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MISAL ABRIL DEL 2024 / www.laverdadcatolica.org |
Intenciones del Santo Padre para Abril del 2024 |
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RED MUNCIAL DE ORACIÓN | |
Por el papel de la mujer Oremos para que la dignidad y la riqueza de las mujeres sean reconocidas en todas las culturas, y para que cese la discriminación que sufren en diversas partes del mundo. |
El número entre paréntesis en MR ( ) corresponde al Misal Romano
edición para México de Editorial BAC.
Blanco Lunes de la Octava de Pascua 97° Aniversario del martirio del beato Anacleto González Flores* MR, p. 345 (347) / Lecc. I, p. 854
Otros Santos: Venancio, Anastasio y compañeros, mártires; Luis Pavoni, presbítero y fundador. María Egipciaca, penitente.
ENTENDIENDO EL
SIGNIFICADO DE LO QUE NOS ACONTECE
Hech 2, 14. 22-33; Sal 15; secuencia; Mt 28, 8-15
La predicación de Pedro en la primera lectura es un buen ejemplo de la predilección de Lucas hacia la forma literaria del discurso. Más de un tercio de su libro, Hechos, está compuesto de tales discursos "misioneros" o "kerygmáticos". Estos discursos expresan, de una manera más explícita y clara de lo que se puede hacer en una narración: el significado de los acontecimientos salvíficos que los discípulos experimentaron especialmente durante los últimos días de Jesús. El discurso de hoy, por ejemplo, explica el significado de los sucesos de la Semana Santa, es decir, su muerte y resurrección. Nosotros debemos imitar a Lucas y Pedro respecto a esta tarea de explicar el significado de las cosas. Cada uno de nosotros experimenta la presencia de Dios a través de los acontecimientos de la vida. No es suficiente simplemente experimentarlos; debemos meditarlos y entender su significado.
ANTÍFONA DE ENTRADA Éx, 13, 5-9
El Señor les
dio a ustedes una tierra que mana leche y miel, para que tengan siempre en su
boca la ley del Señor.
Aleluya.
O bien:
El Señor resucitó,
como lo había predicho; llenémonos de gozo y de alegría,
porque reina eternamente.
Aleluya.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que haces crecer siempre a tu Iglesia dándole nuevos hijos, concédenos la gracia de vivir de acuerdo con la fe que recibimos en el sacramento del bautismo. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
A este Jesús, Dios lo ha resucitado, y de ello somos testigos.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 2, 14. 22-33
El día de Pentecostés,
se presentó Pedro, junto con los Once, ante la multitud, y levantando
la voz, dijo: "Israelitas, escúchenme. Jesús de Nazaret fue
un hombre acreditado por Dios ante ustedes, mediante los milagros, prodigios
y señales que Dios realizó por medio de Él y que ustedes
bien conocen. Conforme al plan previsto y sancionado por Dios, Jesús
fue entregado, y ustedes utilizaron a los paganos para clavarlo en la cruz.
Pero Dios lo resucitó, rompiendo las ataduras de la muerte, ya que no
era posible que la muerte lo retuviera bajo su dominio. En efecto, David dice,
refiriéndose a Él: Yo veía constantemente al Señor
delante de mí, puesto que Él está a mí lado para
que yo no tropiece. Por eso se alegra mi corazón y mi lengua se alboroza;
por eso también mi cuerpo vivirá en la esperanza, porque tú,
Señor, no me abandonarás a la muerte, ni dejarás que tu
santo sufra la corrupción. Me has enseñado el sendero de la vida
y me saciarás de gozo en tu presencia.
Hermanos, que me sea permitido hablarles con toda claridad. El patriarca David
murió y lo enterraron, y su sepulcro se conserva entre nosotros hasta
el día de hoy. Pero como era profeta y sabía que Dios le había
prometido con juramento que un descendiente suyo ocuparía su trono, con
visión profética habló de la resurrección de Cristo,
el cual no fue abandonado a la muerte ni sufrió la corrupción.
Pues bien, a este Jesús, Dios lo resucitó, y de ello todos nosotros
somos testigos. Llevado a los cielos por el poder de Dios, recibió del
Padre el Espíritu Santo prometido a Él y lo ha comunicado, como
ustedes lo están viendo y oyendo". Palabra de Dios. T.
Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 15, 1-2a
y 5.7-8.9-10.11.
R/. Protege, Señor, a los que esperamos en ti. Aleluya.
Protégeme, Dios mío,
pues eres mi refugio. Yo siempre he dicho que tú eres mi Señor.
El Señor es la parte que me ha tocado en herencia; mi vida está
en sus manos. R/.
Por eso se me alegran el corazón y el alma y mi cuerpo vivirá
tranquilo, porque tú no me abandonarás a la muerte ni dejarás
que sufra yo la corrupción. R/.
Enséñame el camino de la vida, sáciame de gozo en tu presencia
y de alegría perpetua junto a ti. R/.
SECUENCIA Opcional durante la Octava, Lecc. I, pág. 855.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Sal 117, 24
R/. Aleluya, aleluya.
Éste es el día del triunfo del Señor, día de júbilo y de gozo. R/.
EVANGELIO
Vayan a decir a mis hermanos que se dirijan a Galilea. Allá me verán.
Del santo Evangelio según san Mateo: 28, 8-15
Después
de escuchar las palabras del ángel, las mujeres se alejaron a toda prisa
del sepulcro, y llenas de temor y de gran alegría, corrieron a dar la
noticia a los discípulos. Pero de repente Jesús les salió
al encuentro y las saludó. Ellas se le acercaron, le abrazaron los pies
y lo adoraron. Entonces les dijo Jesús: "No tengan miedo. Vayan
a decir a mis hermanos que se dirijan a Galilea. Allá me verán".
Mientras las mujeres iban de camino, algunos soldados de la guardia fueron a
la ciudad y dieron parte a los sumos sacerdotes de todo lo ocurrido. Éstos
se reunieron con los ancianos, y juntos acordaron dar una fuerte suma de dinero
a los soldados, con estas instrucciones: "Digan: ‘Durante la noche,
estando nosotros dormidos, llegaron sus discípulos y se robaron el cuerpo'.
Y si esto llega a oídos del gobernador, nosotros nos arreglaremos con
él y les evitaremos cualquier complicación".
Ellos tomaron el dinero y actuaron conforme a las instrucciones recibidas. Esta
versión de los soldados se ha ido difundiendo entre los judíos
hasta el día de hoy. Palabra del Señor. T. Gloria
a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Recibe, Señor, con
bondad, las ofrendas de tu pueblo y haz que, renovados por la confesión
de tu nombre y por el bautismo, consigamos la felicidad eterna.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I de Pascua (en este día), p. 504 (500).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Rom 6, 9
Cristo, una vez resucitado de entre los muertos, ya no morirá nunca. La muerte ya no tiene dominio sobre él. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Que la gracia de este sacramento
pascual fructifique, Señor, en nuestros corazones para que podamos corresponder
a los dones de tu amor, que nos abrió el camino de la salvación
eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.
La despedida se hace como el día de Pascua.
Blanco Martes de la Octava de Pascua MR, p. 346 (348) / Lecc. I, p. 857
"SUBO
A MI PADRE, QUE ES EL PADRE DE USTEDES"
Hech 2,36-41; Sal 32; secuencia; Jn 20,11-18
La venganza contra los enemigos es, tal vez, algo con que algunas víctimas de la violencia y la injusticia sueñan. No obstante, no es el sueño de Dios. Efectivamente, Dios no quiere vengarse contra los que lo ofenden, sino que intenta cambiar la situación que hizo posible sus ofensas e invitar a los ofensores a convertirse. Es precisamente lo que hace Jesús en nuestro Evangelio. Se manifiesta a María Magdalena e indica no que iba a manifestarse a las autoridades que lo condenaron a muerte, para aterrarlos y destruirlos, sino que volvería al Padre, su destino final. Su retorno, junto con su muerte y resurrección, ha cambiado la situación de la humanidad. Ahora los seres humanos son hijos de un mismo Padre, hermanos entre sí (v. 15). Sólo tenemos que abrirnos a esta novedad y, si es preciso, cambiar.
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Sir 15, 3-4
El Señor les dará a beber el agua de la sabiduría; se Apoyarán en él y no vacilarán. Ellos llenará de gloria eternamente. Aleluya.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Señor Dios, que nos has hecho experimentar la fuerza vivificante del misterio pascual, sigue acompañando a tu pueblo con tu divina gracia, para que, conseguida la perfecta libertad, se convierta en gozo celestial la alegría que ahora lo inunda aquí en la tierra. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Arrepiéntanse y bautícense en el nombre de Jesucristo.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 2, 36-41
El día de Pentecostés,
dijo Pedro a los judíos: "Sepa todo Israel, con absoluta certeza,
que Dios ha constituido Señor y Mesías al mismo Jesús,
a quien ustedes han crucificado".
Estas palabras les llegaron al corazón y preguntaron a Pedro y a los
demás apóstoles: "¿Qué tenemos que hacer, hermanos?"
Pedro les contestó: "Arrepiéntanse y bautícense en
el nombre de Jesucristo, para el perdón de sus pecados y recibirán
el Espíritu Santo. Porque las promesas de Dios valen para ustedes y para
sus hijos y también para todos los paganos que el Señor, Dios
nuestro, quiera llamar, aunque estén lejos".
Con éstas y otras muchas razones los instaba y exhortaba, diciéndoles:
"Pónganse a salvo de este mundo corrompido". Los que aceptaron
sus palabras se bautizaron, y aquel día se les agregaron unas tres mil
personas. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
32, 4-5.18-19.20 y 22.
R/. En el Señor está nuestra esperanza. Aleluya.
Sincera es la palabra del
Señor y todas sus acciones son leales. El ama la justicia y el derecho,
la tierra llena está de sus bondades. R/.
Cuida el Señor de aquellos que lo temen y en su bondad confían;
los salva de la muerte y en épocas de hambre les da vida. R/.
En el Señor está nuestra esperanza, pues él es nuestra
ayuda y nuestro amparo. Muéstrate bondadoso con nosotros, puesto que
en ti, Señor, hemos confiado. R/.
SECUENCIA Opcional, Lecc. I, pág.855
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Sal 117, 24
R/. Aleluya, aleluya.
Este es el día del triunfo del Señor, día de júbilo y de gozo. R/.
EVANGELIO
He visto al Señor y me ha dado este mensaje.
Del santo Evangelio según san Juan: 20, 11-18
El día de la resurrección,
María se había quedado llorando junto al sepulcro de Jesús.
Sin dejar de llorar, se asomó al sepulcro y vio dos ángeles vestidos
de blanco, sentados en el lugar donde había estado el cuerpo de Jesús,
uno en la cabecera y el otro junto a los pies. Los ángeles le preguntaron:
"¿Por qué estás llorando, mujer?" Ella les contestó:
"Porque se han llevado a mi Señor y no sé dónde lo
habrán puesto".
Dicho esto, miró hacia atrás y vio a Jesús de pie, pero
no sabía que era Jesús. Entonces él le dijo: "Mujer,
¿por qué estás llorando? ¿A quién buscas?"
Ella, creyendo que era el jardinero, le respondió: "Señor,
si tú te lo llevaste, dime dónde lo has puesto". Jesús
le dijo: "¡María!" Ella se volvió y exclamó:
"¡Rabuní!", que en hebreo significa 'maestro'. Jesús
le dijo: "Déjame ya, porque todavía no he subido al Padre.
Ve a decir a mis hermanos: 'Subo a mi Padre y su Padre, a mi Dios y su Dios'
".
María Magdalena se fue a ver a los discípulos para decirles que
había visto al Señor y para darles su mensaje. Palabra
del Señor. T. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Recibe, Señor, con bondad, estas ofrendas de tu familia santa, para que, con la ayuda de tu protección, conserve los dones recibidos y llegue a poseer los eternos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I de Pascua (en este día), MR, p. 504 (500).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Col 3, 1-2
Puesto que ustedes han resucitado con Cristo, busquen los bienes del cielo, donde Cristo está sentado a la derecha de Dios; pongan todo el corazón en los bienes del cielo, no en los de la tierra. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Escúchanos, Dios
todopoderoso, y, ya que colmaste los corazones de tus hijos con la gracia incomparable
del bautismo, prepáranos para alcanzar la felicidad eterna. Por Jesucristo,
nuestro Señor.
La despedida se hace como el día de Pascua.
Blanco Miércoles de la Octava de Pascua MR, p. 347 (349) / Lecc. I, p. 860
EL LARGO
CAMINO DE LA FE
Hech 3,1-10; Sal 104; secuencia; Lc 24, 13-35
La fe es un largo camino hacia Dios. Este es el mensaje de gran parte del Evangelio de Lucas (9,51-19,27) y es sobre todo el mensaje del famoso relato del camino a Emaús que leemos hoy. En nuestro Evangelio, dos discípulos de Jesús toman la decisión de deja la ciudad de Jerusalén a pesar de ciertos acontecimientos asombrosos que sucedieron allí. ¿Por qué? Porque "nosotros esperábamos que [Jesús] liberaría a Israel" (v. 21), pero él no hizo lo que esperaban y decidieron abandonar definitivamente al discipulado. Jesús se acerca y se pone a caminar con ellos. Por medio de las Escrituras y la Eucaristía, logra alumbrar sus mentes y conducirlos a la fe pascual. Cuando la vida no cumple con nuestras expectativas, y queremos abandonar la esperanza, miremos a Jesús, quien, sin duda, camina con nosotros.
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Mt 25. 34
Vengan, benditos de mi Padre, tomen posesión del Reino preparado para ustedes desde la creación del mundo. Aleluya.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que cada año
nos inundas de alegría por la solemnidad de la resurrección del
Señor, concédenos propicio que, por estas fiestas que celebramos
en el tiempo, merezcamos llegar al gozo de la eternidad.
Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Te voy a dar lo que tengo: En el nombre de Jesús, camina.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 3, 1-10
En aquel tiempo, Pedro y
Juan subieron al templo para la oración vespertina, a eso de las tres
de la tarde. Había allí un hombre lisiado de nacimiento, a quien
diariamente llevaban y ponían ante la puerta llamada la "Hermosa",
para que pidiera limosna a los que entraban en el templo. Aquel hombre, al ver
a Pedro y a Juan cuando iban a entrar, les pidió limosna. Pedro y Juan
fijaron en él los ojos, y Pedro le dijo: "Míranos".
El hombre se quedó mirándolos en espera de que le dieran algo.
Entonces Pedro le dijo: "No tengo ni oro ni plata, pero te voy a dar lo
que tengo: En el nombre de Jesucristo nazareno, levántate y camina".
Y, tomándolo de la mano, lo incorporó.
Al instante sus pies y sus tobillos adquirieron firmeza. De un salto se puso
de pie, empezó a andar y entró con ellos al templo caminando,
saltando y alabando a Dios.
Todo el pueblo lo vio caminar y alabar a Dios, y al darse cuenta de que era
el mismo que pedía limosna sentado junto a la puerta "Hermosa"
del templo, quedaron llenos de miedo y no salían de su asombro por lo
que había sucedido. Palabra de Dios. T. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
104,1-2.3-4.6-7.8-9.
R/. Cantemos al Señor con alegría. Aleluya.
Aclamen al Señor
y denle gracias, relaten sus prodigios a los pueblos. Entonen en su honor himnos
y cantos, celebren sus portentos. R/.
Del nombre del Señor enorgullézcanse y siéntase feliz el
que lo busca. Recurran al Señor y a su poder y a su presencia acudan.
R/.
Descendientes de Abraham, su servidor, estirpe de Jacob, su predilecto, escuchen:
el Señor es nuestro Dios y gobiernan la tierra sus decretos. R/.
Ni aunque transcurran mil generaciones, se olvidará el Señor de
sus promesas, de la alianza pactada con Abraham, del juramento a Isaac, que
un día le hiciera. R/.
SECUENCIA Opcional, Lecc. I. pág. 855.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Sal 117, 24
R/. Aleluya, aleluya.
Este es el día del triunfo del Señor, día de júbilo y de gozo. R/.
EVANGELIO
Lo reconocieron al partir el pan.
Del santo Evangelio según san Lucas: 24, 13-35
El mismo día de la
resurrección, iban dos de los discípulos hacia un pueblo llamado
Emaús, situado a unos once kilómetros de Jerusalén, y comentaban
todo lo que había sucedido. Mientras conversaban y discutían,
Jesús se les acercó y comenzó a caminar con ellos; pero
los ojos de los dos discípulos estaban velados y no lo reconocieron.
Él les preguntó: "¿De qué cosas vienen hablando,
tan llenos de tristeza?"
Uno de ellos, llamado Cleofás, le respondió: "¿Eres
tú el único forastero que no sabe lo que ha sucedido estos días
en Jerusalén?" Él les preguntó: "¿Qué
cosa?" Ellos le respondieron: "Lo de Jesús el nazareno, que
era un profeta poderoso en obras y palabras, ante Dios y ante todo el pueblo.
Cómo los sumos sacerdotes y nuestros jefes lo entregaron para que lo
condenaran a muerte, y lo crucificaron. Nosotros esperábamos que Él
sería el libertador de Israel, y sin embargo, han pasado ya tres días
desde que estas cosas sucedieron. Es cierto que algunas mujeres de nuestro grupo
nos han desconcertado, pues fueron de madrugada al sepulcro, no encontraron
el cuerpo y llegaron contando que se les habían aparecido unos ángeles,
que les dijeron que estaba vivo. Algunos de nuestros compañeros fueron
al sepulcro y hallaron todo como habían dicho las mujeres, pero a Él
no lo vieron".
Entonces Jesús les dijo: "¡Qué insensatos son ustedes
y qué duros de corazón para creer todo lo anunciado por los profetas!
¿Acaso no era necesario que el Mesías padeciera todo esto y así
entrara en su gloria?" Y comenzando por Moisés y siguiendo con todos
los profetas, les explicó todos los pasajes de la Escritura que se referían
a Él.
Ya cerca del pueblo a donde se dirigían, Él hizo como que iba
más lejos; pero ellos le insistieron, diciendo: "Quédate
con nosotros, porque ya es tarde y pronto va a oscurecer". Y entró
para quedarse con ellos. Cuando estaban a la mesa, tomó un pan, pronunció
la bendición, lo partió y se lo dio. Entonces se les abrieron
los ojos y lo reconocieron, pero Él se les desapareció. Y ellos
se decían el uno al otro: "¡Con razón nuestro corazón
ardía, mientras nos hablaba por el camino y nos explicaba las Escrituras!"
Se levantaron inmediatamente y regresaron a Jerusalén, donde encontraron
reunidos a los Once con sus compañeros, los cuales les dijeron: "De
veras ha resucitado el Señor y se le ha aparecido a Simón".
Entonces ellos contaron lo que les había pasado en el camino y cómo
lo habían reconocido al partir el pan. Palabra del Señor.
T. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Recibe. Señor. estas ofrendas de la humanidad redimida, y realiza a favor nuestro, la plena salvación del cuerpo y el alma. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I de Pascua (en este día), MR, p. 504 (500).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Lc 24. 35
Los discípulos reconocieron al Señor Jesús, al partir el pan. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Te rogamos, Señor,
que, purificados de nuestra antigua condición pecadora, la santa recepción
del sacramento de tu Hijo nos transforme en nuevas creaturas. Por Jesucristo,
nuestro Señor.
La despedida se hace como el día de Pascua.
Blanco Jueves de la Octava de Pascua MR, p. 348 (350) / Lecc. I, p. 863
LA IGNORANCIA
Y LA FE
Hech 3, 11-26; Sal 8; secuencia; Lc 24,35-48
El discurso de Pedro en el Templo, en la primera lectura, se distingue por los temas de la ignorancia y de la fe. Fue este primer tema lo que provocó el discurso mismo: la ignorancia de la gente respecto al origen de la curación del paralítico en 3, 1-10 que la atribuía a las fuerzas milagrosas de Pedro y Juan (v. 12); por eso, Pedro tuvo que aclarar su verdadero origen. Más profundamente, la ignorancia explica por qué Jerusalén rechazó a Jesús (v. 17): era ignorante del verdadero mensaje de los profetas (v. 18). Por si fuera poco, la ignorancia de la gente acerca de lo que estaba ocurriendo entre ellos explica por qué Dios todavía les ofrece la salvación. Opuesta a toda esta ignorancia está la fe que hace posible que los seres humanos entiendan justamente su existencia.
ANTÍFONA DE ENTRADA Sab 10, 20-21
Todos alabaron, Señor, tu poder y tu sabiduría, porque has abierto la boca de los mudos y has hecho elocuentes las lenguas de los niños. Aleluya.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que uniste
a todos los pueblos diversos en la confesión de tu nombre, concede que,
quienes renacieron en la fuente bautismal, tengan una misma fe en sus pensamientos
y un mismo amor en sus obras.
Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Ustedes le dieron muerte al autor de la vida, pero Dios lo resucitó de entre los muertos.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 3, 11-26
Como el paralítico
curado por Pedro y Juan no se les despegaba, todo el pueblo, asombrado, corrió
hacia ellos al pórtico de Salomón. Al ver a la muchedumbre, Pedro
les dirigió la palabra: "Israelitas: ¿Por qué les
causa admiración esto y por qué nos miran de ese modo, como si
por nuestro poder o nuestra virtud hubiéramos hecho andar a este hombre?
El Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob, el Dios de nuestros padres, ha glorificado
a su siervo Jesús, a quien ustedes entregaron a Pilato, y a quien rechazaron
en su presencia, cuando Él ya había decidido ponerlo en libertad.
Rechazaron al santo, al justo, y pidieron el indulto de un asesino; han dado
muerte al autor de la vida, pero Dios lo resucitó de entre los muertos
y de ello nosotros somos testigos. El nombre de Jesús y la fe en Él
es lo que ha robustecido los miembros de este hombre al que están viendo
y todos conocen. Esta fe es la que le ha restituido completamente la salud,
como pueden observar.
Ahora bien, hermanos, yo sé que ustedes han obrado por ignorancia, de
la misma manera que sus jefes; pero Dios cumplió así lo que había
predicho por boca de los profetas: que su Mesías tenía que padecer.
Por lo tanto, arrepiéntanse y conviértanse, para que se les perdonen
sus pecados y el Señor les mande el tiempo de la consolación y
les envíe de nuevo a Jesús, el Mesías que les estaba destinado;
aunque Él tiene que quedarse en el cielo hasta la restauración
universal, de la que habló Dios por boca de su profeta desde muy antiguo.
En efecto, Moisés dijo: El Señor Dios hará surgir de entre
sus hermanos un profeta como yo. Escuchen todo cuanto les diga; quien no escuche
al profeta, será expulsado del pueblo. Y todos los profetas, a partir
de Samuel, anunciaron igualmente estos días. Ustedes son herederos de
los profetas y beneficiarios de la alianza que Dios hizo con sus padres, cuando
le dijo a Abraham: Tu descendencia será fuente de bendición para
toda la humanidad. Para ustedes, en primer lugar, ha resucitado Dios a su siervo
y lo ha enviado para bendecirlos y ayudarlos a que cada uno se aparte de sus
iniquidades". Palabra de Dios. T. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
8, 2a y5. 6-7. 8-9.
R/. ¡Qué admirable, Señor, es tu poder! Aleluya.
¡Qué admirable
es, Señor y Dios nuestro, tu poder en toda la tierra! ¿Qué
es el hombre, para que de él te acuerdes; ese pobre ser humano, para
que de él te preocupes? R/.
Sin embargo, lo hiciste un poquito inferior a los ángeles, lo coronaste
de gloria y dignidad; le diste el mando sobre las obras de tus manos y todo
lo sometiste bajo sus pies. R/.
Pusiste a su servicio los rebaños y las manadas, todos los animales salvajes,
las aves del cielo y los peces del mar, que recorren los caminos de las aguas.
R/.
SECUENCIA Opcional, Lecc. I, pág. 855.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Sal 117, 24
R/. Aleluya, aleluya.
Este es el día del triunfo del Señor, día de júbilo y de gozo. R/.
EVANGELIO
Está escrito que Cristo tenía que padecer y tenía que resucitar de entre los muertos al tercer día.
Del santo Evangelio según san Lucas: 24, 35-48
Cuando los dos discípulos
regresaron de Emaús y llegaron al sitio donde estaban reunidos los apóstoles,
les contaron lo que les había pasado en el camino y cómo habían
reconocido a Jesús al partir el pan.
