MISAL JULIO DEL 2013 / www.laverdadcatolica.org | ||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||
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DE LAS MADRIGUERAS Y LAS ZORRAS Gn 18, 16-33; Mt 8, 18-22 El estilo de hablar del Señor Jesús es inigualable e inimitable. Combina una soberana autoridad con una gran sencillez y claridad. Los candidatos a discípulos no podían llamarse a engaño: el Maestro les había invitado a seguirle en condiciones nada confortables. Así que cuando sobrevinieran las persecuciones o adversidades no tendrían que extrañarse. El seguimiento de Cristo es una decisión exigente que en ocasiones rebasa las fronteras de lo razonable. Es necesario disponer de los dones de la fe y la esperanza cristiana para poderlo asumir. Movido por la confianza en Dios, Abrahán se posiciona como un decidido intercesor que aboga hasta el límite, invocando el perdón de Dios para los habitantes de Sodoma. Dios revela a sus amigos sus designios secretos, para animarlos a que funjan como intercesores y le ayuden a otorgar el perdón. ANTÍFONA DE ENTRADA (Rm 5, 5) El amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por su Espíritu, que habita en nosotros. ORACIÓN COLECTA
LITURGIA DE LA PALABRA ¿Será posible que tú destruyas al inocente junto con el culpable? Del libro del Génesis: 18, 16-33 Los tres
hombres que habían estado con Abraham se pusieron de pie y se encaminaron
hacia Sodoma. Abraham los acompañaba para despedirlos. El Señor
dijo entonces: "¿Acaso le voy a ocultar a Abraham lo que voy
a hacer, siendo así que se va a convertir en un pueblo grande y
poderoso y van a ser benditos en él todos los pueblos de la tierra?
Yo lo he escogido para que enseñe a sus hijos y a sus descendientes
a cumplir mi voluntad, haciendo lo que es justo y recto, y así
cumpliré lo que le he prometido". Del
salmo 102 R/. El Señor es compasivo y misericordioso.
ACLAMACIÓN (Cfr. Sal 94, 8) R/. Aleluya, aleluya. Sígueme. Del santo Evangelio según san Mateo: 8, 18-22 En aquel
tiempo, al ver Jesús que la multitud lo rodeaba, les ordenó
a sus discípulos que cruzaran el lago hacia la orilla de enfrente.
En ese momento se le acercó un escriba y le dijo: "Maestro,
te seguiré a dondequiera que vayas". Jesús le respondió:
"Las zorras tienen madrigueras y las aves del cielo, nidos; pero
el Hijo del hombre no tiene en donde reclinar la cabeza". ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS Santifica, Señor, nuestras ofrendas y con la luz del Espíritu Santo purifica nuestros corazones. Por Jesucristo, nuestro Señor. ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Sal 67, 29) Despliega, Señor, tu poder; el poder que por nosotros desplegaste desde tu templo, en lo alto de Jerusalén. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN Que tu Espíritu Santo, Señor, descienda sobre nosotros, purifique nuestros corazones y los fecunde, penetrándolos con su divino rocío. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Santos: Monegunda de Tours, eremita; Otón de Bamberg, obispo; Bernardino Realino, presbítero. Feria (Verde) LA FUERZA DE LA NATURALEZA Gn 19, 15-29; Mt 8, 23-27 Entre las dos lecturas hay un nexo temático muy claro. La ciudad donde Lot y su familia habitan enfrentará los efectos de un cataclismo destructor. Los ángeles del Señor lo visitan para ponerle a salvo de la tormenta de fuego. La narración puede parecer terrible porque asocia a Dios con la fuerza destructora de la naturaleza que arrasa poblaciones enteras. El autor del relato enfatiza el rostro compasivo que salva la vida de una pequeña ciudad en honor a Lot. El relato del Evangelio de san Mateo refiere una escena conocida. Los discípulos que eran pescadores avezados no conseguían sortear una tormenta amenazante que sacudía su pequeña barca. Jesús los amonesta y somete imperiosamente la fuerza del viento. Estos relatos sostienen nuestra confianza en Dios, a pesar de tantas tragedias que arrasan con la vida de personas inocentes en tantos sitios. ANTÍFONA DE ENTRADA (Sal 95, 1. 6) Canten al Señor un cántico nuevo, hombres de toda la tierra, canten al Señor. Hay brillo y esplendor en su presencia, y en su templo, belleza y majestad. ORACIÓN COLECTA Dios eterno y todopoderoso, conduce nuestra vida por el camino de tus mandamientos para que, unidos a tu Hijo amado, podamos producir frutos abundantes. Por nuestro Señor Jesucristo... LITURGIA DE LA PALABRA El Señor hizo llover azufre y fuego sobre Sodoma y Gomorra. Del libro del Génesis: 19, 15-29 Aquel día,
al rayar el alba, los ángeles apresuraban a Lot diciédole:
"Vamos; toma a tu esposa y a tus dos hijas, para que no perezcas
a causa de los pecados de Sodoma". Como Lot no se decidía,
los tomaron de la mano a él, a su mujer y a sus dos hijas, los
sacaron de su casa y los condujeron fuera de la ciudad, porque el Señor
los perdonaba. Cuando estaban fuera, uno de los ángeles le dijo:
Del salmo 25 R/. Ten compasión de mí, Señor.
ACLAMACIÓN (Sal 129, 5) R/. Aleluya, aleluya. Del santo Evangelio según san Mateo: 8, 23-27 En aquel
tiempo, Jesús subió a una barca junto con sus discípulos.
De pronto se levantó en el mar una tempestad tan fuerte, que las
olas cubrían la barca; pero Él estaba dormido. Los discípulos
lo despertaron, diciéndole: "Señor, ¡sálvanos,
que perecemos!" ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS Acepta, Señor, con bondad, los dones que te presentamos y santificalos por medio de tu Espíritu para que se nos conviertan en sacramento de salvación. Por Jesucristo, nuestro Señor. ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Sal 33, 6) Acudan al Señor, pongan en Él su confianza y no quedarán defraudados. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN Te damos gracias, Señor, por habernos alimentado con el Cuerpo y la Sangre de tu Hijo, y te pedimos que este don tuyo sea para nosotros fuente inagotable de vida. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Santos: Tomás, apóstol; Ramón o Raymundo Gayrard, religioso; León II, Papa. Fiesta (Rojo) NO SEAS DESCONFIADO Ef 2, 19-22; Jn 20, 24-29 El episodio de la incredulidad de Tomás es de sobra conocido. El elogio que el Señor Jesús hace en relación a los futuros discípulos que acogen la fe cristiana sin demandar evidencias del resucitado, es estimulante. Los creyentes de todas las épocas hemos accedido a la fe cristiana sin necesidad de contemplar apariciones palpables del Señor de la vida. La perspectiva de la carta a los Efesios considera que los creyentes somos conciudadanos y por tanto, sujetos de derechos y deberes en la comunidad cristiana. En esa familia de Dios no hay lugar para las exclusiones ni los tratamientos diferenciados o discriminatorios. En la medida que cada discípulo se incorpora plenamente en la iglesia local a la que pertenece, aportando sus dones y talentos, se va haciendo manifiesta la edificación espiritual: los creyentes somos morada para Dios, que se complace en cohabitar con quienes invocan su nombre y viven respetuosamente su condición filial, perseverando en las relaciones fraternas y solidarias. ANTÍFONA DE ENTRADA (Sal 117, 28) Te alabaré y te daré gracias siempre, porque tú eres mi salvador, Señor mío y Dios mío. Se dice Gloria. ORACIÓN COLECTA Padre todopoderoso, tú que concediste a santo Tomás reconocer a Cristo como su Señor y su Dios; por intercesión de este Apóstol, haz que crezcamos en la fe, para que creyendo firmemente en tu Hijo Jesucristo podamos participar de su vida divina. Por nuestro Señor Jesucristo... LITURGIA DE LA PALABRA Ustedes han sido edificados sobre el cimiento de los apóstoles. De la carta del apóstol san Pablo a los efesios: 2, 19-22 Hermanos:
Ya no son ustedes extranjeros ni advenedizos; son conciudadanos de los
santos y pertenecen a la familia de Dios, porque han sido edificados sobre
el cimiento de los apóstoles y de los profetas, siendo Cristo Jesús
la piedra angular.
Del salmo 116 R/. Vayan por todo el mundo y prediquen el Evangelio.
ACLAMACIÓN (Jn 20, 29) R/. Aleluya, aleluya. ¡Señor mío y Dios mío! Del santo Evangelio según san Juan: 20, 24-29 Tomás,
uno de los Doce, a quien llamaban el Gemelo, no estaba con ellos cuando
vino Jesús, y los otros discípulos le decían: "Hemos
visto al Señor". Pero él les contestó: "Si
no veo en sus manos la señal de los clavos y si no meto mi dedo
en los agujeros de los clavos y no meto mi mano en su costado, no creeré". ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS Acepta, Señor, el sacrificio de alabanza que vamos a ofrecerte en esta festividad de santo Tomás, apóstol, y conserva en nosotros los dones de tu redención. Por Jesucristo, nuestro Señor. Prefacio I o II de los Apóstoles. ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Cfr. Jn 20, 27) Jesús dijo a Tomás: Acerca tu mano, toca las cicatrices dejadas por los clavos y no seas incrédulo, sino creyente. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN Padre misericordioso, que nos has alimentado con el Cuerpo y la Sangre de tu Hijo, haz que, junto con el apóstol Tomás, reconozcamos en Cristo a nuestro Señor y a nuestro Dios y demos testimonio con la vida de lo que creemos con la fe. Por Jesucristo, nuestro Señor. SAN RAMÓN o RAYMUNDO GAYRARD, del germánico, "la protección del consejo divino" (1118). Religioso. Datos biográficos fidedignos de san Raymundo, se consignan en un manuscrito del siglo XIII
Nuestra Señora del Refugio Santos: Isabel de Portugal, reina; Valentín de Berriochoa, mártir. Memoria libre (Blanco) LA PRUEBA DE LA CONFIANZA Gn 22, 1-19, Mt 9, 1-8 El patriarca Abrahán y el Señor Jesús son los protagonistas de los diferentes relatos que encontramos en este día. Cada uno se relaciona con enorme confianza en Dios. Abrahán accede sin protestar a cumplir el ritual terrible del sacrificio de su propio hijo. El Señor Jesús dispone soberanamente de la palabra y la autoridad para devolver la salud y otorgar el perdón al paralítico. Ambos sabían que Dios no los defraudaría y que finalmente respondería con un gesto de benevolencia y compasión a sus reclamos. No solamente el Señor Jesús manifiesta su confianza, también el paralítico y sus amigos se arriesgan, realizan todo lo humanamente posible para aproximarse al maestro. Dios responde con generosa compasión y benevolencia a quienes se abandonan en sus manos. Estos relatos nos animan a intentarlo. La confianza no es una teoría, ni una doctrina, sino una experiencia de fe que conviene comenzar a vivir. ANTÍFONA DE ENTRADA (Cfr. Jdt 13, 18-19) María, el Altísimo te ha bendecido más que a todas las mujeres de la tierra, y de tal manera te ha glorificado, que los hombres no cesan de alabarte. ORACIÓN COLECTA Dios todopoderoso y eterno, que has constituido a la santísima Virgen María como refugio y auxilio de los pecadores, concédenos su poderosa ayuda, para que, arrepentidos de nuestros pecados, alcancemos de tu misericordia la eterna felicidad. Por nuestro Señor Jesucristo... LITURGIA DE LA PALABRA El sacrificio de nuestro patriarca Abraham. Del libro del Génesis: 22, 1-19 En aquel
tiempo, Dios le puso una prueba a Abraham y le dijo: "¡Abraham,
Abraham!" Él respondió: "Aquí estoy".
Y Dios le dijo: "Toma a tu hijo único, Isaac, a quien tanto
amas; vete a la región de Moría y ofrécemelo en sacrificio,
en el monte que yo te indicaré".
Del salmo 114 R/. Nuestro Dios es compasivo.
ACLAMACIÓN (2 Co 5, 19) R/. Aleluya, aleluya. La gente glorificó a Dios, que había dado tanto poder a los hombres. Del santo Evangelio según san Mateo: 9, 1-8 En aquel
tiempo, Jesús subió de nuevo a la barca, pasó a la
otra orilla del lago y llegó a Cafarnaúm, su ciudad. En
esto, trajeron a donde Él estaba a un paralítico postrado
en una camilla. Viendo Jesús la fe de aquellos hombres, le dijo
al paralítico: "Ten confianza, hijo. Se te perdonan tus pecados". ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS Jubilosos de poder celebrar la festividad de la Madre de tu Hijo, te presentamos, Señor, estas ofrendas de alabanza, y te pedimos que por este santo intercambio de dones, se acrecienten en nosotros los frutos de la redención eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor. ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Cfr. Lc 1, 48) Me llamarán bienaventurada todas las generaciones, porque ha puesto Dios sus ojos en la humildad de su esclava. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN Habiendo recibido el sacramento celestial, te pedimos, Señor, que cuantos hemos celebrado con veneración, la memoria de la santísima Virgen María, merezcamos participar del banquete eterno. Por Jesucristo, nuestro Señor.
