Santoral Diciembre del 2022 / www.laverdadcatolica.org

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Morado De Feria, jueves de la semana I de Adviento MR, p. 125 (149) / Lecc. I, p. 365

Otros santos: Eligio o Eloy de Noyón, obispo; Carlos de Foucault, "el Apóstol de los tuaregs", presbítero. Beata: María Clara del Niño Jesús, cofundadora.

BEATO CARLOS DE FOUCAULD, "el Apóstol de los tuaregs", del germánico, "hombre experto" (1858-1916). Presbítero, originario de Estrasburgo, Francia; a los seis años quedó huérfano de padres, él y su hermana fueron atendidos por su abuelo. Estudió en el colegio de los jesuitas en Nancy y París hasta 1876, después ingresó en la academia militar de Saint Cyr; enviado en 1880 como oficial a Setif, Argelia y, un año después, expulsado por mala conducta. A partir de entonces vivió en la ciudad francesa de Evian en total desorganización, sin trabajar ni encontrar sentido a su existencia. Regresó a la milicia a participar en la revuelta Bon Mama en Oran del Sur, durante ocho meses. Renunció a las armas para estudiar árabe y hebreo. En 1883, en plan de estudio, recorrió el desierto africano de Marruecos; trazó mapas de cada uno de sus oasis y su obra recibió la medalla de oro de la Sociedad Francesa de Geografía. Después exploró Argelia y Túnez, y regresó a París en 1886; ahí escribió un libro referente a Marruecos. Al paso del tiempo se entrevistó con el padre Huvelin, quien lo confesó y le proporcionó la comunión; este encuentro con Dios fue decisivo, sintió una profunda conversión en su corazón; recapacitó acerca de su vida desordenada y pedía: "Señor, si existes, haz que te conozca". Decidió que no era digno para predicar, e imitaría a Jesús en su vida oculta, como un pobre artesano en un pueblo. Desde entonces durmió en el piso, rezó la Liturgia de la Horas y en 1890 ingresó con los monjes de la Trapa de Nuestra Señora de las Nieves, ahí eligió el nombre de María Alberico; pasó al monasterio de Siria y luego a Roma (1896), en este año renunció a los trapenses. Pensaba en África y en sus habitantes, quienes desconocían a Cristo. Peregrinó a pie a Tierra Santa y luego en Francia hizo estudios eclesiásticos y recibió el Orden sacerdotal en 1901. Decidió radicar cerca de Marruecos, en Oran Sur, con el propósito de establecer una comunidad y evangelizar. En 1902 compró esclavos para liberarlos, atendió a los necesitados en lo espiritual y en lo material. Desde 1904 habitó entre la tribu nómada del tuareg ("ilustres guerreros del velo azul", por usar los varones un velo azul o negro; éstos residen en el Sahara y el noroeste de África); hizo la traducción de los Evangelios a esa lengua y, en 1908, trascribió poesía tuareg al francés; escribió una gramática y un diccionario en ambos lenguajes, así como libros sobre dicho pueblo. Se estableció en el corazón del desierto del Sahara, en Tamanrasset, Ahaggar, Argelia. Fundó en 1909 la Unión de Hermanos y Hermanas del Sagrado Corazón para evangelizar las colonias francesas de África. Escribió Consejos espirituales y Viaje a Marruecos, entre otros textos. Este ejemplo de bondad falleció en Ahaggar, víctima de una bala en una revuelta antifrancesa. Fue canonizado por el Papa Francisco el 15 de mayo de 2022. Entre 1933 y 1939 surgieron diez congregaciones religiosas y ocho asociaciones, que en Argelia radican en pequeñas comunidades llamadas fraternidades, en áreas de pobreza.

Morado De Feria, viernes de la semana I de Adviento MR, p. 126 (150) / Lecc. I, p. 367

Otros santos: Bibiana de Roma, virgen y mártir. Beatos: Rafael Chylinski, presbítero de la Orden de los Hermanos Menores Conventuales; Bernardin Palaj, sacerdote franciscano y mártir; Iván Slezyuk, presbítero, obispo y mártir.

BEATO RAFAEL CHYLINSKI, del hebreo, "Dios te ha sanado" (1694-1741). Presbítero de la Orden de los Hermanos Menores Conventuales. Nació en una familia noble en Wisoczka, Polonia y fue bautizado como Melchor. Desde pequeño mostró una espiritualidad poco común, por ello se le conocía como "el Pequeño monje". En su juventud definió su vocación e ingresó en la Orden de los Franciscanos Conventuales de Cracovia. Profesó como sacerdote tomando el hábito en 1717, adoptando el nombre de Fray Rafael. Desarrolló su fecunda labor pastoral como sabio y prudente confesor, admirado predicador y caritativo y solícito pastor en hospitales, asilos y prisiones en diferentes parroquias polacas. Finalmente, fue asignado a servir en Lagiewniki, donde pasó el resto de su vida. Se esmeraba en conseguir y proporcionar alimentos a los necesitados. Ejemplar y heroica fue su labor durante los casi dos años en los cuales epidemias e inundaciones afectaron su región. San Juan Pablo II (1978-2005; 22 de octubre) lo elevó a los altares en 1991 y reconoció su labor expresando: "Era hombre de mucha oración y, a la vez, de gran corazón para con los pobres. Cuando (...) se propagó la epidemia en Cracovia, se entregó completamente a los enfermos y realizó todo tipo de servicios sin preocuparse por su propia seguridad. Con celo servía a los pobres, a los enfermos y a los contagiados por la epidemia (...) Muchas veces, no teniendo nada que darles, les ofrecía su propia porción de pan y su manto". Nota: algunas variantes ortográficas de su nombre son: Rafael Chylinski, Rafal Chylinski, Rafael Khylinski.

Blanco Memoria de san Francisco Javier, presbítero MR, p. 888 (878) / Lecc. I, p. 366

Otros santos: Beatos: Ladislao Bukowinski, presbítero; Julián Marcelino Rebollar, Hermano Marista y mártir.

BEATO LADISLAO BUKOWINSKI, del eslavo, "señor glorioso" (1904-1974). Presbítero. Nativo de Berdychiv, Zhitomir, Ucrania (en el momento de su nacimiento esta ciudad pertenecía a Polonia). La población estaba integrada por rusos, polacos, ucranianos y un considerable número de judíos. Al ser invadida su urbe por los soviéticos, huyó a la villa polaca de Swiecica, donde fue miembro activo de grupos de refugiados. Ingresó al seminario de Cracovia y fue ordenado sacerdote en 1931. Regresó a la zona oriental de Polonia y se estableció en la ciudad de Lucka. Se desempeñó como vicario, catedrático, catequista y dirigente de la Acción Católica. Trabajó con polacos inmigrantes y prisioneros (políticos y delincuentes). Al estallar la Segunda Guerra Mundial (1939-1945) se le designó párroco. En 1940, debido a su defensa de las libertades civiles y religiosas de las diversas etnias y por ejercer su ministerio, el gobierno comunista lo condenó a 8 años de trabajos forzados. Al tomar los alemanes la urbe fue liberado. Continuó su labor pastoral y dio refugio a cientos de niños judíos, librándolos de una muerte segura. En 1945, los soviéticos nuevamente lo arrestaron; en cautiverio, fue duramente tratado y condenado a trabajos forzados en las minas de Kazajstán. En presidio, consoló y fortaleció con su espiritualidad y fe a sus compañeros. Fue liberado 1955, ordenándosele permanecer en Kazajstán. Se convirtió en ciudadano soviético. Apresado en 1957 y condenado a tres años de trabajos forzados por el delito de "ser sacerdote". Fue liberado en 1961, desde entonces y hasta su muerte se dedicó a evangelizar y proseguir su ministerio en clandestinidad. Falleció en Karaganda, Kazajstán. Fue beatificado el 22 de septiembre de 2016 por S. S. Francisco.

Morado Domingo II de Adviento [se omite la Memoria de san Juan Damasceno, presbítero y doctor de la Iglesia] MR, p. 128 (152) / Lecc. I, p. 6

Otros santos: Bárbara de Nicomedia, virgen y mártir. Beato Juan Hará Mondo No Suke, Samurái, terciario franciscano y mártir.