Mientras hablaban de esas cosas, se presentó Jesús en medio de
ellos y les dijo: "La paz esté con ustedes". Ellos, desconcertados
y llenos de temor, creían ver un fantasma. Pero Él les dijo: "No
teman; soy yo. ¿Por qué se espantan? ¿Por qué surgen
dudas en su interior? Miren mis manos y mis pies. Soy yo en persona, tóquenme
y convénzanse: un fantasma no tiene ni carne ni huesos, como ven que
tengo yo". Y les mostró las manos y los pies. Pero como ellos no
acababan de creer de pura alegría y seguían atónitos, les
dijo: "¿Tienen aquí algo de comer?" Le ofrecieron un
trozo de pescado asado; Él lo tomó y se puso a comer delante de
ellos. Después les dijo: "Lo que ha sucedido es aquello de que les
hablaba yo, cuando aún estaba con ustedes: que tenía que cumplirse
todo lo que estaba escrito de mí en la ley de Moisés, en los profetas
y en los salmos".
Entonces les abrió el entendimiento para que comprendieran las Escrituras
y les dijo: "Está escrito que el Mesías tenía que
padecer y había de resucitar de entre los muertos al tercer día,
y que en su nombre se había de predicar a todas las naciones, comenzando
por Jerusalén, la necesidad de volverse a Dios para el perdón
de los pecados. Ustedes son testigos de esto". Palabra del Señor.
T. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Señor, acepta bondadoso
estas ofrendas que te presentamos en agradecimiento por los que han renacido
en el bautismo y para apresurar los auxilios celestiales.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I de Pascua (en este día), MR, p. 504 (500).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. 1 Pedro 2, 9
Pueblo redimido por Dios, anuncia las maravillas del Señor, que te ha llamado de las tinieblas a su luz admirable. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor y Dios nuestro,
escucha nuestras oraciones, para que la participación en los sacramentos
de nuestra redención nos ayude en la vida presente y nos alcance las
alegrías eternas. Por Jesucristo, nuestro Señor.
La despedida se hace como en el día de Pascua.
Blanco Viernes de la Octava de Pascua MR, p. 349 (351) / Lecc. I, p. 866
LA RESURRECCIÓN
ES UNA FUENTE INAGOTABLE
Hech 4,1-12; Sal 117; secuencia; Jn 21, 1-14
Nuestro Evangelio de hoy es la primera sección del capítulo 21, evidentemente un apéndice al Evangelio de Juan que originalmente concluía con 20, 30-31. La existencia de este capítulo adicional implica que la resurrección es tan fructífera que desembocó en más relatos que Juan pudo incluir en la forma original de su obra. Tal fructuosidad incontenible se evidencia también por las múltiples alusiones a elementos de la existencia cristiana, incluyendo la misión apostólica de la Iglesia (representada por la acción de pescar), la Eucaristía (sugerida por el paso preparado por Jesús en v. 9), y la universalidad de la llamada a la salvación (supuestamente implícita por una simbología antigua atribuida al número 153 en el v. 11). En los orígenes de la fe cristiana, y también en nuestros días, la resurrección de Jesús ha sido la fuente inagotable de la vida.
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Sal 77, 53
El Señor liberó a su pueblo y lo llenó de esperanza, y a sus enemigos los sumergió en el mar. Aleluya.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Dios todopoderoso y eterno, que estableciste el misterio pascual como alianza de la reconciliación humana, concédenos manifestar en las obras lo que celebramos con fe. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Fuera de Jesús no hay salvación.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 4, 1-12
En aquellos días,
mientras Pedro y Juan hablaban al pueblo, se presentaron los sacerdotes, el
jefe de la guardia del templo y los saduceos, indignados porque los apóstoles
enseñaban al pueblo y anunciaban que la resurrección de los muertos
se había verificado en la persona de Jesús. Los aprehendieron,
y como ya era tarde, los encerraron en la cárcel hasta el día
siguiente. Pero ya muchos de los que habían escuchado sus palabras, unos
cinco mil hombres, habían abrazado la fe.
Al día siguiente, se reunieron en Jerusalén los jefes del pueblo,
los ancianos y los escribas, el sumo sacerdote Anás, Caifás, Juan,
Alejandro y cuantos pertenecían a las familias de los sumos sacerdotes.
Hicieron comparecer ante ellos a Pedro y a Juan y les preguntaron: "¿Con
qué poder o en nombre de quién han hecho todo esto?"
Pedro, lleno del Espíritu Santo, dijo: "Jefes del pueblo y ancianos:
Puesto que hoy se nos interroga acerca del beneficio hecho a un hombre enfermo,
para saber cómo fue curado, sépanlo ustedes y sépalo todo
el pueblo de Israel: este hombre ha quedado sano en el nombre de Jesús
de Nazaret, a quien ustedes crucificaron y a quien Dios resucitó de entre
los muertos. Este mismo Jesús es la piedra que ustedes, los constructores,
han desechado y que ahora es la piedra angular. Ningún otro puede salvarnos,
porque no hay bajo el cielo otro nombre dado a los hombres por el que nosotros
debamos salvarnos". Palabra de Dios. T. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
117,1-2 y 4.22-24. 25-27a.
R/. La piedra que desecharon los constructores es ahora la piedra angular.
Aleluya.
Te damos gracias, Señor,
porque eres bueno, porque tu misericordia es eterna. Diga la casa de Israel:
"Su misericordia es eterna". Digan los que temen al Señor:
"Su misericordia es eterna". R/.
La piedra que desecharon los constructores, es ahora la piedra angular. Esto
es obra de la mano del Señor, es un milagro patente. Éste es el
día del triunfo del Señor, día de júbilo y de gozo.
R/.
Libéranos, Señor, y danos tu victoria. Bendito el que viene en
nombre del Señor. Que Dios desde su templo nos bendiga. Que el Señor,
nuestro Dios, nos ilumine. R/.
SECUENCIA Opcional, Lecc. I, pág. 855.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Sal 117, 24
R/. Aleluya, aleluya.
Este es el día del triunfo del Señor, día de júbilo y de gozo. R/.
EVANGELIO
Se acercó Jesús, tomó el pan y se lo dio a sus discípulos y también el pescado.
Del santo Evangelio según san Juan: 21, 1-14
En aquel tiempo, Jesús
se les apareció otra vez a los discípulos junto al lago de Tiberíades.
Se les apareció de esta manera: Estaban juntos Simón Pedro, Tomás
(llamado el Gemelo), Natanael (el de Caná de Galilea), los hijos de Zebedeo
y otros dos discípulos. Simón Pedro les dijo: "Voy a pescar".
Ellos le respondieron: "También nosotros vamos contigo". Salieron
y se embarcaron, pero aquella noche no pescaron nada.
Estaba amaneciendo, cuando Jesús se apareció en la orilla, pero
los discípulos no lo reconocieron. Jesús les dijo: "Muchachos,
¿han pescado algo?" Ellos contestaron: "No". Entonces
Él les dijo: "Echen la red a la derecha de la barca y encontrarán
peces". Así lo hicieron, y luego ya no podían jalar la red
por tantos pescados.
Entonces el discípulo a quien amaba Jesús le dijo a Pedro: "Es
el Señor". Tan pronto como Simón Pedro oyó decir que
era el Señor, se anudó a la cintura la túnica, pues se
la había quitado, y se tiró al agua. Los otros discípulos
llegaron en la barca, arrastrando la red con los pescados, pues no distaban
de tierra más de cien metros.
Tan pronto como saltaron a tierra, vieron unas brasas y sobre ellas un pescado
y pan. Jesús les dijo: "Traigan algunos pescados de los que acaban
de pescar". Entonces Simón Pedro subió a la barca y arrastró
hasta la orilla la red, repleta de pescados grandes. Eran ciento cincuenta y
tres, y a pesar de que eran tantos, no se rompió la red. Luego les dijo
Jesús: "Vengan a almorzar". Y ninguno de los discípulos
se atrevía a preguntarle: `¿Quién eres?', porque ya sabían
que era el Señor. Jesús se acercó, tomó el pan y
se lo dio y también el pescado.
Ésta fue la tercera vez que Jesús se apareció a sus discípulos
después de resucitar de entre los muertos. Palabra del Señor.
Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Señor, realiza bondadoso en nosotros el intercambio de este sacrificio pascual, para que pasemos de los afectos terrenos al deseo de los bienes del cielo. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I de Pascua (en este día), MR, p. 504 (500).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Jn 21,12-13
Dijo Jesús a sus discípulos: Vengan a comer. Y tomó un pan y lo repartió entre ellos. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Protege, Señor, con
amor constante a quienes has salvado, para que, una vez redimidos por la pasión
de tu Hijo, se llenen ahora de alegría por su resurrección. El,
que vive y reina por los siglos de los siglos.
La despedida se hace como en el día de Pascua.
Blanco Sábado de la Octava de Pascua MR, p. 350 (352) / Lecc. I, p. 869 LH, vísperas I de mañana, todo propio. T. II: p. 616. Fieles; p. 273. Popular: pp. 446 y 443
TAMBIÉN
LA BIBLIA VIVE
Hech 4,13-21; Sal 117; secuencia; Mc 16,9-15
Por su vocabulario y estilo, sabemos que el Evangelio de hoy es una adición posterior a Marcos, probablemente escrito en el siglo II. Su existencia testifica no sólo a la nueva vida de Jesús sino a la naturaleza viva de la Biblia. Es que el Evangelio mismo de Marcos se termina en 16, 8, sin una aparición del resucitado, ni siquiera del anuncio público de su resurrección. No sabemos por qué el evangelista terminó así su obra, pero parece que cristianos después de él se encontraron consternados por un fin tan abrupto. Por eso añadieron los versos 9 al 15, incluyendo narraciones de otros Evangelios (especialmente Lucas 24 y Juan 20), no reproducidas mecánicamente sino resumidas libremente. Por eso, vemos que unas partes de la Biblia y hasta la Tradición viva de la Iglesia, penetran y hacen crecer otras partes.
ANTÍFONA DE ENTRADA Sal 104, 43
El Señor liberó a su pueblo y lo llenó de alegría; al pueblo elegido lo colmó de júbilo. Aleluya.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que, con la abundancia de tu gracia, no cesas de aumentar en todos los pueblos el número de los que creen en ti, mira propicio a tus elegidos y haz que, renacidos ya por el sacramento del bautismo, queden un día revestidos de gozosa inmortalidad. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
No podemos callar lo que hemos visto y oído.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 4, 13-21
En aquellos días, los sumos sacerdotes, los ancianos y los escribas, se quedaron sorprendidos al ver el aplomo con que Pedro y Juan hablaban, pues sabían que eran hombres del pueblo sin ninguna instrucción. Ya los habían reconocido como pertenecientes al grupo que andaba con Jesús, pero no se atrevían a refutarlos, porque ahí estaba de pie, entre ellos, el hombre paralítico que había sido curado. Por consiguiente, les mandaron que salieran del sanedrín, y ellos comenzaron a deliberar entre sí: "¿Qué vamos a hacer con estos hombres? Han hecho un milagro evidente, que todo Jerusalén conoce y que no podemos negar; pero a fin de que todo esto no se divulgue más entre el pueblo, hay que prohibirles con amenazas hablar en nombre de Jesús". Entonces mandaron llamar a Pedro y a Juan y les ordenaron que por ningún motivo hablaran ni enseñaran en nombre de Jesús. Ellos replicaron: "Digan ustedes mismos si es justo delante de Dios obedecerlos a ustedes antes que a Dios. Nosotros no podemos dejar de contar lo que hemos visto y oído". Los miembros del sanedrín repitieron las amenazas y los soltaron, porque no encontraron la manera de castigarlos, ya que el pueblo entero glorificaba a Dios por lo sucedido. Palabra de Dios. T. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
117,1 y 14-15. 16ab-18. 19-21.
R/. La diestra del Señor ha hecho maravillas. Aleluya.
Te damos gracias, Señor,
porque eres bueno, porque tu misericordia es eterna. El Señor es mi fuerza
y mi alegría; en el Señor está mi salvación. Escuchemos
el canto de victoria que sale de la casa de los justos: R/.
"La diestra del Señor es poderosa, la diestra del Señor es
nuestro orgullo". No moriré, continuaré viviendo para contar
lo que el Señor ha hecho. Me castigó, me castigó el Señor,
pero no me abandonó a la muerte. R/.
Ábranme las puertas del templo, que quiero entrar a dar gracias a Dios.
Ésta es la puerta del Señor y por ella entrarán los que
le viven fieles. Te doy gracias, Señor, pues me escuchaste y fuiste para
mí la salvación. R/.
SECUENCIA Opcional, Lecc. I, pág. 855.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Sal 117, 24
R/. Aleluya, aleluya.
Este es el día del triunfo del Señor, día de júbilo y de gozo. R/.
EVANGELIO
Vayan por todo el mundo y prediquen el Evangelio.
Del santo Evangelio según san Marcos: 16, 9-15
Habiendo resucitado al amanecer
del primer día de la semana, Jesús se apareció primero
a María Magdalena, de la que había arrojado siete demonios. Ella
fue a llevar la noticia a los discípulos, los cuales estaban llorando,
agobiados por la tristeza; pero cuando la oyeron decir que estaba vivo y que
lo había visto, no le creyeron.
Después de esto, se apareció en otra forma a dos discípulos,
que iban de camino hacia una aldea. También ellos fueron a anunciarlo
a los demás; pero tampoco a ellos les creyeron.
Por último, se apareció Jesús a los Once, cuando estaban
a la mesa, y les echó en cara su incredulidad y dureza de corazón,
porque no les habían creído a los que lo habían visto resucitado.
Jesús les dijo entonces: "Vayan por todo el mundo y prediquen el
Evangelio a toda creatura". Palabra del Señor. T. Gloria
a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Concédenos, Señor,
vivir siempre llenos de gratitud por estos misterios pascuales que celebramos,
para que, continuamente renovados por su acción, se conviertan para nosotros
en causa de eterna felicidad.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I de Pascua (en este día), MR, p. 504 (500).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Gál 3, 27
Todos ustedes que han sido bautizados en Cristo, se han revestido de Cristo. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dirige, Señor, tu
mirada compasiva sobre tu pueblo, al que te has dignado renovar con estos misterios
de vida eterna, y concédele llegar un día a la gloria incorruptible
de la resurrección. Por Jesucristo, nuestro Señor.
La despedida se hace como en el día de Pascua.
Blanco Domingo II de Pascua o de la Divina Misericordia
MR p. 351 (353) / Lecc. I, p. 212 LH, Semana II del Salterio
LECTURAS
QUE MEDITAN SOBRE LA FE PASCUAL
Hech 4, 32-35; Sal 117; 1 Jn 5, 1-6; secuencia; Jn 20, 19-31
Las lecturas de hoy meditan sobre diversos aspectos de la fe pascual que hemos empezado a celebrar durante este Tiempo litúrgico. En el famoso relato de Tomás y sus dudas, que constituye el Evangelio de este domingo, meditamos sobre la dificultad de llegar a tal fe, una dificultad especialmente grande para los que intentan creer "sin haber visto" (v. 29). En nuestra primera lectura, meditamos sobre el efecto que tal fe tiene en la Iglesia, que se encuentra unida "en un solo corazón y una sola alma" (v. 32) y por tanto capaz de anunciar el Evangelio y vivirlo hasta el nivel material donde muchos conflictos comunitarios frecuentemente surgen. En la segunda lectura, meditamos sobre la relación entre esta fe y la vida moral del creyente, especialmente el amor que es el culmen de los mandamientos de Dios.
ANTIFONA DE ENTRADA 1 Pedro 2,2
Como niños recién nacidos, anhelen una leche pura y espiritual que los haga crecer hacia la salvación. Aleluya.
O bien: 4 Esd 2, 36-37
Abran el corazón con alegría, y den gracias a Dios, que los ha llamado al Reino de los cielos. Aleluya.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Dios de eterna misericordia,
que reanimas la fe de este pueblo a ti consagrado con la celebración
anual de las fiestas pascuales, aumenta en nosotros los dones de tu gracia,
para que todos comprendamos mejor la excelencia del bautismo que nos ha purificado,
la grandeza del Espíritu que nos ha regenerado y el precio de la Sangre
que nos ha redimido.
Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Tenían un solo corazón y una sola alma.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 4, 32-35
La multitud de los que
habían creído tenía un solo corazón y una sola alma;
todo lo poseían en común y nadie consideraba suyo nada de lo que
tenía.
Con grandes muestras de poder, los apóstoles daban testimonio de la resurrección
del Señor Jesús y todos gozaban de gran estimación entre
el pueblo. Ninguno pasaba necesidad, pues los que poseían terrenos o
casas, los vendían, llevaban el dinero y lo ponían a disposición
de los apóstoles, y luego se distribuía según lo que necesitaba
cada uno. Palabra de Dios. T. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
117, 2-4. 16ab-18. 22-24.
R/. La misericordia del Señor es eterna. Aleluya.
Diga la casa de Israel:
"Su misericordia es eterna". Diga la casa de Aarón: "Su
misericordia es eterna". Digan los que temen al Señor: "Su
misericordia es eterna". R/.
Querían a empujones derribarme, pero Dios me ayudó. El Señor
es mi fuerza y mi alegría, en el Señor está mi salvación.
R/.
La piedra que desecharon los constructores, es ahora la piedra angular. Esto
es obra de la mano del Señor, es un milagro patente. Éste es el
día del triunfo del Señor, día de júbilo y de gozo.
R/.
SEGUNDA LECTURA
Todo el que ha nacido de Dios vence al mundo.
De la primera carta del apóstol san Juan 5, 1-6
Queridos hijo: Todo el
que cree que Jesús es el Mesías, ha nacido de Dios. Todo el que
ama a un padre, ama también a los hijos de éste. Conocemos que
amamos a los hijos de Dios, en que amamos a Dios y cumplimos sus mandamientos,
pues el amor de Dios consiste en que cumplamos sus preceptos. Y sus mandamientos
no son pesados, porque todo el que ha nacido de Dios vence al mundo. Y nuestra
fe es la que nos ha dado la victoria sobre el mundo. Porque, ¿quién
es el que vence al mundo? Sólo el que cree que Jesús es el Hijo
de Dios.
Jesucristo es el que se manifestó por medio del agua y de la sangre;
él vino, no sólo con agua, sino con agua y con sangre. Y el Espíritu
es el que da testimonio, porque el Espíritu es la verdad. Palabra
de Dios. T. Te alabamos, Señor.
SECUENCIA Opcional, Lecc I, pág. 208.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 20, 29
R/. Aleluya, aleluya.
Tomás, tú crees porque me has visto; dichosos los que creen sin haberme visto, dice el Señor. R/.
EVANGELIO
Ocho días después, se les apareció Jesús.
Del santo Evangelio según san Juan: 20, 19-31
Al anochecer del día
de la resurrección, estando cerradas las puertas de la casa donde se
hallaban los discípulos, por miedo a los judíos, se presentó
Jesús en medio de ellos y les dijo: "La paz esté con ustedes".
Dicho esto, les mostró las manos y el costado. Cuando los discípulos
vieron al Señor, se llenaron de alegría. De nuevo les dijo Jesús:
"La paz esté con ustedes. Como el Padre me ha enviado, así
también los envío yo". Después de decir esto, sopló
sobre ellos y les dijo: "Reciban el Espíritu Santo. A los que les
perdonen los pecados, les quedarán perdonados; y a los que no se los
perdonen, les quedarán sin perdonar".
Tomás, uno de los Doce, a quien llamaban el Gemelo, no estaba con ellos
cuando vino Jesús, y los otros discípulos le decían: "Hemos
visto al Señor". Pero él les contestó: "Si no
veo en sus manos la señal de los clavos y si no meto mi dedo en los agujeros
de los clavos y no meto mi mano en su costado, no creeré".
Ocho días después, estaban reunidos los discípulos a puerta
cerrada y Tomás estaba con ellos. Jesús se presentó de
nuevo en medio de ellos y les dijo: "La paz esté con ustedes".
Luego le dijo a Tomás: "Aquí están mis manos; acerca
tu dedo. Trae acá tu mano, métela en mi costado y no sigas dudando,
sino cree". Tomás le respondió: "¡Señor
mío y Dios mío!" Jesús añadió: "Tú
crees porque me has visto; dichosos los que creen sin haber visto".
Otros muchos signos hizo Jesús en presencia de sus discípulos,
pero no están escritos en este libro. Se escribieron éstos para
que ustedes crean que Jesús es el Mesías, el Hijo de Dios, y para
que, creyendo, tengan vida en su nombre. Palabra del Señor. T.
Gloria a ti, Señor Jesús.
Se dice Credo.
PLEGARIA UNIVERSAL
Llenos de gozo por la
santa resurrección del Señor, purificados nuestros sentimientos
y renovado nuestro espíritu, supliquemos con insistencia al Señor,
diciendo: Rey vencedor, escúchanos. R/. Rey vencedor, escúchanos.
A Cristo que, con su gloriosa resurrección, ha vencido la muerte
y ha destruido el pecado, pidámosle que todos los cristianos sean siempre
fieles a las promesas del bautismo que renovaron en la noche santa de Pascua.
A Cristo, que, con su santa resurrección, ha otorgado el perdón
y la paz a los pecadores, supliquémosle que quienes han regresado al
camino de la vida conserven los dones que la misericordia del Padre les ha restituido.
A Cristo, que, con su gloriosa resurrección, ha dado al mundo la vida
verdadera y ha renovado toda la creación, pidámosle por los que,
por no creer en su triunfo, viven sin esperanza.
A Cristo, que, con su santa resurrección, ha colmado de alegría
a los pueblos y los ha enriquecido con sus dones y ha hecho vibrar de gozo nuestros
corazones, pidámosle que renueve la esperanza de los que sufren y lloran.
A Cristo, que, con su gloriosa resurrección, anunció la alegría
a las mujeres, y por medio de las mujeres a los apóstoles, y por medio
de los apóstoles al mundo entero, pidámosle por los que nos hemos
reunido para celebrar su triunfo.
Dios nuestro, que en la Pascua de cada domingo nos haces revivir las maravillas
de la salvación, escucha la oración de tu pueblo y haz que siempre
sepamos reconocer a Cristo presente en la asamblea de los hermanos y que, juntamente
con ellos, demos testimonio de la resurrección inaugurada por cristo,
tu Hijo. El, que vive y reina, inmortal y glorioso, por los siglos de los siglos.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Recibe, Señor, las ofrendas de tu pueblo (y de los recién bautizados), para que, renovados por la confesión de tu nombre y por el bautismo, consigamos la felicidad eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I de Pascua (en este día), MR, p. 504 (500).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Jn 20, 27
Jesús dijo a Tomás: Acerca tu mano, toca los agujeros que dejaron los clavos y no seas incrédulo, sino creyente. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dios todopoderoso, concédenos que la gracia recibida en este sacramento pascual permanezca siempre en nuestra vida. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Puede utilizarse la fórmula de bendición solemne, MR, p. 607 (602).
Para despedir al pueblo se canta o se dice Pueden ir en paz, aleluya, aleluya. A lo cual se responde Demos gracias a Dios, aleluya, aleluya.
UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO.- Puede ser difícil creerlo, pero por muchos años los cristianos se han "olvidado" de la resurrección de Jesús. Por mucho tiempo antes de la década de 1950, la muerte del Señor atrajo la mayor parte de la atención de los fieles mientras que su resurrección se entendía meramente como una añadidura a su muerte o la vindicación de su inocencia. Sin embargo, gracias a varios factores, especialmente la publicación del libro, La resurrección: misterio de salvación en 1960 por el exégeta suizo François Xavier Durwell, la Iglesia ha recuperado la importancia de la fe pascual, Esta recuperación se evidencia en varios aspectos, por ejemplo, en la celebración de la Vigilia Pascual, entendida ahora como la liturgia fundamental del año litúrgico. Puede ser que la resurrección es tan grande y asombrosa que rebasa nuestra limitación y por ello, a veces, no podamos creer que es la realidad.
Solemnidad de la Anunciación del Señor (del día 25 de marzo)
Blanco MR, p. 724 (711) / Lecc. I, p. l007
Nueve meses antes de Navidad celebramos la encarnación del Hijo de Dios, que san Lucas describe en el anuncio del ángel a la santísima Virgen. Toda la liturgia del día de hoy está coloreada por las palabras del salmista, que la carta a los hebreos pone en labios de Cristo al llegar al mundo: "Aquí estoy, Dios mío: vengo para cumplir tu voluntad".
