|
INTENCIONES
DEL SANTO PADRE PARA JULIO
General: Misional: |
MISAL JULIO DEL 2010/ www.laverdadcatolica.org |
|
ANTÍFONA DE ENTRADA (Hb 7, 24)
Cristo, mediador de la nueva alianza, por el hecho de permanecer para siempre, posee un sacerdocio perpetuo.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que para gloria tuya y salvación de todos los hombres constituiste Sumo y Eterno Sacerdote a tu Hijo, Jesucristo, concede a quienes Él ha elegido como ministros suyos y administradores de sus sacramentos y de su Evangelio, la gracia de ser fieles en el cumplimiento de su ministerio. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
Lectura del libro del profeta Amós: 7, 10-17
En aquel tiempo, Amasías,
sacerdote de Betel, le envió este mensaje a Jeroboam, rey de Israel:
"Amós está conspirando contra ti en Israel y el país
ya no puede soportar sus palabras, pues anda diciendo que Jeroboam morirá
a espada e Israel saldrá de su país al destierro".
Amasías le dijo a Amós: "Vete de aquí, visionario,
y huye al país de Judá; gánate allá el pan, profetizando;
pero no vuelvas a profetizar en Betel, porque es santuario del rey y templo
del reino".
Respondió Amós: "Yo no soy profeta ni hijo de profeta, sino
pastor y cultivador de higos. El Señor me sacó de junto al rebaño
y me dijo: 'Ve y profetiza a mi pueblo, Israel'. Y ahora escucha tú la
palabra del Señor. Tú me dices: 'No profetices contra la casa
de Israel. No vaticines contra la casa de Isaac'. Pues bien, esto dice el Señor:
'Tu mujer será deshonrada en plena calle; tus hijos e hijas morirán
a espada; tu tierra se la repartirán los vencedores; tú mismo
morirás en tierra pagana e Israel será desterrado lejos de su
país' ". Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
El sacerdote de Betel está más pendiente de custodiar los intereses de la casa real que de servir al Señor. Amós lo perturba y anuncia un juicio sumario contra el rey Jeroboán.
Del salmo 18 R/.
La voluntad de Dios es santa.
La ley del Señor es perfecta del todo y reconforta el alma;
inmutables son las palabras del Señor y hacen sabio al sencillo. R/.
En los mandamientos de Dios hay rectitud y alegría para el corazón;
son luz los preceptos del Señor para alumbrar el camino. R/.
La voluntad de Dios es santa y para siempre estable; los mandamientos del Señor
son verdaderos y enteramente justos. R/.
Más deseables que el oro y las piedras preciosas las normas del Señor,
y más dulces que la miel de un panal que gotea. R/.
ACLAMACIÓN
(2 Co 5, 19) R/. Aleluya, aleluya.
Dios ha reconciliado consigo al mundo, por medio de Cristo, y nos ha
encomendado a nosotros el mensaje de la reconciliación. R/.
Lectura (Proclamación) del santo Evangelio según san. Mateo: 9, 1-8
En
aquel tiempo, Jesús subió de nuevo a la barca, pasó a la
otra orilla del lago y llegó a Cafarnaúm, su ciudad.
En esto, trajeron a donde El estaba a un paralítico postrado en una camilla.
Viendo Jesús la fe de aquellos hombres, le dijo al paralítico:
"Ten confianza, hijo. Se te perdonan tus pecados".
Al oír esto, algunos escribas pensaron: "Este hombre está
blasfemando". Pero Jesús, conociendo sus pensamientos, les dijo:
"¿Por qué piensan mal en sus corazones? ¿Qué
es más fácil: decir Se te perdonan tus pecados', o decir 'Levántate
y anda'? Pues para que sepan que el Hijo del hombre tiene poder en la tierra
para perdonar los pecados, —le dijo entonces al paralítico-: Levántate,
toma tu camilla y vete a tu casa".
Él se levantó y se fue a su casa. Al ver esto, la gente se llenó
de temor y glorificó a Dios, que había dado tanto poder a los
hombres. Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
Con soberana autoridad Jesús dispone del poder de sanar el cuerpo y el espíritu. Él responde favorablemente a los ruegos y demandas de los hombres y mujeres postradas por el sufrimiento.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Que Jesucristo, nuestro Mediador, haga que te sean aceptables, Señor, nuestras ofrendas y que su sacrificio redentor nos haga vivir cada día más unidos a Él, para que toda nuestra vida sea grata a tus ojos Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Mt 28, 20)
Sepan que yo estaré con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Que el Cuerpo y la Sangre de tu Hijo, que hemos ofrecido en el sacrificio y recibido en la comunión, sean para nosotros, Señor, el principio de una vida nueva, a fin de que, unidos a ti por el amor, demos frutos que permanezcan para siempre. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE ENTRADA (Sal 32, 11. 19)
Los proyectos de su corazón subsisten de edad en edad, para librar de la muerte la vida de sus fieles, y reanimarlos en tiempo de hambre.
ORACIÓN COLECTA
Haz, Señor, que nos revistamos con las virtudes del corazón de tu Hijo, y nos encendamos con el amor que lo inflama, para que, asemejándonos a Él, merezcamos participar de la eterna redención. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
Lectura del libro del profeta Amós: 8, 4-6. 9-12
Escuchen esto, los que buscan
al pobre sólo para arruinarlo y andan diciendo: "¿Cuándo
pasará el descanso del primer día del mes para vender nuestro
trigo, y el descanso del sábado para reabrir nuestros graneros?".
Disminuyen las medidas, aumentan los precios, alteran las balanzas, obligan
a los pobres a venderse; por un par de sandalias los compran y hasta venden
el salvado como trigo.
"Pues bien, en aquel día, dice el Señor, yo haré que
se oscurezca el sol en pleno día y, a plena luz, cubriré la tierra
de tinieblas. Convertiré en duelo las fiestas de ustedes y en gemidos,
sus canciones. Haré que todos se vistan de sayal y se rapen por completo
la cabeza. Ese día será como de luto por el hijo único
y su final será de llanto y amargura. Días vendrán, dice
el Señor, en que les haré sentir hambre, pero no hambre de pan
ni sed de agua, sino de oír la palabra del Señor.
Entonces andarán errantes de norte a sur y de oriente a poniente buscando
la palabra del Señor, pero no la encontrarán". Palabra
de Dios. Te alabamos, Señor.
La violencia y la depredación de los inocentes irrita a Dios. Amós lo sabe y anuncia un juicio cósmico que destruirá la falsa prosperidad de los israelitas del norte.
Del salmo 118 R/.
Con todo el corazón, Señor, te busco.
Dichoso el que es fiel a las enseñanzas del Señor y lo
busca de todo corazón. Con todo el corazón te voy buscando, no
me dejes desviar de tus preceptos. R/.
Mi alma se consume, deseando sin cesar tus mandamientos. He escogido el camino
de la lealtad a tu voluntad y a tus mandamientos. R/.
Mira cómo anhelo tus decretos: dame vida con tu justicia. Hondamente
suspiro, Señor, por guardar tus mandamientos. R/.
ACLAMACIÓN
(Mt 11, 28) R/. Aleluya, aleluya.
Vengan a mí, todos los que están fatigados y agobiados
por la carga, y yo les daré alivio, dice el Señor. R/.
Lectura (Proclamación) del santo Evangelio según san Mateo: 9, 9-13
En aquel tiempo, Jesús
vio a un hombre llamado Mateo, sentado a su mesa de recaudador de impuestos,
y le dijo: "Sígueme". El se levantó y lo siguió.
Después, cuando estaba a la mesa en casa de Mateo, muchos publícanos
y pecadores se sentaron también a comer con Jesús y sus discípulos.
Viendo esto, los fariseos preguntaron a los discípulos: "¿Por
qué su Maestro come con publícanos y pecadores?". Jesús
los oyó y les dijo: "No son los sanos los que necesitan de médico,
sino los enfermos. Vayan, pues, y aprendan lo que significa: Yo quiero misericordia
y no sacrificios. Yo no he venido a llamar a los justos, sino a los pecadores".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
Jesús no se intimida ante los estigmas sociales y las etiquetas puritanas. El llamado a participar en el Reinado de Dios está abierto a toda persona de buena voluntad.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Dios nuestro, Padre misericordioso, que por el inmenso amor con que nos has amado, nos diste con inefable bondad a tu Hijo único, concédenos que, identificados con Él en una perfecta unidad, te ofrezcamos una digna oblación. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Jn 19, 34)
Uno de los soldados le abrió el costado con su lanza, y al punto salió sangre y agua.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Habiendo participado de tu sacramento de amor, te pedimos, Señor, la gracia de parecernos a Cristo aquí en la tierra, para merecer compartir su gloria allá en el cielo, con Él, que vive y reina por los siglos de los siglos.
Santos: Tomás, apóstol; León II, Papa y Ramón o Gavrard religioso.
Vísperas I domingo: 2a semana del Salterio Fiesta (Rojo)
ANTÍFONA DE ENTRADA (Sal 117. 28)
Te alabaré y te daré gracias siempre, porque tú eres mi salvador, Señor mío y Dios mío.
Se dice Gloria
ORACIÓN COLECTA
Padre todopoderoso, tú que concediste a santo Tomás reconocer a Cristo como su Señor y su Dios; por intercesión de este Apóstol, haz que crezcamos en la fe, para que creyendo firmemente en tu Hijo Jesucristo podamos participar de su vida divina. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los efesios: 2, 19-22
Hermanos: Ya no son ustedes
extranjeros ni advenedizos; son conciudadanos de los santos y pertenecen a la
familia de Dios, porque han sido edificados sobre el cimiento de los apóstoles
y de los profetas, siendo Cristo Jesús la piedra angular.
Sobre Cristo, todo el edificio se va levantando bien estructurado, para formar
el templo santo en el Señor, y unidos a Él también ustedes
se van incorporando al edificio, por medio del Espíritu Santo, para ser
morada de Dios. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
El apóstol san Pablo intuye primero que nadie el designio universal de Dios. El padre de todos nos lanza una invitación abierta e incluyente. Todos, sin excepción, formamos la familia de Dios.
Del salmo 116 R/
Vayan por todo el mundo y prediquen el Evangelio.
Que alaben al Señor todas las naciones, que lo aclamen todos
los pueblos. R/.
Porque grande es su amor hacia nosotros y su fidelidad dura por siempre. R/.
ACLAMACIÓN
(cfr. Jn 20, 29) R/. Aleluya, aleluya.
Tomás, tú crees porque me has visto, dice el Señor;
dichosos los que creen sin haberme visto.
Lectura (Proclamación) del santo Evangelio según san Juan, 24-29
Tomás, uno de los
Doce, a quien llamaban el Gemelo, no estaba con ellos cuando vino Jesús,
y los otros discípulos le decían: "Hemos visto al Señor".
Pero él les contestó: "Si no veo en sus manos la señal
de los clavos y si no meto mi dedo en los agujeros de los clavos y no meto mi
mano en su costado, no creeré".
Ocho días después, estaban reunidos los discípulos a puerta
cerrada y Tomás estaba con ellos. Jesús se presentó de
nuevo en medio de ellos y les dijo: "La paz esté con ustedes".
Luego le dijo a Tomás: "Aquí están mis manos; acerca
tu dedo. Trae acá tu mano; métela en mi costado y no sigas dudando,
sino cree". Tomás le respondió: "¡Señor
mío y Dios mío!" Jesús añadió: "Tú
crees porque me has visto; dichosos los que creen sin haber visto". Palabra
del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
Tomás demanda evidencias para apegarse a Jesús resucitado. Su fe es vacilante como la nuestra. El Señor no lo abandona y lo exhorta a creer en su victoriosa resurrección.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Acepta, Señor, el sacrificio de alabanza que vamos a ofrecerte en esta festividad de santo Tomás, apóstol, y conserva en nosotros los dones de tu redención. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I o II de los Apóstoles.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (cfr. Jn 20, 27)
Jesús dijo a Tomás: Acerca tu mano, toca las cicatrices dejadas por los clavos y no seas incrédulo, sino creyente.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Padre misericordioso, que nos has alimentado con el Cuerpo y la Sangre de tu Hijo, haz que, junto con el apóstol Tomás, reconozcamos en Cristo a nuestro Señor y a nuestro Dios y demos testimonio con la vida de lo que creemos con la fe. Por Jesucristo, nuestro Señor.
XIV DOMINGO ORDINARIO
Nuestra Señora del Refugio
Santos: Isabel de Portugal, reina y Oseas, profeta (Verde)
ANTÍFONA DE ENTRADA (Sal 47, 10-11)
Recordaremos, Señor, los dones de tu amor en medio de tu templo. Que todos los hombres de la tierra te conozcan y alaben, porque es infinita tu justicia.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que por medio de la muerte de tu Hijo has redimido al mundo de la esclavitud del pecado, concédenos participar ahora de una santa alegría y, después en el cielo, de la felicidad eterna. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
Lectura del libro del profeta Isaías: 66, 10-14
Alégrense con Jerusalén,
gocen con ella todos los que la aman, alégrense de su alegría
todos los que por ella llevaron luto, para que se alimenten de sus pechos, se
llenen de sus consuelos y se deleiten con la abundancia de su gloria. Porque
dice el Señor: "Yo haré correr la paz sobre ella como un
río y la gloria de las naciones como un torrente desbordado. Como niños
serán llevados en el regazo y acariciados sobre sus rodillas; como un
hijo a quien su madre consuela, así los consolaré yo.
En Jerusalén serán ustedes consolados. Al ver esto se alegrará
su corazón y sus huesos florecerán como un prado. Y los siervos
del Señor conocerán su poder". Palabra de Dios. Te
alabamos, Señor.
Jerusalén como primicia de Israel será restaurada; sus hijos, los sobrevivientes del exilio, se alegrarán de manera especial por la restauración de tan prolífica madre.
Del salmo 65 R/.
Las obras del Señor son admirables.
Que aclame al Señor toda la tierra; celebremos su gloria y su
poder, cantemos un himno de alabanza, digamos al Señor: "Tu obra
es admirable". R/.
Que se postre ante ti la tierra entera y celebre con cánticos tu nombre.
Admiremos las obras del Señor, los prodigios que ha hecho por los hombres.
R/.
El transformó el Mar Rojo en tierra firme y los hizo cruzar el Jordán
a pie enjuto. Llenémonos por eso de gozo y gratitud: El Señor
es eterno y poderoso. R/.
Cuantos temen a Dios vengan y escuchen, y les diré lo que ha hecho por
mí. Bendito sea Dios que no rechazó mi súplica, ni me retiró
su gracia. R/..
Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los gálatas: 6, 14-18
Hermanos: No permita Dios
que yo me gloríe en algo que no sea la cruz de nuestro Señor Jesucristo,
por el cual el mundo está crucificado para mí y yo para el mundo.
Porque en Cristo Jesús de nada vale el estar circuncidado o no, sino
el ser una nueva creatura.
Para todos los que vivan conforme a esta norma y también para el verdadero
Israel, la paz y la misericordia de Dios. De ahora en adelante, que nadie me
ponga más obstáculos, porque llevo en mi cuerpo la marca de los
sufrimientos que he pasado por Cristo.
Hermanos, que la gracia de nuestro Señor Jesucristo esté con ustedes.
Amén. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
San Pablo distingue claramente lo específico del camino cristiano: la consolidación de una nueva criatura, de una humanidad nueva. Los valores terrenales quedan así relativizados.
ACLAMACIÓN
(Col 3, 15. 16) R/. Aleluya, aleluya.
Que en sus corazones reine la paz de Cristo; que la palabra de Cristo habite
en ustedes con toda su riqueza. R/.
Lectura (Proclamación) del santo Evangelio según san Lucas: 10, 1-12. 17-20
En aquel tiempo, Jesús
designó a otros setenta y dos discípulos y los mandó por
delante, de dos en dos, a todos los pueblos y lugares a donde pensaba ir, y
les dijo: "La cosecha es mucha y los trabajadores pocos. Rueguen, por lo
tanto, al dueño de la mies que envíe trabajadores a sus campos.
Pónganse en camino; yo los envío como corderos en medio de lobos.
No lleven ni dinero, ni morral, ni sandalias y no se detengan a saludar a nadie
por el camino. Cuando entren en una casa digan: 'Que la paz reine en esta casa'.
Y si allí hay gente amante de la paz, el deseo de paz de ustedes se cumplirá;
si no, no se cumplirá. Quédense en esa casa. Coman y beban de
lo que tengan, porque el trabajador tiene derecho a su salario. No anden de
casa en casa. En cualquier ciudad donde entren y los reciban, coman lo que les
den. Curen a los enfermos que haya y díganles:
`Ya se acerca a ustedes el Reino de Dios'. Pero si entran en una ciudad y no
los reciben, salgan por las calles y digan: 'Hasta el polvo de esta ciudad,
que se nos ha pegado a los pies nos lo sacudimos, en señal de protesta
contra ustedes. De todos modos, sepan que el Reino de Dios está cerca'.
Yo les digo que en el día del juicio, Sodoma será tratada con
menos rigor que esa ciudad".
Los setenta y dos discípulos regresaron llenos de alegría y le
dijeron a Jesús: "Señor, hasta los demonios se nos someten
en tu nombre".
Él les contestó: "Vi a Satanás caer del cielo como
el rayo. A ustedes les he dado poder para aplastar serpientes y escorpiones
y para vencer toda la fuerza del enemigo, y nada les podrá hacer daño.
Pero no se alegren de que los demonios se les someten. Alégrense más
bien de que sus nombres están escritos en el cielo". Palabra
del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
Los discípulos enviados por Jesús son portadores de un mensaje de paz y esperanza. Es un mensaje exigente que debe difundirse con transparencia y prontitud.
Credo.
ORACIÓN UNIVERSAL
Presentemos al Padre
nuestras plegarias.
Después de cada petición diremos: Escúchanos, Padre.
Por los cristianos de nuestro país. Que demos un buen testimonio de la
fe y la esperanza que nos mueven. Oremos.
Por el proceso electoral en diversos estados del país. Que se desarrolle
en paz y se respete la voluntad de los ciudadanos. Oremos.
Por los misioneros y misioneras Que la fortaleza y la gracia de Dios los acompañe
en su misión de anunciar el Evangelio. Oremos.
Por los inmigrantes que han venido a vivir entre nosotros buscando una vida
mejor. Que puedan encontrar un trabajo digno, y sean acogidos como toda persona
merece. Oremos.
Por nuestros familiares y amigos difuntos. Que Dios los acoja para siempre en
la plenitud de su Reino. Oremos.
Por nosotros y por nuestra parroquia. Que nos amemos y nos ayudemos mutuamente,
cada día más. Oremos.
Escucha, Padre, nuestra oración, y llénanos con tu bondad. Por
Jesucristo, nuestro Señor.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Que el sacrificio que vamos a ofrecerte nos purifique, Señor, y nos ayude a conformar cada día más nuestra vida con los ejemplos de tu Hijo Jesucristo, que vive y reina por los siglos de los siglos.