SAN JUAN DAMASCENO, del hebreo, "Dios ha hecho gracia" (750). Doctor de la Iglesia. Nació en Damasco, Siria. Perteneció a la ilustre familia Manzur. Recibió formación cristiana de un monje. A la muerte de su progenitor heredó su cargo y cuantiosa herencia, la cual donó a los necesitados. En el año 716 se retiró del mundo para consagrarse a Dios en la vida conventual. En 730, después de viajar a Palestina, ingresó en el monasterio de San Sabas, donde recibió el Orden sacerdotal. Destacó por su vasta cultura y espiritualidad. Escribió obras teológicas, Cristológicas y sobre todo de Mariología; así como tratados exegéticos, himnos y apologías; algunos de sus textos son: Exposición de la fe ortodoxa, Discursos en defensa de las imágenes, Fuente del conocimiento y Libro sobre las herejías. Combatió las leyes iconoclastas (destrucción de imágenes) del emperador bizantino León III Isaúrico. Es el primero en hacer una distinción respecto al culto que se les da a las imágenes: "...en el culto público y privado de los cristianos, entre la adoración (latreia) y la veneración (proskynesis): la primera sólo puede dirigirse a Dios, sumamente espiritual; la segunda, en cambio, puede utilizar una imagen para dirigirse a aquél que es representado en esa imagen. Obviamente, el santo no puede en ningún caso ser identificado con la materia de la que está compuesta la imagen" (Benedicto XVI, 2009). Fue nombrado predicador de la basílica del Santo Sepulcro de Jerusalén. Su deceso ocurrió en su monasterio palestino. Es reconocido como el último de los Padres griegos. El pontífice León XIII (1878-1903) lo proclamó Doctor de la Iglesia en 1890. Su nombre, Damasceno, se le dio por haber nacido en Damasco y Crisorroas, que significa "que fluye oro" u "Orador de Oro", debido a la riqueza de su doctrina. Por su profunda cultura teológica y de otras disciplinas profanas, Juan ha sido llamado "Santo Tomás de Oriente" y es considerado el Gran poeta de la Iglesia del Este.

ORACIÓN DE SAN JUAN DAMASCENO A LA VIRGEN: Te saludo, oh, María, esperanza de los cristianos. Acepta la súplica de un pecador que te ama tiernamente, que te ama entrañablemente, te honra y pone en ti toda esperanza de salvación. Gracias a ti tengo vida. Me conduces de nuevo a la gracia de tu Hijo y eres la prenda segura de mi salvación. Te suplico que me liberes de la carga de mis pecados, destruye la oscuridad de mi mente, destierra las ataduras terrenales de mi corazón, reprime las tentaciones de mis enemigos y guía mi vida para que pueda alcanzar, por tu medio y bajo tu guía, la felicidad eterna del Paraíso. Así sea.

Otros santos: Sabas de Capadocia, eremita y abad. Beatos: Attala de Alsacia, abadesa; Nicolás Stensen el "Padre de la geología", presbítero y obispo; Jean Baptiste Fouque, sacerdote.

SANTA ATIALA DE ALSACIA, del latín Attalus, de la ciudad de Atalia (siglo VIII). Abadesa. Originaria de la provincia francesa de Alsacia, donde sus padres eran duques. Desde su infancia recibió formación en los valores evangélicos por medio de su tía paterna, la abadesa santa Odila u Otilia (13 de diciembre), en el monasterio francés de Hohenburg (actual Monte Santa Odila). En su juventud comunicó a sus padres el deseo de consagrarse a Dios y renunciar a la vida de riqueza. Ya consagrada, logró el apoyo de su padre el duque Adalberto para construir un convento en Estrasburgo, Francia, el cual se encomendó a la protección del mártir san Esteban (26 de diciembre), siguiendo la Regla benedictina, Atala fue designada abadesa. En ese lugar, con fama de santidad, entregó su alma al Creador. Su veneración se pierde en la memoria de los tiempos. Algunas variantes de este nombre son: Atalia y Attalía.

Morado De Feria, martes de la semana II de Adviento o Memoria de san Nicolás, obispo* MR p. 130 (154) / Lecc. I, p. 375

Otros santos: Beatos: Aurelia Arambarri, religiosa de las Siervas de María Ministras de los Enfermos y mártir; Janos Scheffier, obispo y mártir.

BEATA AURELIA ARAMBARRI, del latín Aurelius, nombre de una gens romana (1866-1936). Religiosa de las Siervas de María Ministras de los Enfermos y mártir. Clementina Francisca Arambarri Fuente, su nombre de bautizo, nació en Vitoria, España. En 1886 se afilió al Instituto de las Hermanas Siervas de María Ministras de los Enfermos de Madrid. Antes de completar sus estudios fue enviada a Puerto Rico; ahí culminó su preparación religiosa y, al profesar en 1894, tomó el nombre de Hermana Aurelia. Fue Superiora de las comunidades mexicanas de Guanajuato, Durango y Puebla, en ese país le tocó mantener unidas y guiar a sus hijas espirituales durante la Revolución Mexicana. Regresó a su patria en 1916 y retornó el nombramiento de Priora en las casas de Mataró, Alcoy, Sarriá y Barbastro; su gestión como abadesa en los diferentes claustros se caracterizó por su amabilidad, discreción y rectitud. Se le invistió Consejera Provincial y Superiora de la comunidad de Pozuelo de Alarcón, cargo que tuvo que dejar en 1934 al ser atacada por una parálisis progresiva; pero continuó su misión y quienes convivieron con ella le admiraron por su entereza y fe, se le escuchaba decir: "Será lo que Dios quiera. Él sabe que estamos aquí"; "Somos de Dios, no permitirá que nos pase nada malo". Al iniciar la Guerra Civil (1936-1939), las religiosas fueron exclaustradas; Sor Aurelia regresó a Pozuelo de Alarcón, donde una familia les brindó asilo a Aurora López González y Daria Sagaseta, otras dos hermanas de la Congregación. Fueron descubiertas; a las monjas Aurelia y Aurora se les asesinó entre el 6 y 7 de diciembre. Sor Agustina fue inmolada el día anterior. Fueron beatificadas el 13 de octubre de 2013 por S. S. Francisco.

Blanco Memoria de san Ambrosio, obispo y doctor de la Iglesia MR, p. 890 (880) / Lecc. I, p. 378 LH, Vísperas I de la Solemnidad

Otros santos: María Josefa Roselló, virgen fundadora; Fara de Meaux, abadesa; Carlos Garnier, presbítero y mártir.

SANTA MARÍA JOSEFA ROSELLÓ, ambos del hebreo Miryam, cuyo significado y etimología son discutidos; quizá según diversos Padres de la Iglesia "señora", "soberana" y "Dios acrecentará" (1811-1888). Virgen fundadora. Benedicta Roselló, su nombre de pila, nació en Abisola, Italia. Desde pequeña colaboró al mantenimiento de su hogar; por sus virtudes fue recomendada para asistir como enfermera a un rico personaje y lo hizo con tal dedicación que los esposos la consideraron su hija y decidieron darle como recompensa una cuantiosa parte de su fortuna, la cual no aceptó. La joven anhelaba dedicarse al servicio de prójimo, por lo que acudió con el obispo de Savona, quien al conocer sus actividades y valores le encomendó reunir a otras jóvenes y trabajar para educar a niñas en situación de calle, este es el origen de la Congregación de Hijas de Nuestra Señora de la Merced o de las Misericordias (1837), ahí adoptó el nombre de Sor María Josefa. Al morir la esposa del enfermo que atendió, María recibió la herencia, misma que destinó a fundar casas para extender su labor. En 1869 fundó el "Pequeño Seminario" para niños de familia obrera. Su obra se extendió y llegó a Argentina en 1875. Gracias a su intervención, se logró la liberación de muchos esclavos africanos. En los últimos años de su vida terrena fue aquejada por males que le confinaron a estar en cama. Murió en la casa principal de la Congregación en Savona, expresando: ''Amemos a Jesús. Lo más importante es amar a Dios y salvar el alma". Fue canonizada en 1949 por S. S. Pío XII (1939-1958). Dos de sus pensamientos son: "Hay horas de trabajo, horas de oración; es necesario poner el mismo fervor y cumplirlas todas igualmente bien, porque todas son expresión de la voluntad del Señor"; "Vayamos frecuentemente a Jesús, jamás encontraremos un amigo como Él".

Otros santos: Narcisa de Jesús Martillo y Morán, virgen laica. Beato Benedicto Andrés, Hermano Marista mártir.

SANTA NARCISA DE JESÚS MARTILLO, del griego, "sopor", "sueño profundo" y del hebreo, "Yahvé salva" (1832-1869). Virgen laica. Nació en Nobol, Ecuador, en el seno de una familia de agricultores. Sus progenitores murieron cuando ella era pequeña por lo que se trasladó a Guayaquil, donde radicó quince años. Ahí trabajó como costurera para sostener a sus hermanos. En 1868 se reubicó en la ciudad de Lima, Perú, donde colaboró con las religiosas de la Orden de Predicadores. Fue terciaria de la Orden de Santo Domingo, sin pronunciar votos como religiosa. Vivió en forma austera, consagrada por completo a Dios y al prójimo. El Señor la favoreció con éxtasis frecuentes. Con periodicidad se retiraba del poblado y, en medio del bosque, meditaba y acompañada de su guitarra entonaba canciones de alabanza. Como catequista se caracterizó por ser amable e instruido, lo cual le ganó el cariño, la admiración y el respeto de sus catecúmenos; aunado a sus virtudes y por ser ejemplo de vida cristiana, la población en vida la consideró santa. Murió de causas naturales en el convento dominico del Patrocinio de Lima, Perú. En 1992, Narcisa fue proclamada como "Modelo de virtud", en especial para las mujeres que emigran del campo hacia la ciudad en busca de trabajo. Fue canonizada por Benedicto XVI (2005-2013) en 2008. Conocida como "la Violeta de Nobol".