LA VIDA TOTALMENTE
SALVADORA DE CRISTO
Apoc 12,7-12; Sal 137; Heb 10,4-10; Lc 1,26-38
En pleno Tiempo pascual, focalizado en la resurrección de Jesús desde la muerte, irrumpe la fiesta de la Anunciación con sus lecturas. Quizá nos podrían parecer fuera de lugar. ¿No estamos celebrando el destino final de Jesús? ¿Por qué leer lecturas que recuentan sus inicios? Pero estas lecturas nos recuerdan una verdad que, a veces, ha sido olvidada en ciertos momentos de la historia de la Iglesia, y de la cual no se debe nunca apartar. Con la meditación de Hebreos sobre la entrada de Cristo en el mundo, con el relato de Apocalipsis sobre la caída a la tierra del Dragón que intenta matar al niño nacido de la mujer (vv. 4-5), y sobre todo con la narración de Lucas sobre la concepción virginal de Jesús, estamos recordado que toda la vida de Cristo es salvadora, desde los primeros momentos.
ANTÍFONA DE ENTRADA Heb 10, 5. 7
Cristo dijo, al entrar en el mundo: aquí estoy, Dios mío; vengo para cumplir tu voluntad.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que quisiste que tu Palabra, asumiera la realidad de nuestra carne en el seno de la Virgen María, concede a quienes proclamamos a nuestro Redentor como verdadero Dios y verdadero hombre, que merezcamos participar de su naturaleza divina. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Miguel y sus ángeles pelearon contra el dragón.
Del libro del Apocalipsis del apóstol San Juan: 12,7-12
En el cielo se trabó
una gran batalla: Miguel y sus ángeles pelearon contra el dragón.
El dragón y sus ángeles lucharon ferozmente, pero fueron vencidos,
y arrojados del cielo para siempre. Así, el dragón que es la antigua
serpiente, la que se llama Diablo y Satanás, la que engaña al
mundo entero, fue precipitado a la tierra junto con sus ángeles.
Entonces yo, Juan, oí en el cielo una voz poderosa, que decía
: "Ha sonado la hora de la victoria de nuestro dios, de su dominio y de
su reinado, y del poder de su Mesías, porque ha sido reducido a la impotencia
el que de día y de noche acusaba a nuestros hermanos, delante de Dios.
Pero ellos lo han vencido por medio de la sangre del Cordero y por el testimonio
que dieron, pues su amor a la vida no les impidió aceptar la muerte.
Por eso, alégrense los cielos y todos los que en ellos habitan".
Palabra de Dios. T. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
137
R/. De todo corazón te damos gracias, Señor. Aleluya
De todo corazón te
damos gracias, Señor, porque escuchaste nuestros ruegos. te cantaremos
delante de tus ángeles, te adoraremos en tu templo. R/.
Señor, te damos gracias por tu lealtad y por tu amor: siempre que te
invocamos nos oíste y nos llenaste de valor. R/.
Que todos los reyes de la tierra te reconozcan, al escuchar tus prodigios. Que
alaben tus caminos, porque tu gloria es inmensa. R/.
SEGUNDA LECTURA
En tu libro se me ordena hacer tu voluntad.
De la carta a los hebreos: 10, 4-10
Hermanos: Es imposible que
la sangre de toros y machos cabríos pueda borrar los pecados. Por eso,
al entrar al mundo, Cristo dijo, conforme al salmo: No quisiste víctimas
ni ofrendas; en cambio, me has dado un cuerpo. No te agradaron los holocaustos
ni los sacrificios por el pecado; entonces dije —porque a mí se
refiere la Escritura—: "Aquí estoy, Dios mío; vengo
para hacer tu voluntad".
Comienza por decir: No quisiste víctimas ni ofrendas, no te agradaron
los holocaustos ni los sacrificios por el pecado —siendo así que
es lo que pedía la ley—; y luego añade: "Aquí
estoy, Dios mío; vengo para hacer tu voluntad".
Con esto, Cristo suprime los antiguos sacrificios, para establecer el nuevo.
Y en virtud de esta voluntad, todos quedamos santificados por la ofrenda del
cuerpo de Jesucristo, hecha una vez por todas. Palabra de Dios.
T. Te alabamos, Señor.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 1, 14
R/. Aleluya, aleluya.
Aquel que es la Palabra se hizo hombre y habitó entre nosotros y hemos visto su gloria. R/.
EVANGELIO
Concebirás y darás a luz un hijo.
Del santo Evangelio según san Lucas: 1, 26-38
En aquel tiempo, el ángel
Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de Galilea, llamada Nazaret, a una
virgen desposada con un varón de la estirpe de David, llamado José.
La virgen se llamaba María. Entró el ángel a donde ella
estaba y le dijo: "Alégrate, llena de gracia, el Señor está
contigo". Al oír estas palabras, ella se preocupó mucho y
se preguntaba qué querría decir semejante saludo.
El ángel le dijo: "No temas, María, porque has hallado gracia
ante Dios. Vas a concebir y a dar a luz un hijo y le pondrás por nombre
Jesús. Él será grande y será llamado Hijo del Altísimo;
el Señor Dios le dará el trono de David, su padre, y él
reinará sobre la casa de Jacob por los siglos y su reinado no tendrá
fin".
María le dijo entonces al ángel: "¿Cómo podrá
ser esto, puesto que yo permanezco virgen?" El ángel le contestó:
"El Espíritu Santo descenderá sobre ti y el poder del Altísimo
te cubrirá con su sombra. Por eso, el Santo, que va a nacer de ti, será
llamado Hijo de Dios. Ahí tienes a tu parienta Isabel, que a pesar de
su vejez, ha concebido un hijo y ya va en el sexto mes la que llamaban estéril,
porque no hay nada imposible para Dios". María contestó:
"Yo soy la esclava del Señor; cúmplase en mí lo que
me has dicho". Y el ángel se retiró de su presencia. Palabra
del Señor. T. Gloria a ti, Señor Jesús.
Se dice Credo. Todos se arrodillan a las palabras y por obra.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Dios todopoderoso, dígnate aceptar los dones de tu Iglesia, que reconoce su origen en la encarnación de tu Unigénito, y concédele celebrar con gozo sus misterios en esta solemnidad. Por Jesucristo, nuestro Señor.
PREFACIO: El misterio de la Encarnación.
En verdad es justo y necesario,
es nuestro deber y salvación darte gracias siempre y en todo lugar, Señor,
Padre santo, Dios todopoderoso y eterno, por Cristo, Señor nuestro.
A quien primero acogió la Virgen santísima por la fe cuando el
ángel le anunció que por obra del Espíritu Santo habría
de nacer entre los hombres, para que los hombres se salvaran. Y a quien luego
llevó, llena de amor, en sus purísimas entrañas, cumpliendo
así la verdad de las promesas que Dios hizo a Israel y colmando pueblos.
Por él, los coros de los ángeles adoran tu grandeza y se alegran
eternamente en tu presencia. Permítenos asociarnos a sus voces cantando
humildemente tu alabanza: Santo, Santo, Santo...
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN 15 7, 14
Miren: la Virgen concebirá y dará a luz un hijo, a quien le pondrá el nombre de Emmanuel.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, por esta comunión fortalece en nosotros la verdadera fe, para que, cuantos proclamamos que el Hijo de la Virgen María es verdadero Dios y verdadero hombre, lleguemos a la alegría eterna por el poder salvador de su resurrección. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Blanco Martes II de Pascua MR, p. 354 (355) / Lecc. I, p.875 LH, Semana II del Salterio
"NOSOTROS
HABLAMOS DE LO QUE SABEMOS"
Hech 4, 32-37; Sal 92; Jn 3, 7-15
El contraste entre dos grupos, en el cual uno reclama un entendimiento cierto y critica al otro grupo por su falta de entendimiento, fue una técnica común en la retórica del mundo antiguo. Se puede encontrar ejemplos de él en los escritos de judíos, griegos, y otros. Evidentemente Juan utiliza esta técnica en nuestro Evangelio, en el cual presenta a Jesús proclamando que "nosotros hablamos... pero ustedes no aceptan" (v. 11), haciendo así un contraste entre dos grupos no claramente identificados, para señalar la única fuente verdadera del conocimiento de Dios. Es Jesús esta fuente, y no sólo de conocimiento sino de la vida eterna (v. 15) cuando las personas aceptan dicho conocimiento con fe. Debemos recordar hoy que, entre las muchas personas que pretenden tener las respuestas a los misterios de la vida, la única fuente verdadera es Cristo.
ANTÍFONA DE ENTRADA Apoc 19, 7.6
Alegrémonos, regocijémonos y demos gracias, porque el Señor, nuestro Dios omnipotente, ha empezado a reinar. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Te pedimos, Dios todopoderoso, que nos concedas anunciar la victoria de Cristo, resucitado, para que alcancemos en plenitud los bienes eternos, cuyo anticipo hemos recibido. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Tenían un solo corazón y una sola alma.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 4, 32-37
La multitud de los que habían
creído tenía un solo corazón y una sola alma; todo lo poseían
en común y nadie consideraba suyo nada de lo que tenía.
Con grandes muestras de poder, los apóstoles daban testimonio de la resurrección
del Señor Jesús y todos gozaban de gran estimación entre
el pueblo. Ninguno pasaba necesidad, pues los que poseían terrenos o
casas, los vendían, llevaban el dinero y lo ponían a disposición
de los apóstoles, y luego se distribuía según lo que necesitaba
cada uno.
José, levita nacido en Chipre, a quien los apóstoles llamaban
Bernabé (que significa hábil para exhortar), tenía un campo;
lo vendió y puso el dinero a disposición de los apóstoles.
Palabra de Dios. T. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
92, 1 ab. lc-2. 5.
R/. El Señor es un rey magnífico. Aleluya.
Tú eres, Señor,
el rey de todos los reyes. Estás revestido de poder y majestad. Tú
mantienes el orbe y no vacila. Eres eterno, y para siempre está firme
tu trono. R/.
Muy dignas de confianza son tus leyes y desde hoy y para siempre, Señor,
la santidad adorna tu templo. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Jn 3, 15
R/. Aleluya, aleluya.
El Hijo del hombre debe ser levantado en la cruz, para que los que creen en él tengan vida eterna. R/.
EVANGELIO
Nadie ha subido al cielo sino el Hijo del hombre, que bajó del cielo.
Del santo Evangelio según san Juan: 3, 7-15
En aquel tiempo, Jesús
dijo a Nicodemo: "No te extrañes de que te haya dicho: Tienen que
renacer de lo alto'. El viento sopla donde quiere y oyes su ruido, pero no sabes
de dónde viene ni a dónde va. Así pasa con quien ha nacido
del Espíritu". Nicodemo le preguntó entonces: "¿Cómo
puede ser esto?"
Jesús le respondió: "Tú eres maestro de Israel, ¿y
no sabes esto? Yo te aseguro que nosotros hablamos de lo que sabemos y damos
testimonio de lo que hemos visto, pero ustedes no aceptan nuestro testimonio.
Si no creen cuando les hablo de las cosas de la tierra, ¿cómo
creerán si les hablo de las celestiales? Nadie ha subido al cielo sino
el Hijo del hombre, que bajó del cielo y está en el cielo. Así
como levantó Moisés la serpiente en el desierto, así tiene
que ser levantado el Hijo del hombre, para que todo el que crea en él
tenga vida eterna".Palabra del Señor. T. Gloria a ti,
Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Concédenos, Señor,
vivir siempre llenos de gratitud por estos misterios pascuales que celebramos,
para que, continuamente renovados por su acción, se conviertan para nosotros
en causa de eterna felicidad.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I-V de Pascua, MR, pp. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Lc 24, 46.26
Era necesario que Cristo
padeciera y resucitara de entre los muertos, y así entrara luego en su
gloria.
Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor y Dios nuestro, escucha nuestras oraciones, para que la participación en los sacramentos de nuestra redención nos ayude en la vida presente y nos alcance las alegrías eternas. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Blanco Miércoles II de Pascua MR, pp. 355 (356) Y 697 (716) / Lecc. I, p. 877
Otros Santos: Macario de Jerusalén, obispo; Magdalena de Canossa, virgen fundadora. Beato Pedro María Ramírez Ramos, presbítero y mártir.
LA FE PASCUAL
PUEDE CAMBIAR TODO
Hech 5,17-26; Sal 33; Jn 3, 16-21
El evangelista Lucas, quien compuso no sólo su Evangelio sino también el libro de Hechos, fue un escritor exquisito. Nuestra primera lectura de hoy ejemplifica su capacidad literaria. Es una duplicación de un primer episodio de persecución (4, 1-22) pero con ciertos elementos más intensos, como por ejemplo la voluntad de Dios, que es expresada en palabras por Pedro en 4, 19 pero actuada por Dios mismo en el escape milagroso de todos los apóstoles de la prisión en 5, 19-21. Así, nuestra primera lectura hace hincapié, de manera sutil y hermosa, en el cambio que la resurrección efectuó en la vida de los apóstoles: de cobardes, que abandonaron a Jesús en su muerte, han llegado a ser evangelizadores valientes de su Evangelio. ¿Por qué dudar que la fe pascual podría transformar también nuestras vidas y el mundo entero hoy?
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Sal 17, 50; 21, 23
Te alabaré, Señor, ante las naciones y anunciaré tu nombre a mis hermanos. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Al conmemorar cada año los misterios por los que devolviste a la naturaleza humana su dignidad original y le infundiste la esperanza de la resurrección, te suplicamos, Señor, confiadamente, que en tu clemencia, nos concedas recibir con perpetuo amor lo que conmemoramos llenos de fe. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Los hombres que habían metido en la cárcel están en el templo, enseñando al pueblo.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 5, 17-26
En aquellos días,
el sumo sacerdote y los de su partido, que eran los saduceos, llenos de ira
contra los apóstoles, los mandaron aprehender y los metieron en la cárcel.
Pero durante la noche, un ángel del Señor les abrió las
puertas, los sacó de ahí y les dijo: "Vayan al templo y pónganse
a enseñar al pueblo todo lo referente a esta nueva vida". Para obedecer
la orden, se fueron de madrugada al templo y ahí se pusieron a enseñar.
Cuando llegó el sumo sacerdote con los de su partido convocaron al sanedrín,
es decir, a todo el senado de los hijos de Israel, y mandaron traer de la cárcel
a los presos. Al llegar los guardias a la cárcel, no los hallaron y regresaron
a informar: "Encontramos la cárcel bien cerrada y a los centinelas
en sus puestos, pero al abrir no encontramos a nadie adentro".
Al oír estas palabras, el jefe de la guardia del templo y los sumos sacerdotes
se quedaron sin saber qué pensar; pero en ese momento llegó uno
y les dijo: "Los hombres que habían metido en la cárcel están
en el templo, enseñando al pueblo".
Entonces el jefe de la guardia, con sus hombres, trajo a los apóstoles,
pero sin violencia, porque temían ser apedreados por el pueblo. Palabra
de Dios. T. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
33,2-3.4-5.6-7.8-9.
R/. Haz la prueba y verás qué bueno es el Señor. Aleluya.
Bendeciré al Señor
a todas horas, no cesará mi boca de alabarlo. Yo me siento orgulloso
del Señor que se alegre su pueblo al escucharlo. R/.
Proclamemos la grandeza del Señor y alabemos todos juntos su poder. Cuando
acudí al Señor, me hizo caso y me libró de todos mis temores.
R/.
Confía en el Señor y saltarás de gusto, jamás te
sentirás decepcionado, porque el Señor escucha el clamor de los
pobres y los libra de todas sus angustias. R/.
Junto a aquellos que temen al Señor el ángel del Señor
acampa y los protege. Haz la prueba y verás qué bueno es el Señor.
Dichoso el hombre que se refugia en él. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 3, 16
R/. Aleluya, aleluya.
Tanto amó Dios al mundo, que le entregó a su Hijo único, para que el que crea en él, tenga vida eterna. R/.
EVANGELIO
Dios envió a su Hijo al mundo para que el mundo se salve por él.
Del santo Evangelio según san Juan: 3, 16-21
"Tanto amó Dios
al mundo, que le entregó a su Hijo único, para que todo el que
crea en él no perezca, sino que tenga la vida eterna. Porque Dios no
envió a su Hijo para condenar al mundo, sino para que el mundo se salvara
por él. El que cree en él no será condenado; pero el que
no cree ya está condenado por no haber creído en el Hijo único
de Dios.
La causa de la condenación es ésta: habiendo venido la luz al
mundo, los hombres prefirieron las tinieblas a la luz, porque sus obras eran
malas. Todo aquel que hace el mal, aborrece la luz y no se acerca a ella, para
que sus obras no se descubran. En cambio, el que obra el bien conforme a la
verdad se acerca a la luz, para que se vea que sus obras están hechas
según Dios". Palabra del Señor. T. Gloria a ti,
Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Dios nuestro, que por el
santo valor de este sacrificio nos hiciste participar de tu misma y gloriosa
vida divina, concédenos que, así como hemos conocido tu verdad,
de igual manera vivamos de acuerdo con ella.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I-V de Pascua, MR, pp. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Jn 15, 16. 19
Yo los elegí del mundo, dice el Señor, y los destiné para que vayan y den fruto, y su fruto permanezca. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COM7UNIÓN
Señor, muéstrate benigno con tu pueblo, y ya que te dignaste alimentarlo con los misterios celestiales, haz lo pasar de su antigua condición de pecado a una vida nueva. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Rojo San Estanislao, obispo y mártir MR, p. 729 (716) / Lecc. I, p. 879
Nació en Szczepanowski
(Polonia) hacia el año 1030, y estudió en París. Estanislao
fue nombrado obispo de Cracovia. Siendo Papa el formidable Gregorio VII, se
lanzó a defender la libertad de la Iglesia y excomulgó al rey
polaco, tiránico y corrompido, quien lo mandó matar (1030-1079).
Del Común de mártires: para un mártir en Tiempo Pascual,
p. 935 (927), o del Común de pastores: para un obispo, p. 943 (935).
"EL CIELO"
Y "LA TIERRA"
Hech 5, 27-33; Sal 33; Jn 3, 31-36
En el Evangelio, Juan hace
que Jesús distinga entre dos niveles u órdenes: por un lado, "lo
alto" o "el cielo" y, por el otro, "abajo" o "la
tierra" (v. 31). Asimismo, Jesús distingue entre dos diferentes
respuestas a él, es decir, entre "creer en el Hijo" y "negar
a creer en él" (v. 36). Se trata de una característica estilística
del evangelista. A Juan le gusta avanzar sus narraciones y discursos haciendo
tales contrastes y luego decidiendo por uno u otro de sus extremos. Otros contrastes
incluyen "el espíritu la carne", "el agua de vida eterna
el agua natural", y muchos otros. No debemos entender estos contrastes
como dualismos metafísicos,
porque así nos llevarían a pensar de modo dualista y quizá
también de manera intolerante hacia los que, en nuestra imaginación,
están del otro lado o en el otro.
ANTÍFONA DE ENTRADA
Este es el varón que no fue abandonado por Dios en el día del combate; recibirá su corona, porque cumplió fielmente los mandatos del Señor. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, por defender tu honor, el santo obispo Estanislao cayó bajo la espada de sus perseguidores; concédenos que podamos permanecer como él firmes en la fe hasta la muerte. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Nosotros somos testigos de todo esto, y también lo es el Espíritu Santo.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 5, 27-3
En aquellos días,
los guardias condujeron a los apóstoles ante el sanedrín, y el
sumo sacerdote los reprendió, diciéndoles: "Les hemos prohibido
enseñar en nombre de ese Jesús; sin embargo, ustedes han llenado
a Jerusalén con sus enseñanzas y quieren hacernos responsables
de la sangre de ese hombre".
Pedro y los otros apóstoles replicaron: "Primero hay que obedecer
a Dios y luego a los hombres. El Dios de nuestros padres resucitó a Jesús,
a quien ustedes dieron muerte colgándolo de la cruz. La mano de Dios
lo exaltó y lo ha hecho jefe y salvador, para dar a Israel la gracia
de la conversión y el perdón de los pecados. Nosotros somos testigos
de todo esto y también lo es el Espíritu Santo, que Dios ha dado
a los que lo obedecen".
Esta respuesta los exasperó y decidieron matarlos. Palabra de
Dios. T. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
33
R/. Haz la prueba y verás qué bueno es el Señor. Aleluya.
Bendeciré al Señor
a todas horas; no cesará mi boca de alabarlo. Haz la prueba y verás
qué bueno es el Señor. Dichoso el hombre que se refugia en él.
R/.
En contra del malvado está el Señor para borrar de la tierra su
recuerdo; escucha, en cambio, al hombre justo y lo libra de todas sus congojas.
R/.
El Señor no está lejos de sus fieles y levanta a las almas abatidas.
Muchas tribulaciones pasa el justo, pero de todas ellas Dios lo libra. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 20, 29
R/. Aleluya, aleluya.
Tomás, tú crees, porque me has visto. Dichosos los que creen sin haberme visto, dice el Señor. R/.
EVANGELIO
El Padre ama a su Hijo y todo lo ha puesto en sus manos.
Del santo Evangelio según san Juan: 3, 31-36
El que viene de lo alto
está por encima de todos; pero el que viene de la tierra pertenece a
la tierra y habla de las cosas de la tierra. El que viene del cielo está
por encima de todos. Da testimonio de lo que ha visto y oído, pero nadie
acepta su testimonio. El que acepta su testimonio certifica que Dios es veraz.
Aquel a quien Dios envió habla las palabras de Dios, porque Dios le ha
concedido sin medida su Espíritu.
El Padre ama a su Hijo y todo lo ha puesto en sus manos. El que cree en el Hijo
tiene vida eterna. Pero el que es rebelde al Hijo no verá la vida, porque
la cólera divina perdura en contra de él. Palabra del
Señor. T. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Recibe, Señor, el sacrificio de reconciliación y alabanza que ofrecemos a tu majestad en la conmemoración del santo mártir San Estanislao, para que nos lleve a obtener el perdón y nos haga permanecer en continua acción de gracias. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I-V de Pascua, MR, pp. 504-508 (500504) o del santo.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Jn 12,24
Si el grano de trigo no cae en la tierra y muere, queda infecundo; pero, si muere, da fruto abundante. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Al celebrar con alegría esta festividad y habiendo recibido tus dones celestiales, te pedimos, Señor, que concedas, a quienes en este divino banquete proclamamos la muerte de tu Hijo, que podamos participar, con los santos mártires, de su resurrección y de su gloria. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Blanco Viernes II de Pascua MR, p. 357 (358) / Lecc. I, p. 881
UNA CRISTOLOGÍA
DESDE LO ALTO
Hech 5, 34-42; Sal 26; Jn 6,1-15
Todo el capítulo sexto del Evangelio de Juan es una meditación sobre la Eucaristía. Una parte de él que es nuestro Evangelio de hoy, narra el episodio de la multiplicación de los panes. Hay muchos paralelos entre esta narración de Juan y las versiones sinópticas del mismo episodio (Mc 8, 1-10; Mt 14, 13-21; Lc 9, 10-17) pero la de Juan se destaca por presentar a Jesús como poderoso. Se trata de una teología que es típica de Juan: Cristo tiene poderes y conocimiento sobrenaturales, se focaliza sobre todo en la gloria celestial, y nunca muestra temor o dudas. Quizá tenemos aquí una visión "desde lo alto" de Jesús y de la Eucaristía que agrada a algunos y a otros no. Por esto, en parte, hay cuatro Evangelios: diferentes personas pueden encontrar en diferentes Evangelios una misma teología.
ANTÍFONA DE ENTRADA Apoc 5, 9-10
Señor, con tu Sangre has rescatado a hombres de toda raza, lengua, pueblo y nación, y has hecho de nosotros un reino de sacerdotes para Dios. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, tú que eres luz y esperanza de los corazones sinceros, concédenos que sepamos dirigirnos a ti con una oración confiada y ofrecerte siempre el homenaje de nuestra alabanza. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Los apóstoles se retiraron del sanedrín, felices de haber padecido ultrajes por el nombre de Jesús.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 5, 34-42
En aquellos días,
un fariseo llamado Gamaliel, doctor de la ley y respetado por todo el pueblo,
se levantó en el sanedrín, mandó que hicieran salir por
un momento a los apóstoles y dijo a la asamblea:
"Israelitas, piensen bien lo que van a hacer con esos hombres. No hace
mucho surgió un tal Teudas, que pretendía ser un caudillo, y reunió
unos cuatrocientos hombres. Fue ejecutado, dispersaron a sus secuaces y todo
quedó en nada. Más tarde, en la época del censo, se levantó
Judas el Galileo y muchos lo siguieron. Pero también Judas pereció
y se desbandaron todos sus seguidores. En el caso presente, yo les aconsejo
que no se metan con esos hombres; suéltenlos. Porque si lo que se proponen
y están haciendo es de origen humano, se acabará por sí
mismo. Pero si es cosa de Dios, no podrán ustedes deshacerlo. No se expongan
a luchar contra Dios".