LAS BODAS DE ISAAC Gn 23,1-4.19; 24,1-8. 62-67; Mt 9,9-13 La narración del libro del Génesis describe ampliamente los rituales para concertar matrimonios entre la propia parentela. Isaac tiene que escoger una mujer del linaje de Abrahán como esposa. Los patriarcas y los israelitas en general, practicaban el matrimonio endogámico para preservar su identidad racial y religiosa. Los matrimonios con extraños y extranjeros no eran bien vistos. La apertura hacia los diferentes no era estimulada. En ese sentido el pasaje del Evangelio de san Mateo resulta comprensible. Los contemporáneos del Señor Jesús y en particular los fariseos que vivían pertrechados dentro de sus clubes de "buenos", se es-candalizaban de la conducta y el proceder incluyente que el Señor Jesús mostraba hacia los cobradores de impuestos. Jesús no se deja intimidar por sus reclamos, antes bien, defiende su convicción más profunda: ha venido a ofertar la misericordia de Dios a los pecadores y desesperanzados. ANTÍFONA DE ENTRADA (Sal 32, 11. 19) Los proyectos de su corazón subsisten de edad en edad, para librar de la muerte la vida de sus fieles, y reanimarlos en tiempo de hambre. ORACIÓN COLECTA Haz, Señor, que nos revistamos con las virtudes del corazón de tu Hijo, y nos encendamos con el amor que lo inflama, para que, asemejándonos a Él, merezcamos participar de la eterna redención. Por nuestro Señor Jesucristo... LITURGIA DE LA PALABRA Isaac amó tanto a Rebeca, que se consoló de la muerte de su madre. Del libro del Génesis: 23, 1-4. 19; 24, 1-8. 62-67 Sara vivió
ciento veintisiete años y murió en QuiryatArbá, hoy
Hebrón, en el país de Canaán, y Abraham lloró
e hizo duelo por ella. Cuando terminó su duelo, Abraham se levantó
y dijo a los hititas: "Yo soy un simple forastero que reside entre
ustedes. Denme en propiedad un sepulcro en su tierra para enterrar a mi
esposa". Y Abraham sepultó a Sara en la cueva del campo de
Makpelá, que está frente a Mambré, es decir, Hebrón,
en Canaán.
Del salmo 105 R/. Demos gracias al Señor, porque es bueno. ACLAMACIÓN
(Mt 11, 28) R/. Aleluya, aleluya. No son los sanos los que necesitan de médico. Yo quiero misericordia y no sacrificios. Del santo Evangelio según san Mateo: 9, 9-13 En aquel
tiempo, Jesús vio a un hombre llamado Mateo, sentado a su mesa
de recaudador de impuestos, y le dijo: "Sígueme". Él
se levantó y lo siguió. ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS Dios nuestro, Padre misericordioso, que por el inmenso amor con que nos has amado, nos diste con inefable bondad a tu Hijo único, concédenos que, identificados con Él en una perfecta unidad, te ofrezcamos una digna oblación. Por Jesucristo, nuestro Señor. ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Jn 7, 37-38) Dice el Señor: Si alguno tiene sed, que venga a mí y beba. De aquel que cree en mí, brotarán ríos de agua viva. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN Habiendo participado de tu sacramento de amor, te pedimos, Señor, la gracia de parecernos a Cristo aquí en la tierra, para merecer compartir su gloria allá en el cielo, con Él, que vive y reina por los siglos de los siglos.
Santos: María Goretti, mártir; Isaías, Profeta. Beata María Teresa Ledochowska, fundadora. Vísperas I del domingo: 2a semana del Salterio. Tomo III: pp. 880 y 495. Para los fieles: pp. 555 y 403 EL TRATAMIENTO DEL VINO NUEVO Gn 27,1-5.15-29; Mt 9,14-17 Los sucesos relativos a la bendición de Jacob resultan sorprendentes. El narrador no tiene empacho en referirnos el engaño de Jacob, la complicidad de Raquel su madre, la convicción arraigada de que el primogénito debía someter a sus hermanos menores —sé señor de los hijos de tu madre— y la aspiraciónde someter a los pueblos vecinos. Toda esa mentalidad marcada por el afán de dominación nos parece cuestionable. Sin duda son los odres viejos que envejecieron y que ya no pueden contener el vino nuevo. La decisión del Señor Jesús de no ayunar en el tiempo de su ministerio galileo es una defensa de su soberana libertad interior. Él está convencido que la bondad de Dios abraza y conforta a su pueblo y se alegra y contagia de esa alegría a sus hermanos. El discernimiento creyente e inteligente que Jesús realiza de la voluntad de Dios le permite vivir en libertad, sin dejarse amedrentar por quienes pretendían coartar su libertad. MISA DE SANTA MARÍA EN SÁBADO ANTÍFONA DE ENTRADA (Cfr. Hch 1, 14) Con un mismo espíritu, los discípulos perseveraban en la oración junto con María, la Madre de Jesús. ORACIÓN COLECTA Dios misericordioso, que quisiste que tu Hijo unigénito proclamara desde la cruz como Madre nuestra a su propia Madre, haz que tu Iglesia, por la mediación y cooperación maternal de la Virgen María, crezca cada día en santidad y atraiga a su seno a todas las naciones. Por nuestro Señor Jesucristo... LITURGIA DE LA PALABRA Jacob suplantó a su hermano y le robó la bendición de su padre. Del libro del Génesis: 27, 1-5. 15-29 Isaac había
envejecido y ya no veía por tener debilitados los ojos. Un día
llamó a Esaú, su hijo mayor, y le dijo: "¡Hijo
mío!" Esaú le respondió: "Aquí estoy".
Isaac le dijo: "Mira, ya soy viejo y no sé cuándo voy
a morir. Así pues, toma tus flechas, tu aljaba y tu arco, sal al
campo y caza algo para mí. Luego me preparas un buen guiso, como
a mí me gusta, y me lo traes para que me lo coma y te bendiga antes
de morir".
Del salmo 134 R/. Te alabamos, Señor, porque eres bueno. ACLAMACIÓN
(Jn 10, 27) R/. Aleluya, aleluya. ¿Cómo pueden llevar luto los amigos del esposo, mientras él está con ellos? Del santo Evangelio según san Mateo: 9, 14-17 En aquel
tiempo, los discípulos de Juan fueron a ver a Jesús y le
preguntaron: "¿Por qué tus discípulos no ayunan,
mientras nosotros y los fariseos sí ayunamos?" Jesús
les respondió: "¿Cómo pueden llevar luto los
amigos del esposo, mientras él está con ellos? Pero ya vendrán
días en que les quitarán al esposo, y entonces sí
ayunarán. Nadie remienda un vestido viejo con un parche de tela
nueva, porque el remiendo nuevo encoge, rompe la tela vieja y así
se hace luego más grande la rotura. Nadie echa el vino nuevo en
odres viejos, porque los odres se rasgan, se tira el vino y se echan a
perder los odres. El vino nuevo se echa en odres nuevos y así las
dos cosas se conservan". ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS Convierte, Señor, en el Cuerpo y la Sangre de tu Hijo, estos dones que te presentamos, y haz que este memorial de nuestra redención, nos inflame en el amor a la Virgen María, Madre de la Iglesia, y nos asocie íntimamente a ella en la obra de la salvación de los hombres. Por Jesucristo, nuestro Señor. PREFACIO En verdad
es justo y necesario, es nuestro deber y salvación darte gracias
siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios todopoderoso
y eterno, y alabarte en esta festividad de la Virgen Maria. ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Cfr. Jn 19, 26-27) Desde la cruz, Cristo dijo al discípulo amado: "He ahí a tu Madre". ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN Tú que nos has concedido en este sacramento la prenda de nuestra vida eterna, haz, Señor, que tu Iglesia, por la intercesión maternal de la Virgen María, ilumine a todas las naciones con la luz del Evangelio y las santifique con los dones de tu Espíritu. Por Jesucristo, nuestro Señor.
XIV DOMINGO ORDINARIO HUMANIDAD NUEVA Is 66, 10-14; Ga 6, 14-18; Lc 10,1-12. 17-20 La misión cristiana que realiza san Pablo en la comunidad de Galacia y la misión evangelizadora que realizaron los setenta y dos discípulos responden a un proyecto orgánico y bien definido. Dios pretende reconciliar a su pueblo y animarlos a vivir una existencia marcada por la paz, la justicia y la caridad. Esa renovación profunda de las relaciones humanas se verificará en la medida que haya hombres y mujeres nuevos. San Pablo lo sabe y lo formula con claridad y concisión: Lo que importa es una nueva humanidad. En la medida que los setenta y dos discípulos comuniquen efectivamente la paz de Dios a Israel, irá consolidándose el Reinado de Dios. Quienes se dejen tocar por la fuerza del anuncio del Evangelio, dispondrán de la gracia suficiente para vivir como hombres y mujeres nuevos. ANTÍFONA DE ENTRADA (Sal 47, 10-11) Recordaremos, Señor, los dones de tu amor en medio de tu templo. Que todos los hombres de la tierra te conozcan y alaben, porque es infinita tu justicia. ORACIÓN COLECTA Dios nuestro, que por medio de la muerte de tu Hijo has redimido al mundo de la esclavitud del pecado, concédenos participar ahora de una santa alegría y, después en el cielo, de la felicidad eterna. Por nuestro Señor Jesucristo... LITURGIA DE LA PALABRA Yo haré correr la paz sobre ella como un río. Del libro del profeta Isaías: 66, 10-14 Alégrense
con Jerusalén, gocen con ella todos los que la aman, alégrense
de su alegría todos los que por ella llevaron luto, para que se
alimenten de sus pechos, se llenen de sus consuelos y se deleiten con
la abundancia de su gloria. Porque dice el Señor: "Yo haré
correr la paz sobre ella como un río y la gloria de las naciones
como un torrente desbordado. Como niños serán llevados en
el regazo y acariciados sobre sus rodillas; como un hijo a quien su madre
consuela, así los consolaré yo. En Jerusalén serán
ustedes consolados.
Del salmo 65 R/. Las obras del Señor son admirables. Llevo en mi cuerpo la marca de los sufrimientos que he pasado por Cristo. De la carta del apóstol san Pablo a los gálatas: 6, 14-18 Hermanos:
No permita Dios que yo me gloríe en algo que no sea la cruz de
nuestro Señor Jesucristo, por el cual el mundo está crucificado
para mí y yo para el mundo. Porque en Cristo Jesús de nada
vale el estar circuncidado o no, sino el ser una nueva creatura. ACLAMACIÓN
(Col 3, 15. 16) R/. Aleluya, aleluya. El deseo de paz de ustedes se cumplirá. Del santo Evangelio según san Lucas: 10, 1-12. 17-20 En aquel
tiempo, Jesús designó a otros setenta y dos discípulos
y los mandó por delante, de dos en dos, a todos los pueblos y lugares
a donde pensaba ir, y les dijo: "La cosecha es mucha y los trabajadores
pocos. Rueguen, por lo tanto, al dueño de la mies que envíe
trabajadores a sus campos. Pónganse en camino; yo los envío
como corderos en medio de lobos. No lleven ni dinero, ni morral, ni sandalias
y no se detengan a saludar a nadie por el camino. Cuando entren en una
casa digan: 'Que la paz reine en esta casa'. Y si allí hay gente
amante de la paz, el deseo de paz de ustedes se cumplirá; si no,
no se cumplirá. Quédense en esa casa. Coman y beban de lo
que tengan, porque el trabajador tiene derecho a su salario. No anden
de casa en casa. En cualquier ciudad donde entren y los reciban, coman
lo que les den. Curen a los enfermos que haya y díganles: 'Ya se
acerca a ustedes el Reino de Dios'. Credo PLEGARIA UNIVERSAL Presentemos
al Padre nuestras plegarias. Después de cada petición diremos: ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS Que el sacrificio que vamos a ofrecerte nos purifique, Señor, y nos ayude a conformar cada día más nuestra vida con los ejemplos de tu Hijo Jesucristo, que vive y reina por los siglos de los siglos. Prefacio para los domingos del Tiempo Ordinario. ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Sal 33, 9) Hagan la prueba y verán qué bueno es el Señor; dichoso el que se acoge a Él. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN Dios omnipotente y eterno, que nos has alimentado con el sacramento de tu amor, concédenos vivir siempre en tu amistad y agradecer continuamente tu misericordia. Por Jesucristo, nuestro Señor. UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO.- Distintas corrientes filosóficas y diferentes sistemas políticos han propuesto construir al hombre nuevo. Los humanismos no cristianos que propugnaban por la construcción de relaciones justas, fraternas y solidarias se multiplicaron a lo largo del siglo XIX y pretendieron llevarse a la práctica en diferentes proyectos políticos durante el siglo pasado. El mensaje cristiano cuenta con esta misma aspiración: animar a los creyentes a convertirse en hombres nuevos, que voluntariamente se han despojado del hombre viejo. La especificidad del nuevo hombre cristiano es el humilde reconocimiento de que ese hombre nuevo no se auto construye con la pura buena voluntad, sino que también es el resultado de la acción misteriosa de la gracia de Dios en el corazón del creyente. El Espíritu de Jesús espiritualiza al hombre y el creyente humaniza en su existencia concreta al Espíritu. El cristiano no es obligado por ningún líder o proyecto político a convertirse en hombre nuevo, lo hace por su propia decisión libre.
Santos: Adriano III, Papa; Aquila y Priscila de Roma, mártires; Edgardo de Inglaterra, rey. Feria (Verde) UN LUGAR TERRIBLE Gn 28, 10-22; Mt 9, 18-26 El relato del encuentro misterioso del patriarca Jacob con Dios refleja una vivencia impresionante de lo sagrado. El hijo de Isaac pasa la noche en Almendral y entre sueños y visiones advierte la presencia misteriosa de Dios en su vida. El encuentro es tan real que lo deja perplejo y atemorizado. El evento no puede quedar en el olvido y pasará a formar parte de las tradiciones familiares de su grupo. Jacob erige una piedra y rebautiza el sitio con el nombre de Betel, para conmemorar ese evento fundacional; Dios se había manifestado a Jacob prometiéndole bendiciones abundantes. En otra perspectiva y bajo una modalidad apacible y discreta, la hemorroísa del Evangelio de san Mateo, experimenta la cercanía del Dios compasivo en la fuerza sanadora del Señor Jesús. El encuentro parece un tanto furtivo, pero la fe de la mujer fue suficientemente clara para que el Señor Jesús aliviara su dolor. ANTÍFONA DE ENTRADA (Mt 19, 21) Si quieres ser perfecto, anda y vende todo lo que tienes, reparte el dinero entre los pobres y después ven y sígueme, dice el Señor. ORACIÓN COLECTA Padre santo, que llamas a todos tus hijos a la perfección de la caridad e invitas a algunos a seguir más de cerca los ejemplos de Cristo, concede a quienes has elegido para esta vocación especial vivir de tal manera, que sean para la Iglesia y para el mundo, un signo elocuente de tu Reino. Por nuestro Señor Jesucristo... LITURGIA DE LA PALABRA Vio una escalera por la que subían y bajaban los ángeles de Dios y vio a Dios, que le hablaba. Del libro del Génesis: 28, 10-22 En aquel
tiempo, Jacob salió de Berseba y se dirigió a Jarán.