ORACIÓN A LA INMACULADA DEL PAPA FRANCISCO. Virgen Santa e Inmaculada, a Ti, que eres el orgullo de nuestro pueblo y el amparo maternal de nuestra ciudad, nos acogemos con confianza y amor. Eres toda belleza, María. En Ti no hay mancha de pecado. Renueva en nosotros el deseo de ser santos: que en nuestras palabras resplandezca la verdad, que nuestras obras sean un canto a la caridad, que en nuestro cuerpo y en nuestro corazón brillen la pureza y la castidad, que en nuestra vida se refleje el esplendor del Evangelio. Eres toda belleza, María. En Ti se hizo carne la Palabra de Dios. Ayúdanos a estar siempre atentos a la voz del Señor: que no seamos sordos al grito de los pobres, que el sufrimiento de los enfermos y de los oprimidos no nos encuentre distraídos, que la soledad de los ancianos y la indefensión de los niños no nos dejen indiferentes, que amemos y respetemos siempre la vida humana. Eres toda belleza, María. En Ti vemos la alegría completa de la vida dichosa con Dios. Haz que nunca perdamos el rumbo en este mundo: que la luz de la fe ilumine nuestra vida, que la fuerza consoladora de la esperanza dirija nuestros pasos, que el ardor entusiasta del amor inflame nuestro corazón, que nuestros ojos estén fijos en el Señor, fuente de la verdadera alegría. Eres toda belleza, Maria. Escucha nuestra oración, atiende a nuestra súplica. Que el amor misericordioso de Dios en Jesús nos seduzca, que la belleza divina nos salve, a nosotros, a nuestra ciudad y al mundo entero. Amén.

Otros santos: Pedro Fourier, presbítero de la Orden de los canónigos regulares de San Agustín, educador y fundador. Beata Dolores Broseta Bonet, laica mártir.

BEATA DOLORES BROSETA BONET, nombre místico alusivo a los siete dolores de la Virgen María (1892-1936). Laica mártir. Nació en Bétera, Valencia. España. Fue colaboradora de la Asociación de Hijas de María de la Medalla Milagrosa y de las religiosas Hijas de la Caridad de Bétera. Por las constantes hemorragias que sufría no pudo ingresar al convento, sin embargo, hizo vida conventual en su hogar. Se consagró al cuidado de su madre enferma, de enfermos pobres y a la enseñanza de niños. Al morir su madre vivió en el convento de las Hijas de María de la Medalla Milagrosa, donde desempeñó diversas funciones. El 21 de julio de 1936, las cinco monjas fueron exclaustradas; Dolores se refugió en casa de sus hermanos. Las demás religiosas fueron acogidas por familias de su pueblo, hasta que, debido al acoso que sufrían, se trasladaron a Valencia. Dolores fue descubierta y sometida a crueles interrogatorios para que delatara el refugio de sus Hermanas religiosas. Al poco tiempo fueron atrapadas y llevadas a la checa (centro de tortura), ubicada en el Seminario diocesano valenciano de Moncada, de donde las sacaron para ser fusiladas junto con varias decenas de católicos en el "Picadero de Paterna". Dolores y las religiosas fueron beatificadas el 13 de octubre de 2013, durante el pontificado de S. S. Francisco. Son parte de los 522 Mártires españoles inmolados por odio a la fe entre 1929 y 1936.
ORACIÓN A SAN JUAN DIEGO. Gracias por el mensaje evangelizador que con humildad nos has entregado. Tus nos recuerdas que la Virgen Santísima de Guadalupe es la Madre del Verdadero Dios por quien se vive y es la portadora de Jesucristo que nos da el Espíritu Santo, que vivifica a la Iglesia. Tú nos recuerdas que Santa María de Guadalupe es también nuestra Madre amorosa y compasiva. Gracias al obediente cumplimiento de tu misión, sabemos que Santa María de Guadalupe nos ha colocado en su corazón. Gracias Juan Diego por este mensaje que nos fortifica en la Paz, en la Unidad y en el Amor de Nuestro Señor Jesucristo. Amén.

Otros santos: Beatos: Arsenio da Trigolo, sacerdote de la Orden de los Frailes Menores Capuchinos; Anton Durcovici, obispo y mártir.

NUESTRA SEÑORA DE LORETO o bien LA TRASLACIÓN DE LA SANTA CASA DE LORETO, italianización de lauretum, "lugar de laureles", derivado de laurus Lauro "laurel" "triunfo" "victoria" (Siglo XIII) Existen diferentes versiones acerca del origen de esta advocación; una de ellas narra que surgió en un poblado italiano en 1294, cuando el padre Alejandro, estando en Tersatz (Macedonia), enfermó de gravedad e inesperadamente y recuperó la salud; después, explicó que María Santísima se le había aparecido y, además de sanarlo, le indicó que la casa de la Sagrada Familia en Nazaret "...había sido trasladada por los ángeles" a Loreto, Italia. La jerarquía católica italiana comprobó que una casa pequeña, con estancia, cocina y diversos objetos, se encontraba en el lugar señalado por el sacerdote y envió a una comisión a Nazaret, donde ésta atestiguó que sólo quedaban los cimientos de la construcción. La santa casa, se conserva en la actual basílica de Loreto. Iconografia: escultura en madera, de pie, con el Niño Jesús en su brazo izquierdo, ataviada con hermoso vestido y manto, su rostro expresa sin igual dulzura y amor maternal. Patrona de la aviación e intercesora para obtener vivienda y solucionar problemas en el hogar.

ORACIÓN A NUESTRA SEÑORA DE LORETO. ¡Oh!, ¡Misericordiosa Virgen de Loreto, abogada y protectora de los hogares! Derrama sobre nosotros, que nos ponemos bajo tu amparo, tu santísima bendición y aparta de nuestras almas y de nuestros hogares las divisiones, los conflictos y las tensiones entre los que en ellos habitan. Alivia nuestras penas. Enséñanos a vivir con armonía y haznos capaces con tu auxilio, de encontrar los recursos y saber construir con ellos un verdadero hogar. Consérvanos siempre un techo donde cobijamos, una habitación donde compartir con nuestros familiares y amigos un ambiente de paz, en el que podamos amarnos y servirnos recíprocamente. Piadosísima Virgen, acoge nuestros ruegos con la dulzura y piedad que Dios ha puesto en tu corazón. Te lo pedimos por tu hijo Jesucristo, Nuestro Señor. Amén.

Domingo III de Adviento o Gaudete [Se omite la Memoria de san Dámaso I, Papa] MR, p. 135 (159) / Lecc. I, p. 9 LH, semana III del Salterio

Otros santos: Maravillas de Jesús, religiosa de la Orden de las Carmelitas Descalzas. Beato Jerónimo de San Ángelo, presbítero de la Orden de Maria.

SANTA MARAVILLAS DE JESÚS, del latín, plural de mirabilis, "admirable" y del hebreo, abreviatura de Yehoshúah "Josué", "Yahvé salva" (1891-1984). Religiosa de la Orden de las Carmelitas Descalzas. María de las Maravillas Pidal y Chico de Guzmán, su nombre de bautizo, nació en Madrid, España. Las declaraciones vertidas en los Procesos la revelan como una virtuosa joven colmada de piedad, amor a la verdad y amor a Jesús. A la muerte de su padre, quien se oponía a su vocación religiosa, ingresó en el Carmelo de El Escorial el año de 1919, tomando el nombre de Sor Maravillas de Jesús. En 1924 fundó el convento del Cerro de los Ángeles, año y medio después, y "en virtud de santa obediencia", aceptó el cargo de superiora y maestra de novicias. Bajo su tutela se organizaron nueve fundaciones de su Orden en España y el Carmelo de Kottayam, en la India. Asimismo, realizó innumerables obras sociales. Destacó por su prudencia y caridad hacia pobres y enfermos. Con fama de santidad, entregó su alma al Creador en el Carmelo madrileño de La Aldehuela. Fue canonizada por san Juan Pablo II (1978-2005; 22 de octubre) en 2003, quien, en la Homilía de su canonización, expresó: "Santa Maravillas de Jesús vivió animada por una fe heroica, plasmada en la respuesta a una vocación austera, poniendo a Dios como centro de su existencia". Entre sus Pensamientos, se encuentran los siguientes: "Este tiempo de la vida tan corto hemos de aprovecharlo con alegría, ofreciéndole con gozo todo cuanto suceda, que todo es para que crezcamos en el amor"; "Él se ha quedado en el Sagrario para que le amemos, le imitemos, para ser nuestra fortaleza y nuestro consuelo".
Domingo de Gaudete. El tercer domingo de Adviento es llamado "domingo de gaudete" o de la alegría, por la primera palabra del introito de la Misa: Gaudete: regocíjense. Este día se autoriza el uso de la vestidura color rosa como signo de gozo; la Iglesia invita a la feligresía a regocijarse porque ya está cerca el Señor. En la Corona de Adviento se prende la tercera llama: la vela rosada.

Blanco Solemnidad, MR, p. 895 (886) / Lecc. I, p. 978 LH, todo propio. [Misa de precepto en la República Mexicana]

Otros santos: Simón Phan Dác Hòa, padre de familia, médico y mártir. Beato Pío Bartosik, presbítero de la Orden de los Hermanos Menores Conventuales y mártir.