Prefacio para los domingos del Tiempo Ordinario.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Sal 33, 9)
Hagan la prueba y verán qué bueno es el Señor; dichoso el que se acoge a Él
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dios omnipotente y eterno, que nos has alimentado con el sacramento de tu amor, concédenos vivir siempre en tu amistad y agradecer continuamente tu misericordia. Por Jesucristo, nuestro Señor.
UNA
REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO.-
El mensaje cristiano no envejece. Por más que cambien las circunstancias
históricas en las que vivimos los cristianos, el desafío que Jesús
nos lanza es pertinente y valioso. Somos portadores de un mensaje de paz y,
a la vez, artífices y testigos de una renovación
personal y comunitaria. A medida que las comunidades cristianas nos organicemos
y convivamos conforme a valores y principios evangélicos seremos creíbles.
El desgaste que vive nuestra sociedad también afecta nuestra iglesia.
La urgencia de renovarnos es permanente. Somos miembros de una comunidad eclesial
que siempre reconocerá la urgencia de reformarse, para ser fiel al mandato
misionero del Señor Jesús. De no hacerlo, nos sacudirán
el polvo de los pies en más de una ocasión.
ANTÍFONA DE ENTRADA (Lis 4,18)
El Espíritu del Señor está sobre mí; Él me ha enviado a anunciar la Buena Nueva a los pobres, dice el Señor.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, cuyo Espíritu nos guía y nos protege, escucha misericordioso nuestras súplicas para que la fe de los que creemos en ti, se acreciente con tus constantes beneficios. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
Lectura del libro del profeta Oseas: 2, 16. 17-18. 21-22
Esto dice el Señor:
"Yo conduciré a Israel, mi esposa infiel, al desierto y le hablaré
al corazón Ella me responderá allá, como cuando era joven,
como el día en que salió de Egipto. Aquel día, palabra
del Señor, ella me llamará 'Esposo mío', y no me volverá
a decir 'Baal mío'.
Israel, yo te desposaré conmigo para siempre. Nos uniremos en la justicia
y la rectitud, en el amor constante y la ternura; yo te desposaré en
la fidelidad y entonces tú conocerás al Señor".
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
Dios no se impacienta con su esposa infiel. Retorna la senda y se lanza a reconquistarla de nuevo, hablándole al corazón e invitándole a vivir en fidelidad y justicia.
Del salmo 144 R/.
El Señor es compasivo y misericordioso.
Un día tras otro, Señor, bendeciré tu nombre y
no cesará mi boca de alabarte. Muy digno de alabanza es el Señor,
por ser su grandeza incalculable. R/.
Cada generación a la que sigue anunciará tus obras y proezas.
Se hablará de tus hechos portentosos, del glorioso esplendor de tu grandeza.
R/.
Alabarán tus maravillosos prodigios y contarán tus grandes acciones;
difundirán la memoria de tu inmensa bondad y aclamarán tus victorias.
R/.
El Señor es compasivo y misericordioso, lento para enojarse y generoso
para perdonar. Bueno es el Señor para con todos y su amor se extiende
a todas sus creaturas. R/.
ACLAMACIÓN
(cfr. 2 Tm 1, 10) R/. Aleluya, aleluya.
Jesucristo, nuestro salvador, ha vencido la muerte y ha hecho resplandecer
la vida por medio del Evangelio. R/.
Lectura (Proclamación) del santo Evangelio según san Mateo: 9, 18-26
En aquel tiempo, mientras
Jesús hablaba, se le acercó un jefe de la sinagoga, se postró
ante Él y le dijo: "Señor, mi hija acaba de morir; pero ven
tú a imponerle las manos y volverá a vivir". Jesús
se levantó y lo siguió, acompañado de sus discípulos.
Entonces, una mujer que padecía flujo de sangre desde hacía doce
años, se le acercó por detrás y le tocó la orilla
del manto, pues pensaba: "Con sólo tocar su manto, me curaré".
Jesús, volviéndose, la miró y le dijo: "Hija, ten
confianza; tu fe te ha curado". Yen aquel mismo instante quedó curada
la mujer.
Cuando llegó a la casa del jefe de la sinagoga, vio Jesús a los
flautistas, y el tumulto de la gente y les dijo: "Retírense de aquí.
La niña no está muerta; está dormida". Y todos se
burlaron de Él. En cuanto hicieron salir a la gente, entró Jesús,
tomó a la niña de la mano y ésta se levantó. La
noticia se difundió por toda aquella región. Palabra del
Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
La muerte asedia y aqueja a una mujer y una niña. Jesús sabe que Dios ama incondicionalmente a sus criaturas y devuelve la salud y la vida a ese par anónimo.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Señor, que el fuego del Espíritu que encendió los corazones de los discípulos de tu Hijo Jesucristo, santifique este sacrificio que vamos a ofrecerte. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Sal 103, 30)
Señor, envías tu Espíritu y creas la vida, y así renuevas la faz de la tierra.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, que los dones que hemos recibido enciendan en nosotros el fuego del Espíritu Santo, que de manera tan inefable infundiste en tus apóstoles. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Santos: María Goretti, mártir; Isaías, profeta. Beata Nazaria March, fundadora. Feria (Verde)
ANTÍFONA DE ENTRADA (Sal 94, 6-7)
Entremos y adoremos de rodillas al Señor, creador nuestro, porque Él es nuestro Dios.
ORACIÓN COLECTA
Señor, que tu amor incansable cuide y proteja siempre a estos hijos tuyos, que han puesto en tu gracia toda su esperanza. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
Lectura del libro del profeta Oseas: 8, 4-7. 11-13
Esto dice el Señor:
"Han nombrado reyes sin contar conmigo, han escogido príncipes sin
saberlo yo. Con su oro y su plata se han hecho ídolos, para su perdición.
Tu becerro, Samaria, es repulsivo y mi ira arde contra él. ¿Hasta
cuándo serán incapaces de purificarse los hijos de Israel? Un
artesano ha hecho ese becerro, que no es Dios, por eso quedará hecho
trizas.
Siembran vientos y cosecharán tempestades; su trigo no dará espigas,
no producirá harina su grano, y si la produce, los extranjeros se la
comerán.
Efraín ha construido multitud de altares, y sólo le han servido
para pecar. Aunque yo les escribiera todas mis leyes, las ignorarían
como si fueran de un extraño. Aunque inmolen víctimas en mi honor
y coman su carne, no me dan gusto, pues tengo presentes sus culpas y castigaré
sus pecados. Por eso volverán a la esclavitud". Palabra
de Dios. Te alabamos, Señor.
Los israelitas del norte quisieron apresar la grandeza de Dios en la representación insolente de un novillo. El Dios soberano no puede ser manipulado por creyente alguno.
Del salmo 113 R/.
Nosotros confiamos en el Señor.
Nuestro Dios está en el cielo y Él ha hecho todo lo que
quiso. En cambio, los ídolos de los paganos son oro y plata, son dioses
hechos por artesanos. R/.
Tienen boca, pero no hablan; tienen ojos, pero no ven; tienen orejas, pero no
oyen; tienen nariz, pero no huelen. R/.
Tienen manos, pero no tocan; tienen pies, pero no andan. Que sean como ellos
quienes los hacen y cuantos confían en ellos. R/.
Los hijos de Israel confían en el Señor: él es su auxilio
y su escudo; los hijos de Aarón confían en el Señor: él
es su auxilio y su escudo. R/.
ACLAMACIÓN
(Jn 10, 14) R/. Aleluya, aleluya.
Yo soy el buen pastor dice el Señor; yo conozco a mis ovejas
y ellas me conocen a mí. R/.
Lectura (Proclamación) del santo Evangelio según san Mateo: 9, 32-38
En aquel tiempo, llevaron ante Jesús a un hombre mudo, que estaba poseído por el demonio. Jesús expulsó al demonio y el mudo habló. La multitud, maravillada, decía: "Nunca se había visto nada semejante en Israel". Pero los fariseos decían: "Expulsa a los demonios por autoridad del príncipe de los demonios". Jesús recorría todas las ciudades y los pueblos, enseñando en las sinagogas, predicando el Evangelio del Reino y curando toda enfermedad y dolencia. Al ver a las multitudes, se compadecía de ellas, porque estaban extenuadas y desamparadas, como ovejas sin pastor. Entonces dijo a sus discípulos: "La cosecha es mucha y los trabajadores, pocos Rueguen, por lo tanto, al dueño de la mies que envíe trabajadores a sus campos". Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
Los enfermos y afligidos del cuerpo y del Espíritu se allegan a Jesús pidiéndole auxilio. El Señor los acoge y asocia a sus discípulos en la tarea de difundir la paz divina.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Señor, Dios nuestro, tú que nos has dado este pan y este vino para reparar nuestras fuerzas, conviértelos para nosotros en sacramento de vida eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Mt 5, 5-6)
Bienaventurados los que lloran, porque serán consolados. Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, porque serán saciados.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, tú que has querido hacemos participar de un mismo pan y de un mismo cáliz, concédenos vivir de tal manera unidos en Cristo, que nuestro trabajo sea eficaz para la salvación del mundo. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Santos: Fermín de Pamplona, mártir; Mael Ruain, abad. Beata Maria Romero, religiosa. Feria (Verde)
ANTÍFONA DE ENTRADA (Lc 12, 42)
Éste es el siervo prudente y fiel, a quien el Señor puso al frente de su familia.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que en tu inefable providencia elegiste a san José por esposo de la santísima Madre de tu Hijo, concédenos tener como intercesor en el cielo a quien veneramos como protector en la tierra. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
Lectura del libro del profeta Oseas: 10, 1-3. 7-8. 12
Israel era una viña
frondosa que daba abundante fruto. Pero cuanto más se multiplicaban sus
frutos, más se multiplicaban sus altares paganos; cuanto más rico
era el país, más ricos fueron sus monumentos a los ídolos.
Su corazón está dividido y van a pagar sus culpas. El Señor
derribará sus altares y demolerá sus monumentos. Pero ellos dicen:
"No tenemos rey". Pero si no temen al Señor, ¿qué
podrá hacer por ellos el rey?
Samaria y su becerro desaparecerán como espuma sobre el agua. Todos los
santuarios de los ídolos serán destruidos y sobre sus altares
crecerán espinas y cardos, porque la idolatría ha sido el pecado
de Israel. Entonces gritarán a los montes: "¡Cúbrannos!",
y a las colinas: ¡Sepúltennos!".
Siembren justicia y cosecharán misericordia; preparen sus tierras para
la siembra, pues ya es tiempo de buscar al Señor, para que venga y llueva
la salvación sobre ustedes. Palabra de Dios. Te alabamos,
Señor.
Cuando Israel alcanza la prosperidad se ensoberbeció creyendo disponer de los secretos de la naturaleza. El profeta los invita a trabajar confiando en la bendición divina.
Del salmo 104 R/.
Recurramos al Señor y a su poder.
Entonen en su honor himnos y cantos, celebren los portentos del Señor.
Del nombre del Señor enorgullézcanse y siéntase feliz el
que lo busca. R/.
Recurran al Señor y a su poder, y a su presencia acudan. Recuerden los
prodigios que El ha hecho, sus portentos y oráculos. R/.
Descendientes de Abraham, su servidor, estirpe de Jacob, su predilecto, escuchen:
El Señor es nuestro Dios y gobiernan la tierra sus decretos R/.
ACLAMACIÓN
(Mc 1, 15) R/. Aleluya, aleluya.
El Reino de Dios está cerca, dice el Señor; arrepiéntanse
y crean en el Evangelio. R/.
Lectura (Proclamación) del santo Evangelio según san Mateo: 10, 1-7
En
aquel tiempo, llamando Jesús a sus doce discípulos, les dio poder
para expulsar a los espíritus impuros y curar toda clase de enfermedades
y dolencias.
Estos son los nombres de los doce apóstoles: el primero de todos, Simón,
llamado Pedro, y su hermano Andrés; Santiago y su hermano Juan, hijos
del Zebedeo; Felipe y Bartolomé; Tomás y Mateo, el publicano;
Santiago, hijo de Alfeo, y Tadeo; Simón, el cananeo, y Judas Iscariote,
que fue el traidor.
A estos doce los envió Jesús con estas instrucciones: "No
vayan a tierra de paganos, ni entren en ciudades de samaritanos. Vayan más
bien en busca de las ovejas perdidas de la casa de Israel. Vayan y proclamen
por el camino que ya se acerca el Reino de los cielos". Palabra
del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
Jesús vive y actúa como un hijo de Israel. Se sabe enviado por Dios a reconciliar a sus hermanos. Israel está llamado a vivir como una familia cobijada bajo el amor compasivo del Padre.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Por intercesión de san José, a quien confiaste la misión de cuidar de tu Unigénito como padre, te pedimos, Señor, que nos concedas poder ofrecerte dignamente este sacrificio de alabanza. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Mt 25, 21)
Muy bien, siervo bueno y fiel, entra en el gozo de tu Señor.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Renovados con este sacramento que da vida, te rogamos, Señor, que nos concedas vivir para ti en justicia y santidad, a ejemplo y por intercesión de san José, el varón justo y obediente que contribuyó con sus servicios a la realización de tus grandes misterios. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Santos: Adrián o Adriano III, Papa. Gregorio compañeros, mártires. Beato Eugenio III, Papa. Feria (Verde)
ANTÍFONA DE ENTRADA (Sal 77, 23-25)
Abrió Dios las compuertas del cielo e hizo llover sobre ellos el maná para que comiesen; les dio un trigo celeste, y el hombre comió pan de ángeles.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que llevaste a cabo la obra de la redención humana por el misterio pascual de tu Hijo, concédenos que, al anunciar llenos de fe por medio de los signos sacramentales, su muerte y resurrección, recibamos cada vez con mayor abundancia los frutos de la salvación. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
Lectura del libro del profeta Oseas: 11, 1-4. 8-9
"Cuando Israel era
niño, yo lo amé, y de Egipto llamé a mi hijo, dice el Señor.
Pero, mientras más lo llamaba, más se alejaba de mí; ofrecía
sacrificios a los dioses falsos y quemaba ofrendas a los ídolos.
Yo fui quien enseñó a andar a Efraín, yo quien lo llevaba
en brazos; pero no comprendieron que yo cuidaba de ellos.
Yo los atraía hacia mí con los lazos del cariño, con las
cadenas del amor. Yo fui para ellos como un padre, que estrecha a su creatura
y se inclina hacia ella para darle de comer.
Mi corazón se conmueve dentro de mí y se inflama toda mi compasión.
No cederé al ardor de mi cólera, no volveré a destruir
a Efraín, pues yo soy Dios y no hombre, yo soy Santo en medio de ti y
no enemigo a la puerta". Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
En un arrebato cargado de emoción Dios despliega su compasión infinita. Israel es su hijo pequeño y no cederá, como los mortales comunes, al ardor de la cólera.
Del salmo 79 R/.
Ven, Señor, a salvarnos.
Escúchanos, pastor de Israel; tú que estás rodeado
de querubines, manifiéstate, despierta tu poder y ven a salvarnos. R/.
Señor, Dios de los ejércitos, vuelve tus ojos, mira tu viña
y visítala; protege la cepa plantada por tu mano, el renuevo que tú
mismo cultivaste. R/.
ACLAMACIÓN
(Mc 1, 15) R/. Aleluya, aleluya.
El Reino de Dios está cerca, dice el Señor; arrepiéntanse
y crean en el Evangelio. R/.
Lectura (Proclamación) del santo Evangelio según san Mateo: 10, 7-15
En
aquel tiempo, envió Jesús a los Doce con estas instrucciones:
"Vayan y proclamen por el camino que ya se acerca el Reino de los cielos.
Curen a los leprosos y demás enfermos; resuciten a los muertos y echen
fuera a los demonios. Gratuitamente han recibido este poder; ejérzanlo,
pues, gratuitamente.
No lleven con ustedes, en su cinturón, monedas de oro, de plata o de
cobre. No lleven morral para el camino ni dos túnicas ni sandalias ni
bordón, porque el trabajador tiene derecho a su sustento.
Cuando entren en una ciudad o en un pueblo, pregunten por alguien respetable
y hospédense en su casa hasta que se vayan. Al entrar, saluden así:
'Que haya paz en esta casa'. Y si aquella casa es digna, la paz de ustedes reinará
en ella; si no es digna, el saludo de paz de ustedes no les aprovechará.
Y si no los reciben o no escuchan sus palabras, al salir de aquella casa o de
aquella ciudad, sacúdanse el polvo de los pies. Yo les aseguro que el
día del juicio, Sodoma y Gomorra serán tratadas con menos rigor
que esa ciudad". Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor
Jesús.
Los misioneros de la primera hora no son portavoces de discursos gastados. Su palabra va asociada a una acción transformadora que cambiará la situación de muchas personas.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Señor, al celebrar el memorial de nuestra salvación, te pedimos humildemente nos concedas que este sacramento de amor sea siempre para nosotros un signo de unidad y un vínculo de amor. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Jn 6, 51-52)
Yo soy el pan vivo que ha bajado del cielo, dice el Señor. El que coma de este pan, vivirá eternamente; pues el pan que voy a dar, es mi carne, y lo doy para vida del mundo.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, que la participación en este banquete celestial nos santifique, de modo que, por la recepción del Cuerpo y Sangre de Cristo, se estreche entre nosotros la unión fraterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE ENTRADA (cfr. Sb 11, 24. 25. 27)
Señor, tú tienes misericordia de todos y nunca odias a tus creaturas; borras los pecados de los hombres que se arrepienten, y los perdonas, porque tú, Señor, eres nuestro Dios.
ORACIÓN COLECTA
Escucha, Señor, nuestra oración y perdona nuestros pecados, para que recibamos, juntamente, tu perdón y tu paz Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
Lectura del libro del profeta Oseas: 14, 2-10
Esto dice el Señor
Dios: "Israel, conviértete al Señor, Dios tuyo, pues tu maldad
te ha hecho sucumbir. Arrepiéntanse y acérquense al Señor
para decirle: 'Perdona todas nuestras maldades, acepta nuestro arrepentimiento
sincero, que solemnemente te prometemos.
Ya no nos salvará Asiria, ya no confiaremos en nuestro ejército,
ni volveremos a llamar "dios nuestro" a las obras de nuestras manos,
pues sólo en ti encuentra piedad el huérfano'.
Yo perdonaré sus infidelidades, dice el Señor; los amaré,
aunque no lo merezcan, porque mi cólera se ha apartado de ellos. Seré
para Israel como rocío; mi pueblo florecerá como el lirio, hundirá
profundamente sus raíces, como el álamo, y sus renuevos se propagarán;
su esplendor será como el del olivo y tendrá la fragancia de los
cedros del Líbano.