Los demás siguieron su consejo: mandaron traer a los apóstoles,
los azotaron, les prohibieron hablar en nombre de Jesús y los soltaron.
Ellos se retiraron del sanedrín, felices de haber padecido aquellos ultrajes
por el nombre de Jesús.
Y todos los días enseñaban sin cesar y anunciaban el Evangelio
de Cristo Jesús, tanto en el templo como en las casas. Palabra
de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
26,1.4.13-14.
R/. El Señor es mi luz y mi salvación. Aleluya.
El Señor es mi luz
y mi salvación, ¿a quién voy a tenerle miedo? El Señor
es la defensa de mi vida, ¿quién podrá hacerme temblar?
R/.
Lo único que pido, lo único que busco, es vivir en la casa del
Señor toda mi vida, para disfrutar las bondades del Señor y estar
continuamente en su presencia. R/.
La bondad del Señor espero ver en esta misma vida. Ármate de valor
y fortaleza y en el Señor confía. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Mt 4, 4
R/. Aleluya, aleluya.
No sólo de pan vive el hombre, sino también de toda palabra que sale de la boca de Dios. R/.
EVANGELIO
Jesús distribuyó el pan a los que estaban sentados, hasta que se saciaron.
Del santo Evangelio según san Juan: 6, 1-15
En aquel tiempo, Jesús
se fue a la otra orilla del mar de Galilea o lago de Tiberíades. Lo seguía
mucha gente, porque habían visto las señales milagrosas que hacía
curando a los enfermos. Jesús subió al monte y se sentó
allí con sus discípulos.
Estaba cerca la Pascua, festividad de los judíos. Viendo Jesús
que mucha gente lo seguía, le dijo a Felipe: "¿Cómo
compraremos pan para que coman éstos?" Le hizo esta pregunta para
ponerlo a prueba, pues él bien sabía lo que iba a hacer. Felipe
le respondió: "Ni doscientos denarios de pan bastarían para
que a cada uno le tocara un pedazo de pan". Otro de sus discípulos,
Andrés, el hermano de Simón Pedro, le dijo: "Aquí
hay un muchacho que trae cinco panes de cebada y dos pescados. Pero, ¿qué
es eso para tanta gente?" Jesús le respondió: "Díganle
a la gente que se siente". En aquel lugar había mucha hierba. Todos,
pues, se sentaron ahí; y tan sólo los hombres eran unos cinco
mil.
Enseguida tomó Jesús los panes, y después de dar gracias
a Dios, se los fue repartiendo a los que se habían sentado a comer. Igualmente
les fue dando de los pescados todo lo que quisieron. Después de que todos
se saciaron, dijo a sus discípulos: "Recojan los pedazos sobrantes,
para que no se desperdicien". Los recogieron y con los pedazos que sobraron
de los cinco panes llenaron doce canastos.
Entonces la gente, al ver la señal milagrosa que Jesús había
hecho, decía: "Este es, en verdad, el profeta que habría
de venir al mundo". Pero Jesús, sabiendo que iban a llevárselo
para proclamarlo rey, se retiró de nuevo a la montaña, Él
solo. Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Recibe, Señor, con bondad, estas ofrendas de tu familia santa, para que, con la ayuda de tu protección, conserve los dones recibidos y llegue a poseer los eternos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I-V de Pascua, MR, pp. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Rom 4, 25
Cristo fue condenado a muerte por nuestros pecados, y resucitó para nuestra justificación. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Protege, Señor, con
amor constante a quienes has salvado, para que, una vez redimidos por la pasión
de tu Hijo, se llenen ahora de alegría por su resurrección. Él,
que vive y reina por los siglos de los siglos.
Blanco / Rojo Sábado II de Pascua, o san Martín I, Papa y mártir* o san Sabás Reyes Salazar, mártir mexicano** [Memoria en donde se conservan sus reliquias] MR, p. 358 (359) / Lecc. I, p. 884 LH, vísperas I del domingo: Semana III del Salterio II: pp. 1312, 516 y 682. Fieles: pp. 642 y 274. Popular: pp. 202 y 446
Otros Santos: Beato Rolando Rivi, seminarista mártir.
JESÚS
DERRIBÓ EL MURO DE ENEMISTAD QUE SEPARABA LOS PUEBLOS
Hech 6, 1-7; Sal 32; Jn 6, 14-21
En nuestra primera lectura, los acontecimientos siguen desarrollándose en la comunidad cristiana en Jerusalén, pero ahora entran en escena los cristianos procedentes del judaísmo helenista, de un talante más abierto y universal. Entre ellos y los cristianos del judaísmo palestino han crecido ciertas fricciones que estallan en la escena que leemos hoy. El relato refleja las tensiones que se produjeron en las primeras comunidades entre cristianos procedentes de diversas culturas, especialmente entre los de origen judío y los demás. Por eso, muchos autores en el Nuevo Testamento llaman a sus lectores a mantener la unión de caridad entre los miembros de la Iglesia. También, por eso, varios autores hacen hincapié en que la muerte y resurrección de Jesús han demolido los muros de división dentro de la Iglesia (p. ej. Ef 2, 11-22). ¡No construyamos nuevas murallas de separación hoy!
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. 1 Pedro 2, 9
Pueblo redimido por Dios, anuncia las maravillas del Señor, que te llamó de las tinieblas a su luz admirable. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Aparta, Señor, de nosotros la sentencia condenatoria escrita en virtud de la ley del pecado, que ya anulaste en el misterio pascual por la resurrección de Jesucristo, tu Hijo. El, que vive y reina contigo ...
O bien:
Dios de piedad, que por medio de estos misterios pascuales abriste para tus fieles la puerta de tu misericordia, míranos y apiádate de nosotros, para que, siguiendo con tu gracia, el camino de tu voluntad, nunca nos desviemos del sendero de la vida. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Eligieron siete hombres llenos del Espíritu Santo.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 6, 1-7
En aquellos días,
como aumentaba mucho el número de los discípulos, hubo ciertas
quejas de los judíos griegos contra los hebreos, de que no se atendía
bien a sus viudas en el servicio de caridad de todos los días.
Los Doce convocaron entonces a la multitud de los discípulos y les dijeron:
"No es justo que, dejando el ministerio de la palabra de Dios, nos dediquemos
a administrar los bienes. Escojan entre ustedes a siete hombres de buena reputación,
llenos del Espíritu Santo y de sabiduría, a los cuales encargaremos
este servicio. Nosotros nos dedicaremos a la oración y al servicio de
la palabra". Todos estuvieron de acuerdo y eligieron a Esteban, hombre
lleno de fe y del Espíritu Santo, a Felipe, Prócoro, Nicanor,
Timón, Pármenas y Nicolás, prosélito de Antioquía.
Se los presentaron a los apóstoles y éstos, después de
haber orado, les impusieron las manos.
Mientras tanto, la palabra de Dios iba cundiendo; en Jerusalén se multiplicaba
grandemente el número de los discípulos. Incluso un grupo numeroso
de sacerdotes había aceptado la fe. Palabra de Dios. T. Te
alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
32,1-2.4-5.18-19.
R/. El Señor cuida de aquellos que lo temen. Aleluya.
Que los justos aclamen al
Señor; es propio de los justos alabarlo. Demos gracias a Dios, al son
del arpa, que la lira acompañe nuestros cantos. R/.
Sincera es la palabra del Señor y todas sus acciones son leales. El ama
la justicia y el derecho, la tierra llena está de sus bondades. R/.
Cuida el Señor de aquellos que lo temen y en su bondad confían;
los salva de la muerte y en épocas de hambre les da vida. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO
R/. Aleluya, aleluya.
Resucitó Cristo, que creó todas las cosas y se compadeció de todos los hombres. R/.
EVANGELIO
Vieron a Jesús caminando sobre las aguas.
Del santo Evangelio según san Juan: 6, 16-21
Al atardecer del día
de la multiplicación de los panes, los discípulos de Jesús
bajaron al lago, se embarcaron y empezaron a atravesar hacia Cafarnaúm.
Ya había caído la noche y Jesús todavía no los había
alcanzado. Soplaba un viento fuerte y las aguas del lago se iban encrespando.
Cuando habían avanzado unos cinco o seis kilómetros, vieron a
Jesús caminando sobre las aguas, acercándose a la barca, y se
asustaron. Pero él les dijo: "Soy yo, no tengan miedo". Ellos
quisieron recogerlo a bordo y rápidamente la barca tocó tierra
en el lugar a donde se dirigían. Palabra del Señor. T.
Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Santifica, Señor, por tu piedad, estos dones y al recibir en oblación este sacrificio espiritual, conviértenos para ti en una perenne ofrenda. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I-V de Pascua, MR, pp. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 17,24
Padre, quiero que donde yo esté, estén también conmigo los que tú me has dado, para que contemplen la gloria que me diste, dice el Señor. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Al recibir, Señor, el don de estos sagrados misterios, te suplicamos humildemente que lo que tu Hijo nos mandó celebrar en memoria suya, nos aproveche para crecer en nuestra caridad fraterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.
O bien:
*San Martín,
Papa y mártir MR, 729 (716)
Es el último de los Papas mártires (646-654). El
emperador lo mandó arrestar por defender la fe cristiana de que Cristo
tiene voluntad divina y voluntad humana, puesto que es Dios y hombre verdadero.
Lo enviaron a Constantinopla, lo encarcelaron, lo condenaron a muerte, lo degradaron
públicamente y, por fin, lo enviaron al Quersoneso (Sebastopol), en donde
murió de hambre (656).
Del Común de mártires: para un mártir en Tiempo Pascual,
MR, p. 888 (927), o del Común de pastores: para un Papa, MR, p. 894 (933).
ORACIÓN COLECTA
Concédenos, Dios todopoderoso, soportar con invencible constancia de espíritu las adversidades del mundo, tú que no permitiste que san Martín, Papa y mártir, fuera atemorizado por las amenazas ni doblegado por los tormentos. Por nuestro Señor Jesucristo...
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. 4 Esd 2, 35
Una luz eterna, Señor, brillará para tus santos y vivirán para siempre. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Dios y Padre nuestro, que para gloria de tu Iglesia te dignaste coronar con la victoria del martirio a san Sabás Reyes Salazar, concede, bondadoso, que así como él imitó la pasión de tu Hijo, así nosotros, siguiendo sus huellas, merezcamos llegar a los gozos eternos. Por nuestro Señor Jesucristo ...
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Recibe, Señor, el sacrificio de reconciliación y alabanza que ofrecemos a tu majestad en la conmemoración del santo mártir Sabás, para que nos lleve a obtener el perdón y nos haga permanecer en continua acción de gracias. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 12, 24
Si el grano de trigo no cae en la tierra y muere, queda infecundo; pero, si muere, da fruto abundante. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Al celebrar con alegría
esta festividad y habiendo recibido tus dones celestiales, te pedimos, Señor,
que concedas, a quienes en este divino banquete proclamamos la muerte de tu
Hijo, que podamos participar, con los santos mártires, de su resurrección
y de su gloria. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Nació en Cocula, Jal. (Arquidiócesis de Guadalajara), el 5 de
diciembre de 1883. Vicario de Tototlán, Jal. (Diócesis de San
Juan de los Lagos). Sencillo y fervoroso, tenía especial devoción
a la Santísima Trinidad. También invocaba frecuentemente a las
ánimas del purgatorio. Procuró mucho la formación de los
niños jóvenes, tanto en la catequesis como en la enseñanza
de ciencias, oficios y artes, especialmente en la música. Cumplido y
abnegado en su ministerio. Exigía mucho respeto en todo lo referente
al culto y le gustaba que con prontitud se cumpliera cualquier deber. Cuando,
por el peligro que había para los sacerdotes, le aconsejaban que saliera
de Tototlán, él replicaba: «A mí aquí me dejaron
y aquí espero, a ver qué dispone Dios». En la Semana Santa
de 1927 llegaron las tropas federales y los agraristas buscando al Sr. Cura
Francisco Vizcarra y a sus ministros. Sólo encontraron al padre Reyes
y en él concentraron todo su odio. Lo tomaron preso, lo ataron fuertemente
a una columna del templo parroquial, lo torturaron tres días por medio
del hambre y la sed y con sadismo incalificable, le quemaron las manos porque
estaban consagradas. El 13 de abril de 1927, Miércoles Santo, fue conducido
al cementerio. Lo remataron a balazos, pero antes de morir, más con el
alma que con la voz, pudo gritar el sacerdote mártir.' «¡Viva
Cristo Rey!». (Vatican. va)
Blanco Domingo III de Pascua MR, p. 359 (360) / Lecc. I, p. 215 LH, Semana III del Salterio
LA PASCUA
Y EL PERDÓN DE LOS PECADOS
Hech 3. 13-15. 17-19; Sal 4; 1 Jn 2, 1-5; Lc 24, 35-48
Nuestras lecturas de hoy nos recuerdan una verdad revelada por la resurrección, pero a veces marginada. En el Evangelio, Cristo aparece por tercera vez en el día pascual y los discípulos están "sorprendidos y aterrorizados" (v. 37) pero no estupefactos, ya que han sido informados de la resurrección por María Magdalena (24, 9) y por otros discípulos (35-36). Quizá, por esto, Jesús enfatiza el perdón de los pecados. De hecho, él come con los discípulos (ver 41-42), lo cual es un signo de reconciliación y anuncia que ha muerto y resucitado para "el perdón de los pecados" (v. 48). Nuestra primera lectura es precisamente el anuncio de que, incluso, los pecados de los asesinos de Jesús pueden perdonarse (Hech 3, 19). En la segunda lectura, Juan afirma que "tenemos un intercesor" (1 Jn 2, 1) por nuestros pecados.
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Sal 65, 1-2
Aclama a Dios, tierra entera. Canten todos un himno a su nombre, den le gracias y alábenlo. Aleluya.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que tu pueblo se regocije siempre al verse renovado y rejuvenecido, para que, al alegrarse hoy por haber recobrado la dignidad de su adopción filial, aguarde seguro su gozosa esperanza el día de la resurrección. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Ustedes dieron muerte al autor de la vida, pero Dios lo resucitó de entre los muertos.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 3. 13-15. 17-19
En aquellos días,
Pedro tomó la palabra y dijo: "El Dios de Abraham, de Isaac y de
Jacob, el Dios de nuestros padres, ha glorificado a su siervo Jesús,
a quien ustedes entregaron a Pilato, y a quien rechazaron en su presencia, cuando
él ya había decidido ponerlo en libertad. Rechazaron al santo,
al justo, y pidieron el indulto de un asesino; han dado muerte al autor de la
vida, pero Dios lo resucitó de entre los muertos y de ello nosotros somos
testigos.
Ahora bien, hermanos, yo sé que ustedes han obrado por ignorancia, de
la misma manera que sus jefes; pero Dios cumplió así lo que había
predicho por boca de los profetas: que su Mesías tenía que padecer.
Por lo tanto, arrepiéntanse y conviértanse para que se les perdonen
sus pecados". Palabra de Dios. T. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
4, 2. 4. 7, 9.
R/. En ti, Señor, confío. Aleluya.
Tú que conoces lo
justo de mi causa, Señor, responde a mi clamor. Tú que me has
sacado con bien de mis angustias, apiádate y escucha mi oración.
R/.
Admirable en bondad ha sido el Señor para conmigo, y siempre que lo invoco
me ha escuchado; por eso en él confío. R/.
En paz, Señor, me acuesto y duermo en paz, pues sólo tú,
Señor, eres mi tranquilidad. R/.
SEGUNDA LECTURA
Cristo es la víctima de propiciación por nuestros pecados y por los del mundo entero.
De la primera carta del apóstol san Juan 2, 1-5
Hijitos míos: Les
escribo esto para que no pequen. Pero, si alguien peca, tenemos como intercesor
ante el Padre, a Jesucristo, el justo. Porque él se ofreció como
víctima de expiación por nuestros pecados, y no sólo por
los nuestros, sino por los del mundo entero.
En esto tenemos una prueba de que conocemos a Dios: en que cumplimos sus mandamientos.
Quien dice: "Yo lo conozco", pero no cumple sus mandamientos, es un
mentiroso y la verdad no está en él. Pero en aquel que cumple
su palabra, el amor de Dios ha llegado a su plenitud, y precisamente en esto
conocemos que estamos unidos a él. Palabra de Dios. T. Te
alabamos, Señor.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Lc 24, 32
R/. Aleluya, aleluya.
Señor Jesús, haz que comprendamos la Sagrada Escritura. Enciende nuestro corazón mientras nos hablas. R/.
EVANGELIO
Está escrito que Cristo tenía que padecer y tenía que resucitar de entre los muertos al tercer día.
Del santo Evangelio según san Lucas 24, 35-48
Cuando los dos discípulos
regresaron de Emaús y llegaron al sitio donde estaban reunidos los apóstoles,
les contaron lo que les había pasado por el camino y cómo habían
reconocido a Jesús al partir el pan.
Mientras hablaban de esas cosas, se presentó Jesús en medio de
ellos y les dijo: "La paz esté con ustedes". Ellos, desconcertados
y llenos de temor, creían ver un fantasma. Pero él les dijo: "No
teman; soy yo. ¿Por qué se espantan? ¿Por qué surgen
dudas en su interior? Miren mis manos y mis pies. Soy yo en persona. Tóquenme
y convénzanse: un fantasma no tiene ni carne ni huesos, como ven que
tengo yo". Y les mostró las manos y los pies. Pero como ellos no
acababan de creer de pura alegría y seguían atónitos, les
dijo: "¿Tienen aquí algo de comer?" Le ofrecieron un
trozo de pescado asado; él lo tomó y se puso a comer delante de
ellos.
Después les dijo: "Lo que ha sucedido es aquello de que les hablaba
yo, cuando aún estaba con ustedes: que tenía que cumplirse todo
lo que estaba escrito de mí en la ley de Moisés, en los profetas
y en los salmos".
Entonces les abrió el entendimiento para que comprendieran las Escrituras
y les dijo: "Está escrito que el Mesías tenía que
padecer y había de resucitar de entre los muertos al tercer día,
y que en su nombre se había de predicar a todas las naciones, comenzando
por Jerusalén, la necesidad de volverse a Dios para el perdón
de los pecados. Ustedes son testigos de esto". Palabra del Señor.
T. Gloria a ti, Señor Jesús.
Se dice Credo.
PLEGARIA UNIVERSAL
Invoquemos, amados hermanos,
a Cristo, triunfador del pecado y de la muerte, que siempre intercede por nosotros
diciendo: Te rogamos, Señor. R/. Te rogamos, Señor. O (Rey de
la gloria, resucítanos contigo).
Para que Cristo, el Señor, atraiga hacia sí el corazón
de los fieles y fortalezca sus voluntades, de manera que busquen los bienes
de allá arriba, donde él está sentado a la derecha de Dios,
roguemos al Señor.
Para que Cristo, amo supremo de la creación, haga que todos los pueblos
gocen abundantemente de la paz que en sus apariciones otorgó a los discípulos,
roguemos al Señor.
Para que Cristo, el destructor de la muerte y el médico de toda enfermedad,
se compadezca de los débiles y desdichados y aleje del mundo el hambre,
las guerras y todos los males, roguemos al Señor.
Para que Cristo, el Señor, salve y bendiga nuestra parroquia (comunidad),
y conceda la paz, la alegría y el descanso den las fatigas a los que
hoy nos hemos reunido aquí para celebrar su triunfo, roguemos al
Señor.
Señor Dios. que con la muerte gloriosa de tu Hijo, víctima
de propiciación por nuestros pecados, has puesto el fundamento de la
reconciliación y la paz, escucha las oraciones de tu Iglesia y haz de
nosotros signo y levadura de una humanidad nueva, pacificada por tu amor. Por
Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina, inmortal y glorioso, por los siglos de
los siglos.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Recibe, Señor, los dones que, jubilosa, tu Iglesia te presenta, y puesto que es a ti a quien debe su alegría, concédele también disfrutar de la felicidad eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I-V de Pascua, MR, pp. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Lc 24, 35
Los discípulos reconocieron al Señor Jesús, al partir el pan. Aleluya.
O bien (Año B opcional): Lc 24,46-47
Era necesario que Cristo padeciera y resucitara de entre los muertos al tercer día y que, en su nombre, se exhortara a todos los pueblos el arrepentimiento para el perdón de los pecados. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dirige, Señor, tu mirada compasiva sobre tu pueblo, al que te has dignado renovar con estos misterios de vida eterna, y concédele llegar un día a la gloria incorruptible de la resurrección. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Puede utilizarse la fórmula de bendición solemne, MR, p. 607 (602).
UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO.-El gran teólogo holandés, Edward Schillebeeckx (1914-2010), formuló su teoría sobre la resurrección de Jesús en torno a un elemento central de las narraciones pascuales que muchos pasan por alto. Se trata del perdón de los pecados. Para él, la fe pascual empezó cuando los discípulos se dieron cuenta de que su abandono del Señor había sido perdonado. Ya que un muerto no puede perdonar a los vivos, concluyeron que Jesús ha resucitado. Hay más que decir acerca de ella, pero esta teoría nos ayuda a darnos cuenta del mismo tema. Quizá pensemos que el perdón de los pecados sea un tema de la Cuaresma. No obstante, el Tiempo pascual encuadra el perdón en un marco más amplio: revela que es posible sólo por la resurrección; y es algo sumamente positivo, ya que nos da acceso a la vida resucitada.
Blanco Lunes III de Pascua MR, p. 361 (362) / Lecc. I, p. 886
REPITIENDO
LA MUERTE DE CRISTO
Hech 6,8-15; Sal 119; Jn 6,22-29
En su efectividad salvadora, la muerte de Jesús fue un acontecimiento único. No hay otra muerte que pueda hacer los cambios cósmicos que hizo ella. No obstante, hay una manera en que la muerte de Jesús es repetida muchas veces. Es lo que nos está diciendo el arresto de Esteban en la primera lectura. Es un arresto que tiene similitudes notables con el de Jesús: los dos hacen "prodigios y señales en el pueblo" (v. 9); los dos son arrestados de manera escondida (v. 12); los dos han sido hechos presos por fanáticos (Jesús por los saduceos, y Esteban por los judíos de lengua griega); y los dos son acusados de hablar contra el Templo y de blasfemar (vv. 11 y 13). Todos los cristianos estamos destinados a reproducir la muerte de Jesús cuando tenemos que enfrentar el mal y su violencia.
ANTÍFONA DE ENTRADA
Ha resucitado el Buen Pastor, que dio la vida por sus ovejas y se entregó a la muerte por su rebaño. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Concédenos, Dios todopoderoso, que, despojándonos del modo de proceder del hombre viejo, nuestra forma de vida corresponda a la naturaleza que restauraste en nosotros gracias a los sacramentos pascuales. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
No podían refutar la sabiduría inspirada con que hablaba Esteban.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 6, 8-15
En aquellos días,
Esteban, lleno de gracia y de poder, realizaba grandes prodigios y señales
entre la gente.
Algunos judíos de la sinagoga llamada "de los Libertos", procedentes
de Cirene, Alejandría, Cilicia y Asia, se pusieron a discutir con Esteban;
pero no podían refutar la sabiduría inspirada con que hablaba.
Entonces sobornaron a algunos hombres para que dijeran: "Nosotros hemos
oído a este hombre blasfemar contra Moisés y contra Dios".
Alborotaron al pueblo, a los ancianos y a los escribas; cayeron sobre Esteban,
se apoderaron de él por sorpresa y lo llevaron ante el sanedrín.
Allí presentaron testigos falsos, que dijeron: "Este hombre no deja
de hablar contra el lugar santo del templo y contra la ley. Lo hemos oído
decir que ese Jesús de Nazaret va a destruir el lugar santo y a cambiar
las tradiciones que recibimos de Moisés".
Los miembros del sanedrín miraron a Esteban y su rostro les pareció
tan imponente como el de un ángel. Palabra de Dios. T. Te
alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
118,23-24.26-27.29-30.
R/. Dichoso el que cumple la voluntad del Señor. Aleluya.
Aunque los poderosos se
burlen de mí, yo seguiré observando fielmente tu ley. Tus mandamientos,
Señor, son mi alegría; ellos son también mis consejeros.
R/.
Te conté mis necesidades y me escuchaste; enséñame, Señor,
tu voluntad. Dame nueva luz para conocer tu ley y para meditar las maravillas
de tu amor. R/.
Apártame de los caminos falsos y dame la gracia de cumplir tu voluntad.
He escogido el camino de la lealtad a tu voluntad y a tus mandamientos. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Mt 4, 4
R/. Aleluya, aleluya.
No sólo de pan vive el hombre, sino también de toda palabra que sale de la boca de Dios. R/.
EVANGELIO
No trabajen por el alimento que se acaba, sino por el que dura para la vida eterna.