NUESTRA SEÑORA DE GUADALUPE, del árabe marroquí, uad-al-hub, "río de amor" (1531). De acuerdo con los escritos del Nican Mopohua, del náhuatl "Aquí se narra", la Santísima Virgen se apareció en el cerro del Tepeyac en cuatro ocasiones, entre el 9 y 12 de diciembre de 1531, al indígena Juan Diego quien, con su esposa, había abrazado la fe cristiana. La Imagen se identificó como "la madre del verdadero Dios por quien se vive..." y solicitó se le construyese en dicho sitio "una casita" para atender a quienes solicitasen su protección. La Señora quedó impresa en el ayate (burda capa, elaborada con fibra de maguey), con el cual se cubría el indígena; este hecho fue presenciado por el obispo fray Juan de Zumárraga, al desplegarse la tilma portadora de rosas que, a manera de señal, Juan Diego entregó al Prelado, a este suceso se le denomina "el Milagro de las rosas". Su culto fue autorizado en 1551. San Juan Pablo II (1978-2005; 22 de octubre) la nombró "Estrella de la Nueva Evangelización". Patrona de México, Filipinas y de toda América. Iconografía: la imagen de Nuestra Señora de Guadalupe es una Virgen Trinitaria, ya que el nimbo o cúmulo de nubes sobre el que se representa es la figura del Padre en el Antiguo Testamento, el Hijo que ya está en su vientre, concebido por obra y gracia del Espíritu Santo, cuya luz divina resplandece a pesar de los siglos; María de pie rodeada por rayos de luz (el sol), de pie sobre la luna menguante, ataviada con vestido en tono rosa "terroso", estampado con flores de la región; en el centro de la túnica una flor de cuatro pétalos (única en el diseño), conocida como Nahui Ollin, alegoría del centro del universo: el único Dios verdadero, que va a nacer, esto sobre el vientre henchido de una joven mestiza que en breve dará a luz. Una cinta negra atada con un moño sobre su cintura señala, a la usanza indígena, su estado de gravidez. Cierra el ruedo de su cuello una cruz, llevando armiño alrededor de éste y de sus puños. Cubierta desde su cabeza con manto azul con estrellas. A sus pies la sostiene un ángel (de los llamados tronos), que simbólicamente con la mano derecha toma el borde del manto (el cielo) y con la izquierda el vestido (la tierra). Algunos reconocimientos pontificios son: San Pío X la proclamó Patrona de toda América Latina y Filipinas; Pío XII la invistió "Emperatriz de América"; Juan XXIII la aclamó como "La Misionera Celeste del Nuevo Mundo" y "la Madre de las Américas". La mirada de la Virgen. "La mirada de la Virgen en la imagen de la tilma refleja la santa humildad de quien no se muestra a sí misma y lo que quiere es entregarnos a su hijo. La Virgen de Guadalupe mira de soslayo y remarca que es Ella quien se honra en ser madre nuestra, de todos quienes están en esta tierra, de los más variados linajes, y agradece la confianza en su intercesión. El acontecimiento Guadalupano enseña la humildad como camino hacia la fe por medio de Santa María, quien se presenta ante Juan Diego de pie y no sentada en un icpalli (asiento entre los mexicas, el cual estaba destinado solo para los Dioses, realeza y curanderos y era un atributo reconocido del poder real en Mesoamérica), como correspondería a una reina, y le pide que se coloque junto a ella para pedirle algo. Lo que quiere es un templo, una casita en México Tlatelolco. Después, de nuevo con gran humildad, se somete a la voluntad del obispo, quien representa a su propio Hijo en estas tierras, enviándole las pruebas que demanda para creerle a Cuauhtlatoatzin". Sandra Achondo, en Santa María de Guadalupe, Maestra de fe (2013).

Morado / Rojo Feria, martes III de Adviento o Memoria de santa Lucía, virgen y mártir* MR, p. 136 (160) / Lecc. I, p. 390

Otros santos: Beatos: Juan Marinoni, presbítero de la Orden de Clérigos Regulares y fundador; Antonio Grassi, presbítero de la Congregación del Oratorio.

SANTA LUCÍA DE ROMA, del latín, "luminosa" (ca. 304). Virgen y mártir. En 1894, en las catacumbas de Siracusa, Italia, se descubrió una lápida sobre un sepulcro (loculus), donde se da fe de la existencia de esta santa, cuya vida se ha visto envuelta en una serie de piadosas leyendas. La mayoría de las biografías acreditadas, indican que era originaria de Siracusa, perteneciente a una noble familia. Lucía, sin contarse con pormenores, era cristiana. Al morir su padre quedó como heredera de cuantiosa fortuna y bienes, por lo que fue pretendida por varios jóvenes; sin embargo, decidió permanecer virgen, dedicada a servir a Dios por medio de obras en beneficio de pobres y enfermos, pese a ello, su madre, Eutiquia, la comprometió en matrimonio. La boda no logró concretarse, ya que su madre enfermó. Cecilia era devota de Santa Águeda y la joven y su madre peregrinaron a la tumba de la mártir a solicitar la cura. Al sanar, Eutiquia permitió a su hija cumplir su deseo. El joven pretendiente despechado acudió ante la autoridad y denunció a Cecilia por ser cristiana y hechicera. Cecilia fue condenada a morir en la hoguera. Los verdugos al tratar de llevarla a la pira no pudieron moverla, acto seguido, llevaron un par de bueyes; pero, ni con la fuerza de éstos se logró desplazarla, por lo que uno de los esbirros le cortó la garganta; herida de muerte, la santa exhortó a los testigos a no abandonar su fe. Algunas Crónicas citan que para convencerla de abjurar, el procónsul la amenazó con llevada a un prostíbulo, ante lo cual Cecilia respondió: "El cuerpo queda contaminado solamente si el alma es consciente". Otras leyendas narran que sí fue llevada a dicho lugar, pero al entrar la joven quedó ciega, recuperando la vista al salir del recinto. Existen Anales que señalan que, ante la imposibilidad de conducirla al sitio de su tortura, los impíos apilaron a su alrededor ramas y les prendieron fuego, pero las llamas no quemaron el virginal cuerpo. Su culto es inmemorial. También se le conoce como Lucía de Siracusa.

Blanco Memoria de san Juan de la Cruz, presbítero y doctor de la Iglesia MR, p. 898 (889) / Lecc. I, p. 392

Otros santos: Patrono de los poetas; Nimattullah-al-Hardini, sacerdote de la Orden Libanesa Maronita.

SAN NIMATTULLAH KASSAB AL HARDINI, nombre libanés de etimología incierta (1808-1858). Sacerdote de la Orden Libanesa Maronita. Cursó estudios en el colegio del monasterio de la villa de Houb (1816-1822). En 1828 ingresó a la abadía maronita de San Antonio Abad, donde se ordenó sacerdote y cambió su nombre Yusuf Kassab por el de Nimatullah Kassab Al Hardini. Fue nombrado superior y se desempeñó como maestro, siendo uno de sus discípulos san Chárbel (24 de julio). Vivió una existencia plena de virtudes y "totalmente arrebatado por Dios"; pasaba días y noches en constante oración, meditación y adoración ante el Santísimo. Fiel devoto de la Eucaristía, del rezo del rosario y de la Inmaculada Concepción de María, para quien organizó varias Cofradías y edificó 16 altares. Hombre humilde, sensible y paciente. Quienes trataban con él le llamaban "el Santo". El Padre Nimatullah murió en el monasterio San Cipriano de Kfifan, abrazado de una imagen de María y expresando: "Virgen María, a Ti someto mi alma". Sus restos permanecen incorruptos en el citado claustro. Según testigos, al momento de morir: "...una luz celestial iluminó su cuarto y un olor aromático permaneció en su cuarto varios días". Se le ha llamado "el Hijo del Líbano". Fue canonizado, por san Juan Pablo II (1978-2005; 22 de octubre) en 2004. Algunas variantes de su nombre son: Nimattullah al-Hardini, Nimatullah Kassab Al Hardini, Nimatullah Youssef Kassab Al Hardini.

Otros santos: María Crucificada de Rosa, virgen fundadora. Beatos: Janos Brenner, presbítero diocesano y mártir; Carlos Steeb, presbítero y fundador.

BEATO JANOS BRENNER, Juan en húngaro, del hebreo, "Dios ha hecho gracia" (1931-1957). Presbítero diocesano y mártir. Nativo de Szombathely, Hungría. Vivió tiempos en que el gobierno comunista se enfrentó a la Iglesia. Al cerrar el seminario de su ciudad natal, se dirigió al poblado de Györ, donde concluyó sus estudios de Teología. Recibió el Orden sacerdotal en 1955, tomando como lema: "Todas las cosas obran juntas para el bien de los que aman a Dios". Fue designado capellán de Rábakethely, donde encausó su ministerio a la juventud, actividad que fue mal vista por las autoridades, quienes vigilaban su desempeño. En 1957 los comunistas idearon una emboscada para alejar al padre Brenner de su parroquia al fingir la solicitud de asistencia de un moribundo. El sacerdote tomó su porta viático, donde colocó la Sagrada Eucaristía y se encaminó hacia la aldea de Zsida, donde se encontraba el suplicante. En el camino unos sicarios le acorralaron y, según expresó el Cardenal Ángel Amato en la ceremonia de su beatificación, "Le fueron asestadas más de 30 puñaladas. Fue encontrado al amanecer del 15 de diciembre de 1957, en las afueras del pueblo de Zsida, con la mano izquierda sobre el pecho para proteger la Eucaristía, como el mártir Tarcisio [...] El Padre Brenner era amado por todos, por su integridad y la jovialidad de su trato [...] rezaba con fe, visitaba a los enfermos y ancianos y para todos tenía palabras de consuelo y cercanía [...] Solía decir que 'no podían hacerle mal porque no podían robarle nada. Solo tenía un par de pantalones remendados"'. Fue beatificado el 1 de mayo de 2018 por S. S. Francisco.