Volverán a vivir bajo mi sombra, cultivarán los trigales y las
viñas, que serán tan famosas como las del Líbano. Ya nada
tendrá que ver Efraín con los ídolos. Yo te he castigado,
pero yo también te voy a restaurar, pues soy como un ciprés verde,
y gracias a mí, tú das frutos. Quien sea sabio, que comprenda
estas cosas y quien sea prudente, que las conozca. Los mandamientos del Señor
son rectos y los justos los cumplen; los pecadores, en cambio, tropiezan en
ellos y caen". Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
El profeta está seguro de que Dios ama a su pueblo de manera desmedida. Basta que el pueblo se arrepienta y confiese su pecado para que Dios los haga revivir.
Del salmo 50 R/.
Abre, Señor, mis labios y te alabaré.
Por tu inmensa compasión y misericordia, Señor, apiádate
de mí y olvida mis ofensas. Lávame bien de todos mis delitos y
purifícame de mis pecados. R/.
Enséñame, Señor, la rectitud de corazón que quieres.
Lávame tú, Señor, y purifícame y quedaré
más blanco que la nieve. R/.
Crea en mi, Señor, un corazón puro, un espíritu nuevo para
cumplir tus mandamientos. No me arrojes, Señor, lejos de ti ni retires
de mí tu santo espíritu. R/.
Devuélveme tu salvación, que regocija, y mantén en mí
un alma generosa. Señor, abre mis labios y cantará mi boca tu
alabanza. R/.
ACLAMACIÓN
(Jn 16, 13; 14, 26) R/. Aleluya, aleluya.
Cuando venga el Espíritu de verdad, Él les enseñará
toda la verdad y les recordará todo cuanto yo les he dicho, dice el Señor.
R/.
Lectura (Proclamación) del santo Evangelio según san Mateo: 10,16-23
En
aquel tiempo, Jesús dijo a sus apóstoles: "Yo los envío
como ovejas entre lobos. Sean, pues, precavidos como las serpientes y sencillos
como las palomas.
Cuídense de la gente, porque los llevarán a los tribunales, los
azotarán en las sinagogas, los llevarán ante gobernadores y reyes
por mi causa; así darán testimonio de mi ante ellos y ante los
paganos. Pero, cuando los enjuicien, no se preocupen por lo que van a decir
o por la forma de decirlo, porque en ese momento se les inspirará lo
que han de decir. Pues no serán ustedes los que hablen, sino el Espíritu
de su Padre el que hablará por ustedes.
El hermano entregará a su hermano a la muerte, y el padre a su hijo;
los hijos se levantarán contra sus padres y los matarán; todos
los odiarán a ustedes por mi causa, pero el que persevere hasta el fin,
se salvará.
Cuando los persigan en una ciudad, huyan a otra. Yo les aseguro que no alcanzarán
a recorrer todas las ciudades de Israel, antes de que venga el Hijo del hombre".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
La misión que realiza Jesús y sus discípulos afecta intereses y grupos opuestos al plan de Dios. Suscita confrontación. Exige definiciones. Por eso Jesús alerta a proceder con astucia y sencillez.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Acepta, Señor, este sacrificio de reconciliación y alabanza, para que perdones nuestros pecados y dirijas hacia ti nuestro vacilante corazón. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Lc 15, 10)
Por un solo pecador que se convierta, dice el Señor, habrá gran alegría entre los ángeles del cielo.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Por nuestra participación en el sacramento del Cuerpo y la Sangre de tu Hijo, nos has perdonado, Señor, nuestros pecados, concédenos tu gracia para evitarlos de ahora en adelante y servirte con sincero corazón. Por Jesucristo, nuestro Señor.
MISA DE SANTA MARÍA EN SÁBADO
ANTÍFONA DE ENTRADA (Sedulio)
Te aclamamos, santa Madre de Dios, porque has dado a luz al Rey que gobierna cielo y tierra por los siglos de los siglos.
ORACIÓN COLECTA
Padre eterno, Dios nuestro, que has puesto en la Virgen María el trono real de tu Sabiduría, ilumina a la Iglesia con la luz de la Palabra que da vida, para que en el resplandor de la verdad caminemos hasta el pleno conocimiento de tu misterio de amor. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
LITURGIA DE LA PALABRA
Lectura del libro del profeta Isaías: 6, 1-8
El año de la muerte
del rey Ozías, vi al Señor, sentado sobre un trono muy alto y
magnífico. La orla de su manto llenaba el templo. Había dos serafines
junto a Él, con seis alas cada uno: con un par se cubrían el rostro;
con otro, se cubrían los pies, y con el otro, volaban. Y se gritaban
el uno al otro:
"Santo, santo, santo es el Señor, Dios de los ejércitos;
su gloria llena toda la tierra".
Temblaban las puertas al clamor de su voz y el templo se llenaba de humo. Entonces
exclamé:
"¡Ay de mí!, estoy perdido, porque soy un hombre de labios
impuros, que habito en medio de un pueblo de labios impuros, porque he visto
con mis ojos al rey y Señor de los ejércitos".
Después voló hacia mí uno de los serafines. Llevaba en
la mano una brasa, que había tomado del altar con unas tenazas. Con la
brasa me tocó la boca, diciéndome: "Mira: Esto ha tocado
tus labios. Tu iniquidad ha sido quitada y tus pecados están perdonados".
Escuché entonces la voz del Señor que decía: "¿A
quién enviaré? ¿Quién irá de parte mía?".
Yo le respondí: "Aquí estoy, Señor, envíame".
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
El sacerdote Isaías percibe la grandeza de la gloria de Dios, se siente incapaz de ser heraldo del Dios Santo. El Señor lo habilita y acrecienta sus capacidades de lenguaje.
Del salmo 92 R/.
Señor, tú eres nuestro rey.
Tú eres, Señor, el rey de todos los reyes. Estás
revestido de poder y majestad. R/.
Tú mantienes el orbe y no vacila. Eres eterno, y para siempre está
firme tu trono. R/.
Muy dignas de confianza son tus leyes y desde hoy y para siempre, Señor,
la santidad adorna tu templo. R/.
ACLAMACIÓN
(1 P 4, 14) R/. Aleluya, aleluya.
Dichosos ustedes, si los injurian por ser cristianos, porque el Espíritu
de Dios descansa en ustedes. R/.
Lectura (Proclamación) del santo Evangelio según san Mateo: 10, 24-33
En
aquel tiempo, Jesús dijo a sus apóstoles: "El discípulo
no es más que el maestro, ni el criado más que su señor.
Le basta al discípulo ser como su maestro y al criado ser como su señor.
Si al señor de la casa lo han llamado Satanás, ¡qué
no dirán de sus servidores!
No teman a los hombres. No hay nada oculto que no llegue a descubrirse; no hay
nada secreto que no llegue a saberse. Lo que les digo de noche, repítanlo
en pleno día y lo que les digo al oído, pregónenlo desde
las azoteas. No tengan miedo a los que matan el cuerpo, pero no pueden matar
el alma. Teman, más bien, a quien puede arrojar al lugar de castigo el
alma y el cuerpo. ¿No es verdad que se venden dos pajarillas por una
moneda? Sin embargo, ni uno solo de ellos cae por tierra si no lo permite el
Padre. En cuanto a ustedes, hasta los cabellos de su cabeza están contados.
Por lo tanto, no tengan miedo, porque ustedes valen mucho más que todos
los pájaros del mundo.
A quien me reconozca delante de los hombres, yo también lo reconoceré
ante mi Padre, que está en los cielos; pero al que me niegue delante
de los hombres, yo también lo negaré ante mi Padre, que está
en los cielos". Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor
Jesús.
No tengan miedo de los que matan el cuerpo... Esta exhortación recupera su enorme valor en una sociedad atenazada por el miedo ante la violencia desmedida.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Padre lleno de bondad, que nos socorra el inmenso amor de tu Hijo unigénito para que, quien al nacer de la Virgen María, no menoscabó la integridad de la Madre, sino que la consagró, nos libre de nuestras culpas y haga acepta a ti nuestra oblación. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio de Santa María Virgen.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (cfr. Lc 11, 27)
Dichosa la Virgen María, que llevó en su seno al Hijo del eterno Padre.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, al recibir el sacramento celestial en esta conmemoración de la santísima Virgen María, te pedimos que nos concedas celebrar dignamente, a imitación suya, el misterio de nuestra redención. Por Jesucristo, nuestro Señor.
XV DOMINGO ORDINARIO
Santos: Benito de Nursia, abad Olga de Kiev, reina y Pío I, Papa (Verde)
ANTÍFONA DE ENTRADA (Sal 16, 15)
Yo quiero acercarme a ti, Señor, y saciarme de gozo en tu presencia.
ORACIÓN COLECTA
Señor, tú que iluminas a los extraviados con la luz de tu Evangelio para que vuelvan al camino de la verdad, concede a cuantos nos llamamos cristianos imitar fielmente a Cristo y rechazar lo que pueda alejamos de Él, que vive y reina contigo...
LITURGIA DE LA PALABRA
Lectura del libro del Deuteronomio: 30, 10-14
En aquellos días,
habló Moisés al pueblo y le dijo: "Escucha la voz del Señor,
tu Dios, que te manda guardar sus mandamientos y disposiciones escritos en el
libro de esta ley. Y conviértete al Señor tu Dios, con todo tu
corazón y con toda tu alma.
Estos mandamientos que te doy, no son superiores a tus fuerzas ni están
fuera de tu alcance. No están en el cielo, de modo que pudieras decir:
`¿Quién subirá por nosotros al cielo para que nos los traiga,
los escuchemos y podamos cumplirlos?. Ni tampoco están al otro lado del
mar, de modo que pudieras objetar: '¿Quién cruzará el mar
por nosotros para que nos los traiga, los escuchemos y podamos cumplirlos?'.
Por el contrario, todos mis mandamientos están muy a tu alcance, en tu
boca y en tu corazón, para que puedas cumplirlos". Palabra
de Dios. Te alabamos, Señor.
La voluntad de Dios se condensa en un mandato fundamental y accesible. Necesitamos aproximarnos a quien esté en situación de necesidad para servirle generosamente.
Del salmo 68 R/.
Escúchame, Señor, porque eres bueno.
A ti, Señor, elevo mi plegaria, ven en mi ayuda pronto; escúchame
conforme a tu clemencia, Dios fiel en el socorro. Escúchame, Señor,
pues eres bueno y en tu ternura vuelve a mí tus ojos. R/.
Mírame enfermo y afligido; defiéndeme y ayúdame, Dios mío.
En mi cantar exaltaré tu nombre, proclamaré tu gloria, agradecido.
R/.
Se alegrarán al verlo los que sufren; quienes buscan a Dios tendrán
más ánimo, porque el Señor jamás desoye al pobre
ni olvida al que se encuentra encadenado. R/.
Ciertamente el Señor salvará a Sión, reconstruirá
a Judá; la heredarán los hijos de sus siervos, quienes aman a
Dios la habitarán. R/.
Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los colosenses: 1, 15-20
Cristo es la imagen de Dios
invisible, el primogénito de toda la creación, porque en Él
tienen su fundamento todas las cosas creadas, del cielo y de la tierra, las
visibles y las invisibles, sin excluir a los tronos y dominaciones, a los principados
y potestades. Todo fue creado por medio de Él y para Él.
Él existe antes que todas las cosas, y todas tienen su consistencia en
Él. Él es también la cabeza del cuerpo, que es la Iglesia.
Él es el principio, el primogénito de entre los muertos, para
que sea el primero en todo.
Porque Dios quiso que en Cristo habitara toda plenitud y por Él quiso
reconciliar consigo todas las cosas, del cielo y de la tierra, y darles la paz
por medio de su sangre, derramada en la cruz. Palabra de Dios. Te
alabamos, Señor.
Cristo es confesado y celebrado en este antiguo himno cristiano como el artífice de la reconciliación cósmica que acarrea la paz a quienes vivíamos enemistados.
ACLAMACIÓN
(cfr. Jn 6, 63. 68) R/. Aleluya, aleluya.
Tus palabras, Señor, son espíritu y vida. Tú tienes
palabras de vida eterna. R/.
Lectura (Proclamación) del santo Evangelio según san Lucas: 10, 25-37
En
aquel tiempo, se presentó ante Jesús un doctor de la ley para
ponerlo a prueba y le preguntó: "Maestro, ¿qué debo
hacer para conseguir la vida eterna?". Jesús le dijo: "¿Qué
es lo que está escrito en la ley? ¿Qué lees en ella?".
El doctor de la ley contestó: "Amarás al Señor tu
Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma, con todas tus fuerzas y
con todo tu ser, y a tu prójimo como a ti mismo". Jesús le
dijo: "Has contestado bien; si haces eso, vivirás".
El doctor de la ley, para justificarse, le preguntó a Jesús: "¿Y
quién es mi prójimo?". Jesús le dijo: "Un hombre
que bajaba por el camino de Jerusalén a Jericó, cayó en
manos de unos ladrones, los cuales lo robaron, lo hirieron y lo dejaron medio
muerto. Sucedió que por el mismo camino bajaba un sacerdote, el cual
lo vio y pasó de largo. De igual modo, un levita que pasó por
ahí, lo vio y siguió adelante. Pero un samaritano que iba de viaje,
al verlo, se compadeció de él, se le acercó, ungió
sus heridas con aceite y vino y se las vendó; luego lo puso sobre su
cabalgadura, lo llevó a un mesón y cuidó de él.
Al día siguiente sacó dos denarios, se los dio al dueño
del mesón y le dijo: 'Cuida de él y lo que gastes de más,
te lo pagaré a mi regreso'.
¿Cuál de estos tres te parece que se portó como prójimo
del hombre que fue asaltado por los ladrones?". El doctor de la ley le
respondió: "El que tuvo compasión de él". Entonces
Jesús le dijo: "Anda y haz tú lo mismo". Palabra
del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
El buen samaritano. Personaje tan anónimo como familiar para los creyentes cristianos. ¡Que su memoria mantenga despierta nuestra actitud de servicio desinteresado a los demás!
Credo
ORACIÓN UNIVERSAL
Oremos a Dios, que conoce
nuestra debilidad y nuestro afán de serle fieles.
Después de cada petición diremos: Te lo pedimos, Señor.
Para que la Iglesia sea un lugar de consuelo, de refugio y de paz para
todos los desheredados de nuestro mundo. Oremos.
Para que los que ejercen un ministerio en la Iglesia fomenten el diálogo
como expresión de caridad. Oremos.
Para que los responsables políticos y sociales construyan un mundo más
justo y libre. Oremos.
Para que los menospreciados y abandonados puedan llevar una vida verdaderamente
humana. Oremos.
Para que los que recibimos la misericordia del Señor en esta casa la
comuniquemos a quienes nos rodean. Oremos
Señor, Dios nuestro, acepta la súplica insistente de tus siervos
y apiádate de nosotros. Por Jesucristo, nuestro Señor...
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Mira bondadosamente, Señor, las ofrendas de tu Iglesia suplicante, y conviértelas en alimento espiritual, que ayude a crecer en santidad a todos tus fieles. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio para los domingos del Tiempo Ordinario.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Jn 6, 56)
El que come mi carne y bebe mi sangre, permanece en mí y yo en él, dice el Señor.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Te suplicamos, Señor, que esta Eucaristía que hemos recibido, nos ayude a amarte más y a servirte mejor cada día. Por Jesucristo, nuestro Señor.
UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO.- Más allá de las justificaciones ideológicas y los pretextos mezquinos que inventamos para ocultar nuestra mediocridad, todos sabemos qué rumbo nos marca Dios. La vida cristiana no tiene margen de error. El amor que Dios Padre nos ha manifestado en Jesús nos invita a vivir como testigos convencidos de que, en la vida y las necesidades de las personas que viven a nuestro lado, Dios se hace presente para demandarnos palabras de consuelo, gestos de solidaridad, acciones de servicio generoso y eficaz. El rostro de un joven desempleado, la mano tendida de un victima extorsionada y la esperanza ingenua de un niño pequeño, son señales y llamados candentes que Dios nos dirige para que nos hagamos prójimos de quien esté caído junto al camino.
ANTÍFONA DE ENTRADA (Mt 16, 18-19)
Tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia y las puertas del infierno no prevalecerán contra ella. Y a ti te daré las llaves del Reino de los cielos.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que en tu providencia quisiste fundar tu Iglesia sobre la roca de Pedro, el jefe de los apóstoles, mira con bondad a nuestro Santo Padre, el Papa Benedicto XVI, y ya que lo has constituido sucesor de Pedro, concédele que sea para tu pueblo principio y fundamento visible de la unidad en la fe y de la comunión en el amor. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
Lectura del libro del profeta Isaías: 1, 10-17
Oigan la palabra del Señor,
príncipes de Sodoma; escucha la enseñanza de nuestro Dios, pueblo
de Gomorra: "¿Qué me importan a mí todos sus sacrificios?"
dice el Señor. Estoy harto de holocaustos de carneros y de grasa de becerros;
ya no quiero sangre de toros, corderos y cabritos.
¿Quién les ha pedido que me ofrezcan todo eso cuando vienen al
templo para visitarme? Dejen ya de pisotear mis atrios y no me traigan dones
vacíos ni incienso abominable. Ya no aguanto sus novilunios y sábados
ni sus asambleas.
Sus solemnidades y fiestas las detesto; se me han vuelto una carga insoportable.
Cuando extienden sus manos para orar, cierro los ojos; aunque multipliquen sus
plegarias, no los escucharé. Sus manos están llenas de sangre.
Lávense y purifíquense; aparten de mí sus malas acciones.
Dejen de hacer el mal, aprendan a hacer el bien, busquen la justicia, auxilien
al oprimido, defiendan los derechos del huérfano y la causa de la viuda"
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
El pueblo de Israel, al igual que muchos de nosotros, nos empecinamos en practicar un culto mentiroso. Dios no se deja sobornar con ofrendas salpicadas de injusticia y violencia.
Del salmo 49 R/.
Dios salva al que cumple su voluntad.
No voy a reclamarte sacrificios, dice el Señor, pues siempre
están ante mí tus holocaustos. Pero ya no aceptaré becerros
de tu casa ni cabritos de tus rebaños. R/.
¿Por qué citas mis preceptos y hablas a toda hora de mi pacto,
tú, que detestas la obediencia y echas en saco roto mis mandatos? R/.
Tú haces esto, ¿y yo tengo que callarme? ¿Crees acaso que
yo soy como tú? Quien las gracias me da, ése me honra y yo salvaré
al que cumple mi voluntad. R/.
ACLAMACIÓN
(Mt 5, 10) R/. Aleluya, aleluya.
Dichosos los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos
es el Reino de los cielos, dice el Señor. R/.
Lectura (Proclamación) del santo Evangelio según san Mateo: 10, 34-11, 1
En
aquel tiempo, Jesús dijo a sus apóstoles: "No piensen que
he venido a traer la paz a la tierra; no he venido a traer la paz, sino la guerra.