Al llegar a cierto lugar, se dispuso a pasar ahí la noche, porque
ya se había puesto el sol. Tomó entonces una piedra, se
la puso de almohada y se acostó en aquel sitio. Y tuvo un sueño:
Soñó una escalera que se apoyaba en tierra y con la punta
tocaba el cielo, y los ángeles de Dios subían y bajaban
por ella. Vio que el Señor estaba en lo alto de la escalera y oyó
que le decía: "Yo soy el Señor, el Dios de tu padre,
Abraham, y el Dios de Isaac. Te voy a dar a ti y a tus descendientes la
tierra en que estás acostado. Tus descendientes van a ser tan numerosos
como el polvo de la tierra y te extenderás hacia el oriente y el
poniente, hacia el norte y hacia el sur; por ti y por tus descendientes
serán bendecidos todos los pueblos de la tierra. Yo estoy contigo,
te cuidaré por dondequiera que vayas, te haré regresar a
esta tierra y no te abandonaré ni dejaré de cumplir lo que
te he prometido". Del
salmo 90 R/. Señor, en ti confio. ACLAMACIÓN
(Cfr. 2 Tm 1, 10) R/. Aleluya, aleluya. Mi hija acaba de morir; pero ven tú y volverá a vivir. Del santo Evangelio según san Mateo: 9, 18-26 En aquel
tiempo, mientras Jesús hablaba, se le acercó un jefe de
la sinagoga, se postró ante Él y le dijo: "Señor,
mi hija acaba de morir; pero ven tú a imponerle las manos y volverá
a vivir". ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS Acepta, Padre santo, los dones que te presentamos y concede a cuantos se han propuesto seguir con entusiasmo a tu Hijo por el camino estrecho de la perfección evangélica, servirle con libertad de espíritu y en fraternidad verdadera. Por Jesucristo, nuestro Señor. ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Cfr. Mt 19, 27. 28. 29) Yo les aseguro que ustedes, los que han abandonado todo por seguirme, recibirán cien veces más y obtendrán la vida eterna, dice el Señor. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN Fortalece, Señor, con este sacramento, a las comunidades religiosas a fin de que, permaneciendo fieles a su vocación, muestren al mundo una imagen viva de tu Hijo, que vive y reina por los siglos de los siglos.
DE CAMINO CON DIOS Gn 32, 22-32; Mt 9, 32-38 De viajes, andanzas y recorridos tratan estas lecturas. En el libro del Génesis Jacob peregrina al otro lado del Jordán, tratando de evitar un encuentro fatídico con su hermano Esaú. En una de esas noches de desvelo, vive una experiencia intensa de encuentro con Dios, que le permite identificar ese suceso como el parteaguas de su vida: había visto a Dios cara a cara y había recibido un nuevo nombre y una nueva misión. El relato del Evangelio de san Mateo contiene un breve sumario de la actividad misionera de Jesús. Él y sus discípulos recorren los poblados y aldeas de Galilea con la intención deliberada de apaciguar el sufrimiento de los enfermos y reanimar la esperanza en la próxima y decisiva intervención salvadora de Dios. Jesús vive como heraldo del Reino y artífice de la salvación, aunque sus adversarios pretendan descalificarlo, tachándolo de ser un aliado de Satanás. ANTÍFONA DE ENTRADA (Sal 37, 22-23) Señor, no me abandones, no te me alejes, Dios mío. Ven de prisa a socorrerme, Señor, mi salvador. ORACIÓN COLECTA Dios omnipotente y misericordioso, de cuya mano proviene el don de servirte y de alabarte, ayúdanos a vencer en esta vida cuanto pueda separarnos de ti. Por nuestro Señor Jesucristo... LITURGIA DE LA PALABRA En adelante te llamarás Israel porque has luchado con Dios y has salido victorioso. Del libro del Génesis: 32, 22-32 En aquel
tiempo, se levantó Jacob, tomó a sus dos mujeres con sus
dos siervas y sus once hijos y cruzó el arroyo de Yaboc. Los hizo
cruzar el torrente junto con todo lo que poseía. Del
salmo 16 R/. Señor, escucha nuestra súplica.
ACLAMACIÓN (Jn 10, 14) R/. Aleluya, aleluya. La cosecha es mucha y los trabajadores pocos. Del santo Evangelio según san Mateo: 9, 32-38 En aquel
tiempo, llevaron ante Jesús a un hombre mudo, que estaba poseído
por el demonio. Jesús expulsó al demonio y el mudo habló.
La multitud, maravillada, decía: "Nunca se había visto
nada semejante en Israel". Pero los fariseos decían: "Expulsa
a los demonios por autoridad del príncipe de los demonios". ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS Que este sacrificio que vamos a ofrecerte en comunión con toda tu Iglesia, te sea agradable, Señor, y nos obtenga la plenitud de tu misericordia. Por Jesucristo, nuestro Señor. ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Sal 15, 11) Me has enseñado el sendero de la vida, me saciarás de gozo en tu presencia. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN Continúa, Señor, en nosotros tu obra de salvación por medio de esta Eucaristía para que, cada vez más unidos a Cristo en esta vida, merezcamos vivir con Él eternamente. Por Jesucristo, nuestro Señor.
LA CASA DIVIDIDA Gn 41, 55-57; 42, 5-7. 17-24; Mt 10, 1-7 Jacob no se reponía de la pérdida de su hijo José y por esa razón decidió retener a Benjamín y no le permitió marcharse con sus hermanos a conseguir trigo en Egipto. La narración es de sobra conocida. El agravio que los hijos de Jacob habían cometido contra José generaría un extraño reencuentro entre los hermanos y su padre. Ni duda cabe, que la moraleja de la narración suele ser verdadera: Dios puede sacar bienes de los males que produce la mezquindad humana. En otro contexto y en otra época el Señor Jesús ordena a sus discípulos que restrinjan la misión a la tierra de Israel. Ni los samaritanos ni los no israelitas cabrían en un primer momento en el proyecto evangelizador. La reconciliación de Israel tendría que anteponerse a la misión abierta y universal. El camino de la misión cristiana se fue abriendo brecha de manera incierta y contradictoria, como suelen ser todos los procesos históricos que vivimos las sociedades humanas. ANTÍFONA DE ENTRADA (Jn 10, 14-15) Yo soy el Buen Pastor, dice el Señor, y conozco a mis ovejas y ellas me conocen a mí, de la misma manera que el Padre me conoce a mí y yo al Padre; y doy la vida por ellas. ORACIÓN COLECTA Dios todopoderoso y eterno, tú que reúnes a los que están dispersos y los mantienes en la unidad, mira con amor a todos los cristianos, a fin de que, cuantos están consagrados por un solo bautismo formen una sola familia, unida por el amor y la integridad de la fe. Por nuestro Señor Jesucristo... LITURGIA DE LA PALABRA Con razón estamos sufriendo ahora, porque pecamos contra nuestro hermano. Del libro del Génesis: 41, 55-57; 42, 5-7. 17-24 En aquellos
días, en todo el país de Egipto hubo hambre, y el pueblo
clamó al faraón, pidiéndole pan. El faraón
le respondió al pueblo: "Vayan a José y hagan lo que
él les diga". Entonces José mandó abrir todas
las bodegas y abasteció de víveres a los egipcios. Y como
el hambre se extendiera por toda la tierra, de todos los países
iban a Egipto para comprar víveres a José y remediar la
carestía. Del salmo 32 R/. Muéstranos, Señor, tu misericordia. Demos gracias
a Dios al son del arpa, que la lira acompañe nuestros cantos; cantemos
en su honor nuevos cantares, al compás de instrumentos alabémoslo.
R/. ACLAMACIÓN
(Mc 1, 15) R/. Aleluya, aleluya. Del santo Evangelio según san Mateo: 10, 1-7 En aquel
tiempo, llamando Jesús a sus doce discípulos, les dio poder
para expulsar a los espíritus impuros y curar toda clase de enfermedades
y dolencias. ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS Señor, tú que con un solo y único sacrificio, el de tu Hijo, redimiste a tu pueblo y lo adoptaste para siempre, concédele los dones de la unidad y de la paz. Por Jesucristo, nuestro Señor. ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Cfr. 1 Co 10, 17) Todos los que participamos de un mismo pan y de un mismo cáliz, no obstante ser muchos, somos un solo cuerpo como uno solo es el pan. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN Señor, que esta santa comunión que hemos recibido, signo de nuestra fraternidad en Cristo, realice la unidad en tu Iglesia. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Santos: Benito de Nursia, abad; Pío I, Papa; Olga de Kiev, reina. Memoria (Blanco) YO SOY JOSÉ, SU HERMANO Gn 44,18-21. 23-29; 45,1-5; Mt 10,7-15 La reconciliación entre familias y hermanos agraviados por violencia o ultrajes graves no es fácil de conseguir. Una o ambas partes necesita disponer de una grandeza de corazón y una capacidad para perdonar que no abunda. José no había guardado ningún resentimiento contra sus hermanos. La mente de José penetró más allá del doloroso incidente y leyó el mensaje trascendente que su forzada migración a Egipto había producido. Dios escribe derecho con renglones torcidos. Justamente para corregir los entuertos y desviaciones que la debilidad y la maldad humana produce en la vida de los pobres y los enfermos, envió Jesús a sus discípulos a predicar y curar en las aldeas de Galilea. Algo fuera de serie estaba ocurriendo, porque el carismático profeta y sanador de Nazaret podía comunicar su autoridad a unos pescadores generosos y entusiasmados que devolvían a la gente afligida la alegría de vivir al restituirles la salud perdida. ANTÍFONA DE ENTRADA (Sal 15, 5-6) El Señor es la parte que me ha tocado en herencia; la parte que he recibido es la más hermosa. El mismo Señor es mi recompensa. ORACIÓN COLECTA Dios nuestro, que nos has dado en san Benito un maestro admirable de vida consagrada a ti, haz que, según sus enseñanzas, antepongamos tu amor a todas las cosas y procuremos el bien de los demás antes que el nuestro. Por nuestro Señor Jesucristo... LITURGIA DE LA PALABRA Dios me mandó a Egipto para salvarles la vida. Del libro del Génesis: 44, 18-21. 23-29; 45, 1-5 En aquellos
días, se acercó Judá a José y le dijo: "Con
tu permiso, señor, tu siervo va a pronunciar algunas palabras a
tu oído; no te enojes con tu siervo, pues tú eres como un
segundo faraón. Tú, señor, nos preguntaste: `¿Tienen
padre o algún hermano?' Nosotros te respondimos: 'Sí, tenemos
un padre anciano, con un hijo pequeño, que le nació en su
vejez. Como es el único que le queda de su madre, pues el otro
hermano ya murió, su padre lo ama tiernamente'. Entonces tú
dijiste a tus siervos: 'Tráiganmelo para que yo lo vea con mis
propios ojos, pues si no viene su hermano menor con ustedes, no los volveré
a recibir'. Del
salmo 104 R/. Recordemos los prodigios del Señor.
ACLAMACIÓN (Mc 1, 15) R/. Aleluya, aleluya. Gratuitamente han recibido este poder; ejérzanlo, pues, gratuitamente. Del santo Evangelio según san Mateo: 10, 7-15 En aquel
tiempo, envió Jesús a los Doce con estas instrucciones:
"Vayan y proclamen por el camino que ya se acerca el Reino de los
cielos. Curen a los leprosos y demás enfermos; resuciten a los
muertos y echen fuera a los demonios. Gratuitamente han recibido este
poder; ejérzanlo, pues, gratuitamente. ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS Acepta, Señor, con bondad los dones que te presentamos en esta festividad de san Benito y haz que, a ejemplo suyo, te busquemos a ti únicamente a fin de que podamos obtener en tu servicio el don de la unidad y de la paz. Por Jesucristo, nuestro Señor. ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Cfr. Mt 19, 27-29) Yo les aseguro, dice el Señor, que los que han dejado todo para seguirme, recibirán cien veces más y alcanzarán la vida eterna. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN Señor, tú, que nos has alimentado con el Cuerpo y la Sangre de Cristo, haz que, según el espíritu de san Benito abad, te sirvamos fielmente y pongamos en práctica un sincero amor fraterno. Por Jesucristo, nuestro Señor.
EMIGRARON A EGIPTO Gn 46,1-7.28-30; Mt 10,16-23 En el relato del Génesis se nos refiere el viaje jubiloso de un padre de familia, Jacob, que arrea rebaños y guía a hijos y nietos para residir esperanzadamente en Egipto, bajo la protección de José y el faraón. En ésta como en otras migraciones la gente no deja su tie-rra de forma voluntaria, sino forzado por la necesidad y la falta de oportunidades. La Biblia exhibe una actitud favorable y respetuosa hacia los migrantes, porque fue escrita por un pueblo que conoció numerosas migraciones. En el Evangelio de san Mateo los discípulos de Jesús aceptan su invitación a partir en misión a las poblaciones de Galilea. El encuentro con los campesinos galileos no seria siempre cordial. Así se los advirtió Jesús y así lo vivieron antes y después de la Pascua. La misión cristiana producía controversia, generaba adhesiones y rechazos. La misión original nacía en un clima de entusiasmo y esperanza: era necesario resistir y perseverar porque la victoria del Señor era inminente. ANTÍFONA DE ENTRADA (Cfr. Sb 11, 24. 25. 27) Señor, tú tienes misericordia de todos y nunca odias a tus creaturas; borras los pecados de los hombres que se arrepienten, y los perdonas, porque tú, Señor, eres nuestro Dios. ORACIÓN COLECTA Escucha, Señor, nuestra oración y perdona nuestros pecados, para que recibamos, juntamente, tu perdón y tu paz. Por nuestro Señor Jesucristo... LITURGIA DE LA PALABRA Ya puedo morir tranquilo, pues te he vuelto a ver. Del libro del Génesis: 46, 1-7. 28-30 En aquellos
días, partió Jacob con todas sus pertenencias y llegó
a Berseba, donde hizo sacrificios al Dios de su padre Isaac. Por la noche,
Dios se le apareció y le dijo: ¡Jacob, Jacob!" Él
respondió: "Aquí estoy". El Señor le dijo:
"Yo soy Dios, el Dios de tu padre. No tengas miedo de ir a Egipto,
porque ahí te convertiré en un gran pueblo. Yo iré
contigo allá, José te cerrará los ojos y después
de muerto, yo mismo te haré volver aquí".