Otros santos: Alicia o Adelaida o Adelina de Alemania, emperatriz. Beatos: Jean Wauthier, presbítero misionero Oblato de María Inmaculada y mártir; Felipe Siphong Onphitak, Padre de familia y Protomártir de Tailandia.

SANTA ALICIA O ADELAIDA O ADELINA DE ALEMANIA, del germánico, "de estirpe noble" (931-999). Emperatriz. Hija del rey de Borgoña, Rodolfo II, nació en el castillo de Orb. Recibió educación en la corte y formación en la fe. A los 16 años se casó con el monarca
de Germania, Lotario I, quien murió tres años después. Contrajo segundas nupcias con Otón I, rey de Alemania (912-973); ambos formaron un ejemplar matrimonio cristiano. Apoyaron a la Santa Sede en las diferencias que surgieron con diversos soberanos; por ello, el pontífice
Juan XII (956-964) les concedió el título de Emperadores del Sacro Imperio Romano Germánico. Al morir Otón (973), Alicia fue regente y gobernó su país aliado de su hijo Otón II (973-978) y, cuando éste falleció, ayudó a su nieto, Otón III (980-1002), en las labores de la administración del reino. En 995 abandonó el servicio público para ingresar en el monasterio benedictino francés de Seltz uno de los que había fundado, donde vivió el resto de su vida. Alicia, mejor conocida como Adelaida, demostró su amor a Dios en el servicio al prójimo y con sus vastos recursos realizó obras benéficas y propició la edificación y reconstrucción de conventos. Por su obra, fe y ejemplo de vida consagrada a Cristo, al partir al Reino el pueblo inició su veneración. San Odilón, obispo de Cluny (1 de enero), escribió su biografía donde cita: "Era una maravilla de gracia y hermosura".

Morado Feria Mayor de Adviento “O sapientia" * “¡Oh, sabiduría!" MR, p. 142 (166) / Lecc. I, p. 401 [Estas ferias prevalecen sobre las memorias de los Santos]

Otros santos: Juan de Mata, presbítero y fundador; Jacinto María Cormier, presbítero y Maestro general de la Orden de Predicadores; José Manyanet y Vives, sacerdote y fundador.

BEATO JACINTO MARÍA CORMIER, del griego, "sopor, sueño profundo"; del hebreo Miryam, cuyo significado y etimología, según diversos Padres de la Iglesia, es "señora", "soberana" (1832-1916). Presbítero y Maestro general de la Orden de Predicadores. Nativo de Orleáns, Francia. Ingresó al seminario secular y fue ordenado sacerdote en 1856. Se adhirió a la Orden de Predicadores (dominicos) en la ciudad francesa de Flavignye hizo su profesión en 1859. Poseedor de una vasta cultura, en su comunidad se distinguió por su prudencia e inteligencia y gran espiritualidad; por sus virtudes se hizo acreedor a ser elegido para desempeñar varios e importantes cargos. Su continua preparación sirvió para que redactara varios textos hagiográficos y sobre espiritualidad. En 1896 fue investido como Procurador General en la Curia Romana. En 1904 fue nombrado Maestro General de la Orden, como tal, promovió la fundación de la Pontificia Universidad de Santo Tomás de Aquino, conocida como Angélicum de Roma, donde reunió a los más ilustres profesores y sacerdotes dominicos, a la misma la dotó del Reglamento de Estudios (Ratio Studiorum), a fin de que el Plan de estudios estuviese acorde con las necesidades de su tiempo. Amigo y consejero de los pontífices León XIII (1878-1903) y san Pío X (1903-1914; 21 de agosto), quien le llamó "el Santo de Roma". Murió en una celda del convento de San Clemente, en Roma, y sus restos reposan en el Angélicum. Fue elevado a los altares por san Juan Pablo II el 20 de noviembre de 1994, quien en la Homilía de su beatificación expresó: "En el padre Cormier la Iglesia quiere reconocer y honrar la acción del intelecto humano, iluminada por la fe. De hecho, el fundador de la Universidad Angelicum nos recuerda que Dios nos pide que utilicemos todas las facultades de nuestra mente, reflejo de su gloria. Hombre sediento de verdad, él ha sido capaz de entregarse a sus hermanos, así como Prior Provincial y como maestro General de la orden Dominicana (...) Él condujo a los hijos de Santo Domingo con su sabiduría y su competencia para llevados a Dios, para que sean auténticos testigos del Reino".

Morado Domingo IV de Adviento "O Adonai" * "¡Oh, Señor poderoso!" MR p. 141 (165) / Lecc. I, p. 13

Otros santos: La Expectación del Parto de la Virgen o Nuestra Señora de la Esperanza o Santa María de la "O". Malaquías, profeta. Beata Nemesia Valle, religiosa del Instituto de Hermanas de la Caridad.

BEATA NEMESIA VALLE, del griego, "la justiciera" (1847-1916). Religiosa del Instituto de las Hermanas de la Caridad. Julia Valle, su nombre de pila, nació en Aosta, Italia. En 1851 falleció su madre y su padre decidió que ella y su hermano fueran educados por familiares. A la edad de once años Julia fue enviada a Besançon, Francia, a un colegio dirigido por las Hermanas de la Caridad (vicentinas). Retomó a su pueblo natal después de cinco años, encontrándose con que su padre se había vuelto a casar y trasladado su hogar a Donnaz, tornándose la relación familiar tensa. Se encontró a su maestra religiosa de las Hermanas de la Caridad, quien le notificó que la Congregación se había establecido en la ciudad. Resolvió seguir la vida religiosa y en 1866 entró en el noviciado de Santa Margarita de Vercelli. Su plegaría era: "Jesús, despójame de mí misma y revísteme de ti. Jesús, por ti vivo, por ti muero...". Al profesar asumió el nombre de Sor Nemesia. Se le encargó servir como docente en Tortona, donde mostró su vocación de servicio y amor al necesitado, atrayendo hacia ella la admiración y cariño de las religiosas y del pueblo, que le otorgó el sobrenombre de "Ángel de Tortona". Se le designó abadesa de su comunidad, cargo que asumió con humildad y lo desempeñó con sabiduría y apego a las Constituciones de la Orden. Sor Nemesia solía decir: "La santidad no consiste en hacer cosas grandes, sino en hacer bien el deber de cada día y hacerlo en el lugar donde uno ha sido llamado a obrar". Murió en la ciudad italiana de Borgaro Torinese, Turín. Fue beatificada por san Juan Pablo II en 2004.

Morado Feria Mayor de Adviento “O Radix Jesse” * "¡Oh, Raíz de Jesé!" MR p. 144 (168) / Lecc. I, p. 405

Otros santos: Anastasio I, XXXIX Papa. Beatas María Eva de la Providencia Noiszewska y María Marta de Jesús Wolowska, religiosas de la Congregación de las Hermanas de la Inmaculada Concepción y mártires.

SAN ANASTASIO I, del griego, "resurrección" (401). XXXIX Papa. Nacido en Roma. Se desconocen detalles anteriores a su elección, el 27 de noviembre del año 399, ocupando el orden trigésimo noveno de la Cronología. Se distinguió por su austeridad de vida y celo apostólico. Actuó como conciliador en los cismas entre Roma y la Iglesia de Antioquía (antigua ciudad de lo que hoy es Turquía). Condenó las doctrinas heréticas de Orígenes, "el Pagano", y el donatismo. Luchó con valor y tenacidad contra las costumbres inmorales. convencido de que aún en el pecador acérrimo puede existir el perdón y la asistencia de Dios. Indicó que, durante la lectura del Evangelio en la Asamblea Eucarística, los sacerdotes debieran permanecer de pie. Murió en la sede pontificia. El doctor de la Iglesia, san Jerónimo
(30 de septiembre), le ensalzó diciendo: "Era un hombre distinguido, de vida sin mácula y apostólica solicitud". Su veneración acontece después de su deceso, como era tradición en esa época. Fue sepultado en el cementerio Ponciano, de la vía Portuense de Roma. Otras formas del mismo nombre son: Anastasios y Anastasis y su femenino es: Anastasia.

Morado Feria Mayor de Adviento “O Clavis David" * ¡Oh, Llave de David¡" MR, p. 145 (169) / Lecc. I, p. 408

Otros santos: Filogonio de Antioquia, obispo; Domingo de Silos, abad benedictino; Vicente Romano, presbítero. Beato Miguel Piaszczynski, presbítero y mártir.