He venido a enfrentar al hijo con su padre, a la hija con su madre, a la nuera
con su suegra; y los enemigos de cada uno serán los de su propia familia.
El que ama a su padre o a su madre más que mí, no es digno de
mí; el que ama a su hijo o a su hija más que a mí, no es
digno de mí; y el que no toma su cruz y me sigue, no es digno de mí.
El que salve su vida, la perderá y el que la pierda por mi, la salvará.
Quien los recibe a ustedes, me recibe a mí; y quien me recibe a mí,
recibe al que me ha enviado.
El que recibe a un profeta por ser profeta, recibirá recompensa de profeta;
el que recibe a un justo por ser justo, recibirá recompensa de justo.
Quien diere, aunque no sea más que un vaso de agua fría a uno
de estos pequeños, por ser discípulo mío, yo les aseguro
que no perderá su recompensa".
Cuando acabó de dar instrucciones a sus doce discípulos, Jesús
partió de ahí para enseñar y predicar en otras ciudades.
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
La propuesta que Jesús nos ofrece no deja satisfecho a medio mundo. Unos la celebran y apoyan con singular entusiasmo. Otros la rechazan con enojo y molestia.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Acepta, Señor, las ofrendas que te presentamos para el sacrificio eucarístico; protege y dirige a tu santa Iglesia en unión con nuestro Papa Benedicto XVI, a quien constituiste su pastor. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Jn 21, 15. 17)
Simón, hijo de Juan, ¿me amas más que éstos?, le dijo el Señor a Pedro. Éste le respondió: Señor, tú lo conoces todo, tú sabes que te amo.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Por esta Eucaristía, en la que nos has permitido participar, confirma, Señor, en la unidad y en el amor a la santa Iglesia y a la santa iglesia y a tu siervo, el Papa Benedicto XVI para que juntos, rebaño y pastor, recorran con seguridad el camino de la salvación. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Santos: Enrique II de Alemania emperador y Cunegunda, emperatriz; Beato Carlos Manuel laico. Feria (Verde)
ANTÍFONA DE ENTRADA (Sal 30, 3-4)
Sírveme de defensa, Dios mío, de roca y fortaleza salvadoras; y pues eres mi baluarte y mi refugio, acompáñame y guíame.
ORACIÓN COLECTA
Señor nuestro, que prometiste venir y hacer tu morada en los corazones rectos y sinceros, concédenos la rectitud y sinceridad de vida que nos hagan dignos de esa presencia tuya. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
Lectura del libro del profeta Isaías: 7, 1-9
Cuando Ajaz, hijo de Jotam,
hijo de Ozías, reinaba en Judá, Rasón rey de Siria, y Pécaj,
hijo de Remallas y rey de Israel, fueron a Jerusalén para atacarla, pero
no lograron conquistarla.
Cuando al heredero de David le llegó la noticia de que los sirios acampaban
en Efraín, se estremeció su corazón y el del pueblo, como
se estremecen los árboles del bosque, agitados por el viento. Entonces
el Señor le dijo a Isaías: "Sal al encuentro de Ajaz con
tu hijo Sear Yasub, donde termina el canal de la alberca superior, junto a la
calzada del batanero, y dile: 'Manténte alerta, pero tranquilo. No le
tengas miedo a ese par de tizones humeantes; no te acobardes ante la cólera
de Rasón, rey de Siria, y de Pécaj, rey de Israel. No importa
que tramen tu ruina, diciendo: Ataquemos a Judá, sitiémosla, conquistémosla
y nombremos rey de ella al hijo de Tabel' ". Esto dice el Señor:
"Eso no llegará a suceder. Damasco es la capital de Siria y Rasón
es el rey de Damasco; Samaria es la capital de Efraín y el hijo de Remallas
es el rey de Samaria. Pues bien, dentro de sesenta y cinco años Efraín
será destruido y dejará de ser pueblo. Y si ustedes no creen en
mí, también irán a la ruina". Palabra de Dios.
Te alabamos, Señor.
El rey Acaz está en un aprieto. Los ejércitos vecinos lo atemorizan y recurre a soluciones pragmáticas, en vez de luchar con decisión confiando en la presencia cercana del Señor.
Del salmo 47 R/.
Dios es nuestro defensor.
Grande es el Señor y muy digno de alabanza, en la ciudad de
nuestro Dios. Su monte santo, altura hermosa, es la alegría de toda la
tierra. R/.
El monte Sión, en el extremo norte, es la ciudad del rey supremo. Entre
sus baluartes ha surgido Dios como una fortaleza inexpugnable. R/.
Los reyes se aliaron para atacarla juntos; pero al verla, quedaron aterrados
y huyeron despavoridos. R/.
Allí los invadió el pánico y dolores como de parto; como
un viento del desierto, que destroza las naves de Tarsis. R/.
ACLAMACIÓN
(cfr. Sal 94. 8) R/. Aleluya, aleluya.
Hagámosle caso al Señor, que nos dice: "No endurezcan
su corazón". R/.
Lectura (Proclamación) del santo Evangelio según san Mateo: 11, 20-24
En
aquel tiempo, Jesús se puso a reprender a las ciudades que habían
visto sus numerosos milagros, por no haberse arrepentido. Les decía:
“¡Ay de ti, Corozaín! ¡Ay de ti, Betsaida! Porque si
en Tiro y en Sidón se hubieran realizado los milagros que se han hecho
en ustedes, hace tiempo que hubieran hecho penitencia, cubiertas de sayal y
de ceniza. Pero yo les aseguro que el día del juicio será menos
riguroso para Tiro y Sidón, que para ustedes.
Y tú, Cafarnaúm, ¿crees que serás encumbrada hasta
el cielo? No. Serás precipitada en el abismo, porque si en Sodoma se
hubieran realizado los milagros que en ti se han hecho, quizá estaría
en pie hasta el día de hoy. Pero yo te digo que será menos riguroso
el día del juicio para Sodoma que para ti". Palabra del
Señor Gloria a ti, Señor Jesús.
Los signos extraordinarios de poder que Jesús realiza en las dos ciudades ribereñas originan una definición responsable. Ninguna neutralidad los excusa de dar una respuesta responsable.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Que este sacrificio, Señor, que vamos a ofrecerte, nos purifique, nos renueve y nos ayude a obtener la recompensa eterna, prometida a quienes cumplen tu voluntad. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Jn 3, 16)
Tanto amó Dios al mundo, que le dio a su Hijo único, para que todo el que crea en El no perezca, sino que tenga la vida eterna.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, aviva cada vez más en nosotros el deseo de recibir este pan eucarístico, por medio del cual nos comunicas tú la vida verdadera. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE ENTRADA (cfr. Si 36, 18-19)
Señor, concede la paz a los que en ti esperan; escucha las oraciones de tus hijos y guíanos por el camino de la justicia.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que llamas hijos tuyos a los que promueven la paz, concédenos trabajar incansablemente por establecer la justicia, sin la cual es imposible garantizar una paz auténtica y duradera. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
Lectura del libro del profeta Isaías: 10, 5-7. 13-16
Esto dice el Señor:
"¡Ay Asiria, bastón de mi ira, vara que mi furor maneja! Contra
una nación impía voy a guiarte, contra un pueblo que experimenta
mi cólera voy a mandarte, para que lo saquees y lo despojes y lo pisotees
como el lodo de las calles.
Pero Asiria no lo piensa así ni son éstos sus planes; su intención
es arrasar y exterminar numerosas naciones, pues dice: 'Con el poder de mi mano
lo hice y con mi sabiduría, porque soy inteligente; he borrado las fronteras
de los pueblos, he saqueado sus tesoros y, como un gigante, he derribado a sus
jefes.
Como un nido al alcance de mi mano alcancé la riqueza de los pueblos
y como se recogen los huevos abandonados, así cogí yo toda la
tierra y no hubo quien aleteara ni abriera el pico ni piara'".
Pero el Señor dice: “¿Acaso presume el hacha frente al que
corta con ella? ¿O la sierra se tiene por más grande que aquel
que la maneja? Como si la vara pudiera mover al que la levanta y el bastón
pudiera levantar a quien no es de madera. Por eso, el Señor de los ejércitos
hará enflaquecer a los bien alimentados y le prenderá fuego a
su hijo, como se enciende la leña". Palabra de Dios. Te
alabamos, Señor.
El profeta Isaías sabe bien de interpretaciones creyentes de la historia de Israel. Los asirios se confunden y pretenden conducirse como soberanos endiosados con su poderío militar.
Del salmo 93 R/.
Escucha, Señor, a tu pueblo.
Señor, los malvados humillan a tu pueblo y oprimen a tu heredad; asesinan
a las viudas y a los forasteros y degüellan a los huérfanos. R/.
Y comentan: "El Señor no lo ve, el Dios de Jacob no se entera".
Entérense, insensatos; necios, ¿cuándo van ustedes a entender?
R/.
El que plantó el oído, ¿no va a oír? El que formó
el ojo, ¿no va a ver? El que educa a los pueblos, ¿no va a castigar?
El que instruye al hombre, ¿no va a saber? R/.
Jamás rechazará Dios a su pueblo ni dejará a los suyos
sin amparo. Hará justicia al justo y dará un porvenir al hombre
honrado. R/.
ACLAMACIÓN
(cfr. Mt 11, 25) R/. Aleluya, aleluya.
Yo te alabo Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque has revelado
los misterios del Reino a la gente sencilla. R/.
Lectura (Proclamación) del santo Evangelio según san Mateo: 11, 25-27
En
aquel tiempo, Jesús exclamó: "¡Yo te alabo, Padre,
Señor del cielo y de la tierra, porque has escondido estas cosas a los
sabios y entendidos, y las has revelado a la gente sencilla! Gracias, Padre,
porque así te ha parecido bien.
El Padre ha puesto todas las cosas en mis manos. Nadie conoce al Hijo sino el
Padre, y nadie conoce al Padre sino el Hijo y aquel a quien el Hijo se lo quiera
revelar". Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor
Jesús.
El Señor Jesús exalta de gozo y bendice al Padre porque ha dispuesto invertir el orden impuesto por los humanos y ha allanado el camino para que los sencillos accedan al Reino.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Te ofrecemos, Señor, bajo los signos sacramentales del pan y del vino, el sacrificio de tu Hijo, rey de la paz, para que este misterio de unidad y de amor, reafirme la fraternidad entre todos tus hijos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Jn 14, 27)
Mi paz les dejo, mi paz les doy, dice el Señor.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Concédenos, Señor, el espíritu de tu amor, a fin de que, alimentados con el Cuerpo y la Sangre de tu Hijo, fomentemos entre todos los hombres la paz que Él mismo nos dejó. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE ENTRADA (Sal 36, 30-31)
La boca del justo dice palabras sensatas y su lengua expresa lo recto, porque lleva grabada en el corazón la ley de su Dios.
ORACIÓN COLECTA
Te suplicamos, Dios nuestro, que quienes estamos reunidos aquí para celebrar la fiesta de san Buenaventura, podamos, por su intercesión y a ejemplo suyo, ir profundizando cada día más en tu conocimiento y en tu amor. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
Lectura del libro del profeta Isaías: 26, 7-9. 12. 16-19
La senda del justo es recta
porque tú, Señor, le allanas el sendero. En el camino de tus mandamientos
te buscamos, anhelando, Señor, tu nombre y tu recuerdo.
Mi alma te desea por la noche y mi espíritu te busca por la mañana,
porque tus mandamientos son la luz de la tierra y enseñan justicia a
los habitantes del orbe.
Tú nos darás, Señor, la paz, porque todo lo que hemos hecho
eres tú quien lo ha hecho por nosotros.
Acudimos a ti, Señor, en el peligro, cuando nos angustiaba la fuerza
de tu castigo. Como una mujer que va a dar a luz, que se retuerce y grita angustiada,
así éramos, Señor, en tu presencia: concebimos y nos retorcimos,
¡pero lo único que hemos dado a luz ha sido viento! No le hemos
dado salvación al país, no le han nacido habitantes al mundo.
Tus muertos vivirán, sus cadáveres resucitarán, despertarán
jubilosos los que habitan en los sepulcros, porque tu rocío es rocío
luminoso y la tierra de las sombras dará a luz. Palabra de Dios. T. Te
alabamos, Señor.
El pueblo de Judá aprende tardíamente la lección. Fincaron
su esperanza en alianzas vanas que no trajeron la salvación esperada.
Al momento del apremio regresan otra vez al Señor.
Del salmo 101 R/. El Señor tiene compasión de nosotros.
Tú, Señor, reinas para siempre y tu fama pasa de generación
en generación. Levántate y ten misericordia de Sión, pues
ya es tiempo de que te apiades de ella. Tus siervos aman sus piedras y se compadecen
de sus ruinas. R/
Cuando el Señor reedifique a Sión y aparezca glorioso, cuando
oiga el clamor del oprimido y no se muestre a sus plegarias sordo, entonces
temerán al Señor todos los pueblos y su gloria verán los
poderosos. R/.
Esto se escribirá para el futuro y alabará al Señor el
pueblo nuevo, porque el Señor, desde su altura santa, ha mirado a la
tierra desde el cielo, para oír los gemidos del cautivo y librar de la
muerte al prisionero. R/.
ACLAMACIÓN
(Mt 11, 28) R/. Aleluya, aleluya.
Vengan a mí, todos los que están fatigados y agobiados
por la carga, y yo les daré alivio, dice el Señor.
Lectura (Proclamación) del santo Evangelio según san Mateo: 11, 28-30
En aquel tiempo, Jesús dijo: "Vengan a mí, todos los que están fatigados y agobiados por la carga, y yo les daré alivio. Tomen mi yugo sobre ustedes y aprendan de mí, que soy manso y humilde de corazón, y encontrarán descanso, porque mi yugo es suave y mi carga, ligera". Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
El llamado es abierto. Todo aquel que cargue un peso desproporcionado puede acercarse a Jesús para acoger el yugo suave que libera y da reposo.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Que te sea grato, Señor, el sacrificio que vamos a ofrecerte en la fiesta de san Buenaventura, cuyas enseñanzas y ejemplo nos mueven a alabarte con todo nuestro ser. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Lc 12, 42)
Éste es el siervo fiel y sensato a quien su señor ha puesto al frente de su familia, para darles la ración de trigo a su tiempo.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
A quienes nos has alimentado con el Cuerpo de Cristo, ilumínanos, Señor, con sus enseñanzas, para que en la festividad de san Buenaventura, aprendamos tu verdad e imitemos tu amor. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Nuestra Señora del Carmen
Santos: Santa Maria Magdalena Postel, fundadora. Beato Simón Da Costa, mártir. Memoria (Blanco)
ANTÍFONA DE ENTRADA (cfr. Jdt 13, 18-19)
María, el Altísimo te ha bendecido más que a todas las mujeres de la tierra, y de tal manera te ha glorificado, que los hombres no cesan de alabarte.
ORACIÓN COLECTA
Padre todopoderoso, te suplicamos que la santísima Virgen Maria nos proteja siempre con su maternal intercesión y nos ayude a conocer y a amar a tu Hijo Jesucristo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
LITURGIA DE LA PALABRA
Lectura del libro del profeta Isaías: 38, 1-6. 21-22. 7-8
En aquel tiempo, el rey
Ezequías enfermó de muerte y vino a verlo el profeta Isaías,
hijo de Amós, y le dijo: "Esto dice el Señor: 'Arregla todos
tus asuntos, porque no te vas a aliviar y te vas a morir' ".
Ezequías volvió la cara hacia la pared, oró al Señor
y dijo: "Acuérdate, Señor, de que te he servido con fidelidad
y rectitud de corazón y de que he hecho siempre lo que a ti te agrada".
Y lloró con abundantes lágrimas,
Entonces el Señor le habló a Isaías y le dijo: "Ve
a decirle a Ezequías: 'Esto dice el Señor, Dios de tu padre, David:
He escuchado tu oración y he visto tus lágrimas. Voy a curarte
y en tres días podrás ir al templo del Señor. Voy a darte
quince años más de vida. Te libraré de la mano del rey
de Asiria a ti y a tu ciudad, y protegeré a Jerusalén”.
Dijo entonces Isaías: "Traigan un emplasto de higos y aplíquenselo
en la Llaga para que se alivie". Y Ezequías dijo: "¿Cuál
es la señal de que podré ir al templo del Señor?".
Respondió Isaías: "Ésta será para ti la señal
de que el Señor cumplirá las cosas que te ha dicho: voy a hacer
que la sombra retroceda los diez grados que ha avanzado en el reloj de sol de
Ajaz". Y el sol retrocedió los diez grados que había avanzado.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
El rey Ezequías atraviesa por un período crítico. El profeta Isaías lo visita, anticipa su pronta recuperación. El Dios compasivo dicta una tregua y lo libra de morir.
Del salmo 38 R/.
Sálvame, Señor, y viviré.
Yo pensaba que a la mitad de mi vida tendría que dirigirme hacia las
puertas del abismo y me privarían del resto de mis años. R/.
Yo pensaba que ya no volvería a ver al Señor en la tierra de los
vivos, que ya no volvería a ver a los hombres entre los habitantes del
mundo. R/.
Levantan y enrollan mi vida como una tienda de pastores. Como un tejedor tejía
yo mi vida, y me cortaron la trama. R/.
A los que Dios protege viven, y entre ellos vivirá mi espíritu;
me has curado, me has hecho revivir. R/.
ACLAMACIÓN
(Jn 10, 27) R/. Aleluya, aleluya.
Mis ovejas escuchan mi voz, dice el Señor; yo las conozco y
ellas me siguen. R/.
Lectura (Proclamación) del santo Evangelio según san Mateo: 12, 1-8
Un
sábado, atravesaba Jesús por los sembrados. Los discípulos,
que iban con El, tenían hambre y se pusieron a arrancar espigas y a comerse
los granos. Cuando los fariseos los vieron, le dijeron a Jesús: "Tus
discípulos están haciendo algo que no está permitido hacer
en sábado".
Él les contestó: "¿No han leído ustedes lo
que hizo David una vez que sintieron hambre él y sus compañeros?
¿No recuerdan cómo entraron en la casa de Dios y comieron los
panes consagrados, de los cuales ni él ni sus compañeros podían
comer, sino tan sólo los sacerdotes?
¿Tampoco han leído en la ley que los sacerdotes violan el sábado
porque ofician en el templo y no por eso cometen pecado? Pues yo digo que aquí
hay alguien más grande que el templo.
Si ustedes comprendieran el sentido de las palabras: Misericordia quiero y no
sacrificios, no condenarían a quienes no tienen ninguna culpa. Por lo
demás, el Hijo del hombre también es dueño del sábado".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
La escena desvela un mensaje fundamental. Los ordenamientos rituales no son un valor inamovible. Cuando violentan o imposibilitan la vida digna de las personas son refutables.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Jubilosos de poder celebrar la festividad de la Madre de tu Hijo, te presentamos, Señor, estas ofrendas de alabanza, y te pedimos que por este santo intercambio de dones, se acrecienten en nosotros los frutos de la redención eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (cfr. Lc 1, 48)
Me llamarán bienaventurada todas las generaciones, porque ha puesto Dios sus ojos en la humildad de su esclava.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Habiendo recibido el sacramento celestial, te pedimos Señor, que cuantos hemos celebrado con veneración, la memoria de la santísima Virgen María, merezcamos participar del banquete eterno. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Santos: Alejo de Roma penitente; León IV, Papa y Eduviges de Polonia, reina.