Del salmo 36 R/. La salvación del justo es el Señor.
ACLAMACIÓN (Jn 16, 13; 14, 26) R/.Aleluya, aleluya. No serán ustedes los que hablarán, sino el Espíritu de su Padre. Del santo Evangelio según san Mateo: 10, 16-23 En aquel
tiempo, Jesús dijo a sus apóstoles: "Yo los envío
como ovejas entre lobos. Sean, pues, precavidos como las serpientes y
sencillos como las palomas. ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS Acepta, Señor, este sacrificio de reconciliación y alabanza, para que perdones nuestros pecados y dirijas hacia ti nuestro vacilante corazón. Por Jesucristo, nuestro Señor. ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Lc 15, 10) Por un solo pecador que se convierta, dice el Señor, habrá gran alegría entre los ángeles del cielo. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN Por nuestra participación en el sacramento del Cuerpo y la Sangre de tu Hijo, nos has perdonado, Señor, nuestros pecados, concédenos tu gracia para evitarlos de ahora en adelante y servirte con sincero corazón. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Santos: Enrique II de Alemania, emperador; Joel, Profeta. Beato Carlos Manuel Rodríguez, laico. Vísperas I del domingo: 3a semana del Salterio. Tomo III: pp. 1019 y 533. Para los fieles: pp. 642 y 405. Edición popular: pp. 202 y 471. Feria (Verde) NO TENGAN MIEDO Gn 49, 29-32; 50, 15-26; Mt 10, 24-33 Al morir Jacob, su padre, los hermanos de José se sienten inseguros pues imaginan que José tomará revancha contra ellos. La magnanimidad de José es lo suficiente para erradicar el miedo de sus hermanos. Ellos no tendrán que temer, porque en lugar de lastimarlos, se convertirá en protector. Agradecido con Dios que sabe extraer bienes de la maldad humana, corresponde a la maldad de sus hermanos, haciéndoles el bien. Ésta es la verdadera nobleza y la verdadera fraternidad. Del mismo motivo del miedo a los perseguidores se apropia el Señor Jesús para alentar a sus discípulos. Ellos realizarán una misión por encargo suyo, y contarán con su protección. La vida de los misioneros cristianos está expuesta a riesgos e incertidumbres, pero no corre a la deriva; el Padre bondadoso se ocupa de cuidar a sus hijos y preservarlos de males y peligros. No obstante, cabe señalar que la reciente historia de violencia que aflige a nuestro país, pareciera hacer cimbrar esta convicción. La fe está sometida a la prueba; si resiste, renacerá como esperanza perseverante. MISA DE SANTA MARÍA EN SÁBADO ANTÍFONA DE ENTRADA (Sedulio) Te aclamamos, santa Madre de Dios, porque has dado a luz al Rey que gobierna cielo y tierra por los siglos de los siglos. ORACIÓN COLECTA Dios y Padre nuestro, que nos has dado en la Virgen María el modelo de quien escucha tu Palabra y la pone en práctica, abre nuestro corazón al gozo de la escucha, y por medio de tu Espíritu Santo haz que seamos lugar santo en el que tu Palabra de salvación se cumpla hoy. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos. LITURGIA DE LA PALABRA Dios cuidará de ustedes y los sacará de este país. Del libro del Génesis: 49, 29-32; 50, 15-26 En aquellos
días, Jacob llamó a sus hijos y les dio estas instrucciones:
"Yo voy a reunirme con los míos. Sepúltenme junto a
mis padres, en la cueva del campo de Makpelá, frente a Mambré,
en Canaán. Es el campo que Abraham le compró a Efrón,
el hitita, para que lo enterraran. Ahí sepultaron a Abraham y a
su esposa Sara, a Isaac y a su esposa Rebeca, y ahí sepulté
yo a Lía". Cuando terminó de dar este encargo a sus
hijos, Jacob expiró y fue a reunirse con los suyos. Los hermanos
de José, al ver que había muerto su padre, dijeron: "A
ver si José no nos guarda rencor y no nos hace pagar todo el daño
que le hicimos". Por eso le mandaron este recado: "Antes de
morir, tu padre nos encargó que te dijéramos esto: 'Perdona,
por favor, a tus hermanos su crimen, su pecado y el daño que te
hicieron'. También nosotros, siervos del Dios de tu padre, te pedimos
que nos perdones". Cuando José oyó el recado se puso
a llorar. Del
salmo 104 R/. Cantemos la grandeza del Señor.
ACLAMACIÓN (1 P 4, 14) R/. Aleluya, aleluya. No tengan miedo a los que matan el cuerpo, pero no pueden matar el alma. Del santo Evangelio según san Mateo: 10, 24-33 En aquel
tiempo, Jesús dijo a sus apóstoles: "El discípulo
no es más que el maestro, ni el criado más que su señor.
Le basta al discípulo ser como su maestro y al criado ser como
su señor. Si al señor de la casa lo han llamado Satanás,
¡qué no dirán de sus servidores! ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS Padre lleno de bondad, que nos socorra el inmenso amor de tu Hijo unigénito para que, quien al nacer de la Virgen María, no menoscabó la integridad de la Madre, sino que la consagró, nos libre de nuestras culpas y haga acepta a ti nuestra oblación. Por Jesucristo, nuestro Señor. Prefacio de Santa María Virgen. ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Cfr. Lc 11, 27) Dichosa la Virgen María, que llevó en su seno al Hijo del eterno Padre. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN Señor, al recibir el sacramento celestial en esta conmemoración de la santísima Virgen María, te pedimos que nos concedas celebrar dignamente, a imitación suya, el misterio de nuestra redención. Por Jesucristo, nuestro Señor.
XV DOMINGO ORDINARIO Santos: Camilo de Lelis, fundador; Francisco Solano, presbítero. Beato Ghebre Miguel, presbítero. (Verde) EL MANDAMIENTO ESTÁ A TU ALCANCE Dt 30, 10-14; Col 1,15-20; Lc 10,25-37 La exhortación que pone punto final al libro del Deuteronomio y en cierta medida también al Pentateuco, defiende una firme convicción. La instrucción que Dios oferta a Israel es accesible. Las exigencias y mandatos son claros e inteligibles, están formulados en un lenguaje familiar y solamente hace falta disponerse libre y voluntariamente a cumplirlos. Las personas de buena voluntad los podrán acoger y cumplir, cada vez que las circunstancias y necesidades sociales lo reclamen. La parábola del Buen Samaritano es la ilustración palpable de esta verdad: los que conocían al dedillo el tenor y el espíritu de la ley de Israel, es decir, el sacerdote y el escriba, fingen no captar el llamado de Dios a practicar la compasión con el herido. En cambio, un samaritano que no disponía de un conocimiento tan certero de la ley, fue capaz de atender al llamado de Dios. ANTÍFONA DE ENTRADA (Sal 16, 15) Yo quiero acercarme a ti, Señor, y saciarme de gozo en tu presencia. ORACIÓN COLECTA Señor, tú que iluminas a los extraviados con la luz de tu Evangelio para que vuelvan al camino de la verdad, concede a cuantos nos llamamos cristianos imitar fielmente a Cristo y rechazar lo que pueda alejarnos de Él, que vive y reina contigo... LITURGIA DE LA PALABRA Los mandamientos están muy a tu alcance para que puedas cumplirlos. Del libro del Deuteronomio: 30, 10-14 En aquellos
días, habló Moisés al pueblo y le dijo: "Escucha
la voz del Señor, tu Dios, que te manda guardar sus mandamientos
y disposiciones escritos en el libro de esta ley. Y conviértete
al Señor tu Dios, con todo tu corazón y con toda tu alma. Del
salmo 68 R/. Escúchame, Señor, porque eres bueno. Todo fue creado por medio de Él y para Él. De la carta del apóstol san Pablo a los colosenses: 1,15-20 Cristo es
la imagen de Dios invisible, el primogénito de toda la creación,
porque en Él tienen su fundamento todas las cosas creadas, del
cielo y de la tierra, las visibles y las invisibles, sin excluir a los
tronos y dominaciones, a los principados y potestades. Todo fue creado
por medio de Él y para Él.
ACLAMACIÓN (Cfr. Jn 6, 63. 68) R/. Aleluya, aleluya. ¿Quién es mi prójimo? Del santo Evangelio según san Lucas: 10, 25-37 En aquel
tiempo, se presentó ante Jesús un doctor de la ley para
ponerlo a prueba y le preguntó: "Maestro, ¿qué
debo hacer para conseguir la vida eterna?" Jesús le dijo:
"¿Qué es lo que está escrito en la ley? ¿Qué
lees en ella?" El doctor de la ley contestó: "Amarás
al Señor tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma,
con todas tus fuerzas y con todo tu ser, y a tu prójimo como a
ti mismo". Jesús le dijo: "Has contestado bien; si haces
eso, vivirás". Credo PLEGARIA UNIVERSAL Jesús
nos ha invitado a amar a Dios con todo nuestro corazón y con toda
nuestra alma, y a amar a los demás como a nosotros mismos. Movidos
por este amor oremos. ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS Mira bondadosamente, Señor, las ofrendas de tu Iglesia suplicante, y conviértelas en alimento espiritual, que ayude a crecer en santidad a todos tus fieles. Por Jesucristo, nuestro Señor. Prefacio para los domingos del Tiempo Ordinario. ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Sal 83, 4-5) Dichosos los que se acercan a tu altar, Señor. Dichosos los que viven en tu casa y pueden alabarte siempre, Rey mío y Dios mío. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN Te suplicamos, Señor, que esta Eucaristía que hemos recibido, nos ayude a amarte más y a servirte mejor cada día. Por Jesucristo, nuestro Señor. UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO.- La sociedad en que vivimos resiente una crisis de solidaridad. Las personas hemos cambiado hábitos y costumbres y nos hemos pertrechado en situaciones de bienestar y confort personal. Este desinterés creciente por auxiliar y socorrer a los necesitados, este desgano por compartir y participar en iniciativas y organizaciones comunitarias no es producto de la ignorancia o el desconocimiento de los deberes que nos impone nuestra común pertenencia a un grupo social y a una comunidad. No es la desinformación, sino la apatía y el desinterés lo que nos mantiene pasivos. Para que las generaciones emergentes no terminen por enconcharse en su propio egoísmo, es necesario acercarlos de manera directa a las situaciones desfavorables que viven personas afectadas por el desempleo, la orfandad, las adicciones, la enfermedad, la privación de la libertad y la marginación. El corazón de los jóvenes se ablanda y se humaniza cuando palpa el sufrimiento de las personas inocentes. PERDER O GANAR LA VIDA Ex 1, 8-14. 22; Mt 10, 34-11, 1 Las dos parteras hebreas de las que se habla más delante de este pasaje, hacen un discernimiento sensato y preciso: tienen que anteponer su fidelidad a Dios a las órdenes del faraón. No pueden colaborar con el rey opresor, cumpliendo leyes injustas, quitándoles la vida a niños inocentes. Deciden decir no a las órdenes arbitrarias aun a riesgo de su vida y su seguridad. El relato del Éxodo nos confirma que Dios las bendijo y premió dándoles descendencia. Estas mujeres son un ejemplo típico de la objeción de conciencia. El Evangelio de san Mateo postula una exhortación parecida. Quien se disponga a seguir con todas sus consecuencias el mensaje de Dios enfrentará adversidades y persecuciones. Perder la vida o ponerla en riesgo por causa del Evangelio no es una empresa ruinosa como parece. La tranquilidad de conciencia, la certidumbre de obrar de manera congruente, la paz interior son realidades que confirman que mantenerse fiel a las convicciones de fe, es mejor opción que renegar del compromiso bautismal, adhiriéndose a las exigencias de la cultura hedonista. ANTÍFONA DE ENTRADA (Dn 12, 3) Los sabios brillarán como el fulgor del firmamento; y los que enseñaron a muchos la justicia, serán como estrellas eternas. ORACIÓN COLECTA Te suplicamos, Dios nuestro, que quienes estamos reunidos aquí para celebrar la fiesta de san Buenaventura, podamos, por su intercesión y a ejemplo suyo, ir profundizando cada día más en tu conocimiento y en tu amor. Por nuestro Señor Jesucristo... LITURGIA DE LA PALABRA Tomemos precauciones contra Israel para que no siga multiplicándose. Del libro del Éxodo: 1, 8-14. 22 En aquel
tiempo, subió al poder en Egipto un nuevo faraón, que no
había conocido a José, y le dijo a su pueblo: "Los
hijos de Israel forman un pueblo más numeroso y fuerte que nosotros.
Tomemos precauciones contra ellos para que no sigan multiplicándose,
no sea que, en caso de guerra, se unan a nuestros enemigos, para luchar
contra nosotros y se escapen del país". Del
salmo 123 R/. Nuestra ayuda es invocar al Señor.