Del santo Evangelio según san Juan: 6, 22-29
Después de la multiplicación
de los panes, cuando Jesús dio de comer a cinco mil hombres, sus discípulos
lo vieron caminando sobre el lago. Al día siguiente, la multitud, que
estaba en la otra orilla del lago, se dio cuenta de que allí no había
más que una sola barca y de que Jesús no se había embarcado
con sus discípulos, sino que éstos habían partido solos.
En eso llegaron otras barcas desde Tiberíades al lugar donde la multitud
había comido el pan. Cuando la gente vio que ni Jesús ni sus discípulos
estaban allí, se embarcaron y fueron a Cafarnaúm para buscar a
Jesús.
Al encontrarlo en la otra orilla del lago, le preguntaron: "Maestro, ¿cuándo
llegaste acá?" Jesús les contestó: "Yo les aseguro
que ustedes no me andan buscando por haber visto señales milagrosas,
sino por haber comido de aquellos panes hasta saciarse. No trabajen por ese
alimento que se acaba, sino por el alimento que dura para la vida eterna y que
les dará el Hijo del hombre; porque a éste, el Padre Dios lo ha
marcado con su sello".
Ellos le dijeron: "¿Qué necesitamos para llevar a cabo las
obras de Dios?" Respondió Jesús: "La obra de Dios consiste
en que crean en aquel a quien él ha enviado". Palabra del
Señor. T. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Suba hasta ti, Señor, nuestra oración, acompañada por estas ofrendas, para que, purificados por tu bondad, nos dispongas para celebrar el sacramento de tu inmenso amor. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I-V de Pascua, MR, p. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 14, 27
La paz les dejo, mi paz les doy; pero yo no se la doy como la da el mundo, dice el Señor. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dios todopoderoso y eterno,
que, por la resurrección de Cristo, nos has hecho renacer a la vida eterna,
multiplica en nosotros el efecto de este sacramento pascual, e infunde en nuestros
corazones el vigor que comunica este alimento de salvación. Por Jesucristo,
nuestro Señor.
Blanco Martes III de Pascua MR, p. 362 (363) / Lecc. I, p.888 101
"YO
SOY EL PAN DE VIDA"
Hech 7, 51-8, 1; Sal 30; Jn 6, 30-35
El uso del pan o el alimento en sentido figurado es conocido en las Escrituras. Los profetas lo aplican a la palabra de Dios: Am 8, 11, Is 55, 1-11. Los sapienciales lo aplican a la sabiduría: Prov 1,-6. Tal vez inspirado en esta tradición, Jesús proclama en nuestro Evangelio que no solo tiene el pan de vida, sino que él mismo es el tal pan. No sabemos, leyendo sólo sus palabras en nuestro Evangelio, si está afirmando que es el pan en el sentido de la palabra de Dios o en el sentido de la sabiduría divina o aún en el sentido de la Eucaristía. Quizá quiere decir que es pan en todos estos sentidos. De todas maneras, sus palabras deben sorprendernos por la generosidad humilde que revelan, porque implican que Dios se ofrece al ser humano para ser consumido.
ANTÍFONA DE ENTRADA Apoc 19, 5; 12, 10
Alaben a nuestro Dios todos cuantos lo temen, pequeños y grandes, porque ha llegado ya la salvación, el poder y el reinado de su Cristo. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que abres la entrada del reino celestial a los que han renacido por el agua y el Espíritu Santo, aumenta sobre tus siervos la gracia que les diste, para que, purificados de todo pecado no les falte ningún bien de los que, en tu bondad, les tienes prometido. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Señor Jesús, recibe mi espíritu.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 7, 51-8,
En aquellos días,
habló Esteban ante el sanedrín, diciendo: "Hombres de cabeza
dura, cerrados de corazón y de oídos. Ustedes resisten siempre
al Espíritu Santo; ustedes son iguales a sus padres. ¿A qué
profeta no persiguieron sus padres? Ellos mataron a los que anunciaban la venida
del justo, al que ahora ustedes han traicionado y dado muerte. Recibieron la
ley por medio de los ángeles y no la han observado".
Al oír estas cosas, los miembros del sanedrín se enfurecieron
y rechinaban los dientes de rabia contra él. Pero Esteban, lleno del
Espíritu Santo, miró al cielo, vio la gloria de Dios y a Jesús,
que estaba de pie a la derecha de Dios, y dijo: "Estoy viendo los cielos
abiertos y al Hijo del hombre de pie a la derecha de Dios".
Entonces los miembros del sanedrín gritaron con fuerza, se taparon los
oídos y todos a una se precipitaron sobre él. Lo sacaron fuera
de la ciudad y empezaron a apedrearlo. Los falsos testigos depositaron sus mantos
a los pies de un joven, llamado Saulo. Mientras lo apedreaban, Esteban repetía
esta oración: "Señor Jesús, recibe mi espíritu".
Después se puso de rodillas y dijo con fuerte voz: "Señor,
no les tomes en cuenta este pecado". Diciendo esto, se durmió en
el Señor. Y Saulo estuvo de acuerdo en que mataran a Esteban.
Palabra de Dios. T. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
30, 3cd-4. 6ab. 7b. 8a.17. 21ab.
R/. En tus manos, Señor, encomiendo mi espíritu. Aleluya.
Sé tú, Señor,
mi fortaleza y mi refugio, la muralla que me salve. Tú, que eres mi fortaleza
y mi defensa, por tu nombre, dirígeme y guíame. R/.
En tus manos encomiendo mi espíritu y tú, mi Dios leal, me librarás.
En ti, Señor, deposito mi confianza y tu misericordia me llenará
de alegría. R/.
Vuelve, Señor, tus ojos a tu siervo y sálvame, por tu misericordia;
cuídame, Señor, y escóndeme junto a ti, lejos de las intrigas
de los hombres. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 6, 35
R/. Aleluya, aleluya.
Yo soy el pan de la vida, dice el Señor; el que viene a mí ya no tendrá hambre. R/.
EVANGELIO
No fue Moisés, sino mi Padre, quien les da el verdadero pan del cielo.
Del santo Evangelio según san Juan: 6, 30-35
En aquel tiempo, la gente
le preguntó a Jesús: "¿Qué señal vas
a realizar tú, para que la veamos y podamos creerte? ¿Cuáles
son tus obras? Nuestros padres comieron el maná en el desierto, como
está escrito: Les dio a comer pan del cielo".
Jesús les respondió: "Yo les aseguro: No fue Moisés
quien les dio pan del cielo; es mi Padre quien les da el verdadero pan del cielo.
Porque el pan de Dios es aquel que baja del cielo y da la vida al mundo".
Entonces le dijeron: "Señor, danos siempre de ese pan". Jesús
les contesta: "Yo soy el pan de la vida. El que viene a mí no tendrá
hambre, y el que cree en mí nunca tendrá sed". Palabra
del Señor. T. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Recibe, Señor, los dones que, jubilosa, tu Iglesia te presenta, y puesto que es a ti a quien debe su alegría, concédele también disfrutar de la felicidad eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I-V de Pascua, p. 499-503 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Rom 6, 8
Si hemos muerto con Cristo, creemos que también viviremos con él. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dirige, Señor, tu mirada compasiva sobre tu pueblo, al que te has dignado renovar con estos misterios de vida eterna, y concédele llegar un día a la gloria incorruptible de la resurrección. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Blanco Miércoles III de Pascua MR, p. 363 (364) / Lecc. I, p. 890
¿CÓMO
ACTÚA DIOS EN NUESTRAS VIDAS?
Hech 8, 1-8; Sal 65; Jn 6, 35-40
Con nuestra primera lectura, Lucas intenta proveer una transición entre la comunidad cristiana en Jerusalén y la marcha inexorable de la Palabra de Dios fuera de la ciudad santa a Samaria y al mundo entero. La persecución sirve como la causa histórica de la difusión universal del Evangelio. Al mismo tiempo, tal difusión es causada por la voluntad de Dios ya que la expulsión de espíritus impuros y la sanación de paralíticos y lisiados (v. 7) solo suceden con la cooperación divina. ¿Cómo puede un acontecimiento, como la predicación de la Palabra, ser originado por dos diferentes causas? Es la misma pregunta que hacemos cuando un suceso en nuestras vidas parece ser causado por circunstancias históricas y también por Dios. Es la pregunta acerca de la acción divina en el mundo que todavía deja perplejos, incluso, a los pensadores más astutos.
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Sal 70. 8. 23
Mi boca, Señor, se llene de alabanzas, para que pueda cantarte; y así mis labios se llenarán de júbilo. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Muéstrate propicio, Señor, con tu familia santa y protégela benignamente, de manera que a quienes concediste la gracia de la fe, les otorgues también la participación eterna en la resurrección de tu Unigénito. Él, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Al pasar de un lugar a otro, iban difundiendo el Evangelio.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 8, 1-8
El mismo día de la
muerte de Esteban, se desató una violenta persecución contra la
Iglesia de Jerusalén, y todos, menos los apóstoles, se dispersaron
por Judea y por Samaria. Unos hombres piadosos sepultaron a Esteban e hicieron
gran duelo por él. Entre tanto, Saulo hacía estragos en la Iglesia:
entraba en las casas para llevarse a hombres y mujeres y meterlos en la cárcel.
Los que se habían dispersado, al pasar de un lugar a otro, iban difundiendo
el Evangelio. Felipe bajó a la ciudad de Samaria y predicaba ahí
a Cristo. La multitud escuchaba con atención lo que decía Felipe,
porque habían oído hablar de los milagros que hacía y los
estaban viendo: de muchos poseídos salían los espíritus
inmundos, lanzando gritos, y muchos paralíticos y lisiados quedaban curados.
Esto despertó gran alegría en aquella ciudad. Palabra
de Dios. T. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
65, 1-3a. 4-5. 6-7a.
R/. Las obras del Señor son admirables. Aleluya.
Que aclame al Señor
toda la tierra. Celebremos su gloria y su poder, cantemos un himno de alabanza,
digamos al Señor: "Tu obra es admirable". R/.
Que se postre ante ti la tierra entera y celebre con cánticos tu nombre.
Admiremos las obras del Señor, los prodigios que ha hecho por los hombres.
R/.
Él transformó el Mar Rojo en tierra firme y los hizo cruzar el
Jordán a pie enjuto. Llenémonos por eso de gozo y gratitud: el
Señor es eterno y poderoso. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Jn 6, 40
R/. Aleluya, aleluya.
El que cree en mí tiene vida eterna, dice el Señor, y yo lo resucitaré en el último día. R/.
EVANGELIO
La voluntad de mi Padre consiste en que todo el que vea al Hijo y crea en Él, tenga vida eterna.
Del santo Evangelio según san Juan: 6, 35-40
En aquel tiempo, Jesús
dijo a la multitud: "Yo soy el pan de la vida. El que viene a mí
no tendrá hambre, y el que cree en mí nunca tendrá sed.
Pero como ya les he dicho: me han visto y no creen. Todo aquel que me da el
Padre viene hacia mí; y al que viene a mí yo no lo echaré
fuera, porque he bajado del cielo, no para hacer mi voluntad, sino la voluntad
del que me envió.
Y la voluntad del que me envió es que yo no pierda nada de lo que Él
me ha dado, sino que lo resucite en el último día. La voluntad
de mi Padre consiste en que todo el que vea al Hijo y crea en Él, tenga
vida eterna y yo lo resucite en el último día". Palabra
del Señor. T. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Concédenos, Señor,
vivir siempre llenos de gratitud por estos misterios pascuales que celebramos,
para que, continuamente renovados por su acción, se conviertan para nosotros
en causa de eterna felicidad.
Por Jesucristo. nuestro Señor.
Prefacio I-V de Pascua, MR, pp. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN
Resucitó el Señor y nos iluminó a nosotros, los redimidos con su Sangre. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor y Dios nuestro, escucha nuestras oraciones, para que la participación en los sacramentos de nuestra redención nos ayude en la vida presente y nos alcance las alegrías eternas. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Blanco Jueves III de Pascua MR, p. 364 (365) / Lecc. I, p. 892
SE NECESITA
UNA ATRACCIÓN INTERIOR
Hech 8, 26-40; Sal 65; Jn 6, 44-51
El mensaje de salud se ofrece por medio de las palabras, los actos, y la persona de Cristo. Tales realidades exteriores, sin embargo, no son suficientes para abrirnos a Jesús y gustar de su sabiduría, porque los seres humanos podemos ser paralizados por el miedo de cambiar, las dudas intelectuales, la torpeza espiritual, y por mil otras cosas interiores. Por eso, se necesita la gracia interior de Dios. Es a esta gracia que Jesús hace referencia en nuestro Evangelio cuando afirma que "nadie puede venir a mí si no lo atrae el Padre" (v. 44). Cuando los demás tienen dificultad de creer, o no parecen estar interesados cuando predicamos la Palabra de Dios con todos nuestros esfuerzos, no hay motivo para enojarnos o abandonarnos a la desesperanza. Tenemos que dejar que Dios actúe, desde su manera sapiente, dentro de las personas.
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. 15, 1-2
Cantemos al Señor, pues su victoria es grande. Mi fortaleza y mi alabanza es el Señor, Él es mi salvación. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Dios todopoderoso y eterno, concédenos aprovechar bien los dones de tu bondad en estos días en que, por gracia tuya, la hemos experimentado más plenamente, para que, libres de las tinieblas del error, nos hagas estar adheridos firmemente a tu verdad. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Aquí hay agua. ¿Hay alguna dificultad para que me bautices?
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 8, 26-40
En aquellos días,
un ángel del Señor le dijo a Felipe: "Levántate y
toma el camino del sur, que va de Jerusalén a Gaza y que es poco transitado".
Felipe se puso en camino. Y sucedió que un etíope, alto funcionario
de Candaces, reina de Etiopía, y administrador de sus tesoros, que había
venido a Jerusalén para adorar a Dios, regresaba en su carro, leyendo
al profeta Isaías.
Entonces el Espíritu le dijo a Felipe: "Acércate y camina
junto a ese carro". Corrió Felipe, y oyendo que el hombre leía
al profeta Isaías, le preguntó: "¿Entiendes lo que
estás leyendo?" Él le contestó: "¿Cómo
voy a entenderlo, si nadie me lo explica?" Entonces invitó a Felipe
a subir y a sentarse junto a él.
l pasaje de la Escritura que estaba leyendo, era éste: Como oveja fue
llevado a la muerte; como cordero que no se queja frente al que lo trasquila,
así él no abrió la boca. En su humillación no se
le hizo justicia. ¿Quién podrá hablar de su descendencia,
puesto que su vida ha sido arrancada de la tierra'?
El etíope le preguntó a Felipe: "Dime, por favor: ¿De
quién dice esto el profeta, de sí mismo o de otro?" Felipe
comenzó a hablarle y partiendo de aquel pasaje, le anunció el
Evangelio de Jesús. Siguieron adelante, llegaron a un sitio donde había
agua y dijo el etíope: "Aquí hay agua. ¿Hay alguna
dificultad para que me bautices?" Felipe le contestó: "Ninguna,
si crees de todo corazón". Respondió el etíope: "Creo
que Jesús es el Hijo de Dios". Mandó parar el carro, bajaron
los dos al agua y Felipe lo bautizó. Cuando salieron del agua, el Espíritu
del Señor arrebató a Felipe. El etíope ya no lo vio más
y prosiguió su viaje, lleno de alegría. En cuanto a Felipe, se
encontró en la ciudad de Azoto y evangelizaba los poblados que encontraba
a su paso, hasta que llegó a Cesárea. Palabra de Dios.
T. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
65,8-9.16-17.20.
R/. Tu salvación, Señor, es para todos. Aleluya.
Naciones, bendigan a nuestro
Dios, hagan resonar sus alabanzas, porque él nos ha devuelto la vida
y no dejó que tropezaran nuestros pies. R/.
Cuantos temen a Dios, vengan y escuchen, y les diré lo que ha hecho por
mí; a él dirigí mis oraciones y mi lengua le cantó
alabanzas. R/.
Bendito sea Dios, que no rechazó mi súplica, ni me retiró
su gracia. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 6, 51
R/. Aleluya, aleluya.
Yo soy el pan vivo que ha bajado del cielo, dice el Señor; el que coma de este pan vivirá para siempre. R/.
EVANGELIO
Yo soy el pan vivo, que ha bajado del cielo.
Del santo Evangelio según san Juan: 6, 44-51
En aquel tiempo, Jesús
dijo a los judíos: "Nadie puede venir a mí, si no lo atrae
el Padre, que me ha enviado; y a ése yo lo resucitaré el último
día. Está escrito en los profetas: Todos serán discípulos
de Dios. Todo aquel que escucha al Padre y aprende de él, se acerca a
mí. No es que alguien haya visto al Padre, fuera de aquel que procede
de Dios. Ese sí ha visto al Padre.
Yo les aseguro: el que cree en mí, tiene vida eterna. Yo soy el pan de
la vida. Sus padres comieron el maná en el desierto y sin embargo, murieron.
Este es el pan que ha bajado del cielo para que, quien lo coma, no muera. Yo
soy el pan vivo que ha bajado del cielo; el que coma de este pan vivirá
para siempre, y el pan que yo les voy a dar es mi carne para que el mundo tenga
vida". Palabra del Señor. T. Gloria a ti, Señor
Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Dios nuestro, que por el
santo valor de este sacrificio nos hiciste participar de tu misma y gloriosa
vida divina, concédenos que, así como hemos conocido tu verdad,
de igual manera vivamos de acuerdo con ella.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I-V de Pascua, MR, pp. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN 2 Cor 5, 15
Cristo murió por todos, para que los que viven ya no vivan para sí mismos, sino para él, que murió y resucitó por ellos. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, muéstrate benigno con tu pueblo, y ya que te dignaste alimentarlo con los misterios celestiales, hazlo pasar de su antigua condición de pecado a una vida nueva. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Blanco Viernes III de Pascua MR, p. 365 (366) / Lecc. I, p. 895
EL INSTRUMENTO
ELEGIDO POR DIOS
Hech 9, 1-20; Sal 116; Jn 6, 52-59
El que será protagonista principal de la siguiente etapa evangelizadora y que había sido mencionado de pasada en Hch 7,58, es decir Saulo-Pablo, es ahora presentado por Lucas a sus lectores a través de un relato que narra en detalle su misterioso encuentro con Jesús, el Señor. Este episodio es tan importante para Lucas en el conjunto de su obra que lo narra dos veces más (22, 4-16 y 26,9-18). Parece que la narración se originó en la tradición popular que se difundió entre los miembros de las iglesias fundadas por el apóstol, aunque el énfasis en lo maravilloso tiene una cierta conexión con la conversión de Heliodoro en 2 Mac 3. Es un episodio importante porque, por medio de Pablo, el "instrumento elegido" por Dios (v. 15), la Palabra divina se difunde hasta los confines del orbe.
ANTÍFONA DE ENTRADA Apoc 5, 12
Digno es el Cordero
que fue sacrificado, de recibir el poder, la riqueza, la sabiduría, la
fuerza y el honor.
Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Dios todopoderoso, concede a quienes hemos conocido la gracia de la resurrección del Señor, resucitar, por el amor del Espíritu Santo, a una vida nueva. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Es el instrumento escogido por mí, para que me dé a conocer a las naciones.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 9, 1-20
En aquellos días,
Saulo, amenazando todavía de muerte a los discípulos del Señor,
fue a ver al sumo sacerdote y le pidió, para las sinagogas de Damasco,
cartas que lo autorizaran para traer presos a Jerusalén a todos aquellos
hombres y mujeres que seguían la nueva doctrina.
Pero sucedió que, cuando se aproximaba a Damasco, una luz del cielo lo
envolvió de repente con su resplandor. Cayó por tierra y oyó
una voz que le decía: "Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues?"
Preguntó él: "¿Quién eres, Señor?"
La respuesta fue: "Yo soy Jesús, a quien tú persigues. Levántate.
Entra en la ciudad y ahí se te dirá lo que tienes que hacer".
Los hombres que lo acompañaban en el viaje se habían detenido,
mudos de asombro, pues oyeron la voz, pero no vieron a nadie. Saulo se levantó
del suelo, y aunque tenía abiertos los ojos, no podía ver. Lo
llevaron de la mano hasta Damasco y ahí estuvo tres días ciego,
sin comer ni beber.
Había en Damasco un discípulo que se llamaba Ananías, a
quien se le apareció el Señor y le dijo: "Ananías".
El respondió: "Aquí estoy, Señor". El Señor
le dijo: "Ve a la calle principal y busca en casa de Judas a un hombre
de Tarso, llamado Saulo, que está orando". Saulo tuvo también
la visión de un hombre llamado Ananías, que entraba y le imponía
las manos para que recobrara la vista.
Ananías contestó: "Señor, he oído a muchos
hablar de ese individuo y del daño que ha hecho a tus fieles en Jerusalén.
Además, trae autorización de los sumos sacerdotes para poner presos
a todos los que invocan tu nombre". Pero el Señor le dijo: "No
importa. Tú ve allá, porque yo lo he escogido como instrumento,
para que me dé a conocer a las naciones, a los reyes y a los hijos de
Israel. Yo le mostraré cuánto tendrá que padecer por mi
causa".
Ananías fue allá, entró en la casa, le impuso las manos
a Saulo y le dijo: "Saulo, hermano, el Señor Jesús, que se
te apareció en el camino, me envía para que recobres la vista
y quedes lleno del Espíritu Santo". Al instante, algo como escamas
se le desprendió de los ojos y recobró la vista. Se levantó
y lo bautizaron. Luego comió y recuperó las fuerzas. Se quedó
unos días con los discípulos en Damasco y se puso a predicar en
las sinagogas, afirmando que Jesús era el Hijo de Dios. Palabra
de Dios. T. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
116,1.2.
R/. Que aclamen al Señor todos los pueblos. Aleluya.
Que alaben al Señor,
todas las naciones, que lo aclamen todos los pueblos. R/.
Porque grande es su amor hacia nosotros y su fidelidad dura por siempre. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 6, 56
R/. Aleluya, aleluya.
El que come mi carne y bebe mi sangre permanece en mí y yo en él, dice el Señor. R/.
EVANGELIO
Mi carne es verdadera comida y mi sangre es verdadera bebida.
Del santo Evangelio según san Juan: 6, 52-59
En aquel tiempo, los judíos
se pusieron a discutir entre sí: "¿Cómo puede éste
darnos a comer su carne?"
Jesús les dijo: "Yo les aseguro: Si no comen la carne del Hijo del
hombre y no beben su sangre, no podrán tener vida en ustedes. El que
come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna y yo lo resucitaré
el último día.
Mi carne es verdadera comida y mi sangre es verdadera bebida. El que come mi
carne y bebe mi sangre, permanece en mí y yo en él. Como el Padre,
que me ha enviado, posee la vida y yo vivo por él, así también
el que me come vivirá por mí.
Este es el pan que ha bajado del cielo; no es como el maná que comieron
sus padres, pues murieron. El que come de este pan vivirá para siempre".
Esto lo dijo Jesús enseñando en la sinagoga de Cafarnaúm.
Palabra del Señor. T. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Santifica, Señor, por tu piedad, estos dones y al recibir en oblación este sacrificio espiritual, conviértenos para ti en una perenne ofrenda. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I-V de Pascua, MR, pp. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN
El Crucificado resucitó de entre los muertos y nos ha redimido. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Al recibir, Señor, el don de estos sagrados misterios, te suplicamos humildemente que lo que tu Hijo nos mandó celebrar en memoria suya, nos aproveche para crecer en nuestra caridad fraterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Blanco Sábado III de Pascua MR, p. 366 (367) / Lecc. I, p. 897
UN RECHAZO
QUE LLEGÓ A SER MOTIVO DE FE
Hech 9,31-42; Sal 115; Jn 6,60-69
El rechazo forma parte del tema de la Sabiduría, que Juan tomó del Antiguo Testamento y utilizó en el discurso sobre el pan en su capítulo 6. La invitación de comer y beber en su mesa, emitida por la Sabiduría, es rechazada por algunos insensatos (véase Prov 14). Así mismo, el pan de vida ofrecido por Jesús es rechazado por algunos en nuestro Evangelio porque "es dura esta enseñanza" (v. 60). Pero el rechazo no es la última palabra. Al contrario, es el motivo de la profesión de Pedro en los versos 67-69, la cual es probablemente una versión de la profesión del apóstol en Cesárea de Filipo, según los sinópticos (Mc 8,27-33; Mt 16, 13-20; Lc 9, 18-21). También hoy, el rechazo no es siempre la última palabra: aunque puede resultar desalentador, el rechazo puede transformarse en algo sorprendentemente positivo.