Vísperas I del domingo: 4a semana del Salterio Feria (Verde)
MISA DE SANTA MARÍA EN SÁBADO
ANTÍFONA DE ENTRADA
Dichosa tú, Virgen Maria, que llevaste en tu seno al creador del universo; diste a luz al que te creó, y permaneces virgen para siempre.
ORACIÓN COLECTA
Dios santo y misericordioso, que te complaces en los humildes y realizas en ellos, por medio de tu Espíritu Santo, las maravillas de la salvación; mira la humildad de la Virgen María y danos un corazón sencillo y humilde, que sepa responder positivamente a todo signo de tu voluntad. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
LITURGIA DE LA PALABRA
Lectura del libro del profeta Miquear: 2, 1-5
¡Ay de aquellos que
planean injusticias, que traman el mal durante la noche y al despuntar la mañana,
lo ejecutan, porque son gente poderosa!
Codician los campos y los roban, codician las casas y las usurpan, violando
todos los derechos arruinan al hombre y lo despojan de su herencia.
Por eso dice el Señor: "Estoy planeando contra esta gente una serie
de calamidades de las que no podrán escapar. Entonces ya no caminarán
con altivez, porque será un tiempo de desgracias. Aquel día la
gente se burlará de ellos y les cantará un triste canto: Nos han
despojado de todo y se han repartido nuestras tierras; se han apoderado de nuestra
herencia y no hay quien nos la devuelva". Por eso dice el Señor:
"Cuando la asamblea del pueblo distribuya nuevamente las tierras, no habrá
parte para ellos". Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
De noche traman maldades, al amanecer echan mano de su poder y pisotean al inocente. La prepotencia de los poderosos es un pecado que ofende al Señor.
Del salmo 9 R/.
Señor, no te olvides de los pobres.
¿Por qué te quedas lejos, Señor, y te escondes en el momento
de la angustia? La soberbia del malvado oprime al pobre. ¡Que se enrede
en las intrigas que ha tramado! R/.
El malvado presume de su ambición y el avaro maldice al Señor.
El malvado dice con insolencia que no hay Dios que le pida cuentas. R/.
Su boca está llena de engaños y fraudes, su lengua esconde maldad
y opresión; se agazapa junto a la casa del inocente para matarlo a escondidas.
R/.
Pero tú, Señor, ves las penas y los trabajos tú los miras
y los tomas en tus manos; el pobre se encomienda a ti, tú eres el socorro
del huérfano. R/.
ACLAMACIÓN
(2 Co 5, 19) R/. Aleluya, aleluya.
Dios ha reconciliado consigo al mundo, por medio de Cristo, y nos ha
encomendado a nosotros el mensaje de la reconciliación. R/.
Lectura (Proclamación) del santo Evangelio según san Mateo: 12, 14-21
En
aquel tiempo, los fariseos se confabularon contra Jesús para acabar con
Él. Al saberlo, Jesús se retiró de ahí. Muchos lo
siguieron y Él curó a todos los enfermos y les mandó enérgicamente
que no lo publicaran, para que se cumplieran las palabras del profeta Isaías:
Miren a mi siervo, a quien sostengo; a mi elegido, en quien tengo mis complacencias.
En él he puesto mi Espíritu, para que haga brillar la justicia
sobre las naciones. No gritará ni clamará, no hará oír
su voz en las plazas, no romperá la caña resquebrajada, ni apagará
la mecha que aún humea, hasta que haga triunfar la justicia sobre la
tierra; y en él pondrán todas las naciones su esperanza. Palabra
del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
Jesús realiza curaciones que despiertan la animosidad de sus malquerientes. La profecía del Siervo nos ayuda a entender su misión pacífica y esperanzadora.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Al venerar la memoria de la Madre de tu Hijo, te rogamos, Señor, que la ofrenda que te presentamos nos transforme, por tu gracia, en oblación viva y continua. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio de Santa María Virgen
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Lc 1, 49)
Ha hecho en mí maravillas el Todopoderoso, cuyo nombre es santo.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Ya que participamos de la redención eterna, te pedimos, Señor, que al venerar la memoria de la Madre de tu Hijo, nos gloriemos de la plenitud de tu gracia y sintamos los efectos de tu obra redentora. Por Jesucristo, nuestro Señor.
XVI DOMINGO ORDINARIO
Santos: Arnulfo de Metz, obispo; Federico de Utrech, obispo, y Materno de Milán, obispo. (Verde)
ANTÍFONA DE ENTRADA (Sal 53, 6- 8)
Señor Dios, tú eres mi auxilio y el único apoyo de mi vida; te ofreceré de corazón un sacrificio y te daré gracias, Señor, porque eres bueno.
ORACIÓN COLECTA
Míranos, Señor, con amor y multiplica en nosotros los dones de tu gracia para que, llenos de fe, esperanza y caridad, permanezcamos siempre fieles en el cumplimiento de tus mandatos. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
Lectura del libro del Génesis: 18, 1-10
Un día, el Señor
se le apareció a Abraham en el encinar de Mambré. Abraham estaba
sentado en la entrada de su tienda, a la hora del calor más fuerte. Levantando
la vista, vio de pronto a tres hombres que estaban de pie ante él. Al
verlos, se dirigió a ellos rápidamente desde la puerta de la tienda,
y postrado en tierra, dijo: "Señor mío, si he hallado gracia
a tus ojos, te ruego que no pases junto a mí sin detenerte. Haré
que traigan un poco de agua para que se laven los pies y descansen a la sombra
de estos árboles; traeré pan para que recobren las fuerzas y después
continuarán su camino, pues sin duda para eso han pasado junto a su siervo".
Ellos le contestaron: "Está bien. Haz lo que dices". Abraham
entró rápidamente en la tienda donde estaba Sara y le dijo: "Date
prisa, toma tres medidas de harina, amásalas y cuece unos panes".
Luego Abraham fue corriendo al establo, escogió un ternero y se lo dio
a un criado para que lo matara y lo preparara. Cuando el ternero estuvo asado,
tomó requesón y leche y lo sirvió todo a los forasteros.
Él permaneció de pie junto a ellos, bajo el árbol, mientras
comían. Ellos le preguntaron:
"¿Donde está Sara, tu mujer?". Él respondió:
"Allá, en la tienda". Uno de ellos le dijo: "Dentro de
un año volveré sin falta a visitarte por estas fechas; para entonces,
Sara, tu mujer, habrá tenido un hijo". Palabra de Dios.
Te alabamos, Señor.
El patriarca Abrahán acoge a sus visitantes con cariñosa hospitalidad, prepara una comida sustanciosa y recibe una noticia extraordinaria: el próximo nacimiento de su hijo.
Del salmo 14 R/.
¿Quién será grato a tus ojos, Señor?
El hombre que procede honradamente y obra con justicia; el que es sincero
en sus palabras y con su lengua a nadie desprestigia. R/.
Quien no hace mal al prójimo ni difama al vecino; quien no ve con aprecio
a los malvados, pero honra a quienes temen al Altísimo. R/.
Quien presta sin usura y quien no acepta soborno en perjuicio de inocentes.
Quienes vivan así serán gratos a Dios eternamente. R/.
Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los colosenses: 1, 24-28
Hermanos: Ahora me alegro
de sufrir por ustedes, porque así completo lo que falta a la pasión
de Cristo en mí, por el bien de su cuerpo, que es la Iglesia.
Por disposición de Dios, yo he sido constituido ministro de esta Iglesia
para predicarles por entero su mensaje, o sea el designio secreto que Dios ha
mantenido oculto desde siglos y generaciones y que ahora ha revelado a su pueblo
santo. Dios ha querido dar a conocer a los suyos la gloria y riqueza que este
designio encierra para los paganos, es decir, que Cristo vive en ustedes y es
la esperanza de la gloria. Ese mismo Cristo es el que nosotros predicamos, cuando
corregimos a los hombres y los instruimos con todos los recursos de la sabiduría,
a fin de que todos sean cristianos perfectos. Palabra de Dios. Te
alabamos, Señor.
Pablo aprecia positivamente el alcance de su misión, es el portavoz de un mensaje incluyente y consolador: Dios ama sin distinciones a todos los pueblos de la tierra.
ACLAMACIÓN
(cfr. Lc 8, 15) R/. Aleluya, aleluya.
Dichosos los que cumplen la palabra del Señor con un corazón
bueno y sincero, y perseveran hasta dar fruto. R/.
Lectura (Proclamación) del santo Evangelio según san Lucas: 10, 38-42
En
aquel tiempo, entró Jesús en un poblado, y una mujer, llamada
Marta, lo recibió en su casa. Ella tenía una hermana, llamada
María, la cual se sentó a los pies de Jesús y se puso a
escuchar su palabra. Marta, entre tanto, se afanaba en diversos quehaceres,
hasta que, acercándose a Jesús, le dijo: "Señor, ¿no
te has dado cuenta de que mi hermana me ha dejado sola con todo el quehacer?
Dile que me ayude".
El Señor le respondió: "Marta, Marta, muchas cosas te preocupan
y te inquietan, siendo así que una sola es necesaria. Maria escogió
la mejor parte y nadie se la quitará". Palabra del Señor.
Gloria a ti, Señor Jesús.
Marta y María representan dos historias diferentes, dos biografías valiosas. El servicio a Jesús y la escucha atenta de su Palabra. El Señor prioriza el valor más importante.
Credo
ORACIÓN UNIVERSAL
Después de escuchar
la Palabra de Dios, y antes de participar de la mesa de la Eucaristía,
presentemos con confianza nuestras peticiones al Padre.
Después de cada petición diremos: Escúchanos, Padre.
Por la Iglesia, por todos los cristianos. Que escuchemos y profundicemos
la Palabra de Dios como fuente de nuestro seguimiento de Jesús. Oremos.
Por las comunidades cristianas. Que todos nuestros compromisos y tareas pastorales
encuentren su vigor en la fuerza y la luz que vienen de la oración y
la contemplación. Oremos.
Para que sepamos ser acogedores y hospitalarios, como Abraham, como Marta y
María, especialmente con los más necesitados. Oremos:
Por todas las actividades pastorales que se llevan a cabo en nuestra diócesis
y nuestras parroquias, para que sean espacios donde vivir los valores humanos
y cristianos. Oremos.
Por los que, en cualquier lugar del mundo, son sometidos a la práctica
inhumana de la tortura. Que los torturadores y los que ordenan las torturas,
se conviertan y descubran la dignidad de toda persona. Oremos.
Por todos nosotros. Que el tiempo de verano nos ofrezca posibilidades de vivir
y profundizar nuestra fe en Jesús. Oremos.
Escucha, Padre, nuestras oraciones, y derrama tu amor sobre nosotros y sobre
toda la humanidad. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Dios nuestro, que con la muerte de tu Hijo llevaste a término y perfección los sacrificios de la antigua alianza, acepta y bendice estos dones, como aceptaste y bendijiste los de Abel, para que lo que cada uno te ofrece, sea de provecho para la salvación de todos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio para los domingos del Tiempo Ordinario.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Sal 110, 4-5)
Para perpetuar su amor, el Señor nos ha dejado el memorial de sus prodigios, y ha dado a sus amigos el signo de un banquete que les recuerde para siempre su alianza.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, tú que nos has concedido participar en esta Eucaristía, míranos con bondad y ayúdanos a vencer nuestra fragilidad humana para poder vivir como hijos tuyos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO.- Abrahán es presentado en la primera lectura como prototipo del servicio y la hospitalidad con el forastero. Marta también atiende cuidadosamente a Jesús y dispone con esmero del arreglo de su hogar. Esas manifestaciones de calidez humana son expresiones palpables de amor y gratuidad. Es lo que podemos dar a los que nos visitan. Sin embargo, Jesús nos dice que en su caso es nimbo más importante saber recibir que dar. María no se quería perder la ocasión de aprender de la sabiduría del Maestro y se dispuso a escucharle con toda atención. Los quehaceres y los guisos podrían esperar. El profeta estaba en casa y había que estar pendientes de sus labios. En nuestro encuentro personal con el Señor Jesús es más importante acoger su Palabra que presentarle nuestras ofrendas y reconocimientos.
ANTÍFONA DE ENTRADA (1 Jn 3, 17)
Si alguno, teniendo con qué vivir, ve a su hermano pasar necesidad, y sin embargo, no lo ayuda, ¿cómo habitará el amor de Dios en él?
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que diste un origen idéntico a todos los pueblos y quisiste formar con ellos una sola familia, llena los corazones con el fuego de tu amor y suscita en todos los hombres el deseo de un progreso justo y fraternal, a fin de que, con los bienes que has destinado para todos, se realice cada uno como persona humana y, suprimida toda discriminación, reinen en el mundo la igualdad y la justicia. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
Lectura del libro del profeta Miqueas: 6, 1-4. 6-8
Escuchen lo que dice el
Señor: "Levántate; llama a juicio a los montes, que las colinas
escuchen tu voz. Escuchen, montes, el juicio del Señor, pongan atención,
cimientos de la tierra: el Señor entabla juicio contra su pueblo, presenta
sus quejas contra Israel.
Pueblo mío, ¿qué mal te he causado o en qué cosa
te he ofendido? Respóndeme. Con la ayuda de Moisés, Aarón
y María, yo te saqué de Egipto y te libré de la esclavitud".
¿Qué cosa digna le ofreceré al Señor, postrado ante
el Dios del cielo? ¿Le ofreceré en holocausto becerros de un año?
¿Aceptará el Señor un millar de carneros o diez mil ríos
de aceite? ¿En expiación por mis culpas le ofreceré a mi
primogénito, al fruto de mis entrañas, por mi pecado?
Hombre, ya te he explicado lo que es bueno, lo que el Señor desea de
ti: que practiques la justicia y ames la lealtad y que seas humilde con tu Dios.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
Dios llama a su pueblo a rendirle cuentas. Israel no ha correspondido a las muestras de cariño del Señor. La única salida está en practicar la justicia y la Fidelidad.
Del salmo 49 R/.
Dios salva al que cumple su voluntad.
Congreguen ante mí a los que sellaron sobre el altar mi alianza.
Es Dios quien va a juzgar y el cielo mismo lo declara. R/.
No voy a reclamarte sacrificios, pues siempre están ante mí tus
holocaustos. Pero ya no aceptaré becerros de tu casa ni cabritos de tus
rebaños. R/.
¿Por qué citas mi preceptos y hablas a toda hora de mi pacto,
tú, que detestas la obediencia y echas en saco roto mis mandatos? R/.
Tú haces esto, ¿y yo tengo que callarme? ¿Crees acaso que
yo soy como tú? Quien las gracias me da, ése me honra y yo salvaré
al que cumple mi voluntad. R/.
ACLAMACIÓN
(cfr. Sal 94, 8) R/. Aleluya, aleluya.
Hagámosle caso al Señor, que nos dice: "No endurezcan
su corazón". R/
Lectura (Proclamación) del santo Evangelio según san Mateo: 12, 38-42
En aquel tiempo, le dijeron a Jesús algunos escribas y fariseos: "Maestro, queremos verte hacer una señal prodigiosa". Él les respondió: "Esta gente malvada e infiel está reclamando una señal, pero la única señal que se le dará, será la del profeta Jonás. Pues de la misma manera que Jonás estuvo tres días y tres noches en el vientre de la ballena, así también el Hijo del hombre estará tres días y tres noches en el seno de la tierra. Los habitantes de Nínive se levantarán el día del juicio contra esta gente y la condenarán, porque ellos se convirtieron con la predicación de Jonás, y aquí hay alguien más grande que Jonás. La reina del sur se levantará el día del juicio contra esta gente y la condenará, porque ella vino de los últimos rincones de la tierra a oír la sabiduría de Salomón, y aquí hay alguien más grande que Salomón". Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
Jesús ha actuado durante muchos meses con total transparencia. Habla y actúa con contundencia como enviado del Padre amoroso. Las señales están patentes a la vista de quien las quiera ver.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Acepta, Señor, los dones y plegarias de tu Iglesia y haz que todos los hombres se llenen del espíritu de hijos de Dios, a fin de que, superadas por amor todas las desigualdades, lleguen los pueblos a formar en tu paz una sola familia. Por Jesucristo, nuestro Señor
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Lc 11, 9)
Pidan y se les dará, busquen y hallarán, llamen y se les abrirá, dice el Señor.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Que de nuestra participación en este sacramento de unidad, mediante el cual renuevas constantemente a la familia humana, obtengamos, Señor, un amor auténtico y eficaz que nos impulse a promover el progreso de los pueblos y a realizar, en la caridad, las exigencias de la justicia. Por Jesucristo, nuestro señor.
ANTÍFONA DE ENTRADA (Sal 24, 16, 18)
Tengo los ojos puestos en el Señor, porque El me libra de todo peligro. Mírame, Dios mío, y ten piedad de mí, que estoy solo y afligido.
ORACIÓN COLECTA
Nos acogemos, Señor, a tu providencia, que nunca se equivoca, y te pedimos humildemente que apartes de nosotros todo mal y nos concedas aquello que pueda contribuir a nuestro bien. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
Lectura del libro del profeta Miqueas: 7, 14-15. 18-20
Señor, Dios nuestro,
pastorea a tu pueblo con tu cayado, a las ovejas de tu heredad, que permanecen
aisladas en la maleza, en medio de campos feraces. Pastarán en Basan
y en Galaad, como en los días de antaño, como cuando salimos de
Egipto y nos mostrabas tus prodigios. ¿Qué Dios hay como tú,
que quitas la iniquidad y pasas por alto la rebeldía de los sobrevivientes
de Israel? No mantendrás por siempre tu cólera, pues te complaces
en ser misericordioso.
Volverás a compadecerte de nosotros, aplastarás con tus pies nuestras
iniquidades, arrojarás a lo hondo del mar nuestros delitos. Serás
fiel con Jacob y compasivo con Abraham, como juraste a nuestros padres en tiempos
remotos, Señor, Dios nuestro. Palabra de Dios. Te alabamos,
Señor.
El pueblo desea aprovechar la amnistía que Dios le ofrece. Quiere caminar a su lado y dejarse conducir por su mano poderosa. Dios les dará otra oportunidad
Del salmo 84 R/.
Muéstranos, Señor, tu misericordia.
Señor, has sido bueno con tu tierra, pues cambiaste la suerte de Jacob,
perdonaste las culpas de tu pueblo y sepultaste todos sus pecados, reprimiste
tu cólera y frenaste el incendio de tu ira. R/.