ACLAMACIÓN (Mt 5, 10) R/. Aleluya, aleluya. No he venido a traer la paz, sino la guerra. Del santo Evangelio según san Mateo: 10, 34-11, 1 En aquel
tiempo, Jesús dijo a sus apóstoles: "No piensen que
he venido a traer la paz a la tierra; no he venido a traer la paz, sino
la guerra. He venido a enfrentar al hijo con su padre, a la hija con su
madre, a la nuera con su suegra; y los enemigos de cada uno serán
los de su propia familia. ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS Que la participación en esta Eucaristía nos llene, Señor, de la luz de tu espíritu que iluminó a san Buenaventura, y lo hizo instrumento de tu gloria. Por Jesucristo, nuestro Señor. ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (1 Cor 1, 23-24) Nosotros proclamamos a Cristo crucificado: fuerza de Dios y sabiduría de Dios. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN Alimentados con este sacramento, te pedimos, Señor, que fieles a las enseñanzas de san Buenaventura, te demos gracias sin cesar por los dones recibidos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Nuestra Señora del Carmen Santos: Santa María Magdalena Postel, fundadora. Beato Bartolomé de los Mártires, obispo. Memoria (Blanco) DOS LECTURAS CONTRASTANTES Ex 2, 1-15; Mt 11, 20-24 El relato evangélico exhibe la necedad de los pobladores de las aldeas ribereñas del lago de Galilea, quienes no obstante contemplaron las numerosas señales que Jesús realizó, no supieron deletrear el mensaje de compasión y esperanza que Dios les había enviado. Se mantuvieron aferrados a su mentalidad estrecha y desairaron la invitación del Señor Jesús. No supieron descifrar el mensaje urgente que Dios les dirigía a través de las obras y palabras del profeta de Nazaret. En el capítulo segundo del Éxodo apreciamos otra dinámica muy distinta. Moisés había permanecido durante su infancia en el palacio del faraón, desconociendo la situación de opresión en que vivían sus hermanos. Cuando contempló de forma directa la humillación que padecían, reaccionó con indignación y un cierto apresuramiento, pero afloró su sensibilidad social. Se había convertido en un líder generoso que sabía descifrar el sordo clamor que los esclavos hebreos dirigían al Señor. ANTÍFONA DE ENTRADA Dichosa tú, Virgen María, que llevaste en tu seno al creador del universo; diste a luz al que te creó, y permaneces virgen para siempre. ORACIÓN COLECTA Padre todopoderoso, te suplicamos que la santísima Virgen María nos proteja siempre con su maternal intercesión y nos ayude a conocer y a amar a tu Hijo Jesucristo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos. LITURGIA DE LA PALABRA Le puso por nombre Moisés, porque fue sacado del agua. - Cuando Moisés creció, fue a visitar a sus hermanos. Del libro del Éxodo: 2, 1-15 En aquellos
días, un hombre de la tribu de Leví se casó con una
mujer de su misma tribu. La mujer concibió y dio a luz un hijo;
y viendo que era hermoso, lo tuvo escondido tres meses. Pero como ya no
podía ocultarlo por más tiempo, tomó una canastilla
de mimbre, la embadurnó con betún y con brea, metió
en ella al niño y la dejó entre los juncos, a la orilla
del río. Entre tanto, la hermana del niño se quedó
a cierta distancia para ver lo que sucedía.
Del salmo 68 R/. Busquen al Señor y vivirán.
ACLAMACIÓN (Cfr. Sal 94, 8) R/. Aleluya, aleluya. El día del juicio será menos riguroso para Tiro, Sidón y Sodoma que para otras ciudades. Del santo Evangelio según san Mateo: 11, 20-24 En aquel
tiempo, Jesús se puso a reprender a las ciudades que habían
visto sus numerosos milagros, por no haberse convertido. Les decía: ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS Al venerar la memoria de la Madre de tu Hijo, te rogamos, Señor, que la ofrenda que te presentamos nos transforme, por tu gracia, en oblación viva y continua. Por Jesucristo, nuestro Señor. ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Lc 1, 49) Ha hecho en mí maravillas el Todopoderoso, cuyo nombre es santo. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN Ya que participamos de la redención eterna, te pedimos, Señor, que al venerar la memoria de la Madre de tu Hijo, nos gloriemos de la plenitud de tu gracia y sintamos los efectos de tu obra redentora. Por Jesucristo, nuestro Señor.
LA REVELACIÓN ES PARA LOS SENCILLOS Ex 3, 1-6. 9-12; Mt 11, 25-27 La enseñanza fundamental del Evangelio de san Mateo se verifica de manera cotidiana. Conforme aumenta el bienestar económico, el grado de conocimiento, el manejo del poder y los años de vida, las personas vamos estrechando nuestra apertura mental, hasta hacernos prácticamente impermeables a los llamados de la gracia. Los pequeños y los sencillos se nos adelantan en el camino de la fe, y los pretendidamente "grandes" nos dejamos enredar por la "sabiduría humana" y terminamos por desoír el mensaje de Dios. El encuentro intenso y vivo entre Dios y Moisés se llevó a cabo por la disponibilidad y sencillez de corazón del pastor fugitivo. ANTÍFONA DE ENTRADA (Sal 105, 47) Sálvanos, Señor y Dios nuestro; reúnenos de entre las naciones, para que podamos agradecer tu poder santo y sea nuestra gloria el alabarte. ORACIÓN COLECTA Concédenos, Señor, Dios nuestro, amarte con todo el corazón y, con el mismo amor, amar a nuestros prójimos. Por nuestro Señor Jesucristo... LITURGIA DE LA PALABRA Se le apareció el Señor en una llama que salía de un zarzal. Del libro del Éxodo: 3, 1-6. 9-12 En aquellos
días, Moisés pastoreaba el rebaño de su suegro, Jetró,
sacerdote de Madián. En cierta ocasión llevó el rebaño
más allá del desierto, hasta el Horeb, el monte de Dios,
y el Señor se le apareció en una llama que salía
de un zarzal. Moisés observó con gran asombro que la zarza
ardía sin consumirse y se dijo: "Voy a ver de cerca esa cosa
tan extraña, por qué la zarza no se quema". Del salmo 102 R/. El Señor es compasivo y misericordioso. Bendice al
Señor, alma mía, que todo mi ser bendiga su santo nombre.
Bendice al Señor, alma mía, y no te olvides de sus beneficios.
R/. ACLAMACIÓN
(Cfr. Mt 11, 25) R/. Aleluya, aleluya. Escondiste estas cosas a los sabios y las revelaste a la gente sencilla. Del santo Evangelio según san Mateo: 11, 25-27 En aquel
tiempo, Jesús exclamó: "Yo te alabo, Padre, Señor
del cielo y de la tierra, porque has escondido estas cosas a los sabios
y entendidos, y las has revelado a la gente sencilla! Gracias, Padre,
porque así te ha parecido bien. ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS Acepta, Señor, estos dones que te presentamos en señal de sumisión a ti, y conviértelos en el sacramento de nuestra redención. Por Jesucristo, nuestro Señor. ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Sal 30, 17-18) Ven, Señor, en ayuda de tu siervo y sálvame por tu misericordia. Que no me arrepienta nunca de haberte invocado. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN Que el sacramento del Cuerpo y la Sangre de tu Hijo que acabamos de recibir, nos ayude, Señor, a vivir más profundamente nuestra fe. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Santos: Arnulfo de metz, obispo; Federico de Utrech, obispo; Simeón de Lípnica, presbítero. Feria (Verde) HE DECIDIDO SACARLOS DE LA OPRESIÓN Ex 3,13-20; Mt 11,28-30 De realidades dolorosas y deshumanizantes hablan de alguna manera las dos lecturas. Mientras que el Evangelio hace una invitación abierta a todas las personas que sobrellevan cargas insoportables, frecuentemente impuestas por la rigidez y la brutalidad de dirigentes políticos y religiosos abusivos, a que se liberen de ésas, identificándose con el camino y la propuesta de Jesús. Efectivamente, quien se adhiere a Jesús no renuncia a su libertad ni a su autonomía personal, antes bien, aprende a vivir en diálogo permanente y abierto con Él. El discípulo de Jesús reorienta sus opciones vitales a partir de la mirada de Jesucristo. El relato de la vocación de Moisés ratifica la meta innegociable de su misión: el pastor fugitivo se sumará, si así lo desea, al proyecto liberador de Dios. El Señor no es cómplice de la opresión, ni se deja sobornar por ofrendas y dones votivos ofrecidos por los que usan violencia para maltratar a emigrantes y forasteros. ANTÍFONA DE ENTRADA (Sal 109, 4) El Señor lo ha jurado y el Señor no se retracta. Tú eres sacerdote para siempre, como lo es Melquisedec. ORACIÓN COLECTA Señor Dios, que para gloria tuya y salvación nuestra constituiste a Cristo sumo y eterno sacerdote, concede al pueblo redimido con su sangre obtener, por la participación en este memorial, los frutos de la muerte y resurrección de tu Hijo, que vive y reina contigo... LITURGIA DE LA PALABRA Mi nombre es "Yo-soy". - "Yo-soy" me envía a ustedes. Del libro del Éxodo: 3, 13-20 En aquel
tiempo, Moisés [después de oír la voz del Señor
en medio de la zarza] le dijo: "Está bien. Me presentaré
a los hijos de Israel y les diré: 'El Dios de sus padres me envía
a ustedes'; pero cuando me pregunten cuál es su nombre, ¿qué
les voy a responder?".
Del salmo 104 R/. El Señor nunca olvida sus promesas.
ACLAMACIÓN (Mt 11, 28) R/. Aleluya, aleluya. Soy manso y humilde de corazón. Del santo Evangelio según san Mateo: 11, 28-30 En aquel
tiempo, Jesús dijo: "Vengan a mí, todos los que están
fatigados y agobiados por la carga, y yo les daré alivio. Tomen
mi yugo sobre ustedes y aprendan de mí, que soy manso y humilde
de corazón, y encontrarán descanso, porque mi yugo es suave
y mi carga, ligera". ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS Concédenos, Señor, participar dignamente en esta Eucaristía, porque cada vez que celebramos el memorial del sacrificio de tu Hijo, se lleva a cabo la obra de nuestra redención. Por Jesucristo, nuestro Señor. ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (1 Co 11, 24-25) Éste es mi Cuerpo, que se da por ustedes. Este cáliz es la nueva alianza establecida por mi Sangre; cuantas veces lo beban, háganlo en memoria mía, dice el Señor. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN Señor, tú que nos has concedido el gozo de participar en esta Eucaristía, memorial de la muerte y resurrección de tu Hijo, haz que, unidos siempre a Él, vivamos como verdaderos hijos tuyos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
YO SOY EL SEÑOR Ex 11,10-12, 14; Mt 12,1-8 La negociación que Moisés había intentando llevar a cabo con el faraón partía de ese postulado. El Dios de Israel es el Señor y por tanto, nadie puede disponer de la vida y la libertad de su pueblo. Esa pretensión soberana tendría que acreditarse con acciones de poder. Dios pasaría salvando y rescatando a su pueblo de la opresión egipcia y de esa manera, se haría evidente su discurso. La promesa de liberación se cumpliría al momento que Israel empezara a disponer libremente de su vida, su descanso, sus ritmos festivos y su ruta de viaje. Por esa opción a favor de la libertad, Israel no podría permitir que alguien le arrebatara su libertad. Ésa fue la razón que animó al Señor Jesús a confrontarse con las autoridades y los líderes de opinión en Israel. Ellos habían tejido una red de normas y mandamientos que victimizaban a las personas y los convertían en perpe-tuos menores de edad. La propuesta del Reinado de Dios ratifica el señorío exclusivo del Padre y cuestiona todos los proyectos manipuladores y abusivos que se erigen en su nombre. ANTÍFONA DE ENTRADA (Ap 5, 9-10) Sin distinción de raza, lengua, pueblo o nación, nos compraste, Señor, con tu Sangre e hiciste de nosotros un Reino para Dios. ORACIÓN COLECTA Dios nuestro, que has redimido a todos los hombres con la preciosa Sangre de tu Hijo, protege en nosotros la obra de tu misericordia, para que, celebrando siempre el misterio de nuestra salvación merezcamos alcanzar sus frutos eternos. Por nuestro Señor Jesucristo... LITURGIA DE LA PALABRA Al atardecer inmolarán un cordero. - Yo veré su sangre y pasaré de largo. Del libro del Éxodo: 11, 10-12, 14 En aquellos
días, Moisés y Aarón hicieron muchos prodigios ante
el faraón, pero el Señor endureció el corazón
del faraón, que no dejó salir de su país a los hijos
de Israel. Del
salmo 115 R/. Cumpliré mis promesas al Señor. ACLAMACIÓN
(Jn 10, 27) R/. Aleluya, aleluya. El Hijo del hombre también es dueño del sábado. Del santo Evangelio según san Mateo: 12, 1-8 Un sábado,
atravesaba Jesús por los sembrados. Los discípulos, que
iban con Él, tenían hambre y se pusieron a arrancar espigas
y a comerse los granos. Cuando los fariseos los vieron, le dijeron a Jesús:
"Tus discípulos están haciendo algo que no está
permitido hacer en sábado". ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS Al presentarte nuestras ofrendas, te suplicamos, Señor, que por medio de estos misterios, nos acerquemos a Jesús, y renovemos la acción salvadora de su Sangre. Por Jesucristo, nuestro Señor. ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Cfr. 1 Co 10, 16) El cáliz de nuestra acción de gracias, nos une a todos en la Sangre de Cristo; y el pan que partimos, nos une a todos en el Cuerpo del Señor. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN Habiendo sido reconfortados con el alimento y la bebida de salvación, te pedimos, Señor, que nos purifiques siempre con la Sangre de nuestro Salvador, y que la conviertas en fuente de agua que brote para darnos vida eterna. Por Jesucristo nuestro Señor.