ANTÍFONA DE ENTRADA Col 2, 12
Ustedes, por el bautismo,
han sido sepultados con Cristo, y con él han sido resucitados, porque
han creído en el poder de Dios, que lo resucitó de entre los muertos.
Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que renovaste en la fuente bautismal a los que creen en ti, protege a quienes renacieron en Cristo, para que, evitando todas las asechanzas del error, conserven fielmente la gracia de tu bendición. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
La comunidad cristiana crecía, animada por el Espíritu Santo.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 9, 31-42
En aquellos días,
las comunidades cristianas gozaban de paz en toda Judea, Galilea y Samaria,
con lo cual se iban consolidando, progresaban en la fidelidad a Dios y se multiplicaban,
animadas por el Espíritu Santo.
Pedro recorría toda la región y una vez fue a visitar a los fieles
que vivían en Lida. Ahí encontró a un hombre, llamado Eneas,
que tenía ya ocho años de estar en cama, paralítico. Pedro
le dijo: "Eneas, Jesucristo te da la salud. Levántate y tiende tu
cama". Eneas se levantó inmediatamente; y todos los habitantes de
Lida y de la llanura de Sarón que lo vieron, se convirtieron al Señor.
Había en Jafa, entre los discípulos, una mujer llamada Tabitá
(que significa "gacela"), la cual hacía infinidad de obras
buenas y repartía limosnas. En aquellos días cayó enferma
y murió. Lavaron su cadáver y lo tendieron en una habitación
del segundo piso. Como Lida está cerca de Jafa, los discípulos,
sabiendo que Pedro estaba allá, enviaron dos hombres para suplicarle
que fuera a Jafa sin tardar.
Pedro fue con ellos. Tan pronto como llegó, lo condujeron a la habitación
del segundo piso. Allí lo rodearon todas las viudas, llorando y mostrándole
las túnicas y los vestidos que Tabitá les había hecho,
cuando aún vivía.
Pedro mandó salir a todos, se postró de rodillas y se puso a orar;
luego, dirigiéndose a la muerta, dijo: "Tabitá, levántate".
Ella abrió los ojos y al ver a Pedro, se incorporó. Él
la tomó de la mano y la levantó; llamó a los fieles y a
las viudas y se la entregó viva. Esto se supo por toda Jafa y muchos
creyeron en el Señor. Palabra de Dios. T. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
115,12-13.14-15.16-17.
R/. ¿Cómo le pagaré al Señor todo el bien que
me ha hecho? Aleluya.
¿Cómo le pagaré
al Señor todo el bien que me ha hecho? Levantaré el cáliz
de salvación e invocaré el nombre del Señor. R/.
Cumpliré mis promesas al Señor ante todo su pueblo. A los ojos
de Dios es muy penoso que mueran sus amigos. R/.
De la muerte, Señor, me has librado, a mí, tu esclavo e hijo de
tu esclava. Te ofreceré con gratitud un sacrificio e invocaré
tu nombre. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Jn 6, 63. 68
R/. Aleluya, aleluya.
Tus palabras, Señor, son espíritu y vida. Tú tienes palabras de vida eterna. R/.
EVANGELIO
Señor, ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de vida eterna.
Del santo Evangelio según san Juan: 6, 60-69
En aquel tiempo, muchos
discípulos de Jesús dijeron al oír sus palabras: "Este
modo de hablar es intolerable, ¿quién puede admitir eso?"
Dándose cuenta Jesús de que sus discípulos murmuraban,
les dijo: "¿Esto los escandaliza? ¿Qué sería
si vieran al Hijo del hombre subir a donde estaba antes? El Espíritu
es quien da la vida; la carne para nada aprovecha. Las palabras que les he dicho
son espíritu y vida, y a pesar de esto, algunos de ustedes no creen".
(En efecto, Jesús sabía desde el principio quienes no creían
y quién lo habría de traicionar). Después añadió:
"Por eso les he dicho que nadie puede venir a mí, si el Padre no
se lo concede"
Desde entonces, muchos de sus discípulos se echaron para atrás
y ya no querían andar con él. Entonces Jesús les dijo a
los Doce: "¿También ustedes quieren dejarme?" Simón
Pedro le respondió: "Señor, ¿a quién iremos?
Tú tienes palabras de vida eterna; y nosotros creemos y sabemos que tú
eres el Santo de Dios". Palabra del Señor. T. Gloria
a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Recibe, Señor, con bondad, estas ofrendas de tu familia santa, para que, con la ayuda de tu protección, conserve los dones recibidos y llegue a poseer los eternos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I-V de Pascua, MR, pp. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 17, 20-21
Padre, te ruego por ellos, para que sean uno en nosotros y el mundo pueda creer que tú me has enviado, dice el Señor. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Protege, Señor, con amor constante a quienes has salvado, para que, una vez redimidos por la pasión de tu Hijo, se llenen ahora de alegría por su resurrección. El que vive y reina por los siglos de los siglos.
Blanco Domingo IV de Pascua Domingo del Buen Pastor, Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones [970 Aniversario del martirio de san Román Adame] MR, p. 367 (368) / Lecc. I, p. 218 LH, semana IV del Salterio
Otros Santos: Santo Niño Jesús de la Salud. Agapito I, LII Papa; Conrado de Parzham. Hermano lego capuchino.
EL PAPEL
DE CRISTO RESUCITADO
Hech 4,8-12; Sal 117; 1 Jn 3,1-2; Jn 10,11-18
Nuestras lecturas continúan la meditación sobre el misterio de la resurrección que es el tema central de este tiempo pascual. Hoy meditamos sobre el papel el Cristo resucitado en nuestras vidas. ¿Qué es lo que hace para nosotros después de su resurrección? Con su afirmación de que Jesús es "el único Nombre por el cual podemos salvarnos" (v. 12), la primera lectura proclama que el Cristo resucitado es el mediador de la salvación y el único. El Evangelio afirma algo parecido porque sostiene que Cristo es el pastor de todas las ovejas y basa toda su obra en "el mandato que recibí de mi padre" (v. 18), es decir, el mandato de ser mediador de la salvación. La segunda lectura propone que esta salvación es grande y, aunque no sabemos todo acerca de ella, significa que "seremos semejantes a Dios" (v. 2).
ANTÍFONA ENTRADA Cfr. Sal 32, 5-6
La tierra está llena del amor del Señor y su palabra hizo los cielos. Aleluya.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Dios todopoderoso y eterno, te pedimos que nos lleves a gozar de las alegrías celestiales para que tu rebaño a pesar de su fragilidad, llegue también a donde lo precedió su glorioso Pastor. Él, que vive y reina contigo.
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Sólo Jesús puede salvarnos.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 4, 8-12
En aquellos días, Pedro, lleno del Espíritu Santo, dijo: "Jefes del pueblo y ancianos: Puesto que hoy se nos interroga acerca del beneficio hecho a un hombre enfermo, para saber cómo fue curado, sépanlo ustedes y sépalo todo el pueblo de Israel: este hombre ha quedado sano en el nombre de Jesús de Nazaret, a quien ustedes crucificaron y a quien Dios resucitó de entre los muertos. Este mismo Jesús es la piedra que ustedes, los constructores, han desechado y que ahora es la piedra angular. Ningún otro puede salvarnos, pues en la tierra no existe ninguna otra persona a quien Dios haya constituido como salvador nuestro". Palabra de Dios. T. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
117,1 y 8-9. 21-23. 26y 28cd y 29.
R/. La piedra que desecharon los constructores es ahora la piedra angular.
Aleluya.
Te damos gracias, Señor,
porque eres bueno, porque tu misericordia es eterna. Más vale refugiarse
en el Señor, que poner en los hombres la confianza; más vale refugiarse
en el Señor, que buscar con los fuertes una alianza. R/.
Te doy gracias, Señor, pues me escuchaste y fuiste para mí la
salvación. La piedra que desecharon los constructores, es ahora la piedra
angular. Esto es obra de la mano del Señor, es un milagro patente. R/.
Bendito el que viene en nombre del Señor. Que Dios desde su templo nos
bendiga. Tú eres mi Dios, y te doy gracias. Tú eres mi Dios, y
yo te alabo. Te damos gracias, Señor, porque eres bueno, porque tu misericordia
es eterna. R/.
SEGUNDA LECTURA
Veremos a Dios tal cual es.
De la primera carta del apóstol san Juan 3, 1-2
Queridos hijos: Miren cuánto
amor nos ha tenido el Padre, pues no sólo nos llamamos hijos de Dios,
sino que lo somos. Si el mundo no nos reconoce, es porque tampoco lo ha reconocido
a él.
Hermanos míos, ahora somos hijos de Dios, pero aún no se ha manifestado
cómo seremos al fin. Y ya sabemos que, cuando él se manifieste,
vamos a ser semejantes a él, porque lo veremos tal cual es. Palabra
de Dios. T. Te alabamos, Señor.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 10, 14
R/. Aleluya, aleluya.
Yo soy el buen pastor, dice el Señor; yo conozco a mis ovejas y ellas me conocen a mí. R/.
EVANGELIO
El buen pastor da la vida por sus ovejas.
Del santo Evangelio según san Juan 10, 11-18
En aquel tiempo, Jesús
dijo a los fariseos: "Yo soy el buen pastor. El buen pastor da la vida
por sus ovejas. En cambio, el asalariado, el que no es el pastor ni el dueño
de las ovejas, cuando ve venir al lobo, abandona las ovejas y huye; el lobo
se arroja sobre ellas y las dispersa, porque a un asalariado no le importan
las ovejas.
Yo soy el buen pastor, porque conozco a mis ovejas y ellas me conocen a mí,
así como el Padre me conoce a mí y yo conozco al Padre. Yo doy
la vida por mis ovejas. Tengo además otras ovejas que no son de este
redil y es necesario que las traiga también a ellas; escucharán
mi voz y habrá un solo rebaño y un solo pastor.
El Padre me ama porque doy mi vida para volverla a tomar. Nadie me la quita;
yo la doy porque quiero. Tengo poder para darla y lo tengo también para
volverla a tomar. Este es el mandato que he recibido de mi Padre". Palabra
del Señor. T. Gloria a ti, Señor Jesús.
Se dice Credo.
PLEGARIA UNIVERSAL
Levantemos, hermanos,
nuestros ojos a Cristo, obispo y pastor de nuestras almas, y pongamos en sus
manos, con toda confianza, las necesidades de los hombres diciendo: Te rogamos,
Señor. (R/. Te rogamos, Señor.)
O bien: Jesús, Buen Pastor, sálvanos.
Para que los obispos, los presbíteros y diáconos apacienten
santamente a los pueblos que tienen encomendados, roguemos al Señor.
Para que la paz que Jesucristo concedió a los discípulos arraigue
con fuerza en nuestro mundo, y se alejen de las naciones el odio y las guerras,
roguemos al Señor.
Para que los enfermos, los pobres y todos los que sufren encuentren en Cristo
resucitado luz y esperanza, roguemos al Señor.
Para que Dios derrame en las familias cristianas el espíritu de piedad
y de renuncia a lo mundano, de manera que germinen abundantes vocaciones al
ministerio eclesial, roguemos al Señor.
Dios nuestro, Padre todopoderoso, que hiciste resplandecer la gloria de
Cristo resucitado cuando, en su nombre, devolviste la salud al inválido,
reúne en una sola familia a los hombres dispersos por el pecado y haz
que, uniéndose a Cristo, el buen pastor, experimenten la alegría
de pertenecer a tu rebaño. Por Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina,
inmortal y glorioso, por los siglos de los siglos.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Concédenos, Señor, vivir siempre llenos de gratitud por estos misterios pascuales que celebramos, para que, continuamente renovados por su acción se conviertan para nosotros en causa de eterna felicidad. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I-V de Pascua, MR, pp. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN
Ha resucitado el Buen Pastor, que dio la vida por sus ovejas y se entregó a la muerte por su rebaño. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Buen Pastor, vela con solicitud por tu rebaño y dígnate conducir a las ovejas que redimiste con la preciosa sangre de tu Hijo, a las praderas eternas. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Puede utilizarse la fórmula de bendición solemne, M R, p. 608 (603).
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. 4 Esd 2, 35
Una luz eterna, Señor, brillará para tus santos y vivirán para siempre. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Dios y Padre nuestro, que
para gloria de tu Iglesia te dignaste coronar con la victoria del martirio a
san Román Adame Rosales, concede, bondadoso, que así como él
imitó la pasión de tu Hijo, así nosotros, siguiendo sus
huellas, merezcamos llegar a los gozos eternos.
Por nuestro Señor Jesucristo ...
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Recibe, Señor, el sacrificio de reconciliación y alabanza que ofrecemos a tu majestad en la conmemoración del santo mártir Román, para que nos lleve a obtener el perdón y nos haga permanecer en continua acción de gracias. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 12, 24
Si el grano de trigo no cae en la tierra y muere, queda infecundo; pero, si muere, da fruto abundante. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Al celebrar con alegría esta festividad y habiendo recibido tus dones celestiales, te pedimos, Señor, que concedas, a quienes en este divino banquete proclamamos la muerte de tu Hijo, que podamos participar, con los santos mártires, de su resurrección y de su gloria. Por Jesucristo, nuestro Señor.
UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO.- La resurrección de Jesús no es simplemente su triunfo sobre la muerte de una vez para siempre. Es su pasaje a un nuevo modo de ser activo en el mundo. Se trata de ser la fuente de todo lo bueno que Dios puede darnos. Cualquier beneficio, bendición, o bondad que recibimos en esta vida o en la otra nos llega por medio de Cristo resucitado. Es una afirmación que ha sido discutida por muchos en los años recientes, ya que parece deducir que las otras religiones, como el judaísmo o el budismo, no tienen en ellas ni siquiera una gota de salvación o bien. Pero no es así, como ha sido clarificado por el Vaticano II en su documento Ad gentes. El Cristo resucitado puede ser activo en estas religiones en cierta manera, porque no está delimitado por las fronteras humanas.
Blanco Lunes IV de Pascua MR, p. 368 (369) / Lecc. I, p. 900
EL ESPÍRITU,
MOTOR DE LA HISTORIA
Hech 11,1-18; Sa/41; Jn 10,1-10
El Espíritu es más que un aliento que nos conforta o una brisa que nos consuela. Es una persona activa y fuerte quien impulsa la historia. Así es la perspectiva del libro de Hechos. En nuestra primera lectura, vemos al Espíritu provocando el inicio de una de las etapas más fundamentales de la comunidad primitiva, a saber, la misión hacia los gentiles. Es el Espíritu quien inspira a Pedro a seguir a los mensajeros a Cesarea (v. 12) para empezar dicha misión. Es el Espíritu quien cae sobre los gentiles cuando escuchan la predicación del apóstol (v. 15). Parece que es el Espíritu que calma a los partidarios de la circuncisión (v. 18). Hoy, cuando el Espíritu todavía obra sus sorpresas entre nosotros, no nos olvidemos de las palabras de Pedro: "¿Quién soy yo para oponerme a Dios?" (v. 17).
ANTÍFONA DE ENTRADA Rom 6, 9
Cristo, una vez resucitado de entre los muertos, ya no morirá nunca. La muerte ya no tiene dominio sobre él. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, luz perfecta de los santos, que nos concediste celebrar en la tierra los misterios pascuales, haz que gocemos siempre de la plenitud eterna de tu gracia. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
También a los paganos les ha concedido Dios la conversión que lleva a la vida.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 11, 1-18
En aquellos días,
los apóstoles y los hermanos que vivían en Judea se enteraron
de que también los paganos habían recibido la palabra de Dios.
Cuando Pedro regresó a Jerusalén, los circuncidados le hicieron
reproches, diciendo: "Has entrado en la casa de unos incircuncisos y has
comido con ellos"
Entonces Pedro les contó desde el principio lo que le había pasado:
"Estaba yo en la ciudad de Jafa, en oración, cuando tuve una visión
y vi algo semejante a un gran mantel, que sostenido por las cuatro puntas, bajaba
del cielo hasta donde yo me encontraba. Miré con atención aquella
cosa y descubrí que había en ella toda clase de cuadrúpedos,
fieras, reptiles y aves. Oí luego una voz que me decía: 'Levántate,
Pedro. Mata el animal que quieras y come'. Pero yo le respondí: 'Ni pensarlo,
Señor. Jamás he comido nada profano o impuro'. La voz del cielo
me habló de nuevo: 'No tengas tú por impuro lo que Dios ha hecho
puro'. Esto se repitió tres veces y luego todo fue recogido hacia el
cielo.
En aquel instante, se presentaron en la casa donde yo estaba tres hombres, que
venían de Cesarea, con un recado para mí. El Espíritu me
dijo entonces que me fuera con ellos sin dudar. También fueron conmigo
estos seis hermanos y todos entramos en casa de aquel hombre. Él nos
contó cómo había visto de pie, ante él, a un ángel
que le dijo: 'Manda a buscar en Jafa a Simón, llamado Pedro. Lo que él
te diga, te traerá la salvación a ti y a toda tu familia'. En
cuanto empecé a hablar, el Espíritu Santo descendió sobre
ellos, como había descendido al principio sobre nosotros. Entonces me
acordé de lo que había dicho el Señor: 'Juan bautizó
con agua; pero ustedes serán bautizados con el Espíritu Santo'.
Por lo tanto, si Dios les ha dado a ellos el mismo don que a nosotros, por haber
creído en el Señor Jesús, ¿quién soy yo para
oponerme a Dios?"
Con esto se apaciguaron y alabaron a Dios, diciendo: "Por lo visto, también
a los paganos les ha concedido Dios la conversión que lleva a la vida".
Palabra de Dios. T.Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
41,2-3; y 42,3.4.
R/. Estoy sediento del Dios que da la vida. Aleluya.
Como el venado busca el
agua de los ríos, así, cansada, mi alma te busca a ti, Dios mío.
R/.
Del Dios que da la vida está mi ser sediento. ¿Cuándo será
posible ver de nuevo su templo? R/.
Envíame, Señor, tu luz y tu verdad; que ellas se conviertan en
mi guía y hasta tu monte santo me conduzcan, allí donde tú
habitas. R/.
Al altar del Señor me acercaré, al Dios que es mi alegría,
y a mi Dios, el Señor, le daré gracias al compás de la
cítara. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 10, 14
R/. Aleluya, aleluya.
Yo soy el buen pastor, dice el Señor; yo conozco a mis ovejas y ellas me conocen a mí. R/.
EVANGELIO
Yo soy la puerta de las ovejas.
Del santo Evangelio según san Juan: 10, 1-10
En aquel tiempo, Jesús
dijo a los fariseos: "Yo les aseguro que el que no entra por la puerta
del redil de las ovejas, sino que salta por otro lado, es un ladrón,
un bandido; pero el que entra por la puerta, ése es el pastor de las
ovejas. A ése le abre el que cuida la puerta, y las ovejas reconocen
su voz; él llama a cada una por su nombre y las conduce afuera. Y cuando
ha sacado a todas sus ovejas, camina delante de ellas, y ellas lo siguen, porque
conocen su voz. Pero a un extraño no lo seguirán, sino que huirán
de él, porque no conocen la voz de los extraños".
Jesús les puso esta comparación, pero ellos no entendieron lo
que les quería decir. Por eso añadió: "Les aseguro
que yo soy la puerta de las ovejas. Todos los que han venido antes que yo, son
ladrones y bandidos; pero mis ovejas no los han escuchado.
Yo soy la puerta; quien entre por mí se salvará, podrá
entrar y salir y encontrará pastos. El ladrón sólo viene
a robar, a matar y a destruir. Yo he venido para que tengan vida y la tengan
en abundancia". Palabra del Señor. T. Gloria a ti, Señor
Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Recibe, Señor, los dones que, jubilosa, tu Iglesia te presenta, y puesto que es a ti a quien debe su alegría, concédele también disfrutar de la felicidad eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I-V de Pascua, MR, p. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 20, 19
Jesús se presentó en medio de sus discípulos y les dijo: "La paz esté con ustedes". Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dirige, Señor, tu mirada compasiva sobre tu pueblo, al que te has dignado renovar con estos misterios de vida eterna, y concédele llegar un día a la gloria incorruptible de la resurrección. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Blanco / Rojo Martes IV de Pascua o Memorias de san Jorge, mártir* o san Adalberto, obispo y mártir** MR, p. 369 (370) / Lecc. I, p. 903
"TODOS
LOS PUEBLOS HAN NACIDO EN TI"
Hech 11,19-26; Sal 86; Jn 10,22-30
Entre los llamados "salmos de alabanza", hay unos que alaban tan bellamente a Jerusalén que han sido denominados "cánticos de Sion". El salmo responsorial de hoy es uno de ellos. Aunque el texto hebreo del Salmo 86 ha sido alterado dactilarmente y, por lo tanto, objeto de disputas entre los expertos, es un himno de gran emoción. Como muchos de dichos cánticos, invita a los participantes de una liturgia en el Templo a cantar y bailar con todas sus fuerzas (v. 7). No sólo alaba la belleza gloriosa de Jerusalén, sino que enfatiza de que, como una madre cariñosa, abre sus brazos para acoger todos los pueblos, aún los enemigos de antaño, Egipto y Babilonia (v. 4). Es obvio por qué muchos cristianos han visto en él un símbolo de la Iglesia pascual, llena de alegría y abierta a todos.
ANTÍFONA DE ENTRADA Apoc 19, 7. 6
Alegrémonos, regocijémonos y demos gracias, porque el Señor, nuestro Dios omnipotente, ha empezado a reinar. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Concédenos, Dios todopoderoso, que quienes celebramos los misterios de la resurrección del Señor, merezcamos alcanzar el gozo de nuestra redención. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Comenzaron a predicar a los griegos el Evangelio del Señor Jesús.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 11, 19-26
En aquellos días,
algunos de los que se habían dispersado, huyendo de la persecución
desatada después de la muerte de Esteban, llegaron hasta Fenicia, Chipre
y Antioquía; pero predicaban el Evangelio solamente a los judíos.
Sin embargo, hubo entre ellos algunos chipriotas y cirenenses, que al llegar
a Antioquía, comenzaron a dirigirse también a los griegos y a
predicarles el Evangelio del Señor Jesús. Y como la mano del Señor
estaba con ellos, muchos se convirtieron y abrazaron la fe.
Cuando llegaron estas noticias a la comunidad cristiana de Jerusalén,
Bernabé fue enviado a Antioquía. Llegó Bernabé,
y viendo la acción de la gracia de Dios, se alegró mucho; y como
era hombre bueno, lleno del Espíritu Santo y de fe, exhortó a
todos a que, firmes en su propósito, permanecieran fieles al Señor.
Así se ganó para el Señor una gran muchedumbre.
Entonces Bernabé partió hacia Tarso, en busca de Saulo; y cuando
lo encontró, lo llevó consigo a Antioquía. Ambos vivieron
durante todo un año en esa comunidad y enseñaron a mucha gente.
Allí, en Antioquía, fue donde por primera vez los discípulos
recibieron el nombre de "cristianos". Palabra de Dios. T.
Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
86,1-3. 4-5.6-7.
R/. Alaben al Señor todos los pueblos. Aleluya.
Jerusalén gloriosa,
el Señor ha puesto en ti su templo. Tú eres más querida
para Dios que todos los santuarios de Israel. R/.
De ti, Jerusalén, ciudad del Señor, se dirán maravillas.
Egipto y Babilonia adorarán al Señor; los filisteos, con Tiro
y Etiopía, serán como tus hijos. R/.
Y de ti, Jerusalén, afirmarán: "Todos los pueblos han nacido
en ti y el Altísimo es tu fortaleza". R/.
El Señor registrará en el libro de la vida a cada pueblo, convertido
en ciudadano tuyo; y todos los pueblos te cantarán, bailando: "Tú
eres la fuente de nuestra salvación". R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 10, 27
R/. Aleluya, aleluya.
Mis ovejas escuchan mi voz, dice el Señor; yo las conozco y ellas me siguen. R/.
EVANGELIO
El Padre y yo somos uno.
Del santo Evangelio según san Juan: 10, 22-30
Por aquellos días,
se celebraba en Jerusalén la fiesta de la dedicación del templo.
Era invierno. Jesús se paseaba por el templo, bajo el pórtico
de Salomón.
Entonces lo rodearon los judíos y le preguntaron: "¿Hasta
cuándo nos vas a tener en suspenso? Si tú eres el Mesías,
dínoslo claramente".