También ahora cambia nuestra suerte, Dios, salvador nuestro, y deja ya
tu rencor contra nosotros. ¿O es que vas a estar siempre enojado y a
prolongar tu ira de generación en generación? R/.
¿No vas a devolvernos la vida para que tu pueblo se alegre contigo? Muéstranos,
Señor, tu misericordia y danos tu salvación. R/.
ACLAMACIÓN
(Jn 14, 23) R/. Aleluya, aleluya.
El que me ama cumplirá mi palabra y mi Padre lo amará
y haremos en él nuestra morada, dice el Señor. R/.
Lectura (Proclamación) del santo Evangelio según san Mateo: 12, 46-50
En aquel tiempo, Jesús estaba hablando a la muchedumbre, cuando su madre y sus parientes se acercaron y trataban de hablar con Él. Alguien le dijo entonces a Jesús: "Oye, ahí fuera están tu madre y tus hermanos, y quieren hablar contigo". Pero Él respondió al que se lo decía: "¿Quién es mi madre y quiénes son mis hermanos?". Y señalando con la mano a sus discípulos, dijo: "Éstos son mi madre y mis hermanos. Pues todo el que cumple la voluntad de mi Padre, que está en los cielos, ése es mi hermano, mi hermana y mi madre". Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
No es que Jesús reniegue de su familia. Su declaración sorprendente nos alerta a descubrir lo esencial. Los discípulos de Jesús conformamos una familia dispuesta a cumplir el designio del Padre.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Confiados en tu misericordia, Señor, venimos a tu altar con nuestros dones a fin de que te dignes purificarnos por este memorial que estamos celebrando. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Mc 11, 23-24)
Yo les aseguro, dice el Señor, que todo cuanto pidan en la oración, si tienen fe en obtenerlo, les será concedido.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Padre santo, tú que nos has alimentado con el Cuerpo y la Sangre de tu Hijo, guíanos por medio de tu Espíritu a fin de que, no sólo con palabras, sino con toda nuestra vida podamos demostrarte nuestro amor y así merezcamos entrar al Reino de los cielos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE ENTRADA (cfr. Is 53, 4)
El Señor ha cargado con nuestros sufrimientos, ha soportado nuestros dolores.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que quisiste que tu Hijo unigénito soportara nuestros sufrimientos, para enseñamos el valor de la enfermedad y la paciencia; escucha nuestras súplicas por nuestros hermanos enfermos y concede a cuantos están afligidos por el dolor, las penas y la enfermedad, la gracia de sentirse elegidos entre aquellos que el Señor ha llamado bienaventurados, y de saberse unidos para salvación del mundo, a la pasión de Cristo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
LITURGIA DE LA PALABRA
Lectura del libro del profeta Jeremías: 1, 1. 4-10
Palabras de Jeremías,
hijo de Jilquías, uno de los sacerdotes residentes en Anatot, territorio
de Benjamín.
En tiempo de Josías, el Señor me dirigió estas palabras:
"Desde antes de formarte en el seno materno, te conozco; desde antes de
que nacieras, te consagré como profeta para las naciones".
Yo le contesté: "Pero, Señor mío, yo no sé
expresarme, porque apenas soy un muchacho".
El Señor me dijo: "No digas que eres un muchacho, pues irás
a donde yo te envíe y dirás lo que yo te mande. No tengas miedo,
porque yo estoy contigo para protegerte", lo dice el Señor.
El Señor extendió entonces su brazo, con su mano me tocó
la boca y me dijo: "Desde hoy pongo mis palabras en tu boca y te doy autoridad
sobre pueblos y reyes, para que arranques y derribes, para que destruyas y deshagas,
para que edifiques y plantes". Palabra de Dios. Te alabamos,
Señor.
Jeremías tendrá que vencer su miedo. Sus oyentes testarudos no lo doblegarán. Dios lo asistirá y emprenderá una lucha contrarreloj para transformar integralmente a Juda.
Del salmo 70 R/.
Señor, tú eres mi esperanza.
Señor, tú eres mi esperanza, que no quede yo jamás
defraudado. Tú que eres justo, ayúdame y defiéndeme; escucha
mi oración y ponme a salvo. R/.
Sé para mí un refugio, ciudad fortificada en que me salves. Y
pues eres mi auxilio y mi defensa, líbrame, Señor, de los malvados.
R/.
Señor, tú eres mi esperanza; desde mi juventud en ti confío.
Desde que estaba en el seno de mi madre, yo me apoyaba en ti y tú me
sostenías. R/.
Yo proclamaré siempre tu justicia y a todas horas, tu misericordia. Me
enseñaste a alabarte desde niño y seguir alabándote es
mi orgullo. R/.
ACLAMACIÓN
R/. Aleluya, aleluya.
La semilla es la palabra de Dios y el sembrador es Cristo; todo aquel
que lo encuentra vivirá para siempre. R/.
Lectura (Proclamación) del santo Evangelio según san Mateo: 13, 1-9
Un día salió Jesús de la casa donde se hospedaba y se sentó a la orilla del mar. Se reunió en torno suyo tanta gente, que Él se vio obligado a subir a una barca, donde se sentó, mientras la gente permanecía en la orilla. Entonces Jesús les habló de muchas cosas en parábolas y les dijo: "Una vez salió un sembrador a sembrar, y al ir arrojando la semilla, unos granos cayeron a lo largo del camino; vinieron los pájaros y se los comieron. Otros granos cayeron en terreno pedregoso, que tenía poca tierra; ahí germinaron pronto, porque la tierra no era gruesa; pero cuando subió el sol, los brotes se marchitaron, y como no tenían raíces, se secaron. Otros cayeron entre espinos, y cuando los espinos crecieron, sofocaron las plantitas. Otros granos cayeron en tierra buena y dieron fruto: unos, ciento por uno; otros, sesenta; y otros, treinta. El que tenga oídos, que oiga". Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
Jesús no se apresura a realizar "cuentas alegres". Conoce la volubilidad del corazón humano. Sin embargo, sigue sembrando con la esperanza de encontrar tierra buena.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Dios nuestro, cuya providencia dirige cada momento de nuestra vida, recibe las súplicas y las ofrendas con que imploramos tu misericordia por nuestros hermanos enfermos, para que la preocupación de ahora por su enfermedad, se nos convierta pronto en gozo por su salud. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Col 1, 24)
Así completo en mi carne los dolores de Cristo, por el bien de su cuerpo, que es la Iglesia.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dios nuestro, auxilio inefable en la enfermedad, ayuda con tu poder a estos hijos tuyos enfermos, para que, aliviados por tu misericordia, vuelvan a ocupar su lugar en la asamblea de tus fieles. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE ENTRADA (Jn 20, 17)
Jesús dijo a María Magdalena: Ve y diles a mis hermanos: Subo a mi Padre y a su Padre, a mi Dios y a su Dios.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que quisiste que santa María Magdalena fuera la primera en recibir de tu Hijo Unigénito el encargo de anunciar el gozo de la resurrección, concédenos, que siguiendo su ejemplo, demos a conocer a todos que Cristo vive y nos está esperando en el cielo. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
Lectura del libro del profeta Jeremías: 2, 1-3. 7-8. 12-33
En aquel tiempo, me habló
el Señor y me dijo: "Ve y grita a los oídos de Jerusalén:
'Esto dice el Señor: Aún recuerdo el cariño de tu juventud
y tu amor de novia para conmigo, cuando me seguías por el desierto, por
una tierra sin cultivo.
Israel estaba consagrado al Señor como primicia de su cosecha. Quien
se atrevía a comer de ella, cometía un delito y la desgracia caía
sobre él.
Yo los traje a ustedes a una tierra de jardines, para que comieran de sus excelentes
frutos. Pero llegaron y profanaron mi tierra, convirtieron mi heredad en algo
abominable.
Los sacerdotes ya no hablan de Dios y los doctores de la ley no me conocen,
los pastores han profetizado en nombre de Baal y adoran a los ídolos.
Espántense, cielos, de ello, horrorícense y pásmense, –palabra
del Señor–, porque dos maldades ha cometido mi pueblo: me abandonaron
a mí, manantial de aguas vivas, y se hicieron cisternas agrietadas, que
no retienen el agua' ". Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
Quienes se apartan del camino del bien y la fidelidad al Señor perecerán; eso dice el dogma tradicional. Jeremías se inconforma al ver la prosperidad de los malvados.
Del salmo 35 R/.
Tú eres, Señor, la fuente de la vida.
Señor, tu misericordia es tan grande como el cielo y tu fidelidad,
como desde la tierra hasta las nubes.
Más grande que las montañas es tu justicia y tus sentencias son
como el océano inmenso. R/.
Señor, qué inapreciable es tu misericordia. Los seres humanos
se acogen a la sombra de tus alas, se nutren de lo más sabroso de tu
casa y tú les das a beber el torrente de tus delicias. R/.
Porque tú eres, Señor, la fuente de la vida y tu luz nos hace
ver la luz. Prolonga tu misericordia con los que te reconocen y tu justicia
con los rectos de corazón. R/.
ACLAMACIÓN
R/. Aleluya, aleluya.
¿Qué has visto de camino, María, en la mañana?
A mi Señor glorioso, la tumba abandonada. R/.
Lectura (Proclamación) del santo Evangelio según san Juan: 20, 1-2. 11-18
El
primer día después del sábado, estando todavía oscuro,
fue María Magdalena al sepulcro y vio removida la piedra que lo cerraba.
Echó a correr, llegó a la casa donde estaban Simón Pedro
y el otro discípulo, a quien Jesús amaba, y les dijo: "Se
han llevado del sepulcro al Señor y no sabemos dónde lo habrán
puesto".
María se había quedado llorando junto al sepulcro de Jesús.
Sin dejar de llorar, se asomó al sepulcro y vio dos ángeles vestidos
de blanco, sentados en el lugar donde había estado el cuerpo de Jesús,
uno en la cabecera y el otro junto a los pies. Los ángeles le preguntaron:
"¿Por qué estás llorando, mujer?". Ella les contestó:
"Porque se han llevado a mi Señor y no sé dónde lo
habrán puesto".
Dicho esto, miró hacia atrás y vio a Jesús de pie, pero
no sabía que era Jesús. Entonces Él le dijo: "Mujer,
¿por qué estás llorando? ¿A quién buscas?".
Ella, creyendo que era el jardinero, le respondió: "Señor,
si tú te lo llevaste, dime dónde lo has puesto". Jesús
le dijo: "¡María!". Ella se volvió y exclamó:
"¡Rabbuní!", que en hebreo significa 'maestro'. Jesús
le dijo: "Déjame ya, porque todavía no he subido al Padre.
Ve a decir a mis hermanos: 'Subo a mi Padre y su Padre, a mi Dios y su Dios'
".
María Magdalena se fue a ver a los discípulos para decirles que
había visto al Señor y para darles su mensaje. Palabra
del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
Magdalena sufre menosprecios antes de seguir al Señor. Al vivir como discípula de Jesús aprende a servirle y como tal, será mensajera de su resurrección.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Mira, Señor, los dones que te presentamos y acéptalos con el mismo agrado con que tu Hijo Jesucristo aceptó el homenaje de amor de María Magdalena. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (2 Co 5, 14-15)
El amor de Cristo nos compromete a vivir, no para nosotros mismos, sino para El, que murió y resucitó por nosotros.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Que el sacramento que hemos recibido encienda, Señor, en nosotros aquel mismo amor ardiente y fiel de santa María Magdalena a Cristo, su maestro, que vive y reina por los siglos de los siglos.
Santos: Brígida de Suecia, fundadora Juan Casiano, abad Beato Pedro Ruiz y compañeros feria (Verde).
ANTÍFONA DE ENTRADA (cfr. Ga 6, 14)
Que nuestra única gloria sea la cruz de nuestro Señor Jesucristo, en quien está nuestra salvación, nuestra vida y resurrección y por quien hemos sido redimidos y liberados.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que quisiste que tu Hijo muriera en la Cruz para salvar a todos los hombres, concédenos aceptar por su amor la cruz del sufrimiento aquí en la tierra, para poder gozar en el cielo los frutos de su redención. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
Lectura del libro del profeta Jeremías: 3, 14-17
"Vuélvanse a
mi, hijos rebeldes, porque yo soy su dueño, dice el Señor: Iré
tomando conmigo a uno de cada ciudad, a dos de cada familia y los traeré
a Sión; les daré pastores según mi corazón, que
los apacienten con sabiduría y prudencia.
Después, cuando ustedes se hayan multiplicado y hayan prosperado en el
país, palabra del Señor, ya no habrá necesidad de invocar
el arca de la alianza del Señor, pues ya no pensarán en ella,
ni se acordarán de ella, ni la echarán de menos, ni se les ocurrirá
hacer otra.
En aquel tiempo, llamarán a Jerusalén 'el trono del Señor',
acudirán a ella todos los pueblos en el nombre del Señor y ya
no seguirán la maldad de su corazón obstinado". Palabra
de Dios. Te alabamos, Señor.
El arca de la alianza es el memorial del compromiso de Israel con Dios. Un signo externo que resultará innecesario cuando Israel renueve su obstinado corazón.
Jeremías
31 R/. El Señor es nuestro pastor.
Escuchen, pueblos, la palabra del Señor y anúncienla
aun en las islas más remotas: "El que dispersó a Israel lo
reunirá y lo cuidará como el pastor a su rebaño".
R/.
Porque el Señor redimió a Jacob y lo rescató de las manos
del poderoso. Ellos vendrán para aclamarlo al monte Sión y correrán
hacia los bienes del Señor. R/.
Entonces se alegrarán las jóvenes, danzando; se sentirán
felices jóvenes y viejos, porque yo convertiré su tristeza en
alegría, y los llenaré de gozo y aliviaré sus penas. R/.
ACLAMACIÓN
(cfr. Lc 8, 15) R/. Aleluya, aleluya.
Dichosos los que cumplen la palabra del Señor con un corazón
bueno y sincero, y perseveran hasta dar fruto. R/.
Lectura
(Proclamación) del santo Evangelio según san Mateo: 13, 18-23
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: "Escuchen ustedes
lo que significa la parábola del sembrador. A todo hombre que oye la
palabra del Reino y no la entiende, le llega el diablo y le arrebata lo sembrado
en su corazón. Esto es lo que significan los granos que cayeron a lo
largo del camino.
Lo sembrado sobre terreno pedregoso significa al que oye la palabra y la acepta
inmediatamente con alegría; pero, como es inconstante, no la deja echar
raíces, y apenas le viene una tribulación o una persecución
por causa de la palabra, sucumbe.
Lo sembrado entre los espinos representa a aquel que oye la palabra, pero las
preocupaciones de la vida y la seducción de las riquezas, la sofocan
y queda sin fruto.
En cambio, lo sembrado en tierra buena, representa a quienes oyen la palabra,
la entienden y dan fruto; unos, el ciento por uno; otros, el sesenta; y otros,
el treinta". Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor
Jesús.
Los pretextos de mayor o menor peso se multiplican y nos impiden vivir la libertad cristiana. Los creyentes debemos pagar el precio de nuestra fidelidad al Reino.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Señor, que este sacrificio que Cristo te ofreció sobre la Cruz para borrar los pecados del mundo, nos purifique ahora de todas nuestras culpas. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Jn 12, 32)
Cuando yo sea levantado de la tierra, atraeré a todos hacia mí, dice el Señor.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor nuestro Jesucristo, tú que nos has redimido por medio de tu Cruz y nos has hecho partícipes de tu Cuerpo y de tu Sangre, concédenos participar también de la gloria de tu resurrección. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos.
Vísperas I del domingo: 1ª. semana del Salterio Feria (Verde)
MISA DE SANTA MARÍA EN SÁBADO
ANTÍFONA DE ENTRADA (cfr. Jdt 13, 18-19)
María, el Altísimo te ha bendecido más que a todas las mujeres de la tierra, y de tal manera te ha glorificado, que los hombres no cesan de alabarte.
ORACIÓN COLECTA
Padre eterno, Dios nuestro,
que has puesto en la Virgen Maria el trono real de tu Sabiduría, ilumina
a la Iglesia con la luz de la Palabra que da vida, para que en el resplandor
de la verdad caminemos hasta el pleno conocimiento de tu misterio de amor. Por
nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad
del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
LITURGIA DE LA PALABRA
Lectura del libro del profeta Jeremías: 7, 1-11
Ésta es la palabra del Señor que escuchó Jeremías:
"Ponte a la entrada del templo y proclama allí estas palabras: 'Escucha,
Judá, la palabra del Señor; escúchenla ustedes los que
entran por estas puertas para adorar al Señor.
Esto dice el Señor de los ejércitos, el Dios de Israel: Corrijan
su conducta y sus intenciones, y viviré con ustedes en este lugar. No
se hagan ilusiones con razones falsas, repitiendo: ¡Éste es el
templo del Señor, éste es el templo del Señor, éste
es el templo del Señor!
Si corrigen su conducta y sus intenciones; si aplican bien la justicia entre
los hombres y no explotan al forastero, al huérfano y a la viuda; si
no derraman sangre inocente en este lugar y no siguen, para mal de ustedes,
a dioses extranjeros, entonces yo habitaré con ustedes en este lugar,
en la tierra que desde hace tanto tiempo y para siempre les di a sus padres.
Ustedes, en cambio, ponen su confianza en palabras engañosas, que no
sirven de nada. Porque roban, matan, cometen adulterios y perjurios, queman
incienso a los ídolos, adoran a dioses extranjeros y desconocidos, y
creen que, con venir después a presentarse ante mí en este templo,
donde se invoca mí nombre, y con decir: ‘estamos salvados', basta
para poder seguir cometiendo todas esas iniquidades. ¿Creen, acaso, que
este templo, donde se invoca mi nombre es una cueva de ladrones? Tengan cuidado,
porque no estoy ciego, dice el Señor' ". Palabra de Dios.
Te alabamos, Señor.
El culto que los israelitas practican en Jerusalén resulta engañoso. Quien no acompañe los rituales de las actitudes éticas correspondientes no podrá satisfacer al Señor.
Del salmo 83 R/.
Qué agradable, Señor, es tu morada.
Anhelando los atrios del Señor se consume mi alma. Todo mi ser
de gozo se estremece y el Dios vivo es la causa. R/.
Hasta el gorrión encuentra casa y la golondrina un lugar para su nido,
cerca de tus altares, Señor de los Dios mío R/.
Dichosos los que viven en tu casa, te alabarán para siempre; dichosos
los que encuentran en ti su fuerza, pues caminarán cada vez con más
vigor. R/.
Pues un día en tus atrios vale más que mil fuera de ellos; yo
prefiero el umbral de la casa de mi Dios, al lujoso palacio del perverso. R/.
ACLAMACIÓN
(St 1, 21) R/. Aleluya, aleluya.
Acepten dócilmente la palabra que ha sido sembrada en ustedes
y es capaz de salvarlos. R/.