Santos: Apolinar de Ravena, obispo; Bulmaro o Vulmaro de Bolonia, abad; José María Díaz, obispo. Vísperas I del domingo: 4a semana del Salterio. Tomo III: pp. 1151 y 571. Para los fieles: pp. 722 y 406. Edición popular: pp. 289 y 472. Feria (Verde) NO APAGARÁ LA MECHA HUMEANTE Ex 12,37-42; Mt 12,14-21 La descripción y el perfil del profeta anónimo que nos hace Isaías son suficientes para darnos a entender que ese enviado de Dios estaría animado por la compasión y la perseverante esperanza, de un hombre dispuesto a hacer prevalecer las justas relaciones entre las personas y las naciones. Un objeto y una meta utópica sin duda alguna. La utopía se volvió realizable cuando el Señor Jesús peregrinaba por las comunidades galileas devolviendo la salud, la movilidad y la alegría de vivir a numerosas personas. Una de las grandes noticias que alegran nuestro corazón es la recuperación de la salud. De ese mismo mensaje propositivo y esperanzador está preñado el relato de la salida de Egipto. El pasado de opresión resultaba insoportable para el pueblo y para Dios. No era posible entretenerse más tiempo en esa situación insufrible. Había que salir en volandas, con la masa a medio cocer. Esos panes desabridos y sin levadura se comerían ritualmente cada año para recordar el cese de la amarga esclavitud y el comienzo de la gozosa liberación. MISA DE SANTA MARÍA EN SÁBADO ANTÍFONA DE ENTRADA Dichosa tú, Virgen María, que llevaste en tu seno al creador del universo; diste a luz al que te creó, y permaneces virgen para siempre. ORACIÓN COLECTA Padre eterno, Dios nuestro, que has puesto en la Virgen María el trono real de tu Sabiduría, ilumina a la Iglesia con la luz de la Palabra que da vida, para que en el resplandor de la verdad caminemos hasta el pleno conocimiento de tu misterio de amor. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos. LITURGIA DE LA PALABRA Esa noche veló el Señor para sacarlos de la tierra de Egipto. Del libro del Éxodo: 12, 37-42 En aquellos
días, los hijos de Israel partieron de Ramsés hacia Sukot;
eran unos seiscientos mil hombres, sin contar a los niños. Salió
también con ellos una enorme y abigarrada muchedumbre con grandes
rebaños de ovejas, vacas y otros animales. De la masa que habían
sacado de Egipto cocieron piezas de pan ázimo, no fermentado; pues
los egipcios, al arrojarlos del país, no les dieron tiempo de dejar
fermentar la masa, ni de tomar provisiones para el camino.
Del salmo 135 R/. Demos gracias al Señor, porque Él es bueno. ACLAMACIÓN
(2 Co 5, 19) R/. Aleluya, aleluya. Les mandó que no lo publicaran, para que se cumplieran las palabras del profeta. Del santo Evangelio según san Mateo: 12, 14-21 En aquel
tiempo, los fariseos se confabularon contra Jesús para acabar con
Él. Al saberlo, Jesús se retiró de ahí. Muchos
lo siguieron y Él curó a todos los enfermos y les mandó
enérgicamente que no lo publicaran, para que se cumplieran las
palabras del profeta Isaías: Miren a mi siervo, a quien sostengo;
a mi elegido, en quien tengo mis complacencias. En él he puesto
mi Espíritu, para que haga brillar la justicia sobre las naciones.
No gritará ni clamará, no hará oír su voz
en las plazas, no romperá la caña resquebrajada, ni apagará
la mecha que aún humea, hasta que haga triunfar la justicia sobre
la tierra; y en él pondrán todas las naciones su esperanza. ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS Al venerar la memoria de la Madre de tu Hijo, te rogamos, Señor, que la ofrenda que te presentamos nos transforme, por tu gracia, en oblación viva y continua. Por Jesucristo, nuestro Señor. Prefacio de Santa María Virgen. ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Lc 1, 49) Ha hecho en mí maravillas el Todopoderoso, cuyo nombre es santo. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN Ya que participamos de la redención eterna, te pedimos, Señor, que al venerar la memoria de la Madre de tu Hijo, nos gloriemos de la plenitud de tu gracia y sintamos los efectos de tu obra redentora. Por Jesucristo, nuestro Señor.
XVI DOMINGO ORDINARIO Santos: Lorenzo de Brindisi. Doctor de la Iglesia; Daniel, Profeta; Alberico Crescitelli, mártir. (Verde) YA NO PUEDEN MORIR Gn 18, 1-10; Col 1, 24-28; Lc 20, 28-42 La hospitalidad que el patriarca Abrahán oferta a los tres viajeros que de improviso llegan a su tienda es genuina y generosa. El anfitrión de cualquier vivienda en el Antiguo Oriente se sentía honrado con la visita de huéspedes y los acogía con cordial amabilidad. El extraño dejaba de serlo cuando tocaba las puertas de un oriental. La narración cierra con una promesa consoladora. Los huéspedes anuncian que en el plazo de un año, la promesa de bendición se cumpliría: el hijo esperado se mecería en los brazos de Sara. En esta vida las personas descubrimos nuestra indigencia y nuestra limitación. No podemos sobrellevar la vida en soledad, necesitamos unirnos íntima y cariñosamente con otra persona para encontrar juntos sentido a la existencia. Hombres y mujeres se desposan y auxilian recíprocamente. En la plenitud de la vida, nos explica el Señor Jesús, todas las limitaciones propias de la condición humana, cesarán y viviremos en una plenitud donde no habrá soledad, llanto ni dolor. ANTÍFONA DE ENTRADA (Sal 53, 6. 8) Señor Dios, tú eres mi auxilio y el único apoyo de mi vida; te ofreceré de corazón un sacrificio y te daré gracias, Señor, porque eres bueno. ORACIÓN COLECTA Míranos, Señor, con amor y multiplica en nosotros los dones de tu gracia para que, llenos de fe, esperanza y caridad, permanezcamos siempre fieles en el cumplimiento de tus mandatos. Por nuestro Señor Jesucristo... LITURGIA DE LA PALABRA Señor, no pases junto a mí sin detenerte. Del libro del Génesis: 18, 1-10 Un día,
el Señor se le apareció a Abraham en el encinar de Mambré.
Abraham estaba sentado en la entrada de su tienda, a la hora del calor
más fuerte. Levantando la vista, vio de pronto a tres hombres que
estaban de pie ante él. Al verlos, se dirigió a ellos rápidamente
desde la puerta de la tienda, y postrado en tierra, dijo: "Señor
mío, si he hallado gracia a tus ojos, te ruego que no pases junto
a mí sin detenerte. Haré que traigan un poco de agua para
que se laven los pies y descansen a la sombra de estos árboles;
traeré pan para que recobren las fuerzas y después continuarán
su camino, pues sin duda para eso han pasado junto a su siervo".
Del salmo 14 R/. ¿Quién será grato a tus ojos, Señor? Un designio secreto que Dios ha mantenido oculto y que ahora ha revelado a su pueblo santo. De la carta del apóstol san Pablo a los colosenses: 1, 24-28 Hermanos:
Ahora me alegro de sufrir por ustedes, porque así completo lo que
falta a la pasión de Cristo en mí, por el bien de su cuerpo,
que es la Iglesia.
ACLAMACIÓN (Cfr. Lc 8, 15) Aleluya, aleluya. Marta lo recibió en su casa. - María escogió la mejor parte. Del
santo Evangelio según san Lucas: 10, 38-42 Credo PLEGARIA UNIVERSAL Después
de escuchar la Palabra de Dios, y antes de participar de la mesa de la
Eucaristía, presentemos con confianza nuestras peticiones al Padre. ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS Dios nuestro, que con la muerte de tu Hijo llevaste a término y perfección los sacrificios de la antigua alianza, acepta y bendice estos dones, como aceptaste y bendijiste los de Abel, para que lo que cada uno te ofrece, sea de provecho para la salvación de todos. Por Jesucristo, nuestro Señor. Prefacio para los domingos del Tiempo Ordinario. ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Sal 110, 4-5) Para perpetuar su amor, el Señor nos ha dejado el memorial de sus prodigios, y ha dado a sus amigos el signo de un banquete que les recuerde para siempre su alianza. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN Señor, tú que nos has concedido participar en esta Eucaristía, míranos con bondad y ayúdanos a vencer nuestra fragilidad humana para poder vivir como hijos tuyos. Por Jesucristo, nuestro Señor. UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO.- Nuestra condición humana nos orienta a buscar el complemento y la compañía. Con los diferentes nos completamos y con los semejantes nos acompañamos. La recíproca donación nos acrecienta y vamos resolviendo los retos y desafíos de la vida. La sociabilidad nos anima a establecer relaciones amorosas y de amistad con las personas. La soledad es la realidad que más intensamente deshumaniza nuestra existencia. En esta vida vivimos la relación con los demás, incluyendo esposa, hijos y hermanos en medio de gozos y fricciones. La plenitud de la vida que aspiramos alcanzar, viviendo como discípulos y seguidores de Jesús, nos depara una vida exenta de sobresaltos, desilusiones y penas. Nuestra identidad subsistirá y podremos participar de una existencia marcada por el amor rebosante de Dios. El amor vivificante del Padre nos transformará para vivir la dicha perdurable.
LA SUBIDA AL PADRE Ex 14,5-18; Jn 20,1-2. 11-18 El libro del Éxodo refiere la salida de Egipto como una subida. Geográficamente hablando la tierra de Israel se encuentra a mayor altitud que Egipto. Mas no se trata simplemente de cuestiones de relieve, simbólicamente hablando el pueblo estaba en el fondo de la opresión y la violencia. La superación de esa circunstancia sería necesariamente un ascenso desde el punto de vista humano. El pueblo pasó de la opresión y la tiranía a la libertad. Como todos los procesos de transformación social, éste también significó tensiones y obstáculos, que necesariamente hubo que vencer. El Evangelio de san Juan también registra una experiencia ascendente. El Señor Jesús supera todas las barreras de su condición mortal y asciende a la plenitud de vida junto al Padre. Esa misma transformación ascendente la vivió también María Magdalena que pasó de una situación de incertidumbre a una confianza indestructible: había visto al Señor resucitado y ya nadie se lo volvería a arrebatar. ANTÍFONA DE ENTRADA (Jn 20, 17) Jesús dijo a María Magdalena: Ve y diles a mis hermanos: Subo a mi Padre y a su Padre, a mi Dios y a su Dios. ORACIÓN COLECTA
LITURGIA DE LA PALABRA Cuando me haya cubierto de gloria a expensas del faraón, sabrán que yo soy el Señor. Del libro del Éxodo: 14, 5-18 En aquellos
días, cuando le avisaron al faraón que los israelitas habían
escapado, el faraón y sus servidores cambiaron de parecer con respecto
al pueblo de Israel y exclamaron: "¿Qué hemos hecho?
Hemos dejado escapar a nuestros esclavos israelitas". Entonces el
faraón mandó enganchar su carro y llevó consigo sus
tropas: seiscientos carros escogidos y todos los carros de Egipto, cada
uno con sus respectivos guerreros. Éxodo
15 R/. Alabemos al Señor por su victoria.
ACLAMACIÓN R/. Aleluya, aleluya. Mujer, ¿por qué estás llorando? ¿A quién buscas? Del santo Evangelio según san Juan: 20, 1-2. 11-18 El primer
día después del sábado, estando todavía oscuro,
fue María Magdalena al sepulcro y vio removida la piedra que lo
cerraba. Echó a correr, llegó a la casa donde estaban Simón
Pedro y el otro discípulo, a quien Jesús amaba, y les dijo:
"Se han llevado del sepulcro al Señor y no sabemos dónde
lo habrán puesto". ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS Mira, Señor, los dones que te presentamos y acéptalos con el mismo agrado con que tu Hijo Jesucristo aceptó el homenaje de amor de María Magdalena. Por Jesucristo, nuestro Señor. ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (2 Co 5, 14-15) El amor de Cristo nos compromete a vivir, no para nosotros mismos, sino para Él, que murió y resucitó por nosotros. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN Que el sacramento que hemos recibido encienda, Señor, en nosotros aquel mismo amor ardiente y fiel de santa María Magdalena a Cristo, su maestro, que vive y reina por los siglos de los siglos.
VIERON LA MANO DE DIOS Ex 14, 21-15, 1; Mt 12, 46-50 Los israelitas organizaron de forma discreta la huida de Egipto y se jugaron el todo por el todo confiando en la determinación de Moisés y en la fidelidad de Dios. La noche de la liberación se multiplicaron los obstáculos y temores, pero lograron organizarse y per-manecer unidos y valientes hasta traspasar el límite del mar que les cerraba el camino a la libertad. Cuando la adversidad parecía ser más intensa, el poder de Dios se hizo manifiesto sobre la naturaleza y ellos consiguieron deletrear su presencia salvadora. A partir de ese suceso fundamental consolidaron su relación creyente con Dios. Esa relación de enorme confianza en la voluntad del Padre es la que elogia el Señor Jesús cuando explica quienes son los verdaderos miembros de su familia. Jesús vive una relación de obediente entrega a su Padre y ejerce una autoridad incuestionable sobre sus discípulos. Por esa razón ellos aprenden a poner su existencia en las manos del Señor y saben reconocerse como hermanos en la fe compartida. ANTÍFONA DE ENTRADA (Gn 1, 1. 27. 31) En el principio creó Dios el cielo y la tierra. Creó Dios al hombre a su imagen. Y vio Dios todo lo que había hecho y lo encontró muy bueno. ORACIÓN COLECTA Dios nuestro, creador de todas las cosas, que impusiste a los hombres el deber del trabajo, bendice las obras que iniciamos para que contribuyan al bienestar de la sociedad y a la difusión de tu Reino. Por nuestro Señor Jesucristo... LITURGIA DE LA PALABRA Los israelitas entraron en el mar sin mojarse. Del libro del Éxodo: 14, 21-15, 1 En aquellos
días, Moisés extendió su mano sobre el mar, y el
Señor hizo soplar durante toda la noche un fuerte viento del este,
que secó el mar, y dividió las aguas. Los israelitas entraron
en el mar y no se mojaban, mientras las aguas formaban una muralla a su
derecha y a su izquierda. Los egipcios se lanzaron en su persecución
y toda la caballería del faraón, sus carros y jinetes, entraron
tras ellos en el mar. Éxodo
15 R/. Alabemos al Señor por su victoria.
ACLAMACIÓN (Jn 14, 23) R/. Aleluya, aleluya. Señalando a sus discípulos, dijo: Éstos son mi madre y mis hermanos. Del santo Evangelio según san Mateo: 12,46-50 En aquel
tiempo, Jesús estaba hablando a la muchedumbre, cuando su madre
y sus parientes se acercaron y trataban de hablar con Él. Alguien
le dijo entonces a Jesús: "Oye, ahí fuera están
tu madre y tus hermanos, y quieren hablar contigo".
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Col 3, 17) Todo lo que hagan de palabra o de obra, háganlo en el nombre de Jesús, el Señor, dando gracias por su medio a Dios Padre. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN Señor, tú que nos has alimentado con el sacramento de la unidad y del amor, concédenos desempeñar con fe el trabajo que nos has encomendado para obtener nuestro diario sustento y cooperar a la edificación de tu Reino. Por Jesucristo, nuestro Señor.