SANTO DOMINGO DE SILOS, del latín, “consagrado al Señor" (1000-1073). Abad benedictino. Nativo de Cañas, La Rioja, España. Su nombre de bautizo fue Domingo Manso, se desconocen particularidades de su familia. En la adolescencia, en un sitio apartado, hizo vida de retiro y oración; más adelante ingresó al monasterio benedictino de San Millán de la Cogolla, donde recibió el Orden sacerdotal. Se le asignó ejercer su ministerio en la parroquia de su tierra natal, ahí se distinguió por sus méritos y fue electo prior, cumpliendo su cargo con prudencia, justicia y sabiduría. Cuando el rey de Navarra intentó adueñarse de ornamentos y objetos sagrados de la abadía, Domingo se opuso y por ello fue desterrado junto con sus monjes. Más adelante solicitó el apoyo de Fernando I "el Magno", rey de León, quien lo puso al frente de la abadía de San Sebastián Silos de Burgos que actualmente se denomina Santo Domingo de Silos, que estaba en el abandono. Restauró este claustro sin dejar de realizar excelente labor misional y administrativa durante 23 años. Dios le otorgó el don de efectuar hechos milagrosos, por lo que se le consideró taumaturgo. Destacó por lograr a distancia la liberación de cristianos cautivos de los musulmanes; se narra que sólo con invocarlo, desde la prisión, los rehenes milagrosamente se encontraban libres y en tierras cristianas; muchos de los rescatados acudían a darle las gracias y dejar sus grilletes y cadenas en la capilla del monasterio citado. Dejó por escrito documentos que fueron útiles para la organización de numerosas fundaciones monásticas. Murió en su abadía.

Morado Feria Mayor de Adviento O Oriens" * ¡Oh, Sol!", o conmemoración de san Pedro Canisio, presbítero y doctor de la Iglesia* MR, p. 146 (170) / Lecc. I, p. 410

BEATO PEDRO FRIEDHOFEN, del arameo, "piedra", "roca" (1819-1860). Fundador. Nació en la ciudad alemana de Weitersburg. A los nueve años Sufrió la pérdida de sus padres, por lo que desde temprana edad, junto con su hermano, trabajó como barrendero y deshollinador. Su innata espiritualidad le llevó a organizar grupos de catequesis y oración. Pasó su niñez y juventud en la miseria. Ingresó al seminario de los redentoristas, pero al morir su hermano lo abandonó para hacerse cargo de su cuñada y once sobrinos, trabajando como barrendero. Pese a lo exhaustivo de su trabajo, se daba tiempo para continuar su labor de apostolado entre niños y jóvenes de su comunidad. Para la evangelización, atención y cuidado de niños pobres y huérfanos y de los indigentes fundó la Congregación de los Hermanos de la Misericordia de María Auxiliadora. Hizo votos personales de pobreza y castidad y el 25 de marzo de 1851 recibió el hábito redentorista. Tuvo que enfrentar situaciones económicas difíciles, envidias y calumnias para establecer nuevos asilos, orfanatorios y hospitales. Su existencia llegó a su fin en la ciudad alemana de Coblenza. En la actualidad su obra se encuentra en Europa, Malasia y Brasil. Fue beatificado por san Juan Pablo II (1978-2005; 22 de octubre) en 1985.

Morado Feria Mayor de Adviento "O Rex gentium" * "¡Oh rey de las naciones!" MR, p. 147 (171) / Lecc. I, p. 413

Otros santos: Francisca Xavier Cabrini, virgen fundadora; Isquirión de Alejandría, mártir. Beato Epifanio Gómez Álvaro, presbítero de la Orden de San Agustín y mártir.

SANTA FRANCISCA XAVIER CABRINI, del italiano antiguo: "franco", "francés" y del vasco: "de la casa nueva" (1850-1917). Virgen fundadora. Nacida en San Ángelo Lodiagiano, Italia. Su hermana mayor era maestra y dirigió los estudios primarios de Francisca, quien tenía una frágil salud y se creía que moriría joven. En la adolescencia cursó la carrera de profesora, se graduó en 1868 e inició su trabajo como directora de la escuela orfanato de su parroquia. Encaminó su vocación a la vida consagrada, pero en varias congregaciones no se le aceptó por su débil salud. El obispo de su diócesis le sugirió fundar un instituto; así, en 1877, estableció la Congregación de Hermanas Misioneras del Sagrado Corazón de Jesús. Ante el pontífice León XIII (1878-1903) expresó su deseo de evangelizar en China, pero el Papa le indicó que debía trasladarse a los Estados Unidos de Norteamérica para atender a los inmigrantes italianos. Llegó a Nueva York en 1889; con firmeza superó dificultades y carencias. Atendió a sus coterráneos, se dedicó a la evangelización y enfrentó al protestantismo. Recorrió aquella ciudad, donde estableció asilos, dispensarios, centros de salud y de cultura; comunidades, hospitales, escuelas, casas para ancianos. Obtuvo la nacionalidad norteamericana. Su determinación y caridad propició que emigrantes italianos ricos apoyaran sus obras. Su lema era: "Trabajemos, trabajemos. Luego tendremos toda una eternidad para descansar". Partió al Reino desde la ciudad de Chicago. Fue canonizada en 1946 por el papa Pío XII (1939-1958) y en 1950 la declaró "Patrona de los inmigrantes"; dos años después el Comité Americano de la Inmigración Italiana la nombró "la más ilustre inmigrante del siglo XX".

Morado Feria Mayor de Adviento “O Emmanuel" * ¡Oh, Emmanuel!" o conmemoración de san Juan de Kety, presbítero* MR, p. 148 (172) / Lecc. I, p. 415

Otros santos: Antonio de Santa Ana Galvao, "Apóstol de Sâo Paulo", presbítero de la Orden de los Hermanos Menores y fundador; Margarita de Youville, fundadora y primera santa canadiense

SAN ANTONIO DE SANTA ANA GALVAO, "Apóstol de Sâo Paulo", del latín, Antonius, nombre de una gens romana de probable origen etrusco (1739-1822). Presbítero de la Orden de los Hermanos Menores y fundador. Oriundo de Guaratinguetá, Brasil. Su familia era de vastos recursos y pertenecía a los terciarios franciscanos. Al cumplir 21 años ingresó en el noviciado del convento de San Buenaventura de Macacu, de la Orden de Hermanos Menores. En 1762 se le comisionó al monasterio de San Francisco, en Sâo Paulo, donde se desempeñó como predicador, confesor y portero. El contacto con el pueblo le hizo desarrollar una notable sensibilidad hacia los afligidos, los enfermos y los esclavos. En 1774, con sor Elena María del Espíritu Santo, abrió el hoy llamado "Monasterio de la Luz", y en 1882 inauguró la iglesia del Recolhimiento. Ocupó cargos destacados en su comunidad hasta que renunció en 1808 por motivos de salud. Tres años más tarde fundó el Recolhimiento de Santa Clara en Sorocaba, sitio donde se daba asiló a "recogidas", mujeres en situación de calle; este recinto pronto se transformó en una casa de retiro en la que un grupo de señoras vivían como religiosas, pero sin emitir votos. Su labor en beneficio de los fieles nunca disminuyó y con ello obtuvo el cariño y reconocimiento de la población. Está considerado como el "Apóstol de Sâo Paulo", ciudad desde la que partió al Reino. Fue canonizado por S. S. Benedicto XVI (2005-2013) en 2007, quien señaló: "El carisma franciscano, evangélicamente vivido, ha producido frutos significativos a través de su testimonio de ferviente adorador de la Eucaristía, de prudente y sabio guía de las almas que lo buscaban y de gran devoto de la Inmaculada Concepción de María, de la que se consideraba 'hijo y esclavo perpetuo"'. San Antonio María es el primer santo nacido en tierras brasileñas. NOTA: La Familia Franciscana celebra su memoria el 24 de octubre.

Morado Feria Mayor de Adviento en la Misa matutina MR, p. 149 (173) / Lecc. I, p. 418

Otros santos: Irma o Irmina de Tréveris, abadesa; Paula Isabel Cerioli, viuda y fundadora; Adela de Alemania, religiosa.

SANTA IRMA o IRMINA DE TRÉVERIS, del germánico, "la mujer fuerte y poderosa" (ca. 708). Abadesa. Originaria de Tréveris, Alemania, hija del rey san Dagoberto II de Austrasia (23 de diciembre). No se conocen particularidades de su niñez y temprana juventud, excepto que era piadosa y caritativa al extremo, cuestión no usual entre la nobleza. Dedicó su fortuna para patrocinar las altruistas obras del obispo san Bonifacio (5 de junio) y las de san Willibrodo (7 de noviembre). Como era costumbre en su época, Irma fue comprometida en matrimonio con un caballero de la nobleza, quien murió antes de efectuarse los esponsales. Al enviudar, consagró su vida a Dios y aquí difieren los hagiógrafos hay quienes señalan que Irmina, con sus recursos, mandó construir el monasterio benedictino de Öhren (Ohren o Horreum) en Tréveris (entonces territorio francés); en tanto que otros citan que fue edificado por orden de su padre, el rey, donde ingresó renunciado al mundo y a sus prerrogativas de princesa. Como religiosa hizo vida de oración y penitencia, alcanzando el grado de abadesa; asimismo, estableció las Constituciones para dicho convento. En vida fue reconocida por sus virtudes y llamada santa, prestigio que se incrementó cuando auxilió de forma heroica a la población durante una epidemia de peste. Falleció en Ostén, iniciándose su culto. Algunos Santo rales la señalan como hermana de santa Adela de Pfalzel, viuda y abadesa, también conmemorada hoy.