Lectura (Proclamación) del santo Evangelio según san Mateo: 13, 24-30
En aquel tiempo, Jesús propuso esta otra parábola a la muchedumbre: "El Reino de los cielos se parece a un hombre que sembró buena semilla en su campo; pero mientras los trabajadores dormían, llegó un enemigo del dueño, sembró cizaña entre el trigo y se marchó. Cuando crecieron las plantas y se empezaba a formar la espiga, apareció también la cizaña. Entonces los trabajadores fueron a decirle al amo: `Señor, ¿qué no sembraste buena semilla en tu campo? ¿De dónde, pues, salió esta cizaña?. El amo les respondió: 'De seguro lo hizo un enemigo mío'. Ellos le dijeron: '¿Quieres que vayamos a arrancarla?'. Pero él les contestó: 'No. No sea que al arrancar la cizaña, arranquen también el trigo. Dejen que crezcan juntos hasta el tiempo de la cosecha y, cuando llegue la cosecha, diré a los segadores: Arranquen primero la cizaña y átenla en gavillas para quemarla; y luego almacenen el trigo en mi granero' ". Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
Los seres humanos solemos ser impacientes con los procesos de renovación interior. No respetamos los ritmos y las decisiones de las personas y exigimos resultados inmediatos.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Jubilosos de poder celebrar la festividad de la Madre de tu Hijo, te presentamos, Señor, estas ofrendas de alabanza, y te pedimos que por este santo intercambio de dones, se acrecienten en nosotros los frutos de la redención eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio de Santa María Virgen.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (cfr Lc 1, 48)
Me llamarán bienaventurada todas las generaciones, porque ha puesto Dios sus ojos en la humildad de su esclava.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Habiendo recibido el sacramento celestial, te pedimos, Señor, que cuantos hemos celebrado con veneración, la memoria de la santísima Virgen María, merezcamos participar del banquete eterno. Por Jesucristo, nuestro Señor.
XVII DOMINGO ORDINARIO
ANTÍFONA DE ENTRADA (Sal 67, 6-7. 36)
Adoremos a Dios en su santo templo. Él nos hace habitar juntos en su casa. Él es la fuerza y el poder de su pueblo.
ORACIÓN COLECTA
Padre santo y todopoderoso, protector de los que en ti confían, ten misericordia de nosotros y enséñanos a usar con sabiduría de los bienes de la tierra, a fin de que no nos impidan alcanzar los del cielo. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
Lectura del libro del Génesis: 18, 20-32
En aquellos días,
el Señor dijo a Abraham: "El clamor contra Sodoma y Gomorra es grande
y su pecado es demasiado grave. Bajaré, pues, a ver si sus hechos corresponden
a ese clamor; y si no, lo sabré".
Los hombres que estaban con Abraham se despidieron de él y se encaminaron
hacia Sodoma. Abraham se quedó ante el Señor y le preguntó:
"¿Será posible que tú destruyas al inocente junto
con el culpable? Supongamos que hay cincuenta justos en la ciudad, ¿acabarás
con todos ellos y no perdonarás al lugar en atención a esos cincuenta
justos? Lejos de ti tal cosa: matar al inocente junto con el culpable, de manera
que la suerte del justo sea como la del malvado; eso no puede ser. El juez de
todo el mundo ¿no hará justicia?". El Señor le contestó:
"Si encuentro en Sodoma cincuenta justos, perdonaré a toda la ciudad
en atención a ellos".
Abraham insistió: "Me he atrevido a hablar a mi Señor, yo
que soy polvo y ceniza. Supongamos que faltan cinco para los cincuenta justos,
¿por esos cinco que faltan, destruirás toda la ciudad?".
Y le respondió el Señor: "No la destruiré, si encuentro
allí cuarenta y cinco justos". Abraham volvió a insistir:
"Quizá no se encuentren allí más que cuarenta".
El Señor le respondió: "En atención a los cuarenta,
no lo haré".
Abraham siguió insistiendo: "Que no se enoje mi Señor, si
sigo hablando, ¿y si hubiera treinta?". El Señor le dijo:
"No lo haré, si hay treinta".
Abraham insistió otra vez: "Ya que me he atrevido a hablar a mi
Señor, ¿y si se encuentran sólo veinte?". El Señor
le respondió: "En atención a los veinte, no la destruiré".
Abraham continuó: "No se enoje mi Señor, hablaré sólo
una vez más, ¿y si se encuentran sólo diez?". Contestó
el Señor: "Por esos diez no destruiré la ciudad". Palabra
de Dios. Te alabamos, Señor.
Abrahán es el confidente del Señor. La amenaza contra Sodoma está en el aire. El patriarca entiende que le corresponde interceder y lo hace atrevidamente hasta el final.
Del salmo 137 R/.
Te damos gracias de todo corazón.
De todo corazón te damos gracias, Señor, porque escuchaste nuestros
ruegos. Te cantaremos delante de tus ángeles, te adoraremos en tu templo.
R/.
Señor, te damos gracias por tu lealtad y por tu amor; siempre que te
invocamos, nos oíste y nos llenaste de valor. R/.
Se complace el Señor en los humildes y rechaza al engreído. En
las penas, Señor, me infundes ánimo, me salvas del furor del enemigo.
R/.
Tu mano, Señor, nos pondrá a salvo y así concluirás
en nosotros tu obra. Señor, tu amor perdura eternamente; obra tuya soy,
no me abandones. R/.
Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los colosenses: 2, 12-14
Hermanos: Por el bautismo
fueron ustedes sepultados con Cristo y también resucitaron con Él,
mediante la fe en el poder de Dios, que lo resucitó de entre los muertos.
Ustedes estaban muertos por sus pecados y no pertenecían al pueblo de
la alianza. Pero El les dio una vida nueva con Cristo, perdonándoles
todos los pecados. Él anuló el documento que nos era contrario,
cuyas cláusulas nos condenaban, y lo eliminó clavándolo
en la cruz de Cristo. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
Los delitos que solapada o descaradamente cometemos contra nuestros hermanos nos encaminan hacia la muerte. Jesús resucitado nos ofrece un camino hacia la vida plena.
ACLAMACIÓN
(Rm 8, 15) R/.Aleluya, aleluya.
Hemos recibido un espíritu de hijos, que nos hace exclamar:
¡Padre! R/.
Lectura (Proclamación) del santo Evangelio según san Lucas: 11, 1-13
Un
día, Jesús estaba orando y cuando terminó, uno de sus discípulos
le dijo: "Señor, enséñanos a orar, como Juan enseñó
a sus discípulos".
Entonces Jesús les dijo: "Cuando oren, digan: `Padre, santificado
sea tu nombre, venga tu Reino, danos hoy nuestro pan de cada día y perdona
nuestras ofensas, puesto que también nosotros perdonamos a todo aquel
que nos ofende, y no nos dejes caer en tentación'". También
les dijo: "Supongan que alguno de ustedes tiene un amigo que viene a medianoche
a decirle: 'Préstame, por favor, tres panes, pues un amigo mío
ha venido de viaje y no tengo nada que ofrecerle'. Pero él le responde
desde dentro: 'No me molestes. No puedo levantarme a dártelos, porque
la puerta ya está cerrada y mis hijos y yo estamos acostados'. Si el
otro sigue tocando, yo les aseguro que, aunque no se levante a dárselos
por ser su amigo, sin embargo, por su molesta insistencia, sí se levantará
y le dará cuanto necesite.
Así también les digo a ustedes: Pidan y se les dará, busquen
y encontrarán, toquen y se les abrirá. Porque quien pide, recibe;
quien busca, encuentra, y al que toca, se le abre. ¿Habrá entre
ustedes algún padre que, cuando su hijo le pida pescado, le dé
una víbora? ¿O cuando le pida huevo, le dé un alacrán?
Pues, si ustedes, que son malos, saben dar cosas buenas a sus hijos, ¿cuánto
más el Padre celestial dará el Espíritu Santo a quienes
se lo pidan?". Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor
Jesús.
El razonamiento es impecable. Los humanos, aun en situaciones excepcionales, somos atentos con nuestros amigos. Dios habrá de atendernos con singular cariño cuando se lo pidamos.
Credo
ORACIÓN UNIVERSAL
Las lecturas nos han
hablado hoy del valor de la intercesión ante Dios. Con la insistencia
de Abraham, siguiendo la enseñanza y el ejemplo de Jesús, oremos.
Después de cada petición diremos: Escúchanos Padre.
Por todos los que creemos en Jesucristo, tanto por los que formamos la Iglesia
católica como por los miembros de las demás confesiones cristianas.
Oremos.
Por los responsables de nuestras comunidades, especialmente por el papa Benedicto,
y por nuestro obispo N., y nuestro párroco N. Oremos.
Por los gobernantes de las naciones, para que sean dignos instrumentos de Dios
en el ejercicio del poder. Oremos.
Por los extranjeros que en estos días nos visitan. Oremos.
Por nosotros, y por nuestros familiares y amigos. Oremos.
Escucha, Padre, nuestras peticiones y derrama tu amor sobre el mundo entero.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Acepta, Señor, estos dones que tu generosidad ha puesto en nuestras manos, y concédenos que este sacrificio santifique toda nuestra vida y nos conduzca a la felicidad eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio para los domingos del Tiempo Ordinario.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Mt 5, 7-8)
Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia. Bienaventurados los limpios de corazón, porque verán a Dios, dice el Señor.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, que esta Eucaristía, memorial de la muerte y resurrección de tu Hijo, nos ayude a corresponder al don inefable de su amor y a procurar cada día nuestra salvación eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.
UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO.- Pedir sin esperar es sencillo. Pedir confiadamente a pesar de la adversidad que nos aprisiona es más complicado. Las situaciones conflictivas que vivimos como personas y como sociedad se han agravado. Madres desconsoladas por los problemas de sus hijos jóvenes, padres con serios apuros económicos, ciudadanos confundidos e impotentes ante los serios conflictos sociales. De ninguno de esos apuros nos librará Dios de forma inmediata. El Señor Jesús nos ofrece un auxilio más seguro, la guía del Espíritu Santo que habremos de pedir al Padre, para que nos fortalezca y nos ayude a discernir el camino adecuado que debernos seguir en esta hora confusa que vivimos.
ANTÍFONA DE ENTRADA
Benditos sean san Joaquín y santa Ana, porque fueron los padres de la Virgen María; por ella nos ha venido la salvación prometida a todas las naciones.
ORACIÓN COLECTA
Dios de nuestros padres, que concediste a san Joaquín y a santa Ana el privilegio de ser los padres de María, la madre del Salvador, ayúdanos, por su intercesión, a alcanzar la salvación eterna. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
Lectura del libro del profeta Jeremías: 13, 1-11
El Señor me dijo:
"Ve a comprar un cinturón de lino y póntelo en la cintura,
pero no lo metas en el agua". Compré el cinturón y me lo
puse en la cintura, según la orden del Señor.
Entonces el Señor me habló por segunda vez y me dijo: "Toma
el cinturón que compraste y que llevas puesto en la cintura, levántate
y vete al río Eufrates y escóndelo ahí, en el agujero de
una roca". Fui y lo escondí en el Éufrates, como me había
ordenado el Señor.
Al cabo de mucho tiempo, me dijo el Señor: "Levántate, vete
al Éufrates y recoge el cinturón que te mandé que escondieras
ahí". Fui al Éufrates, escarbé y recogí el
cinturón del sitio donde lo había escondido; pero el cinturón
se había podrido: no servía para nada.
Entonces el Señor me habló y me dijo:
"Esto dice el Señor: 'Del mismo modo haré yo que se pudra
la gran soberbia de Juda y de Jerusalén. Ese pueblo malvado se ha negado
a obedecerme, se porta obstinadamente, ha seguido a otros dioses para servirlos
y adorarlos, y será como este cinturón, que ya no sirve para nada.
Porque así como el cinturón va adherido al cuerpo, así
quise llevar unidas a mí a la casa de Israel y a la casa de Juda, para
que fueran mi pueblo, mi fama, mi gloria y mi honor; pero ellos no me escucharon'".
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
Un cinturón resalta las formas, sujetas los vestidos, da soltura de movimientos. Israel se ha vuelto un cinturón inservible, al insubordinarse y rebelarse contra Dios.
Deuteronomio 32
R/. Abandonaron a Dios, que les dio la vida.
Abandonaron a Dios, que los creó, y olvidaron al Señor,
que les dio la vida. Lo vio el Señor, y encolerizado, rechazó
a sus hijos y a sus hijas. R/.
El Señor pensó: "Me les voy a esconder y voy a ver en qué
acaban, porque son una generación depravada, unos hijos infieles. R/.
Ellos me han dado celos con un dios que no es Dios y me han encolerizado con
sus ídolos; yo también les voy a dar celos con un pueblo que no
es pueblo y los voy a encolerizar con una nación insensata". R/.
ACLAMACIÓN
(St 1, 18) R/. Aleluya, aleluya.
Por su propia voluntad el Padre nos engendró por medio del Evangelio,
para que fuéramos, en cierto modo, primicias de sus creaturas. R/.
Lectura (Proclamación) del santo Evangelio según san Mateo: 13, 31-35
En
aquel tiempo, Jesús propuso esta otra parábola a la muchedumbre:
"El Reino de los cielos es semejante a la semilla de mostaza que un hombre
siembra en su huerto. Ciertamente es la más pequeña de todas las
semillas, pero cuando crece, llega a ser más grande que las hortalizas
y se convierte en un arbusto, de manera que los pájaros vienen y hacen
su nido en las ramas".
Les dijo también otra parábola: "El Reino de los cielos se
parece a un poco de levadura que tomó una mujer y la mezcló con
tres medidas de harina, y toda la masa acabó por fermentar".
Jesús decía a la muchedumbre todas estas cosas con parábolas,
y sin parábolas nada les decía, para que se cumpliera lo que dijo
el profeta:
Abriré mi boca y les hablaré con parábolas; anunciaré
lo que estaba oculto desde la creación del mundo. Palabra del
Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
Los comienzos modestos del Reinado de Dios son un acicate para no doblegarse.
Dios es quien impulsa el proyecto, a los suyos nos corresponde sumarnos solidariamente.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Acepta, Señor, el sacrificio que vamos a ofrecerte y concédenos participar por él de la salvación prometida en Cristo a Abraham y a su descendencia. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (cfr. Sal 23, 5)
Dichosos los corazones limpios porque han recibido la bendición del Señor y han encontrado gracia delante de Dios, su salvador.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Padre santo, que quisiste que tu Unigénito se hiciera hermano nuestro para convertirnos en hijos tuyos, concede a quienes has alimentado con el Cuerpo y la Sangre de Cristo un verdadero espíritu filial y una sincera caridad fraterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE ENTRADA (Sal 26, 1-2)
El Señor es mi luz y mi salvación, ¿a quién temeré? El Señor es la defensa de mi vida, ¿quién me hará temblar? Cuando me asaltan mis enemigos, tropiezan y caen.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, de quien todo bien procede, inspíranos propósitos de justicia y santidad y concédenos tu ayuda para poder cumplirlos. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
Lectura del libro del profeta Jeremías: 14, 17-22
Que mis ojos lloren sin
cesar de día y de noche, porque la capital de mi pueblo está afligida
por un gran desastre, por una herida gravísima. Si salgo al campo, encuentro
gente muerta por la espada; si entro en la ciudad, hallo gente que se muere
de hambre. Hasta los profetas y los sacerdotes andan errantes por el país
y no saben qué hacer.
¿Acaso has rechazado, Señor, a Judá? ¿O te has cansado
ya de Sión? ¿Por qué nos has herido tan gravemente, que
ya no tenemos remedio? Esperábamos tranquilidad y sólo hay perturbación;
esperábamos la curación y sólo encontramos miedo.
Reconocemos, Señor, nuestras maldades y las culpas de nuestros padres;
hemos pecado contra ti. Por ser tú quien eres, no nos rechaces; no deshonres
el trono de tu gloria. Acuérdate, Señor, de tu alianza con nosotros
y no la quebrantes. ¿Acaso los ídolos de los paganos pueden hacer
llover? ¿Acaso los cielos, por sí solos, pueden darnos la lluvia?
Tú solo, Señor y Dios nuestro, haces todas estas cosas, por eso
en ti tenemos puesta nuestra esperanza. Palabra de Dios. Te alabamos,
Señor.
Las desgracias de la guerra aumentan sobre Jerusalén. Los falsos profetas auguran la pronta recuperación. Jeremías afirma que ésta no vendrá si el pueblo no se convierte de corazón.
Del salmo 78 R/.
Socórrenos, Señor, y te alabaremos.
No recuerdes, Señor, contra nosotros, las culpas de nuestros
padres. Que tu amor venga pronto a socorrernos, porque estamos totalmente abatidos.
R/.
Para que sepan quién eres, socórrenos, Dios y salvador nuestro.
Por el honor de tu nombre, sálvanos y perdona nuestros pecados. R/.
Que lleguen hasta ti los gemidos del cautivo; con tu brazo poderoso salva a
los condenados a muerte. Y nosotros, pueblo tuyo y ovejas de tu rebaño,
te daremos gracias siempre y de generación en generación te alabaremos.
R/.
ACLAMACIÓN
R/. Aleluya, aleluya.
La semilla es la palabra de Dios y el sembrador es Cristo; todo aquel
que lo encuentra vivirá para siempre. R/.
Lectura (Proclamación) del santo Evangelio según san Mateo: 13, 36-43
En
aquel tiempo, Jesús despidió a la multitud y se fue a su casa.
Entonces se le acercaron sus discípulos y le dijeron: "Explícanos
la parábola de la cizaña sembrada en el campo".
Jesús les contestó: "El sembrador de la buena semilla es
el Hijo del hombre; el campo es el mundo; la buena semilla son los ciudadanos
del Reino; la cizaña son los partidarios del demonio; el enemigo que
la siembra es el demonio; el tiempo de la cosecha es el fin del mundo, y los
segadores son los ángeles.
Y así como recogen la cizaña y la queman en el fuego, así
sucederá al fin del mundo: el Hijo del hombre enviará a sus ángeles
para que arranquen de su Reino a todos los que inducen a otros al pecado y a
todos los malvados, y los arrojen en el horno encendido. Allí será
el llanto y la desesperación. Entonces los justos brillarán como
el sol en el Reino de su Padre. El que tenga oídos, que oiga".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
Los corruptores y malvados serán excluidos del Reino. Así sentencia la explicación alegórica de la parábola de la cizaña. Dios y nadie más, es quien da a cada cual su merecido.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Mira, Señor, con bondad, estos dones que te presentamos humildemente, para que sean gratos a tus ojos y nos hagan crecer en tu amor. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (1 Jn 4, 16)
Dios es amor y el que permanece en el amor permanece en Dios y Dios en él.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Que la fuerza redentora de esta Eucaristía nos proteja, Señor, de nuestras malas inclinaciones y nos guíe siempre por el camino de tus mandamientos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Santos: Víctor I, Papa; Catalina Tomás, religiosa y Pedro Poveda fundador. Feria (Verde)
ANTÍFONA DE ENTRADA
Yo soy la salvación de mi pueblo, dice el Señor. Los escucharé en cualquier tribulación en que me llamen, y seré siempre su Dios.