COSECHAR SIN HABER SEMBRADO Ex 16, 1-5. 9-15; Mt 13, 1-9 El trabajo humano, del que indudablemente nos habla la parábola del sembrador, es el modo normal en que alcanzamos la satisfacción para nuestras necesidades. El esfuerzo, la perseverancia y capacidad de superar obstáculos, es indispensable para lograr que fructifique la buena nueva del Reinado de Dios en el corazón de la persona. Ni los campesinos cosechan granos sin esfuerzo, ni los cristianos generan obras y actitudes evangélicas sin sacrificio. La respuesta humana es más que necesaria para acrecentar el proyecto del Reinado de Dios. Solamente en condiciones de excepción podemos vivir sin realizar el indispensable esfuerzo que implica vivir. Los niños pequeñitos, las personas sometidas a un tratamiento quirúrgico severo, quienes sufren una severa afección física o mental viven completamente dependientes del cariño y el cuidado de su familia. Los hijos de Israel recibieron el maná en el desierto para que aprendieran a abandonar confiadamente su corazón en los brazos amorosos del Padre. ANTÍFONA DE ENTRADA (Sal 104, 3-4) Alégrese el corazón de los que buscan al Señor. Busquen la ayuda del Señor; busquen continuamente su presencia. ORACIÓN COLECTA Aumenta, Señor, en nosotros la fe, la esperanza y la caridad para que cumplamos con amor tus mandamientos y podamos conseguir, así, el cielo que nos tienes prometido. Por nuestro Señor Jesucristo... LITURGIA DE LA PALABRA Voy a hacer que llueva pan del cielo. Del libro del Éxodo: 16, 1-5. 9-15 El día
quince del segundo mes, después de salir de Egipto, toda la comunidad
de Israel partió de Elim y llegó al desierto de Sin, entre
Elim y el Sinaí.
Del salmo 77 R/. El Señor les dio pan del cielo.
ACLAMACIÓN R/. Aleluya, aleluya. Algunos granos dieron el ciento por uno. Del santo Evangelio según san Mateo: 13, 1-9 Un día
salió Jesús de la casa donde se hospedaba y se sentó
a la orilla del mar. Se reunió en torno suyo tanta gente, que Él
se vio obligado a subir a una barca, donde se sentó, mientras la
gente permanecía en la orilla. Entonces Jesús les habló
de muchas cosas en parábolas y les dijo: ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS Mira, Señor, con bondad, las ofrendas que te presentamos, a fin de que esta celebración eucarística sea para tu gloria y alabanza. Por Jesucristo, nues.tro Señor. ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Sal 19, 6) Llenos de júbilo porque nos ha salvado, alabemos la grandeza del Señor, nuestro Dios. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN Concédenos, Señor, que este memorial de la muerte y resurrección de tu Hijo nos haga morir de veras al pecado y renacer a una nueva vida. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Fiesta (Rojo) LAS VASIJAS DE BARRO 2 Co 4,7-15; Mt 20,20-28 Los discípulos de Jesús estaban acostumbrados a los usos del poder vigentes en su época. Los grandes en Israel y en todo el mundo mediterráneo, disponían de dinero y ejércitos, de poder y privilegios para imponerse sobre los demás. Imaginando que el Señor Jesús establecería el reinado de Dios y asumiría en poder en Israel, la familia del Zebedeo juzgaba que sus hijos tenían los méritos suficientes para asegurarse un puesto relevante al lado de Jesús. No habían entendido aún, el modo alternativo como Él ejercería la autoridad, como un servidor. Mientras que a los pescadores apodados "hijos del trueno" les costó comprenderlo, el apóstol san Pablo aprendió en su larga experiencia misionera la trascendencia de la vocación apostólica: la fuerza de Dios acrecentaba las habilidades y fortalezas de los enviados, pero éstos seguían siendo personas frágiles que llevaban la gracia de Dios en vasijas de barro. ANTÍFONA DE ENTRADA (Cfr. Mt 4, 18. 21) Caminando Jesús por la ribera del mar de Galilea, vio a Santiago y a Juan, hijos de Zebedeo, que estaban remendando sus redes, y los llamó. Se dice Gloria. ORACIÓN COLECTA Dios todopoderoso y eterno, que quisiste que Santiago fuera el primero de entre los apóstoles en derramar su sangre por el Evangelio, fortalece a tu Iglesia con el testimonio de su martirio y defiéndela con su valiosa protección. Por nuestro Señor Jesucristo... LITURGIA DE LA PALABRA Llevamos siempre la muerte de Jesús en nuestro cuerpo. De la segunda carta del apóstol san Pablo a los corintios: 4, 7-15 Hermanos:
Llevamos este tesoro en vasijas de barro, para que se vea que esta fuerza
tan extraordinaria proviene de Dios y no de nosotros mismos. Por eso sufrimos
toda clase de pruebas, pero no nos angustiamos. Nos abruman las preocupaciones,
pero no nos desesperamos. Nos vemos perseguidos, pero no desamparados;
derribados, pero no vencidos.
Del salmo 125 R/. Entre gritos de júbilo cosecharán aquellos
que siembran con dolor. ACLAMACIÓN
(Cfr. Jn 15, 16) R/. Aleluya, aleluya. Beberán mi cáliz. Del santo Evangelio según san Mateo: 20, 20-28 En aquel
tiempo, se acercó a Jesús la madre de los hijos de Zebedeo,
junto con ellos, y se postró para hacerle una petición.
Él le preguntó: "¿Qué deseas?" Ella
respondió: "Concédeme que estos dos hijos míos
se sienten, uno a tu derecha y el otro a tu izquierda, en tu Reino".
Pero Jesús replicó: "No saben ustedes lo que piden.
¿Podrán beber el cáliz que yo he de beber?"
Ellos contestaron: "Sí podemos". Y Él les dijo:
"Beberán mi cáliz; pero eso de sentarse a mi derecha
o a mi izquierda no me toca a mí concederlo; es para quien mi Padre
lo tiene reservado". ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS Acepta, Señor, los dones que te presentamos y por intercesión del apóstol Santiago, purifica nuestros corazones para que podamos participar dignamente del Cuerpo y de la Sangre de Cristo, que vive y reina por los siglos de los siglos. Prefacio I o II de los Apóstoles. ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Cfr. Mt 20, 22-23) Quienes participan del cáliz del Señor se convierten en amigos de Dios. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN Por intercesión del apóstol Santiago, en cuya festividad hemos recibido con alegría tus santos sacramentos, concédenos, Señor, tu protección y ayuda. Por Jesucristo, nuestro Señor.
NO TIENE RAÍCES Y ES INCONSTANTE Ex 20,1-17; Mt 13,18-23 La explicación de la parábola del sembrador nos puede servir de clave de lectura para comprender el texto del Decálogo. Los mandamientos e instrucciones que Dios dio a Israel no son incomprensibles ni imposibles de cumplir. Los hombres de buena voluntad logran comprender la superioridad moral de una convivencia humana marcada por el respeto irrestricto a la dignidad de las personas. Solamente quien no quiera refrenar su egoísmo encontrará justificaciones y excusas para desoír la voz de Dios en los diez manda-mientos. Efectivamente es la atracción de las riquezas y el afán de gozos y placeres lo que confunde nuestra voluntad. El corazón que no se robustece a través de la obediencia, no sabe humillarse para acatar la voluntad de Dios. Quien aprender a negarse a sí mismo consigue poner en obra los mandamientos divinos. ANTÍFONA DE ENTRADA Benditos sean san Joaquín y santa Ana, porque fueron los padres de la Virgen María; por ella nos ha venido la salvación prometida a todas las naciones. ORACIÓN COLECTA Dios de nuestros padres, que concediste a san Joaquín y a santa Ana el privilegio de ser los padres de María, la madre del Salvador, ayúdanos, por su intercesión, a alcanzar la salvación eterna. Por nuestro Señor Jesucristo... LITURGIA DE LA PALABRA La ley fue dada por Dios a Moisés. Del libro del Éxodo: 20, 1-17 En aquellos
días, el Señor promulgó estos preceptos para su pueblo
en el monte Sinaí, diciendo: "Yo soy el Señor, tu Dios,
que te sacó de la tierra de Egipto y de la esclavitud. No tendrás
otros dioses fuera de mí; no te fabricarás ídolos
ni imagen alguna de lo que hay arriba, en el cielo, o abajo, en la tierra,
o en el agua, y debajo de la tierra. No adorarás nada de eso ni
le rendirás culto, porque yo, el Señor, tu Dios, soy un
Dios celoso, que castiga la maldad de los padres en los hijos hasta la
tercera y cuarta generación de aquellos que me odian; pero soy
misericordioso hasta la milésima generación de aquellos
que me aman y cumplen mis mandamientos.
Del salmo 18 R/. Ayúdanos, Señor, a cumplir tu voluntad.
ACLAMACIÓN (Cfr. Lc 8, 15) R/. Aleluya, aleluya. Del santo Evangelio según san Mateo: 13, 18-23 En aquel
tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: "Escuchen ustedes
lo que significa la parábola del sembrador. A todo hombre que oye
la palabra del Reino y no la entiende, le llega el diablo y le arrebata
lo sembrado en su corazón. Esto es lo que significan los granos
que cayeron a lo largo del camino. ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS Acepta, Señor, el sacrificio que vamos a ofrecerte y concédenos participar por él de la salvación prometida en Cristo a Abraham y a su descendencia. Por Jesucristo, nuestro Señor. ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Cfr. Sal 23, 5) Dichosos los corazones limpios porque han recibido la bendición del Señor y han encontrado gracia delante de Dios, su salvador. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN Padre santo, que quisiste que tu Unigénito se hiciera hermano nuestro para convertirnos en hijos tuyos, concede a quienes has alimentado con el Cuerpo y la Sangre de Cristo un verdadero espíritu filial y una sincera caridad fraterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Vísperas I del domingo: 1a semana del Salterio. Tomo III: pp. 745 y 609. Para los fieles: pp. 472 y 407. Edición popular: pp. 13 y 473. Feria (Verde) SEMBRASTE SEMILLA BUENA Ex 24, 3-8; Mt 13, 24-30 Apenas había celebrado Dios e Israel el ritual de la alianza y al poco tiempo el pueblo había traspasado la clausula fundamental, erigiéndose un becerro de oro, corno imagen de Dios. El pueblo pretendía apoderarse de Dios y manejarlo a su antojo. El Señor castigó la rebeldía y les ofreció una segunda oportunidad. Por esa razón fue necesario realizar la renovación de la alianza. Dios conoce la fragilidad del corazón humano y sabe que es veleidoso y no persevera en el camino de la fidelidad a Dios. Con imágenes del mundo campesino el Señor Jesús explica esta ambigüedad, mostrando que a la buena siembra y la buena semilla, le afectan otros factores negativos que terminan por desvirtuarla. La cizaña y el trigo se parecen demasiado por el follaje, la diferencia se hace manifiesta entre ambos hasta que aparece la espiga y el fruto. Los hombres inexpertos nos confundimos a la hora de valorar a las personas. Solamente Dios sondea el corazón humano y sabe descifrar sus verdaderas intenciones. MISA DE SANTA MARÍA EN SÁBADO ANTÍFONA DE ENTRADA (Cfr. Jdt 13, 18-19) María, el Altísimo te ha bendecido más que a todas las mujeres de la tierra, y de tal manera te ha glorificado, que los hombres no cesan de alabarte. ORACIÓN COLECTA Dios santo y misericordioso, que te complaces en los humildes y realizas en ellos, por medio de tu Espíritu Santo, las maravillas de la salvación; mira la humildad de la Virgen María y danos un corazón sencillo y humilde, que sepa responder positivamente a todo signo de tu voluntad. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos. LITURGIA DE LA PALABRA Ésta es la sangre de la alianza que el Señor ha hecho con ustedes. Del libro del Éxodo: 24, 3-8 En aquellos
días, Moisés bajó del monte Sinaí y refirió
al pueblo todo lo que el Señor le había dicho y los mandamientos
que le había dado. Y el pueblo contestó a una voz: "Haremos
todo lo que dice el Señor".
Del salmo 49 R/. Ofrécele al Señor tu gratitud.
ACLAMACIÓN (St 1, 21) R/. Aleluya, aleluya. Dejen que crezcan juntos hasta el tiempo de la cosecha. Del santo Evangelio según san Mateo: 13, 24-30 En aquel
tiempo, Jesús propuso esta otra parábola a la muchedumbre:
"El Reino de los cielos se parece a un hombre que sembró buena
semilla en su campo; pero mientras los trabajadores dormían, llegó
un enemigo del dueño, sembró cizaña entre el trigo
y se marchó. Cuando crecieron las plantas y se empezaba a formar
la espiga, apareció también la cizaña. ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS Jubilosos de poder celebrar la festividad de la Madre de tu Hijo, te presentamos, Señor, estas ofrendas de alabanza, y te pedimos que por este santo intercambio de dones, se acrecienten en nosotros los frutos de la redención eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor. Prefacio de Santa María Virgen. ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Cfr. Lc 1, 48) Me llamarán bienaventurada todas las generaciones, porque ha puesto Dios sus ojos en la humildad de su esclava. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN Habiendo recibido el sacramento celestial, te pedimos, Señor, que cuantos hemos celebrado con veneración, la memoria de la santísima Virgen María, merezcamos participar del banquete eterno. Por Jesucristo, nuestro Señor.