Jesús les respondió: "Ya se lo he dicho y no me creen. Las
obras que hago en nombre de mi Padre dan testimonio de mí, pero ustedes
no creen, porque no son de mis ovejas. Mis ovejas escuchan mi voz; yo las conozco
y ellas me siguen. Yo les doy la vida eterna y no perecerán jamás;
nadie las arrebatará de mi mano. Me las ha dado mi Padre, y Él
es superior a todos, y nadie puede arrebatarlas de la mano del Padre. El Padre
y yo somos uno". Palabra del Señor. T. Gloria a ti,
Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Concédenos, Señor,
vivir siempre llenos de gratitud por estos misterios pascuales que celebramos,
para que, continuamente renovados por su acción, se conviertan para nosotros
en causa de eterna felicidad.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio IV de Pascua, MR, pp. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Lc 24, 46. 26
Era necesario que Cristo
padeciera y resucitara de entre los muertos, y así entrara luego en su
gloria.
Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor y Dios nuestro, escucha nuestras oraciones, para que la participación en los sacramentos de nuestra redención nos ayude en la vida presente y nos alcance las alegrías eternas. Por Jesucristo, nuestro Señor.
O bien:
*San
Jorge, mártir MR, p. 730 (717)
Hay testimonio del culto a san Jorge desde finales
del siglo IV, en Lod (cerca de Tel Aviv). Las leyendas lo han convertido en
soldado que nos defiende contra "el Dragón", rival de san Miguel.
Su culto está muy difundido, especialmente en Grecia, Rusia e Inglaterra.
Del Común de mártires: para un mártir en Tiempo Pascual,
MR, p. 935 (927).
ORACIÓN COLECTA
Al proclamar con entusiasmo
tu poder, te suplicamos humildemente, Señor, que, así como san
Jorge imitó a tu Hijo en su pasión, nos ayude generosamente en
nuestra debilidad. Por nuestro Señor Jesucristo ...
O bien:
**San Adalberto,
obispo y mártir MR, p. 731 (718)
Nació en Bohemia (Libice) hacía el año 956.
Hizo sus estudios en Magdeburgo. Al regresar a su patria, se preparó
para el sacerdocio, y el año 983 fue elegido segundo obispo de Praga,
donde trabajó valientemente para extirpar las costumbres paganas. Como
notaba que obtenía poco fruto, se dirigió a Roma y allí
se convirtió en monje. Finalmente, acudió a Prusia a conquistar
almas para Cristo. Mas habiendo tenido mala acogida, fue coronado con el martirio
el día 23 de abril de 997.
Del Común de mártires: para un mártir en Tiempo Pascual,
MR, p. 935 (927), o del Común de pastores: para un obispo, MR. p. 943
(935).
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que coronaste con el martirio al santo obispo Adalberto, inflamado en el celo por las almas, concédenos, por su intercesión, que no falte a los pastores la obediencia de su grey ni a las ovejas el cuidado de sus pastores. Por nuestro Señor Jesucristo ...
Blanco / Rojo Miércoles IV de Pascua o Memoria de san Fidel de Sigmaringa, presbítero y mártir* MR, p. 370 (371) / Lecc. I, p. 906
LA PALABRA
DE DIOS SE DIFUNDE
Hech 12, 24-13.5; Sal 66; Jn 12,44-50
Lucas inicia la tercera y última parte de Hechos (l3, 1 28,31) con el primero de los tres viajes misioneros de Pablo, aunque los historiadores debaten el número de tales viajes y cómo el apóstol los entendió. El objetivo del autor al narrar este primer viaje es más teológico que histórico: quiere mostrar cómo el mensaje, ante el rechazo de los judíos, se abre al mundo entero. El mensaje cristiano llega hasta los extremos del mundo, representado por la ciudad de Roma, capital del imperio. El punto de partida no es Jerusalén, el centro doctrinal, sino la ciudad de Antioquía, un centro misionero fundado por los misioneros del grupo de los helenistas. Que no nos pase por alto el que esta primera misión inició una importante difusión del Evangelio que, después de muchos siglos, condujo a nuestra evangelización.
ANTIFONA DE ENTRADA Cfr. Sal 17, 50: 21, 23
Te alabaré, Señor, ante las naciones y anunciaré tu nombre a mis hermanos. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, vida de los
creyentes, gloria de los humildes, felicidad de los justos, escucha, benigno,
nuestras súplicas, para que quienes tienen sed de las promesas de tu
generosidad, se vean siempre colmados de la plenitud de tus bienes. Por nuestro
Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Resérvenme a Saulo y a Bernabé.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 12, 24-13, 5
En aquel tiempo, la palabra
del Señor cundía y se propagaba. Cumplida su misión en
Jerusalén, Saulo y Bernabé regresaron a Antioquia, llevando consigo
a Juan Marcos.
Había en la comunidad cristiana de Antioquia algunos profetas y maestros,
como Bernabé, Simón (apodado el, “Negro”). Lucio el
de Cirene. Manahén (que se crio junto con el tetrarca Herodes) y Saulo.
Un día estaban ellos ayunando y dando culto al Señor, y el Espíritu
Santo les dijo: “Resérvenme a Saulo y a Bernabé para la
misión que les tengo destinada”. Todos volvieron a ayunar y a orar;
después les impusieron las manos y los despidieron.
Así, enviados por el Espíritu Santo, Saulo y Bernabé fueron
a Seleucia y zarparon para Chipre. Al llegar a Salamina, anunciaron la palabra
de Dios en las sinagogas de los judíos. Palabra de Dios. T.
Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
66, 2-3. 5. 6 y 8.
R/. Que te alaben, Señor, todos los pueblos. Aleluya.
Ten piedad de nosotros y
bendícenos; vuelve, Señor, tus ojos a nosotros. Que conozca la
tierra tu bondad y los pueblos tu obra salvadora. R/.
Las naciones con júbilo te canten, porque juzgas al mundo con justicia;
con equidad tú juzgas a los pueblos y riges en la tierra a las naciones.
R/.
Que te alaben, Señor, todos los pueblos, que los pueblos te aclamen todos
juntos. Que nos bendiga Dios y que le rinda honor el mundo entero.
R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 8, 12
R/. Aleluya, aleluya.
Yo soy la luz del mundo, dice el Señor; el que me sigue tendrá la luz de la vida. R/.
EVANGELIO
Yo he venido al mundo como luz.
Del santo Evangelio según san Juan: 12, 44-50
En aquel tiempo, exclamó
Jesús con fuerte voz: "El que cree en mí, no cree en mí,
sino en aquel que me ha enviado; el que me ve a mí, ve a aquel que me
ha enviado. Yo he venido al mundo como luz, para que todo el que crea en mí
no siga en tinieblas.
Si alguno oye mis palabras y no las pone en práctica, yo no lo voy a
condenar; porque no he venido al mundo para condenar al mundo, sino para salvarlo.
El que me rechaza y no acepta mis palabras, tiene ya quien lo condene: las palabras
que yo he hablado lo condenarán en el último día. Porque
yo no he hablado por mi cuenta, sino que mi Padre, que me envió, me ha
mandado lo que tengo que decir y hablar. Y yo sé que su mandamiento es
vida eterna. Así, pues, lo que hablo, lo digo como el Padre me lo ha
dicho". Palabra del Señor. T. Gloria a ti, Señor
Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Dios nuestro, que por el
sano valor de este sacrificio nos hiciste participar de tu misma y gloriosa
vida divina, concédenos que, así como hemos conocido tu verdad,
de igual manera vivamos de acuerdo con ella.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I-V de Pascua, MR, p. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Jn 15, 16. 19
Yo los elegí del mundo, dice el Señor, y los destiné para que vayan y den fruto, y su fruto permanezca. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, muéstrate benigno con tu pueblo, y ya que te dignaste alimentarlo con los misterios celestiales, hazlo pasar de su antigua condición de pecado a una vida nueva. Por Jesucristo, nuestro Señor.
O bien:
*San
Fidel de Sigmaringa, presbítero y mártir MR, p. 731 (718)
Fue abogado y entró en la Orden de
los Capuchinos, en Friburgo de Brisgovia. Era un religioso lleno de amor al
prójimo y un notable predicador popular, por lo cual fue designado por
la Congregación de la Propagación de la Fe para predicar una misión
entre los protestantes de Suiza. Al poco tiempo fue asesinado (1578-1622).
Del Común de mártires: para un mártir en Tiempo Pascual,
MR, p. 935 (927), o del Común de pastores: para un pastor, MR, p. 947
(939).
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que te dignaste coronar con la palma del martirio a san Fidel de Sigmaringa, inflamado en tu amor para propagar la fe, concédenos, por su intercesión, que, arraigados en la caridad y unidos a él, merezcamos experimentar el poder de la resurrección de Cristo. Él, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
Fiesta de san Marcos, Evangelista
Rojo o Memoria, 97 aniversario del martirio de los beatos Andrés Solá y Molist y José Trinidad Rangel Montaño, presbíteros y Leonardo Pérez Larios, laico, mártires mexicanos* MR, p. 732 (719) / Lecc. I, p. 1009
Por sus lazos familiares Marcos pertenecía a la comunidad cristiana de Jerusalén. Inicialmente acompañó a san Pablo en sus misiones y después a san Pedro, quien lo llamaba "su hijo". La tradición enseña que Marcos recogió en su Evangelio la predicación de Pedro a los cristianos romanos y que fundó la Iglesia de Alejandría.
"VAYAN POR
TODO EL MUNDO... "
1 Pedro 5,5-14; Sa188; Mc 16, 15-20
¿Nos damos cuenta de que los autores bíblicos fueron personas reales, de carne y hueso, que tuvieron que navegar por la vida como nosotros tenemos que hacer en nuestra época? Las lecturas de hoy concretan al personaje de Marcos, el presunto autor del Evangelio homónimo. En la primera lectura, Pedro se refiere a "Marcos, mi hijo" (v. 13), quien fue supuestamente el intérprete del apóstol. Puede ser que se trate de la misma persona que es llamada "Juan Marcos", el primo de Bernabé (Col 4, 10), y acompaña a Pablo, con diferentes niveles de éxito, durante sus viajes misioneros (Hech 12,25; etc...). Marcos, probablemente, no escribió el fragmento del Evangelio de hoy que no se encuentra en los manuscritos más antiguos, pero que nos muestra los retos y los triunfos que un cristiano antiguo, como Marcos, habría anticipado en su existencia cristiana.
ANTÍFONA DE ENTRADA Mc 16, 15
Vayan por todo el mundo y prediquen el Evangelio a toda creatura. Aleluya.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que enalteciste a tu evangelista san Marcos con la gracia de la predicación evangélica, concédenos aprovechar de tal manera sus enseñanzas, que podamos seguir fielmente las huellas de Jesucristo. El que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
LITURGIA DE LA PALABRA
RIMERA LECTURA
Los saluda mi hijo Marcos.
De la primera carta del apóstol san Pedro: 5, Sb-14
Queridos hermanos: Que en
su trato mutuo la humildad esté siempre presente, pues Dios es enemigo
de los soberbios, y en cambio, a los humildes les concede su gracia. Humíllense,
pues, ante la mano poderosa de Dios, para que él los levante y encumbre
en el momento oportuno. Dejen en sus manos todas sus preocupaciones, pues él
cuida de ustedes.
Estén alerta y no se dejen sorprender, porque su enemigo, el diablo,
como un león rugiente, anda buscando a quien devorar. Resístanle
con la firmeza de la fe, sabiendo que sus hermanos, dispersos por el mundo,
soportan los mismos sufrimientos que ustedes.
Dios, que es la fuente de todos los bienes, nos ha llamado a participar de su
gloria eterna en unión con Cristo, y después de estos sufrimientos
tan breves, los restaurará a ustedes, los afianzará, fortalecerá
y hará inconmovibles. Suyos son la gloria y el poder para siempre. Amén.
Por medio de Silvano, a quien considero hermano digno de toda confianza, les
he escrito esta breve carta para que sepan cuál es la verdadera gracia
de Dios y animarlos a permanecer firmes en ella.
Los saluda la comunidad de Babilonia, a la que Dios ha elegido, lo mismo que
a ustedes. También los saluda mi hijo Marcos. Salúdense los unos
a los otros con el beso fraterno. Les deseo la paz a todos ustedes, los que
son de Cristo. Palabra de Dios. T. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
88,2-3.6-7.16-17.
R/. Proclamaré sin cesar la misericordia del Señor. Aleluya.
Proclamaré sin cesar
la misericordia del Señor y daré a conocer que su fidelidad es
eterna, pues el Señor ha dicho: «Mi amor es para siempre y mi lealtad,
más firme que los cielos». R/.
El cielo, Señor, proclama tus maravillas, y tu lealtad, la asamblea de
los santos ¿Quién se compara a Dios sobre las nubes? ¿Quién
es como el Señor entre los dioses? R/.
Señor, feliz el pueblo que te alaba y que a tu luz camina, que en tu
nombre se alegra a todas horas y al que llena de orgullo tu justicia. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO 1Co 1, 23. 24
R/. Aleluya, aleluya.
Nosotros predicamos a Cristo crucificado, que es la fuerza y la sabiduría de Dios. R/.
EVANGELIO
Prediquen el Evangelio a todas las creaturas.
Del santo Evangelio según san Marcos: 16, 15-20
En aquel tiempo, se apareció
Jesús a los Once y les dijo: «Vayan por todo el mundo y prediquen
el Evangelio a toda creatura. El que crea y se bautice, se salvará; el
que se resista a creer, será condenado. Estos son los milagros que acompañarán
a los que hayan creído: arrojarán demonios en mi nombre, hablarán
lenguas nuevas, cogerán serpientes en sus manos, y si beben un veneno
mortal, no les hará daño; impondrán las manos a los enfermos
y éstos quedarán sanos».
El Señor Jesús, después de hablarles, subió al cielo
y está sentado a la derecha de Dios. Ellos fueron y proclamaron el Evangelio
por todas partes, y el Señor actuaba con ellos y confirmaba su predicación
con los milagros que hacían. Palabra del Señor. T.
Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Al celebrar la glorificación de san Marcos, te ofrecemos, Señor, este sacrificio de alabanza, y te suplicamos humildemente que la predicación evangélica se mantenga siempre firme en tu Iglesia. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Mt 28, 20
Yo estaré con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo, dice el Señor. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN.
Concédenos, Dios
todopoderoso, que los dones recibidos de tu santo altar nos santifiquen y nos
fortalezcan en la fe del Evangelio, que san Marcos predicó.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
* Andrés
Solá Molist, C.M.F.
Nació en Can Vilarrasa, municipio de Taradell, Barcelona, España,
en 1895. Sintió la vocación misionera e ingresó con los
claretianos de Vich; fue ordenado presbítero el 23 de septiembre de 1922
y fue enviado a México, donde puso su ministerio bajo la protección
de la Virgen de Guadalupe. Trabajó en Toluca, León, San Luis Potosí,
y de nuevo en León. Ordenada la expulsión de los sacerdotes extranjeros,
prefirió confiar en la Providencia y quedarse con los fieles para celebrar
la Eucaristía y los demás sacramentos, catequizar y visitar a
los pobres; se refugió con las señoritas Josefina y Jovita Alba;
allí confesaba y llevaba hasta 300 comuniones a los enfermos. Habiéndose
enterado de la detención del Padre Rangel, él organizó
una hora santa; la policía secreta lo encontró y fue condenado
a muerte junto con el Padre Rangel y el seglar Leonardo Pérez, en San
Joaquín, municipio de Lagos de Moreno; testificó durante su agonía
que moría por Jesús.
* José
Trinidad Rangel Montaño
Nació en el rancho El Durazno, en Dolores Hidalgo, Guanajuato, en 1887;
muchacho devoto e inteligente, debió realizar considerables esfuerzos
para conseguir entrar al seminario de León, donde fue ordenado presbítero
el 13 de abril de 1919. Enviado a San Francisco del Rincón, fue reconocido
como sacerdote y detenido; fue condenado por el general Amarillas y fusilado
y sepultado en el rancho de San Joaquín el 25 de abril de 1927, al lado
de la vía del ferrocarril México Ciudad Juárez.
* Leonardo
Pérez Larios
Nació en Lagos de Moreno, Jalisco, en 1883; vivió cerca de Encarnación
de Díaz y posteriormente en León, Gto., donde trabajó como
dependiente de una tienda de ropa; joven piadoso, guiaba y cantaba el rosario
en su casa y ayudaba en el arreglo de los templos. En León ingresó
a una asociación mariana de jóvenes en que se hacía un
voto privado y temporal de castidad, una hora semanal de adoración al
Santísimo, rezar vísperas, cultivar vocaciones y solemnizar las
festividades. Fue detenido mientras estaba en oración ante el Santísimo,
el 24 de abril de 1927 en el oratorio de la casa de las señoritas Alba.
Se le acusó de ser sacerdote y de estarse preparando para celebrar la
Misa. Fue fusilado y sepultado en San Joaquín el 25 de abril de 1927.
Los fieles le tuvieron devoción junto con los otros dos mártires
con quienes murió.
Nuestra Madre del buen Consejo
Blanco Viernes IV de Pascua MR, p. 372 (373) / Lecc. I, p. 910
LA BIBLIA
Y SU PODER HERMENÉUTICO
Hech 13, 24-33; Sal 2; Jn 14,1-6
Los primeros cristianos reconocieron que la resurrección no fue un acontecimiento que tocó únicamente la persona de Jesús, sino un hecho con un significado universal. El discurso de Pablo en Antioquía de Pisidia, que es nuestra primera lectura, sugiere cómo han llegado a una tal conclusión. Utiliza, como clave de interpretación de la Pascua, el Salmo 2, que proclama la promesa hecha a David y su dinastía, sobre un papel mesiánico expresado en los términos más íntimos: "tú eres mi hijo, yo te he engendrado hoy" (v. 7). Por medio de este salmo, los cristianos se dieron cuenta de que la resurrección fue el cumplimiento de dicha promesa y, de hecho, de la salvación universal mediante un descendiente de David, Jesús. Así podemos ver el poder de la Biblia: puede abrir nuestros ojos a la acción divina entre nosotros.
ANTÍFONA DE ENTRADA Apoc 5, 9-10
Señor, con tu sangre has rescatado a hombres de toda raza, lengua, pueblo y nación, y has hecho de nosotros un reino de sacerdotes para Dios. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, autor de nuestra libertad y salvación, oye la voz de los que te suplican y a quienes redimiste por la sangre derramada de tu Hijo, concédeles vivir para ti y que puedan gozar en ti de inmortalidad eterna. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Resucitando a Jesús, Dios ha cumplido la promesa que nos hizo.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 13, 26-33
En aquellos días,
Pablo continuó su predicación en la sinagoga de Antioquía
de Pisidia con estas palabras: "Hermanos míos, descendientes de
Abraham, y cuantos temen a Dios: Este mensaje de salvación les ha sido
enviado a ustedes. Los habitantes de Jerusalén y sus autoridades no reconocieron
a Jesús, y al condenarlo, cumplieron las palabras de los profetas que
se leen cada sábado: no hallaron en Jesús nada que mereciera la
muerte y, sin embargo, le pidieron a Pilato que lo mandara ejecutar. Y después
de cumplir todo lo que de Él estaba escrito, lo bajaron de la cruz y
lo pusieron en el sepulcro.
Pero Dios lo resucitó de entre los muertos, y Él, ya resucitado,
se apareció durante muchos días a los que lo habían seguido
de Galilea a Jerusalén. Ellos son ahora sus testigos ante el pueblo.
Nosotros les damos la buena nueva de que la promesa hecha a nuestros padres
nos la ha cumplido Dios a nosotros, los hijos, resucitando a Jesús, como
está escrito en el salmo segundo: Tú eres mi hijo, yo te he engendrado
hoy". Palabra de Dios. T. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
2,6-7; 8-9.10-11.
R/. Jesucristo es el rey de las naciones. Aleluya.
El Señor me ha consagrado
como rey de Sión, su ciudad santa. Anunciaré el decreto del Señor.
He aquí lo que me dijo: R/.
"Hijo mío eres tú, yo te he engendrado hoy. Te daré
en herencia las naciones y como propiedad, toda la tierra. Podrás gobernarlas
con cetro de hierro y despedazarlas como jarros". R/.
Escuchen y comprendan estas cosas, reyes y gobernantes de la tierra. Adoren
al Señor con reverencia, sírvanlo con temor. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 14, 6
R/. Aleluya, aleluya.
Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie va al Padre, si no es por mí, dice el Señor. R/.
EVANGELIO
Yo soy el camino, la verdad y la vida.
Del santo Evangelio según san Juan: 14, 1-6
En aquel tiempo, Jesús
dijo a sus discípulos: "No pierdan la paz. Si creen en Dios, crean
también en mí. En la casa de mi Padre hay muchas habitaciones.
Si no fuera así, yo se lo habría dicho a ustedes, porque voy a
prepararles un lugar. Cuando me vaya y les prepare un sitio, volveré
y los llevaré conmigo, para que donde yo esté, estén también
ustedes. Y ya saben el camino para llegar al lugar a donde voy".
Entonces Tomás le dijo: "Señor, no sabemos a dónde
vas, ¿cómo podemos saber el camino?" Jesús le respondió:
"Yo soy el camino, la verdad y la vida. Nadie va al Padre si no es por
mí". Palabra del Señor. T. Gloria a ti, Señor
Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Recibe, Señor, con bondad, estas ofrendas de tu familia santa, para que, con la ayuda de tu protección, conserve los dones recibidos y llegue a poseer los eternos. Por Jesucristo, nuestro Señor ...
Prefacio I-V de Pascua, MR, pp. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Rom 4, 25
Cristo fue condenado a muerte por nuestros pecados y resucitó para nuestra justificación. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Protege, Señor, con amor constante a quienes has salvado, para que, una vez redimidos por la pasión de tu Hijo, se llenen ahora de alegría por su resurrección. Él, que vive y reina por los siglos de los siglos.
Blanco Sábado IV de Pascua o santa María Guadalupe García Zavala, virgen
MR, p. 373 (374) / Lecc. I, p. 912
Otros santos: Zita de Lucca, virgen. Beato José Outhay Phongphumi, Catequista mártir laico laosiano.
DIOS SE REVELA
POR PALABRAS Y ACCIONES HUMANAS
Hech 13, 44-52; Sal 97; Jn 14, 7-14
Quizá hay algunos que creen que Dios actúe sólo de forma espectacular, extraordinaria, y asombrosa. Una opinión semejante puede ser el motivo de la petición de Felipe en nuestro Evangelio de hoy: "muéstranos al Padre" (v. 8). La respuesta sorprendida de Jesús, quien parece sorprendido por la petición, rechaza esta creencia equivocada. El Señor dirige la atención de Felipe a lo que él ya ha experimentado, es decir, las palabras y las obras de Jesús mismo. Son palabras y obras que, a primera vista, probablemente parecieron muy humanas y de ninguna manera extraordinarias. Pero fue por ellas por las cuales el Padre se comunicó a los discípulos. Hoy debemos recordar que Dios nos habla por las acciones de los seres humanos alrededor de nosotros, especialmente los pobres, porque "quien cree en mí hará también las obras que yo hago" (v. 12).
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. 1 Pedro 2, 9
Pueblo redimido por Dios, anuncia las maravillas del Señor, que te llamó de las tinieblas a su luz admirable. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Señor Dios, que por esta solemnidad de la Pascua proporcionas al mundo el remedio que necesita, prolonga tu misericordia en favor de tu Iglesia, para que el culto que te rinde en el tiempo le aproveche para la vida eterna. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Ahora nos dirigiremos a los paganos.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 13, 44-52
El sábado siguiente
casi toda la ciudad de Antioquía acudió a oír la palabra
de Dios. Cuando los judíos vieron una concurrencia tan grande, se llenaron
de envidia y comenzaron a contradecir a Pablo con palabras injuriosas. Entonces
Pablo y Bernabé dijeron con valentía: "La palabra de Dios
debía ser predicada primero a ustedes; pero como la rechazan y no se
juzgan dignos de la vida eterna, nos dirigiremos a los paganos. Así nos
lo ha ordenado el Señor, cuando dijo: Yo te he puesto como luz de los
paganos, para que lleves la salvación hasta los últimos rincones
de la tierra".
Al enterarse de esto, los paganos se regocijaban y glorificaban la palabra de
Dios, y abrazaron la fe todos aquellos que estaban destinados a la vida eterna.
La palabra de Dios se iba propagando por toda la región. Pero los judíos
azuzaron a las mujeres devotas de la alta sociedad y a los ciudadanos principales,
y provocaron una persecución contra Pablo y Bernabé, hasta expulsarlos
de su territorio. Pablo y Bernabé se sacudieron el polvo de los pies,
como señal de protesta, y se marcharon a Iconio, mientras los discípulos
se quedaron llenos de alegría y del Espíritu Santo. Palabra
de Dios. T. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
97,1. 2.-3ab 3cd-4.