ORACIÓN COLECTA
Dios de clemencia y de reconciliación, que concedes a los hombres días especiales de gracia para que te reconozcan como creador y Padre de todos, mira con bondad a tus hijos y ayúdanos a aceptar de corazón tu mensaje de paz, para que podamos cumplir tu voluntad de hacer reinar en todos a tu Hijo Jesucristo, que vive y reina contigo...
LITURGIA DE LA PALABRA
Lectura del libro del profeta Jeremías: 15, 10. 16-21
¡Ay de mí,
madre mía! ¿Por qué me engendraste para que fuera objeto
de pleitos y discordias en todo el país? A nadie debo dinero, ni me lo
deben a mi, y sin embargo, todos me maldicen.
Siempre que oí tus palabras, Señor, las acepté con gusto;
tus palabras eran mi gozo y la alegría de mi corazón, porque yo
defendía tu causa, Señor, Dios de los ejércitos.
No me senté a reír con los que se divertían; forzado por
tu mano, me sentaba aparte, porque me habías contagiado con tu propia
ira. ¿Por qué mi dolor no acaba nunca y mi herida se ha vuelto
incurable? ¿Acaso te has convertido para mí, Señor, en
espejismo de aguas que no existen?
Entonces el Señor me respondió: "Si te vuelves a mí,
yo haré que cambies de actitud, y seguirás a mi Servicio; si separas
el metal precioso de la escoria, seguirás siendo mi profeta. Ellos cambiarán
de actitud para contigo y no tú para con ellos. Yo te convertiré
frente a este pueblo en una poderosa muralla de bronce: lucharán contra
ti, pero no podrán contigo, porque yo estaré a tu lado para librarte
y defenderte, dice el Señor. Te libraré de las manos de los perversos,
te rescataré de las manos de los poderosos". Palabra de
Dios. Te alabamos, Señor.
El profeta titubea. Al proclamar la palabra de Dios con claridad enfrenta el rechazo popular. Dios lo anima a resistir y a continuar proclamando su palabra profética.
Del salmo 58 R/.
Me alegraré, Señor, por tu bondad.
Dios mío, líbrame de mis enemigos, protégeme de
mis agresores; líbrame de los que hacen injusticias, sálvame de
los hombres sanguinarios. R/.
Mira cómo se conjuran contra mí los poderosos y esperan el momento
de matarme. Sin embargo, Señor, en mi no hay crimen ni pecado; sin culpa
mía, avanzan contra mí para atacarme. R/.
En ti, Señor, tendré fijos los ojos, porque tú eres mi
fuerza y mi refugio. El Dios de mi amor vendrá en mi ayuda y me hará
ver la derrota de mis enemigos. R/.
Yo celebraré tu poder y desde la mañana me alegraré por
tu bondad, porque has sido mi defensa y mi refugio en el día de la tribulación.
R/.
ACLAMACIÓN
(Jn 15, 15) R/. Aleluya, aleluya.
A ustedes los llamo amigos, dice el Señor, porque les he dado
a conocer todo lo que le he oído a mi Padre. R/.
Lectura (Proclamación) del santo Evangelio según san Mateo: 13, 44-46
En
aquel tiempo, Jesús dijo a la multitud: "El Reino de los cielos
se parece a un tesoro escondido en un campo. El que lo encuentra lo vuelve a
esconder, y lleno de alegría, va y vende cuanto tiene y compra aquel
campo.
El Reino de los cielos se parece también a un comerciante en perlas finas
que, al encontrar una perla muy valiosa, va y vende cuanto tiene y la compra".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
Los hallazgos sorprendentes nos deslumbran. El encuentro personal con Jesucristo es una experiencia incomparable. Quien la vive, desestima sus viejos tesoros.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Acepta, Señor, con bondad, los dones que tu Iglesia te presenta y, por este memorial de la muerte de tu Hijo, que con su sangre borró nuestros pecados y nos reconcilió contigo, concédenos que podamos hacer participes a todos de la paz de Cristo, que vive y reina por los siglos de los siglos.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Jn 16, 24)
Pidan y recibirán, para que su alegría sea completa, dice el Señor.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, que el Cuerpo y la Sangre de tu Hijo, que hemos recibido en este sacramento de unidad, nos llene de tu amor, para que podamos ser en todas partes, instrumentos de tu paz. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Santos: Marta de Betania, laica; Olaf u Olavo de Noruega, mártir y Urbano II, Papa. Memoria (Blanco)
ANTÍFONA DE ENTRADA (Lc 10, 38)
Cuando Jesús llegó a Betania una mujer, llamada Marta, lo recibió en su casa.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que concediste a santa Marta el privilegio de hospedar y servir en su casa a tu Hijo, Jesucristo, concédenos, por su intercesión, no cerrar nunca nuestras puertas a los que necesitan, y ser recibidos por ti en tu casa del cielo. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
Lectura del libro del profeta Jeremías: 18, 1-6
Esto es lo que el Señor
me dijo: "Jeremías, ve a la casa del alfarero y ahí te haré
oír mis palabras".
Fui, pues, a la casa del alfarero y lo hallé trabajando en su torno.
Cuando se le estropeaba la vasija que estaba modelando, volvía a hacer
otra con el mismo barro, como mejor le parecía.
Entonces el Señor me dijo: "¿Acaso no puedo hacer yo con
ustedes, casa de Israel, lo mismo que hace este alfarero? Como está el
barro en las manos del alfarero, así ustedes, casa de Israel, están
en mis manos". Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
La comparación de la vasija y el alfarero es elocuente. Estamos en las manos de Dios, para vivir una relación abierta y obediente que preserve nuestra libertad interior.
Del salmo 145 R/.
Dichoso el que espera en el Señor.
Alaba, alma mía, al Señor; alabaré al Señor
toda mi vida; tocaré y cantaré para mi Dios, mientras yo exista.
R/.
No pongas tu confianza en los que mandan ni en el mortal, que no puede salvarte;
pues cuando mueren, se convierten en polvo y ese mismo día se acaban
sus proyectos. R/.
Dichoso aquel que es auxiliado por el Dios de Jacob y pone su esperanza en el
Señor, su Dios, que hizo el cielo y la tierra, el mar y cuanto el mar
encierra. R/.
ACLAMACIÓN
(Jn 8. 12) R/. Aleluya, aleluya.
Yo soy la luz del mundo, dice el Señor; el que me sigue tendrá
la luz de la vida. R/.
Lectura (Proclamación) del santo Evangelio según san Juan: 11, 19-27
Él
En aquel tiempo, muchos judíos habían ido a ver a Marta y a María
para consolarlas por la muerte de su hermano Lázaro. Apenas oyó
Marta que Jesús llegaba, salió a su encuentro; pero María
se quedó en casa. Le dijo Marta a Jesús: "Señor, si
hubieras estado aquí, no habría muerto mi hermano. Pero aún
ahora estoy segura de que Dios te concederá cuanto le pidas".
Jesús le dijo: "Tu hermano resucitará". Marta respondió:
"Ya sé que resucitará en la resurrección del último
día". Jesús le dijo: "Yo soy la resurrección
y la vida. El que cree en mí, aunque haya muerto, vivirá; y todo
aquel que está vivo y cree en mí, no morirá para siempre.
¿Crees tú esto" Ella le contestó: "Sí,
Señor. Creo firmemente que tú eres el Mesías, el Hijo de
Dios vivo, el que tenia que venir al mundo". Palabra del Señor.
Gloria a ti, Señor Jesús.
Jesús es nuestra esperanza. La negatividad nos afecta de manera contundente y nos hace mortales y finitos. En la victoria de Jesús paladeamos nuestra futura resurrección.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Señor, al proclamar las maravillas que realizaste en santa Marta, te pedimos humildemente que, así como te fue grato el homenaje de su amor, también te sean agradables las ofrendas con que te manifestamos nuestra sumisión. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Jn 11, 27)
Marta dijo a Jesús: Sí, Señor, yo creo que tú eres el Mesías, el Hijo de Dios, que ha venido al mundo.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Que la recepción del Cuerpo y de la Sangre de tu Hijo nos ayude, Señor, a comprender, por intercesión de santa Marta, que muchas cosas nos preocupan e inquietan, pero una sola es necesaria: amarte y servirte aquí en la tierra. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE ENTRADA (Ap 5, 9-10)
Sin distinción de raza, lengua, pueblo o nación, nos compraste, Señor, con tu Sangre e hiciste de nosotros un Reino para Dios.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que has redimido a todos los hombres con la preciosa Sangre de tu Hijo, protege en nosotros la obra de tu misericordia, para que, celebrando siempre el misterio de nuestra salvación merezcamos alcanzar sus frutos eternos. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
Lectura del libro del profeta Jeremías: 26, 1-9
Al principio del reinado
de Joaquín, hijo de Josías y rey de Judá, el Señor
le habló a Jeremías y le dijo. "Esto dice el Señor:
'Ve al atrio del templo y diles a todos los habitantes de Judá que entran
en el templo para adorar al Señor, todas las palabras que yo te voy a
ordenar, sin omitir ninguna. A ver si las escuchan y se convierten de su mala
vida, y me arrepiento del castigo que he pensado imponerles a causa de sus malas
acciones'.
Diles, pues: 'Esto dice el Señor: Si no me obedecen, ni cumplen la ley
que he dado, ni escuchan las palabras de mis siervos, los profetas, que sin
cesar les he enviado y a quienes ustedes no han escuchado, entonces yo trataré
a este templo como al de Siló y haré que esta ciudad sirva de
escarmiento para todos los pueblos de la tierra' ''. Los sacerdotes, los profetas
y el pueblo oyeron a Jeremías pronunciar estas palabras en el templo
del Señor. Y cuando él termino de decir cuanto el Señor
le había mandado, los sacerdotes y los profetas lo apresaron, diciéndole
al pueblo: "Este hombre debe morir, porque ha profetizado en nombre del
Señor que este templo será como el de Siló y que esta ciudad
será destruida y quedará deshabitada". Entonces la gente
se amotinó contra Jeremías en el templo del Señor.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
Jeremías desbarata el mito de la inviolabilidad del templo. Quien practique un culto espiritual podrá acercarse al templo para ofrecer sus ofrendas al Señor.
Del salmo 68 R/.
Escúchanos, Señor, conforme a tu clemencia.
Son más que mis cabellos los que me odian sin tener un motivo y más
fuertes que yo los que pretenden con sus calumnias acabar conmigo. Lo que yo
no robé, ¿acaso tengo yo que restituirlo? R/.
Por ti he sufrido injurias y la vergüenza cubre mi semblante. Extraño
soy y advenedizo, aun para aquellos de mi propia sangre; pues me devora el celo
de tu casa, el odio del que te odia, en mí recae. R/.
A ti, Señor, elevo mi plegaria, ven en mi ayuda pronto; escúchame
conforme a tu clemencia, Dios fiel en el socorro. R/.
ACLAMACIÓN
(1 P 1, 25) R/. Aleluya, aleluya.
La palabra de Dios permanece para siempre. Y ésa es la palabra
que se les ha anunciado. R/.
Lectura (Proclamación) del santo Evangelio según san Mateo: 13, 54-58
En
aquel tiempo, Jesús llegó a su tierra y se puso a enseñar
a la gente en la sinagoga, de tal forma, que todos estaban asombrados y se preguntaban:
"¿De dónde ha sacado éste esa sabiduría y esos
poderes milagrosos? ¿Acaso no es éste el hijo del carpintero?
¿No se llama María su madre y no son sus hermanos Santiago, José,
Simón y Judas? ¿Qué no viven entre nosotros todas sus hermanas?
¿De dónde, pues, ha sacado todas estas cosas?". Y se negaban
a creer en Él.
Entonces, Jesús les dijo: "Un profeta no es despreciado más
que en su patria y en su casa". Y no hizo muchos milagros allí por
la incredulidad de ellos. Palabra del Señor, Gloria a ti,
Señor Jesús.
Ni los paisanos de Jesús daban crédito a sus palabras. El predicador nazareno debía autentificarse, realizando señales y viviendo congruentemente su mensaje.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Al presentarte nuestras ofrendas, te suplicamos, Señor, que por medio de estos misterios, nos acerquemos a Jesús, y renovemos la acción salvadora de su Sangre. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (cfr. 1 Co 10, 16)
El cáliz de nuestra acción de gracias, nos une a todos en la Sangre de Cristo; y el pan que partimos, nos une a todos en el Cuerpo del Señor.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dios todopoderoso, habiendo sido confortados con el alimento y bebida celestiales, te pedimos que defiendas del temor del enemigo a quienes has redimido con la preciosa Sangre de tu Hijo, que vive y reina por los siglos de los siglos.
* Santa María de Jesús Sacramentada Venegas, virgen (ml), blanco.
ORACIÓN COLECTA
Dios todopoderoso y eterno, que en la sencilla y humilde santa María de Jesús Sacramentado nos has dado ejemplo admirable de servicio a los enfermos, pobres y ancianos, concédenos por su intercesión, que, practicando el bien en tortas partes, seamos signos de tu amor en el mundo. Por nuestro Señor Jesucristo...
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Mira, Señor, con bondad, los dones que tu pueblo te presenta para celebrar la memoria de santa María de Jesús Sacramentado, y concédenos, que libres de las ambiciones y egoísmos de este mundo, te busquemos a ti, como nuestro único bien verdadero. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, con la luz y la fuerza de este sacramento que hemos recibido, condúcenos siempre por el camino de tu amor, a fin de que la obra de salvación que has iniciado en nosotros, se vea coronada el día de la venida gloriosa de tu Hijo, que vive y reina por los siglos de los siglos.
Santos: Ignacio de Loyola, fundador Justino de Jacobis obispo. Beato Juan Francisco Jarrige, mártir.
Vísperas I del domingo: 2a semana del Salterio Feria (Blanco)
ANTÍFONA DE ENTRADA (Flp 2, 10-11)
Que al nombre de Jesús toda rodilla se doble, en los cielos, en la tierra, en los abismos, y que toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, tú que encendiste en san Ignacio de Loyola un apasionado amor por tu Hijo y por tu Iglesia, concédenos por su intercesión un celo infatigable por la salvación de las almas y una fidelidad inquebrantable al Vicario de Cristo. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
Lectura del libro del profeta Jeremías: 26, 11-16. 24
En aquellos días,
los sacerdotes y los profetas dijeron a los jefes y al pueblo: "Ese hombre,
Jeremías, merece la muerte, porque ha profetizado contra esta ciudad,
como ustedes mismos lo han oído".
Pero Jeremías les dijo a los jefes y al pueblo: "El Señor
me ha enviado a profetizar todo lo que han oído contra este templo y
esta ciudad. Pues bien, corrijan su conducta y sus obras, escuchen la voz del
Señor, su Dios, y el Señor se retractará de la amenaza
que ha pronunciado contra ustedes. Por mi parte, yo estoy en manos de ustedes:
hagan de mí lo que les parezca justo y conveniente. Pero sépanlo
bien: si me matan, ustedes, la ciudad y sus habitantes serán responsables
de la muerte de un inocente, porque es cierto que el Señor me ha enviado
a ustedes para anunciarles todas estas cosas”. Los jefes y todo el pueblo
dijeron a los sacerdotes y a los profetas: "Este hombre no merece sentencia
de muerte, porque nos ha hablado en nombre del Señor, nuestro Dios".
Entonces Ajicam, hijo de Safán, defendió a Jeremías, para
que no fuera entregado en manos del pueblo y lo mataran. Palabra de
Dios. Te alabamos, Señor.
Jeremías se confronta con los dirigentes y el pueblo de Jerusalén. Él ratifica su condición de enviado de Dios y se dispone a seguirle siendo aún a costa de su vida.
Del salmo 68 R/.
Defiéndeme y ayúdame, Dios mío.
Sácame de este cieno, no vaya a ser que me hunda; ponme a salvo,
Señor, de los que me odian y de estas aguas tan profundas. R/.
No dejes que me arrastre la corriente y que me trague el remolino; no dejes
que se cierre sobre mí la boca del abismo. R/.
Mírame enfermo y afligido; defiéndeme y ayúdame, Dios mío.
En mi cantar exaltaré tu nombre, proclamaré tu gloria, agradecido.
R/.
Se alegrarán al verlo los que sufren; quienes buscan a Dios tendrán
más ánimo, porque el Señor jamás desoye al pobre,
ni olvida al que se encuentra encadenado. R/.
ACLAMACIÓN
(Mt 5. 10) R/. Aleluya, aleluya.
Dichosos los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos
es el Reino de los cielos, dice el Señor. R/.
Lectura (Proclamación) del santo Evangelio según san Mateo: 14, 1-12
En aquel tiempo, el rey
Herodes oyó lo que contaban de Jesús y les dijo a sus cortesanos:
"Es Juan el Bautista, que ha resucitado de entre los muertos y por eso
actúan en Él fuerzas milagrosas".
Herodes había apresado a Juan y lo había encadenado en la cárcel
por causa de Herodías, la mujer de su hermano Filipo, pues Juan le decía
a Herodes que no le estaba permitido tenerla por mujer. Y aunque quería
quitarle la vida, le tenía miedo a la gente, porque creían que
Juan era un profeta. Pero llegó el cumpleaños de Herodes, y la
hija de Herodías bailó delante de todos y le gustó tanto
a Herodes, que juró darle lo que le pidiera. Ella, aconsejada por su
madre, le dijo: "Dame, sobre esta bandeja, la cabeza de Juan el Bautista".
El rey se entristeció, pero a causa de su juramento y por no quedar mal
con los invitados, ordenó que se la dieran; y entonces mandó degollar
a Juan en la cárcel. Trajeron, pues, la cabeza en una bandeja, se la
entregaron a la joven y ella se la llevó a su madre.
Después vinieron los discípulos de Juan, recogieron el cuerpo,
lo sepultaron, y luego fueron a avisarle a Jesús Palabra del
Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
El cadáver del profeta del Jordán tiene que desaparecer. Sus verdugos no soportaban su palabra de fuego. Los discípulos habrán de retomar la misión.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Acepta, Señor, los dones que te presentamos y por intercesión de san Ignacio de Loyola, concédenos que este sacrificio, fuente de toda santidad, nos santifique también a nosotros. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Lc 12, 49)
He venido a traer fuego a la tierra, y cuánto desearía que ya estuviese ardiendo, dice el Señor.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Que esta Eucaristía,
que te hemos ofrecido en la festividad de san Ignacio de Loyola, nos dé
tu gracia, Señor, para buscar en todo tu mayor gloria. Por Jesucristo,
nuestro Señor.
www.laverdadcatolica.org |