XVII DOMINGO ORDINARIO Santos: Victor I, Papa; Samsón de Gales, obispo; Pedro Poveda, mártir (Verde) LA SÚPLICA PERSEVERANTE Gn 18, 20-32; Col 2, 12-14; Lc 11, 1-13 Los fragmentos del libro del Génesis y del Evangelio de San Lucas coinciden en el mismo mensaje. Abrahán encarna a la perfección la actitud que elogia y recomienda el Señor Jesús en el Evangelio. El patriarca no desistió en su afán de conseguir el perdón para los habitantes de Sodoma y Gomorra, sino que intercedió reiteradamente, pidiendo a Dios que estirara al límite su misericordia. El Señor accedió a los ruegos del profeta y se mostró como Padre de misericordia. Las comparaciones ilustrativas que el Señor Jesús utiliza en el Evangelio van en la misma dirección. El discípulo no debe desistir cuando se dirige al Padre. Aunque las circunstancias sean adversas y las señales de la cercanía de Dios no parezcan tan visibles, conviene seguir insistiendo. El argumento final es más que sólido. Si los hombres, que estamos afectados por la pecaminosidad sabemos acoger los llamados urgentes de nuestros amigos y familiares, con mayor razón el Padre bondadoso, acogerá los ruegos de sus hijos. ANTÍFONA DE ENTRADA (Sal 67, 6-7. 36) Adoremos a Dios en su santo templo. Él nos hace habitar juntos en su casa. Él es la fuerza y el poder de su pueblo. ORACIÓN COLECTA Padre santo y todopoderoso, protector de los que en ti confian, ten misericordia de nosotros y enséñanos a usar con sabiduría de los bienes de la tierra, a fin de que no nos impidan alcanzar los del cielo. Por nuestro Señor Jesucristo... LITURGIA DE LA PALABRA No se enfade mi Señor, si sigo hablando. Del libro del Génesis: 18, 20-32 En aquellos
días, el Señor dijo a Abraham: "El clamor contra Sodoma
y Gomorra es grande y su pecado es demasiado grave. Bajaré, pues,
a ver si sus hechos corresponden a ese clamor; y si no, lo sabré". Del
salmo 137 R/. Te damos gracias de todo corazón. Les dió a ustedes una vida nueva con Cristo, perdonándoles todos sus pecados. De la carta del apóstol san Pablo a los colosenses: 2, 12-14 Hermanos:
Por el bautismo fueron ustedes sepultados con Cristo y también
resucitaron con Él, mediante la fe en el poder de Dios, que lo
resucitó de entre los muertos.
ACLAMACIÓN (Rm 8, 15) R/. Aleluya, aleluya. Pidan y se les dará. Del santo Evangelio según san Lucas: 11, 1-13 Un día,
Jesús estaba orando y cuando terminó, uno de sus discípulos
le dijo: "Señor, enséñanos a orar, como Juan
enseñó a sus discípulos". Credo PLEGARIA UNIVERSAL Las lecturas
nos han hablado hoy del valor de la intercesión ante Dios. Con
la insistencia de Abraham, siguiendo la enseñanza y el ejemplo
de Jesús, oremos. Después de cada petición diremos: ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS Acepta, Señor, estos dones que tu generosidad ha puesto en nuestras manos, y concédenos que este sacrificio santifique toda nuestra vida y nos conduzca a la felicitad eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor. Prefacio para los domingos del Tiempo Ordinario. ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Sal 102, 2) Bendice, alma mía, al Señor y no olvides sus muchos beneficios. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN Señor, que esta Eucaristía, memorial de la muero resurrección de tu Hijo, nos ayude a corresponder al inefable de tu amor y a procurar cada día nuestra sal eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor. UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO.- En las relaciones interpersonales, conforme se va tejiendo una red de confianza lo suficientemente firme para ser transparentes, los seres humanos vamos aprendiendo a compartir nuestras penas y alegrías y a acoger las de nuestros amigos. El amigo que toma la iniciativa y hace el primer movimiento de apertura y donación se juega un riesgo. Con el tiempo descubrirá si haber vaciado el corazón valió o no la pena. En cierta medida eso mismo ocurre en las relaciones con Dios, los grandes orantes, los autores de los salmos y los grandes místicos tienen una enorme confinza y cercanía en Dios. Se dirigen a Él cuando su alma esta exultante o abatida, algunos lo tutean sin rubor alguno. Saben que del otro lado, está el amor palpitante que ama sin reservas. De esta experiencia profunda es oportuno partir cuando se trata de comprender el diálogo confiado, insistente y amoroso con Dios, que atiende con benevolencia nuestras súplicas, cada vez que le demandamos los bienes necesarios.
DE LA REBELDÍA A LA TRAICIÓN Ex 32, 15-24. 30-34; Jn 11, 19-27 La anécdota del libro del Éxodo refiere una especie de amotinamiento popular. Los hijos de Israel demandan señales de certidumbre de la presencia tangible de Dios a Aarón. El sacerdote cede a la primera de cambio y funde un becerro de oro, símbolo de la fuerza y la fecundidad, para hacer manifiestos esos dos rasgos divinos ante los ojos del pueblo. La idolatría es la pretensión del hombre de controlar y manejar a Dios. Intento absolutamente contrario a la fe obediente. El diálogo evangélico registra la futura traición de Judas Iscariote. A reserva de errar podemos afirmar que el apóstol pretendía escribir el guión pascual de Jesús, orillándolo a asumir un papel enérgico y violento ante sus captores. La expectativa de un mesías davídico, militarmente poderoso y eficaz llevaría a Judas a entregar a Jesús. A fin de cuentas quería anteponer su proyecto humano sobre el proyecto divino. ANTÍFONA DE ENTRADA (Lc 10, 38) Cuando Jesús llegó a Betania una mujer, llamada Marta, lo recibió en su casa. ORACIÓN COLECTA Dios nuestro, que concediste a santa Marta el privilegio de hospedar y servir en su casa a tu Hijo, Jesucristo, concédenos, por su intercesión, no cerrar nunca nuestras puertas a los que nos necesitan, y ser recibidos por ti en tu casa del cielo. Por nuestro Señor Jesucristo... LITURGIA DE LA PALABRA Este pueblo ha cometido un gravísimo pecado al hacerse un dios de oro. Del libro del Éxodo: 32, 15-24. 30-34 En aquellos
días, Moisés bajó del monte y regresó trayendo
en sus manos las dos tablas de la alianza, que estaban escritas por ambos
lados. Las tablas eran obra de Dios y la escritura grabada sobre ellas
era también obra de Dios. Del
salmo 105 R/. Perdona, Señor, las culpas de tu pueblo.
ACLAMACIÓN (Sant 1, 18) R/. Aleluya, aleluya. El grano de mostaza se convierte en un arbusto y los pájaros hacen su nido en las ramas. Del santo Evangelio según san Mateo: 13, 31-35 En aquel
tiempo, Jesús propuso esta otra parábola a la muchedumbre:
"El Reino de los cielos es semejante a la semilla de mostaza que
un hombre siembra en su huerto. Ciertamente es la más pequeña
de todas las semillas, pero cuando crece, llega a ser más grande
que las hortalizas y se convierte en un arbusto, de manera que los pájaros
vienen y hacen su nido en las ramas". ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS Señor, al proclamar las maravillas que realizaste en santa Marta, te pedimos humildemente que, así como te fue grato el homenaje de su amor, también te sean agradables las ofrendas con que te manifestamos nuestra sumisión. Por Jesucristo, nuestro Señor. ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Jn 11, 27) Marta dijo a Jesús: Sí, Señor, yo creo que tú eres el Mesías, el Hijo de Dios, que ha venido al mundo. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN Que la recepción del Cuerpo y de la Sangre de tu Hijo nos ayude, Señor, a comprender, por intercesión de santa Marta, que muchas cosas nos preocupan e inquietan, pero una sola es necesaria: amarte y servirte aquí en la tierra. Por Jesucristo, nuestro Señor.
LA MAGNANIMIDAD Y LA PACIENCIA DIVINA Ex 33,7-11; 34, 5-9; Mt 13,36-43 Una relación tan directa y estrecha como teoría y práctica apreciamos entre los dos textos bíblicos. El Evangelio refiere la interpretación alegórica de la parábola de la cizaña y contrasta el proceder impaciente de los humanos con la magnanimidad de Dios, que amplía el plazo de la espera para dar tiempo a que los hombres rectifiquemos nuestro errado proceder. En los relatos del Éxodo no estamos delante de un relato ficcioso, sino de una de los más hermosos autorretratos que Dios hace de Sí mismo, mostrando su abundantísima compasión y su recta justicia. Esa caracterización no se queda en la pura intencionalidad, al contrario, se hace manifiesta en la donación del perdón otorgada a un pueblo recién contaminado de idolatría. Moisés intercede con decisión y obtiene el perdón de su gran amigo. ANTÍFONA DE ENTRADA (Cfr. Sal 23, 5-6) Santa María de Jesús Sacramentado ha recibido la bendición del Señor, ha encontrado gracia delante de Dios, su salvador, porque buscó sinceramente al Señor. ORACIÓN COLECTA Dios todopoderoso y eterno, que en la sencilla y humilde santa María de Jesús Sacramentado nos has dado ejemplo admirable de servicio a los enfermos, pobres y ancianos, concédenos por su intercesión, que, practicando el bien en todas partes, seamos signos de tu amor en el mundo. Por nuestro Señor Jesucristo... LITURGIA DE LA PALABRA El Señor hablaba con Moisés cara a cara. Del libro del Éxodo: 33, 7-11; 34, 5-9. 28 En aquellos
días, Moisés tomó la tienda que había llamado
"de la reunión" y la colocó a cierta distancia,
fuera del campamento, de modo que todo el que deseaba consultar al Señor,
tenía que salir fuera del campamento. Cuando Moisés iba
hacia la tienda, todo el pueblo se levantaba, se quedaba de pie a la entrada
de sus tiendas y seguía con la vista a Moisés, hasta que
entraba en la tienda de la reunión. Una vez que Moisés entraba
en ella, la columna de nube bajaba y se detenía a la puerta, mientras
el Señor hablaba con Moisés. Todo el pueblo, al ver la columna
de nube detenida en la puerta de la tienda de la reunión, se levantaba
y cada uno se postraba junto a la entrada de su tienda. El Señor
hablaba con Moisés cara a cara, como habla un hombre con su amigo.
Luego volvía Moisés al campamento, pero su ayudante, el
joven Josué, hijo de Nun, no se alejaba de la tienda de la reunión.
Del salmo 102 R/. El Señor es compasivo y misericordioso.
ACLAMACIÓN R/. Aleluya, aleluya. Así como recogen la cizaña y la queman, así será el fin del mundo. Del santo Evangelio según san Mateo: 13, 36-43 En aquel
tiempo, Jesús despidió a la multitud y se fue a su casa.
Entonces se le acercaron sus discípulos y le dijeron: "Explícanos
la parábola de la cizaña sembrada en el campo". ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS Mira, Señor, con bondad, los dones que tu pueblo te presenta para celebrar la memoria de santa María de Jesús Sacramentado, y concédenos, que libres de las ambiciones y egoísmos de este mundo, te busquemos a ti, como nuestro único bien verdadero. Por Jesucristo, nuestro Señor. ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Sal 33, 9) Prueben y vean qué bueno es el Señor. Dichoso el hombre que se acoge a Él. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN Señor, con la luz y la fuerza de este sacramento que hemos recibido, condúcenos siempre por el camino de tu amor, a fin de que la obra de salvación que has iniciado en nosotros, se vea coronada el día de la venida gloriosa de tu Hijo, que vive y reina por los siglos de los siglos.
Santos: Ignacio de Loyola, fundador; Elena de Skovde, mártir; Justino de Jacobis, obispo. Memoria (Blanco) LA GLORIA DE MOISÉS Ex 34,29-35; Mt 13,44-46 El dicho popular dice que el dinero y el amor no pueden ocultarse, porque salen a la cara. Tampoco es posible disimular la experiencia de Dios. Quien se ha topado con Dios, lo refleja en su rostro, en su mirada serena, en sus actitudes compasivas. No se puede re-presentar la fe. O se tiene o se hace el ridículo. Moisés había aprendido a mirar la vida en íntima cercanía con Dios, se había hecho experto en la escucha "del rumor de palabras" con que Dios habla a su pueblo. Ese encuentro lo había afectado radicalmente. Cuantos le conocían advertían que algo nuevo había en su persona. Esa experiencia es la que subyace detrás del episodio del velo que cubre el rostro de Moisés. En el mismo sentido, no se puede ir caminando con apatía o indiferencia cuando se ha descubierto un fabuloso tesoro. Esos hallazgos cambian los ritmos vitales, mudan la existencia de los afectados. Quienes encontraron a Jesús en la Galilea de los años treinta, vivían con una pasión nunca antes vista en sus rostros. ANTÍFONA DE ENTRADA (Flp 2, 10-11) Que al nombre de Jesús toda rodilla se doble, en los cielos, en la tierra, en los abismos, y que toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre. ORACIÓN COLECTA Dios nuestro, tú que encendiste en san Ignacio de Loyola un apasionado amor por tu Hijo y por tu Iglesia, concédenos por su intercesión un celo infatigable por la salvación de las almas y una fidelidad inquebrantable al Vicario de Cristo. Por nuestro Señor Jesucristo... LITURGIA DE LA PALABRA Al ver el rostro de Moisés, tuvieron miedo de acercarse. Del libro del Éxodo: 34, 29-35 Cuando Moisés
bajó del monte Sinaí con las dos tablas de la alianza en
las manos, no sabía que tenía el rostro resplandeciente
por haber hablado con el Señor.
Del salmo 98 R/. Santo es el Señor, nuestro Dios.
ACLAMACIÓN (Jn 15, 15) R/. Aleluya, aleluya. Del santo Evangelio según san Mateo: 13, 44-46 En aquel
tiempo, Jesús dijo a la multitud: "El Reino de los cielos
se parece a un tesoro escondido en un campo. El que lo encuentra lo vuelve
a esconder, y lleno de alegría, va y vende cuanto tiene y compra
aquel campo. ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS Acepta, Señor, los dones que te presentamos y por intercesión de san Ignacio de Loyola, concédenos que este sacrificio, fuente de toda santidad, nos santifique también a nosotros. Por Jesucristo, nuestro Señor. ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Lc 12, 49) He venido a traer fuego a la tierra, y cuánto desearía que ya estuviese ardiendo, dice el Señor. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN Que esta Eucaristía, que te hemos ofrecido en la festividad de san Ignacio de Loyola, nos dé tu gracia, Señor, para buscar en todo tu mayor gloria. Por Jesucristo, nuestro Señor. |
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