R/. Cantemos las maravillas del Señor. Aleluya.
Cantemos al Señor
un canto nuevo, pues ha hecho maravillas. Su diestra y su santo brazo le han
dado la victoria. R/.
El Señor ha dado a conocer su victoria y ha revelado a las naciones su
justicia. Una vez más ha demostrado Dios su amor y su lealtad hacia Israel.
R/.
La tierra entera ha contemplado la victoria de nuestro Dios. Que todos los pueblos
y naciones aclamen con júbilo al Señor. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 8, 31. 32
R/. Aleluya, aleluya.
Si se mantienen fieles a mi palabra, dice el Señor, serán verdaderamente discípulos míos y conocerán la verdad. R/.
EVANGELIO
Quien me ha visto a mí, ha visto al Padre.
Del santo Evangelio según san Juan: 14, 7-14
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: "Si ustedes me conocen a mí, conocen también a mi Padre. Ya desde ahora lo conocen y lo han visto". Le dijo Felipe: "Señor, muéstranos al Padre y eso nos basta". Jesús le replicó: "Felipe, tanto tiempo hace que estoy con ustedes, ¿y todavía no me conoces? Quien me ha visto a mí, ha visto al Padre. ¿Entonces por qué dices: 'Muéstranos al Padre'? ¿O no crees que yo estoy en el Padre y que el Padre está en mí? Las palabras que yo les digo, no las digo por mi propia cuenta. Es el Padre, que permanece en mí, quien hace las obras. Créanme: yo estoy en el Padre y el Padre está en mí. Si no me dan fe a mí, créanlo por las obras. Yo les aseguro: el que crea en mí, hará las obras que hago yo y las hará aún mayores, porque yo me voy al Padre; y cualquier cosa que pidan en mi nombre, yo la haré para que el Padre sea glorificado en el Hijo. Yo haré cualquier cosa que me pidan en mi nombre". Palabra del Señor. T. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Santifica, Señor, por tu piedad estos dones y al recibir en oblación este sacrificio espiritual, conviértenos para ti en una perenne ofrenda. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I-V de Pascua MR, pp. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 17, 24
Padre, quiero que donde yo esté, estén también conmigo los que tú me has dado, para que contemplen la gloria que me diste, dice el Señor. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Al recibir, Señor,
el don de estos sagrados misterios, te suplicamos humildemente que lo que tu
Hijo nos mandó celebrar en memoria suya, nos aproveche para crecer en
nuestra caridad fraterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.
O bien:
*Santa María
Guadalupe García Zavala, virgen MR, p. 733 (720)
Nació en 1878 en Zapopan, México, la "Madre Lupita”
fue una religiosa que con una fe profunda y una esperanza sin límites,
buscó la propia santificación desde el amor al Corazón
de Jesús y la fidelidad a la Iglesia. Cofundadora de la Congregación
de las Siervas de Santa Margarita María y de los Pobres, se distinguió
por sus obras a favor de los necesitados y de los enfermos. Fue llamada a la
casa del Padre celestial el 24 de junio de 1963, y canonizada el 12 de mayo
de 2013.
Del Común de vírgenes: para una virgen p. 960 (952), o del Común
de santos y santas: para los que hicieron obras de misericordia, p. 976 (968).
ORACIÓN COLECTA
Señor y Dios nuestro, que en el amor a ti y al prójimo has querido resumir tus mandamientos, concédenos que, a ejemplo de santa María Guadalupe García Zavala, no neguemos a nadie nuestra ayuda y merezcamos ser llamados con ella a compartir el Reino de tu Hijo, que vive y reina contigo ...
Blanco Domingo V de Pascua MR, p. 374 (375) / Lecc. I, p. 220 [Se omiten las Memorias de san Pedro Chanel, presbítero y mártir y san Luis María Grignion de Montfort, presbítero]
Otros santos: Beata María Felicia de Jesús Sacramentado "Chiquitunga", religiosa de la orden de Carmelitas Descalzas.
CÓMO
PARTICIPAR EN LA VIDA DEL RESUCITADO
Hech 9, 26-31; Sal 21; l Jn3, 18-24; Jn 15,1-8
La resurrección de Cristo no fue suficiente para ellos en ese momento. Los discípulos querían saber cómo podrían compartir la vida resucitada de que él gozaba. Contesta la primera Carta de Juan, que es nuestra segunda lectura, que nuestras acciones son el camino para tomar parte de esa vida: tenemos la salvación si "cumplimos sus mandatos y hacemos lo que le agrada" (v. 21). Sin embargo, dicho camino no consiste simplemente en nuestras acciones porque "este es su mandamiento: que creamos ... y que nos amemos" (v. 23). Se trata de actitudes interiores. Clarifica el Evangelio de hoy que es el amor por Cristo, simbolizado por la metáfora de permanecer en la viña y realizado en nuestras acciones exteriores y en nuestras actitudes interiores, lo que nos da acceso a la vida resucitada. En otras palabras, lo que cuenta es nuestra relación verdadera con Cristo resucitado sin olvidar nuestra relación con los demás.
ANTÍFONA DE ENTRADA Sal 97, 1-2
Canten al Señor un cántico nuevo, porque ha hecho maravillas y todos los pueblos han presenciado su victoria. Aleluya.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Dios todopoderoso y eterno, lleva a su plenitud en nosotros el sacramento pascual, para que, a quienes te dignaste renovar por el santo bautismo, les hagas posible, con el auxilio de tu protección, abundar en frutos buenos, y alcanzar los gozos de la vida eterna. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Les contó como había visto al Señor en el camino.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 9, 26-31
Cuando Pablo regreso a Jerusalén,
trato de unirse a los discípulos, pero todos le tenían miedo,
por que no creían que se hubiera convertido en discípulo.
Entonces, Bernabé lo presento a los apóstoles y le refirió
como Saulo había visto al Señor en el camino, como el Señor
le había hablado y como el había predicado en Damasco, con valentía,
en el nombre de Jesús. Desde entonces, vivió con ellos en Jerusalén,
iba y venía, predicando abiertamente en el nombre del Señor, hablaba
y discutía con los judíos de habla griega y éstos intentaban
matarlo. Al enterarse de esto, los hermanos condujeron a Pablo a Cesarea y lo
despacharon a Tarso.
En aquellos días, las comunidades cristianas gozaban de paz en toda Judea,
Galilea y Samaria, con lo cual se iban consolidando, progresaban en la fidelidad
a Dios y se multiplicaban, animadas por el Espíritu Santo. Palabra
de Dios. T. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
21, 26b-27. 28. 30ab. 30c-32.
R/. Bendito sea el Señor. Aleluya.
Le cumpliré mis promesas
al Señor delante de sus fieles. Los pobres comerán hasta saciarse
y alabarán al Señor los que lo buscan: su corazón ha de
vivir para siempre. R/.
Recordaran al Señor y volverán a Él desde los últimos
lugares del mundo; en su presencia se postraran todas las familias de los pueblos.
Solo ante Él se postrarán todos los que mueren. R/.
Mi descendencia lo servirá y le contará a la siguiente generación,
al pueblo que ha de nacer, la justicia del Señor y todo lo que Él
ha hecho. R/.
SEGUNDA LECTURA
Este es su mandamiento: que creamos y que nos amemos.
De la primera carta del apóstol san Juan 3, 18-24
Hijos míos: No amemos
solamente de palabra, amemos de verdad y con las obras. En esto conoceremos
que somos de verdad y delante de Dios tranquilizaremos nuestra conciencia de
cualquier cosa que ella nos reproche, por que Dios es más grande que
nuestra conciencia y todo lo conoce. Si nuestra conciencia no nos remuerde,
entonces, hermanos míos, nuestra confianza en Dios es total.
Puesto que cumplimos los mandamientos de Dios y hacemos lo que le agrada, ciertamente
obtendremos de Él todo lo que le pidamos. Ahora bien, éste es
su mandamiento: que creamos en la persona de Jesucristo, su Hijo, y nos amemos
los unos a los otros, conforme al precepto que nos dio.
Quien cumple sus mandamientos permanece en Dios y Dios en él. En esto
conocemos, por el Espíritu que Él nos ha dado, que Él permanece
en nosotros. Palabra de Dios. T. Te alabamos, Señor.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 15, 4-5
R/. Aleluya, aleluya.
Permanezcan en mí y yo en ustedes, dice el Señor; el que permanece en mí da fruto abundante. R/.
EVANGELIO
El que permanece en mí y yo en él, ése da fruto abundante.
Del santo Evangelio según san Juan 15, 1-8
En aquel tiempo, Jesús
dijo a sus discípulos: “Yo soy la verdad vid y mi Padre es el viñador.
Al sarmiento que no da fruto en mí, Él lo arranca, y al que da
fruto lo poda para que dé más fruto.
Ustedes ya están purificados por las palabras que les he dicho. Permanezcan
en mí y yo en ustedes. Como el sarmiento no puede dar fruto por sí
mismo, si no permanece en la vid, así tampoco ustedes, si no permanecen
en mí. Yo soy la vid, ustedes los sarmientos; el que permanece en mí
y yo en el, ese da fruto abundante, porque sin mí nada puede hacer. Al
que no permanece en mí se le echa afuera, como el sarmiento, y se seca;
luego lo recogen, lo arrojan al fuego y arde.
Si permanecen en mí y mis palabras permanecen en ustedes, pidan lo que
quieran y se les concederá. La gloria de mi Padre consiste en que den
mucho fruto y se manifiesten así como discípulos míos”.
Palabra del Señor. T. Gloria a ti, Señor Jesús.
Se dice Credo.
PLEGARIA UNIVERSAL
Invoquemos a Cristo,
camino verdad y vida y, como pueblo sacerdotal, pidámosle por las necesidades
de todo el mundo diciendo: Te rogamos, Señor. (R/. Te rogamos, Señor.)
Para que Cristo, esposo de la Iglesia, llene de alegría pascual
a todos los que se han consagrado a la extensión de su reino, roguemos
al Señor.
Para que Cristo, piedra angular del edificio, ilumine con el anuncio evangélico
a los pueblos que aún desconocen la buena nueva de la resurrección,
roguemos al Señor.
Para que Cristo, estrella luciente de la mañana, seque las lágrimas
de los que lloran y aleje del dolor las penas de los que sufren, roguemos
al Señor.
Para que Cristo, testigo fidedigno y veraz, nos conceda ser, con nuestra alegría
evangélica, sal y luz para los hombres que desconocen la victoria de
la resurrección, roguemos al Señor.
Dios nuestro, que nos has unido a Cristo como sarmientos a la verdadera
vid, escucha nuestra oración y danos tu Espíritu Santo, para que,
amándonos los unos a los otros, demos frutos abundantes de santidad y
de paz. Por Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina, inmortal y glorioso, por
los siglos de los siglos.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Dios nuestro, que por el santo valor de este sacrificio nos hiciste participar de tu misma y gloriosa vida divina, concédenos que, así como hemos conocido tu verdad, de igual manera vivamos de acuerdo con ella. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I-V de Pascua, MR, pp. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 15, 1. 5
Yo soy la vid verdadera y ustedes los sarmientos, dice el Señor; si permanecen en mí y yo en ustedes darán fruto abundante. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, muéstrate
benigno con tu pueblo, y ya que te dignaste alimentarlo con los misterios celestiales,
hazlo pasar de su antigua condición de pecado a una vida nueva. Por Jesucristo,
nuestro Señor.
Puede utilizarse la fórmula de bendición solemne, M R, p. 595
(603).
UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO.- Frecuentemente oímos que nuestra relación con Cristo es lo que importa más en nuestras vidas. No hay duda de que esta opinión tiene su verdad. Sin embargo, es preciso tener un poco de sabiduría y empatía al afirmarla. Por un lado, tenemos que reconocer que nuestra relación con Cristo no es puramente psicológica o interior. Tiene que ver con nuestras acciones y con toda la manera en que vivimos nuestra existencia cristiana. No se puede "sentir muy cerca" del Señor mientras uno está tratando mal a sus semejantes. Por otro lado, debemos reconocer que no todos experimentan directamente su relación con Cristo. Hay personas que experimentan lo que los santos han llamado "la noche oscura del alma" en que se siente una cierta ausencia de Dios; para ellos, Dios se esconde. Debemos tener empatía con tales personas.
Blanco Memoria de santa Catalina de Siena, virgen y doctora de la Iglesia MR, p. 735 (722) / Lecc. I, p. 915
Otros santos: Beatas: Itala Mela, oblata benedictina; Hanna Helena Chrzanowska, enfermera laica.
Su vida estuvo repartida entre la contemplación de Jesús crucificado y el servicio de la Iglesia, desgarrada por facciones. Plenamente imbuida en el espíritu de santo Domingo, encontró en el amor a Dios todas las energías necesarias para hacer regresar al Papa de Aviñón a Roma, y para hacer comprender a los pecadores lo que significa el llamamiento de la sangre redentora (1347-1380).
HAY QUE CONOCER
LAS COSTUMBRES E IDIOMAS
Hech 14,5-18; Sal 113B; Jn 14, 21-26
El incidente pintoresco de Listra, que narra nuestra primera lectura, es significativo en la historia de la Iglesia porque representa uno de los primeros encuentros de los predicadores cristianos con la cultura pagana politeísta. Lucas lo interpreta como un caso particular de religiosidad crédula de una población que cree las leyendas poéticas de dioses que se presen tan en figura humana. Pero ¿Es su interpretación acertada? Lucas mismo sugiere que Pablo y Bernabé no entendieron el idioma de los licaonios (véase v. 11). Puede ser que no entendieran la manera en que ellos solían ofrecer gracias: mientras que la gente solo intentó agradecerles de forma elaborada, tal vez Pablo y Bernabé se equivocaron pensando que quisieran adorarlos. No sabemos precisamente lo que pasó, pero cuando predicamos el Evangelio en culturas ajenas, tenemos que esforzarnos por entender sus costumbres e idiomas.
ANTÍFONA DE ENTRADA
Esta virgen sabia y prudente salió al encuentro de Cristo con la lámpara encendida. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que hiciste arder en amor divino a santa Catalina de Siena, al contemplar la pasión de tu Hijo y al servir a tu Iglesia, concede, por su intercesión, que tu pueblo, asociado al misterio de Cristo, se alegre siempre en la manifestación de su gloria. Él, que vive y reina contigo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Les predicamos el Evangelio para que dejando los falsos dioses, se conviertan al Dios vivo.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 14, 5-18
En aquellos días,
los paganos y los judíos de Iconio, apoyados por las autoridades, comenzaron
a agitarse con la intención de maltratar y apedrear a Pablo y a Bernabé.
Pero ellos se dieron cuenta de la situación y huyeron a Listra y Derbe,
ciudades de Licaonia, y predicaron el Evangelio en toda la región.
Había en Listra un hombre tullido de los pies desde su nacimiento que
se pasaba la vida sentado y nunca había podido andar. El tullido escuchaba
el discurso de Pablo, y éste, mirándolo fijamente, advirtió
que aquel hombre tenía fe suficiente como para ser curado, y le ordenó
en voz alta: "Levántate y ponte derecho sobre tus pies". De
un salto el hombre se puso en pie y comenzó a caminar. Cuando la gente
vio lo que Pablo había hecho, empezaron a gritar en la lengua de Licaonia:
"¡Dioses en figura de hombres han bajado a visitarnos!" Decían
que Bernabé era el dios Júpiter y Pablo el dios Mercurio, porque
éste era el que hablaba.
El sacerdote del templo de Júpiter, situado a la entrada de la ciudad,
llevó a las puertas unos toros adornados con guirnaldas, y junto con
la muchedumbre, quería ofrecerles un sacrificio. Al darse cuenta de todo
esto, los apóstoles Bernabé y Pablo se rasgaron las vestiduras
e irrumpieron por entre la multitud, gritando:
"Ciudadanos, ¿por qué hacen semejante cosa? Nosotros somos
hombres mortales, lo mismo que ustedes. Les predicamos el Evangelio que los
hará dejar los falsos dioses y convertirse al Dios vivo, que hizo el
cielo, la tierra, el mar y todo cuanto contienen. En épocas pasadas,
Dios dejó que cada pueblo siguiera su camino, aunque siempre se dio a
conocer por sus beneficios, mandando la lluvia y la cosecha a su tiempo, dándoles
así comida y alegría en abundancia". Y diciendo estas palabras,
consiguieron impedir, a duras penas, que la multitud les ofreciera un sacrificio.
Palabra de Dios. T. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
113 B 1-2.3-4.15-16.
R/. Que todos te alaben sólo a ti, Señor. Aleluya.
No por nosotros, Señor,
no por nosotros, sino por ti mismo, manifiesta tu grandeza, porque eres fiel
y bondadoso. Que no nos pregunten los paganos: "¿Dónde está
el Dios de Israel?" R/.
Nuestro Dios está en el cielo y Él ha hecho todo lo que quiso.
En cambio, los ídolos de los paganos son oro y plata, son dioses hechos
por artesanos. R/.
Que los llene de bendiciones el Señor, que hizo el cielo y la tierra.
El Señor se ha reservado para sí el cielo y a los hombres les
ha entregado la tierra. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 14, 26
R/. Aleluya, aleluya.
El Espíritu Santo les enseñará todas las cosas y les recordará todo cuanto yo les he dicho, dice el Señor. R/.
EVANGELIO
El Espíritu Santo, que mi Padre les enviará en mi nombre, les enseñará todas las cosas.
Del santo Evangelio según san Juan: 14, 21-26
En aquel tiempo, Jesús
dijo a sus discípulos: "El que acepta mis mandamientos y los cumple,
ése me ama. Al que me ama a mí, lo amará mi Padre, yo también
lo amaré y me manifestaré a él".
Entonces le dijo Judas (no el Iscariote): "Señor, ¿por qué
razón a nosotros sí te nos vas a manifestar y al mundo no?"
Le respondió Jesús: "El que me ama, cumplirá mi palabra
y mi Padre lo amará y vendremos a él y haremos en él nuestra
morada. El que no me ama no cumplirá mis palabras. Y la palabra que están
oyendo no es mía, sino del Padre, que me envió.
Les he hablado de esto ahora que estoy con ustedes; pero el Paráclito,
el Espíritu Santo que mi Padre les enviará en mi nombre, les enseñará
todas las cosas y les recordará todo cuanto yo les he dicho". Palabra
del Señor. T. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Recibe, Señor, este sacrificio de salvación que te ofrecemos en la conmemoración de santa Catalina, para que, instruidos por sus enseñanzas, podamos darte gracias con mayor fervor a ti, único Dios verdadero. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio de santas vírgenes y santos religiosos, MR, p. 543 (539).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. 1 Jn 1, 7
Si caminamos en la luz, como Dios es luz, estamos unidos unos con otros, y la sangre de Jesucristo, su Hijo, nos purifica de todo pecado. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Concede, Señor, la
vida eterna a quienes has alimentado en esta mesa celestial, la cual sostuvo
la vida temporal de santa Catalina. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Blanco Martes V de Pascua o Memoria de san Pío V, Papa* MR, p. 376 (377) / Lecc. I, p. 917
Otros santos: María de la Encarnación (Guyart Martín), religiosa ursulina. Beata Paulina van Mallinckrodt, virgen fundadora.
LEYENDO LA
BIBLIA EN MEDIO DE LA COMUNIDAD CRISTIANA
Hech 14,19-28; Sal 145; Jn 14, 27-31
A veces, ciertos párrafos de la Biblia han sido el centro de grandes debates doctrinales. Es el caso con el verso 28 de nuestro Evangelio de hoy, a saber, la afirmación de Jesús de que "el Padre es más grande que yo". Durante una controversia del siglo IV d. C. los partidarios de una secta llamada arrianismo utilizaron estas palabras para negar la plena divinidad de Cristo: él es dios, sostenían, pero un dios inferior al Padre. Aunque esta posición pareciera un poco esotérica, tuvo grandes consecuencias para la liturgia, la oración, la vida eclesial, e incluso para la política. Contestando dicha posición, los grandes exégetas cristianos hicieron hincapié en una regla que sigue siendo importante en nuestros días: hay que leer la Biblia no en aislamiento sectario sino en medio de la comunidad cristiana para la cual fue escrita.
ANTÍFONA DE ENTRADA Apoc 19, 5; 12, 10
Alaben a nuestro Dios todos cuantos lo temen, pequeños y grandes, porque ha llegado ya la salvación, el poder y el reinado de su Cristo. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que por la resurrección de tu Hijo nos rescatas para la vida eterna, concede a tu pueblo perseverar en la fe y la esperanza, para que no dudemos que se han de cumplir las promesas que tú hiciste y nos has dado a conocer. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Contaban a la comunidad cristiana lo que había hecho Dios por medio de ellos.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 14, 19-28
En aquellos días,
llegaron a Listra, procedentes de Antioquía y de Iconio, unos judíos,
que se ganaron a la multitud y apedrearon a Pablo; lo dieron por muerto y lo
arrastraron fuera de la ciudad. Cuando lo rodearon los discípulos, Pablo
se levantó y regresó a la ciudad. Pero al día siguiente,
salió con Bernabé hacia Derbe.
Después de predicar el Evangelio y de hacer muchos discípulos
en aquella ciudad, volvieron a Listra, Iconio y Antioquía, y ahí
animaban a los discípulos y los exhortaban a perseverar en la fe, diciéndoles
que hay que pasar por muchas tribulaciones para entrar en el Reino de Dios.
En cada comunidad designaban presbíteros, y con oraciones y ayunos los
encomendaban al Señor, en quien habían creído. Atravesaron
luego Pisidia y llegaron a Panfilia; predicaron en Perge y llegaron a Atalía.
De allí se embarcaron para Antioquía, de donde habían salido,
con la gracia de Dios, para la misión que acababan de cumplir.
Al llegar, reunieron a la comunidad y les contaron lo que había hecho
Dios por medio de ellos y cómo les había abierto a los paganos
las puertas de la fe. Ahí se quedaron bastante tiempo con los discípulos.
Palabra de Dios. T. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
14410-11. 12-13ab. 21.
R/. Bendigamos al Señor eternamente. Aleluya.
Que te alaben, Señor,
todas tus obras y que todos tus fieles te bendigan. Que proclamen la gloria
de tu reino y den a conocer tus maravillas. R/.
Que muestren a los hombres tus proezas, el esplendor y la gloria de tu reino.
Tu reino, Señor, es para siempre y tu imperio, para todas las generaciones.
R/.
Que mis labios alaben al Señor, que todos los seres lo bendigan ahora
y para siempre. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Lc 24, 46. 26
R/. Aleluya, aleluya.
Cristo tenía que morir y resucitar de entre los muertos, para entrar así en su gloria. R/.
EVANGELIO
Les doy mi paz.
Del santo Evangelio según san Juan: 14, 27-31
En aquel tiempo, Jesús
dijo a sus discípulos: "La paz les dejo, mi paz les doy. No se la
doy como la da el mundo. No pierdan la paz ni se acobarden. Me han oído
decir: 'Me voy, pero volveré a su lado'. Si me amaran, se alegrarían
de que me vaya al Padre, porque el Padre es más que yo. Se lo he dicho
ahora, antes de que suceda, para que cuando suceda, crean.
Ya no hablaré muchas cosas con ustedes, porque se acerca el príncipe
de este mundo; no es que él tenga poder sobre mí, pero es necesario
que el mundo sepa que amo al Padre y que cumplo exactamente lo que el Padre
me ha mandado". Palabra del Señor. T. Gloria a ti, Señor
Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Recibe, Señor, los dones que, jubilosa, tu Iglesia te presenta, y puesto que es a ti a quien debe su alegría, concédele también disfrutar de la felicidad eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I-V de Pascua, pp. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Rom 6, 8
Si hemos muerto con Cristo, creemos que también viviremos con él. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dirige, Señor, tu mirada compasiva sobre tu pueblo, al que te has dignado renovar con estos misterios de vida eterna, y concédele llegar un día a la gloria incorruptible de la resurrección. Por Jesucristo, nuestro Señor.
O bien:
*Memoria
de san Pío V, Papa MR, p. 736 (723)
Durante los seis años de su pontificado (1566-1572), se dedicó
a llevar a la práctica la reforma decretada por el Concilio de Trento.
Promulgó el Catecismo del Concilio, el Breviario y el Misal Romanos.
Reglamentó el rezo del rosario y se esmeró en propagar esta devoción.
Del Común de pastores: para un Papa, MR; p. 941 (933).
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que en tu providencia elegiste al Papa san Pío quinto para defender en tu Iglesia la fe y para darte culto dignamente, concédenos, por su intercesión, que podamos participar en tus santos misterios con fe viva y una caridad operante. Por nuestro Señor Jesucristo ...
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