LOS SANTOS ANTEPASADOS DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO. La Genealogía de Jesucristo, hijo de David, se encuentra en los Evangelios de san Mateo (1, 1-25) y de san Lucas (3, 23-38); en ella se incluyen, entre otros, a los profetas, quienes anunciaban la inminente venida del Mesías, Todos estos santos hombres fueron purificados por Dios para que al final naciera María, una mujer virgen pura, la Madre del Redentor. El Martirologio Romano cita: "Memoria de todos los santos antepasados de Jesucristo, hijo de David, hijo de Abraham, hijo de Adán, sus abuelos, que agradaron a Dios y fueron hallados justos y murieron creyendo, pese a no haber visto realizadas las promesas, pero avizorando de lejos su cumplimiento y saludándolo, de los que nació Cristo según la carne, Dios bendito sobre todas las cosas por siempre".

Blanco Solemnidad con Octava, en la Misa vespertina de la Vigilia MR, p. 153 (175) / Lecc. I, p. 422

Otros santos: Eugenia de Roma, mártir; Alberto (Adán) Chmielowski, fundador; Anastasia de Sirmio, virgen y mártir.

Esta misa se celebra en la tarde del 24 de diciembre, antes o después de las primeras Vísperas de Navidad.

SANTA EUGENIA DE ROMA, del griego, "bien nacida, de buena estirpe" (s. III/IV). Mártir. Pese a que se cuenta con pocos datos fidedignos de ella, es innegable su existencia y su muerte en aras de la fe, tal como hacen constar la passio Sancte Eugeniae y la passio ss. prot.et hyacinthi. Eugenia fue enterrada en el cementerio de Aproniano, en la Vía Latina. Su vida, como la de muchas mártires de su época, se ve adornada por fantásticas narraciones que tratan de exaltar su santidad y dones. La Leyenda Dorada señala que era una noble dama romana que se trasladó a Alejandría de Egipto cuando nombraron prefecto a su padre. En dicha ciudad fue educada en el cristianismo por los santos Jacinto y Proto. Un noble joven de nombre Aquilio la pidió por esposa; sin embargo, Eugenia ya había decidido consagrarse a Dios por lo que, con la ayuda de sus mentores, huyó a un convento masculino, donde se hizo pasar por hombre, con el nombre de Eugenio y llegó a ser abad. Fue denunciada y calumniada por una celosa mujer. Al ser descubierta se le juzgó, pero fue absuelta de los cargos. Se reasentó en Roma, donde encabezó una comunidad religiosa y realizó fructífera misión evangelizadora hasta que fue capturada, atormentada y decapitada junto con Proto y Jacinto. Sobre su sepulcro fue construida una basílica. En la actualidad sus restos reposan en la Basílica romana de los Santos XII Apóstoles.

LA NATIVIDAD DEL SEÑOR, del latín, nativitas, "nacimiento" (siglo I). De acuerdo con el evangelio de Lucas (1,5), Jesús nació en Belén, en una cueva, donde se refugiaron José y María al no haber encontrado alojamiento. Esto aconteció en tiempos del rey Herodes I (20
a. C.-39 d. C.), probablemente en el año 4 de la antigua era. Fue descendiente de la estirpe de David (LC 3,31). La Iglesia fijó esta solemnidad a partir del siglo IV. Benedicto XVI nos invita a meditar: "...el anuncio de los ángeles resuena para nosotros también como una invitación: 'haya' gloria a Dios en lo alto del cielo, 'haya' paz en la tierra a los hombres que El ama. El único modo de glorificar a Dios y de construir la paz en el mundo consiste en la humilde y confiada acogida del don de Navidad: el amor. El canto de los ángeles puede entonces convertirse en una oración para pronunciar frecuentemente, no sólo en este tiempo navideño. Un himno de alabanza a Dios en lo alto del cielo y una ferviente invocación de paz sobre la tierra, que se traduzca en un compromiso concreto a construirla con nuestra vida. Este es el compromiso que la Navidad nos confía". REFLEXION: "La Navidad suele ser una fiesta ruidosa: nos vendría bien estar un poco en silencio, para oír la voz del Amor". Papa Francisco (2013).

Otros santos: Beatas Inés Phila y Lucía Khambang, religiosas de las Hermanas Amantes de la Cruz y 4 compañeras, mártires tailandesas.

SAN ESTEBAN DE ROMA, del griego Stephanos "coronado", "victorioso". Protomártir de la cristiandad. Era judío de origen griego. Los Hechos de los Apóstoles en su capítulo 6, La elección de diáconos (18), señala que los Doce, ante el creciente número de fieles y a fin de no desatender las obras de caridad ni su misión evangelizadora, convocaron a todos los discípulos y acordaron buscar "...a siete hombres de buena fama, llenos del Espíritu Santo y de sabiduría y nosotros les encargaremos esta tarea. De esa manera, podremos dedicarnos a la oración y al ministerio de la Palabra, y eligieron a Esteban, hombre lleno de fe y del Espíritu Santo, a Felipe y a Prócoro, a Nicanor y a Timón, a Pármenas y a Nicolás, prosélito de Antioquía". Ahí se define a Esteban como "...lleno de gracia y de poder, hacía grandes prodigios y signos en el pueblo". Por su parte el capítulo 7, El enojo del Sanedrín, narra el martirio de Esteban después de haberse presentado ante el Consejo supremo judío, y en los versículo s 58 a 60 se detalla: "...Ellos comenzaron a vociferar y, tapándose los oídos, se precipitaron sobre él como un solo hombre y, arrastrándolo fuera de la ciudad, lo apedrearon. Los testigos se quitaron los mantos, confiándolos a un joven llamado Saulo. Mientras lo apedreaban, Esteban oraba, diciendo: 'Señor Jesús, recibe mi espíritu'. Después, poniéndose de rodillas, exclamó en alta voz: 'Señor, no les tengas en cuenta este pecado'. y al decir esto, expiró". San Fulgencio de Ruspe (1 de enero), en su Sermón 3, Las armas de la caridad, expresa: "Ayer celebramos el nacimiento temporal de nuestro Rey eterno; hoy celebramos el triunfal martirio de su soldado. Ayer nuestro Rey, revestido con el manto de nuestra carne y saliendo del recinto del seno virginal, se dignó visitar el mundo; hoy el soldado, saliendo del tabernáculo de su cuerpo, triunfador, ha emigrado al cielo ...Esteban, para merecer la corona que significa su nombre, tenía la caridad como arma, y por ella triunfaba en todas partes. Por la caridad de Dios, no cedió ante los judíos que lo atacaban; por la caridad hacia el prójimo, rogaba por los que lo lapidaban. Por la caridad, argüía contra los que estaban equivocados, para que se corrigieran; por la caridad, oraba por los que lo lapidaban, para que no fueran castigados. Confiado en la fuerza de la caridad, venció la acerba crueldad de Saulo, y mereció tener en el cielo como compañero a quien conoció en la tierra como perseguidor. La santa e inquebrantable caridad de Esteban deseaba conquistar orando a aquellos que no pudo convertir amonestando ...Fuente y origen de todos los bienes, santa protección, camino que conduce al cielo es la caridad. Quien camina en la caridad no puede temer ni errar; ella dirige, protege, encamina".

Blanco Día III dentro de la Octava de Navidad MR, p. 901 (893) / Lecc. I, p. 983

Otros santos: Beatos: Alain Dieulangard, presbítero de los Misioneros de África (Padres Blancos); Sara Salkanhazi, maestra, periodista y mártir;

SAN JUAN, del hebreo, "Dios ha hecho gracia", (siglo I). Apóstol y evangelista: El Evangelio de Marcos (1, 19-20) lo menciona como hijo de Zebedeo y hermano del también apóstol, Santiago "el Mayor" (25 de julio), perteneciendo ambos a los Doce discípulos de Jesús. Hasta antes de seguir al Mesías era pescador de oficio, por lo demás, no se conocen detalles de su infancia y familia, algunos hagiógrafos señalan la posibilidad de que su madre haya sido Salomé, parienta de María Santísima y a la cual se menciona como una de las mujeres que siguieron a Cristo hasta el Calvario. Es citado en el pasaje de la Transfiguración del Señor (Mc 5,37); en la última Cena se recostó sobre el pecho de Jesús (Jn 13,23) un momento, y al pie de la cruz en el Calvario, fue el único apóstol que lo acompañó y el Redentor le confió el cuidado de su Madre (Jn 19,26-27). Es autor de cinco libros del Nuevo Testamento: El cuarto Evangelio, tres Cartas y, el único libro profético, el Apocalipsis, escrito que redactó en su destierro en la isla de Patmos (Grecia), donde se cree que, casi centenario, murió. El Patriarca ecuménico de Constantinopla, Atenágoras, señaló: "Juan se halla en el origen de nuestra más elevada espiritualidad. Como él, los 'silenciosos' conocen ese misterioso intercambio de corazones, invocan la presencia de Juan y su corazón se enciende". El Papa Benedicto XVI, rogó: "Que el Señor nos ayude a entrar en la escuela de san Juan para aprender la gran lección del amor, de manera que todos nos sintamos amados por Cristo 'hasta el extremo' (Jn 13,1) y gastemos nuestra vida por Él". Iconografia: Solo o entre los apóstoles, con túnica roja, manto verde, su atributo es un águila (llamada por algunos "águila de Patmos") o bien, escribiendo con pluma y libro. Se le invoca para proteger viudas y doncellas por haberse encargado de la Santísima Virgen María; asimismo, patrono de aceiteros, editores, teólogos y escritores. Suele citársele como "el Teólogo" y el "Discípulo amado".

Rojo Día IV dentro de la Octava de Navidad MR, p. 902 (894) / Lecc. I, p. 985

Otros santos: Catalina Volpicelli, virgen fundadora; Gaspar del Búfalo, presbítero y fundador.

LOS SANTOS INOCENTES, del latín, innocens, entis, "el que no daña", "libre de culpa' (siglo I). Mártires. El hecho conocido como la "Matanza de los santos Inocentes" hace referencia a los niños varones asesinados por Herodes "el Grande" en Belén y alrededores, acontecimiento narrado en el evangelio de Mateo 2, 13-18: "...Después que ellos [los magos] se retiraron, el Ángel del Señor se apareció en sueños a José y le dijo: 'Levántate, toma contigo al niño y a su madre y huye a Egipto, y estate allí hasta que yo te diga. Porque Herodes va a buscar al niño para matarle'. Él se levantó, tomó de noche al niño y a su madre y se retiró a Egipto; estuvo allí hasta la muerte de Herodes, para que se cumpliera el oráculo del Señor por medio del profeta: De Egipto llamé a mi hijo. Entonces Herodes, al ver que había sido burlado por los magos, se enfureció terriblemente y mandó matar a todos los niños de Belén y de toda su comarca de dos años para abajo, según el tiempo que había precisado por los magos. Entonces se cumplió el oráculo del profeta Jeremías (31, 15): Un clamor se ha oído en Ramá, mucho llanto y lamento: es Raquel que llora a sus hijos, y no quiere consolarse, porque ya no existen"... Esta festividad se establece a partir del siglo IV; el Papa Benedicto XV (1914-1922) estableció, en 1921, su conmemoración el domingo siguiente a la Navidad. Su Santidad Francisco, en una Carta a los Obispos, actualiza esta inmolación de infantes (2016) invitando a los Prelados (y por extensión a toda la Iglesia militante) diciendo: "[se debe tener] El coraje de protegerla [a la infancia] de los nuevos Herodes de nuestros días, que fagocitan la inocencia de nuestros niños. Una inocencia desgarrada bajo el peso del trabajo clandestino y esclavo, bajo el peso de la prostitución y la explotación. Inocencia destruida por las guerras y la emigración forzada, con la pérdida de todo lo que esto conlleva. Miles de nuestros niños han caído en manos de pandilleros, de mafias, de mercaderes de la muerte que lo único que hacen es fagocitar y explotar su necesidad".

Blanco Día V dentro de la Octava de Navidad, Memoria de santo Tomás Becket, obispo y mártir* MR, p. 159 (181) / Lecc. I, p. 437

Otros santos: David, profeta y rey. Beatos: José Perpiñá I Nácher, mártir laico; Gerardo Cagnoli de Valenza, religioso de la Orden de Frailes Menores.

SANTO TOMÁS BECKET, del arameo, "mellizo", "gemelo"(1118-1170). Arzobispo y mártir. Nacido en Londres, Inglaterra, hijo de padres aristócratas. Cursó estudios en la abadía londinense de Merton y de artes en París, Francia. En 1139 regresó a su país donde, cuatro años más tarde, se le designó auxiliar del arzobispo Teobaldo de Canterbury, quien le patrocinó estudios de derecho civil y canónico. En 1154 el Prelado le invistió como archidiácono de Canterbury, misión que comprendía el atender las relaciones diplomáticas entre el Vaticano y la corte británica. El rey Enrique II (1135-1189) le brindó su amistad y lo nombró canciller de Inglaterra. Tomás se dejó seducir por el boato cortesano, pero continuaba siendo generoso con los desposeídos. A la muerte de Teobaldo fue ordenado sacerdote y obispo (1162) y, pese a su oposición, se le invistió como arzobispo de Canterbury. Al asumir el cargo cambió de forma radical su estilo de vida. Destacó por ser un defensor de la feligresía ante la prepotencia del rey y oponerse a las intenciones de someter a la Iglesia al Estado. Esta situación le generó severos enfrentamientos con la monarquía, por lo que huyó a la ciudad francesa de Pontigny, donde se refugió en una abadía cisterciense. Cuando volvió a su sede episcopal, los esbirros del rey le tendieron una emboscada en la que lo asesinaron hundiéndole una espada en el cráneo. Fue canonizado por Alejandro III (1159-1181) en 1173.

Otros santos: Félix I, XXVI Papa. Beatos: Juan María Boccardo, presbítero y fundador; Eugenia Ravasco, virgen fundadora.

BEATO JUAN MARÍA BOCCARDO, del hebreo, "Dios ha hecho gracia" y del hebreo Miryam, cuyo significado y etimología, según diversos Padres de la Iglesia, es "señora", "soberana" (1848-1913). Presbítero y fundador. Nació en la ciudad de Moncalieri, vecina de Turín, Italia. Estudió en el Seminario diocesano y recibió el Orden sacerdotal en 1871. Se le nombró director espiritual de los seminarios de Chieri y Turín; posteriormente, fue nombrado canónigo honorario de la Colegiata de Chieri. En 1882 se le nombró director espiritual del seminario mayor. Dos años después fue designado párroco de Pancalieri, Turín, en este cargo y población permanecerá hasta su partida al Reino. Su carisma pastoral y virtudes pronto hicieron que la población frecuentara los Sacramentos y asistiera a la celebración de la Eucaristía. En 1884, al estallar la epidemia de cólera, el padre Broccardo atendió de forma incansable y servicial a los infectados del mal. Fundó la Congregación de Hijas Pobres de San Cayetano para atender a las víctimas. La tarea de asistencia del Instituto y el perseverante trabajo en favor de la educación de los niños, el auxilio a los pobres, enfermos y ancianos del padre Juan María favorecieron la expansión de su obra y llegó a fundar más de treinta casas. Su labor sólo fue interrumpida por la parálisis que le afectó los últimos años de su vida; sin embargo, aún con estas limitaciones, nunca abandonó la supervisión de su Fundación ni el trabajo asistencial y espiritual para sus feligreses. Como parte de su testamento espiritual dejó muchos escritos de carácter místico y pastoral. Fue beatificado en 1998.

Blanco Día VII dentro de la Octava de Navidad, o conmemoración de san Silvestre I, Papa * MR, p. 161 (183) / Lecc. I, p. 441

Otros santos: Silvestre I, XXXIII Papa; Juan Francisco Regis, presbítero de la Compañía de Jesús y misionero; Catalina Labouré, religiosa de las Hijas de la Caridad.

SAN JUAN FRANCISCO REGIS, del hebreo, "Dios ha hecho gracia" y del italiano antiguo, "franco", "francés" (1597-1640). Presbítero de la Compañía de Jesús y misionero. Nació en Fontcouverte (Langue doc-Rosellón), Francia. Ingresó en la Compañía de Jesús (jesuitas) en Toulouse el año 1616 y recibió el Orden sacerdotal en 1630. Inició su ministerio en Montpellier y poblaciones vecinas, ahí se avocó a lo que denominó "misiones rurales". Después se le comisionó a servir en las diócesis de Viviers y luego en Puy, Es reconocido como uno de los grandes predicadores del siglo XVII, ya que con palabras sencillas y un conmovedor fervor incrementó la fe en diversas comunidades y logró numerosas conversiones. Dios le otorgó el don de taumaturgia, por esto se le conocía como "el Santo". Dedicó exhaustivas jornadas a atender enfermos rechazados por su aspecto o el desagradable olor que causaba su padecimiento. El afecto del pueblo y los prodigios que realizó le acarrearon envidias, amenazas de muerte, enemistades y la incomprensión de sus superiores, pese a ello, continuó su obra, por lo que se le considera "Mártir silencioso". Solía decir: "¿Cómo podría yo probar mi amor a Dios si no ofrezco lo que más se estima en este mundo: la salud y la vida?". Terminó su existencia en la población francesa de La Louvesc, donde descansan sus restos. Un contemporáneo refirió: "El padre Regis, no tenía más que a Dios dentro de su alma, a Dios en la boca y a Dios delante de sus ojos". Fue canonizado por el Papa Clemente XII (1730-1740). Es el primer jesuita francés elevado a los altares. Se le conoce como "el Apóstol de Velay".

MENSAJE DEL PAPA FRANCISCO: “Con ustedes doy gracias al Señor por todo lo que nos ha donado a lo largo del año que está por terminar. Les deseo un santo y feliz Año Nuevo; que con la ayuda de la Virgen María, el Señor nos custodie en la esperanza de la realización de sus promesas, firmes en la fe y siempre atentos a las necesidades de nuestros hermanos”.