Dom |
Lun |
Mar |
Mié |
Jue |
Vie |
Sáb |
|
MISAL MAYO DEL 2022 / www.laverdadcatolica.org |
INTENCIONES
DEL SANTO PADRE PARA MAYO 2022 |
|
RED MUNDIAL DE ORACIÓN | |
|
|
Por la fe de los jóvenes | |
Recemos para que los jóvenes, llamados a una vida plena, descubran en María el estilo de la escucha, la profundidad del discernimiento, la valentía de la fe y la dedicación al servicio. |
.. | ||||
El número de página del Misal Romano que aparece en nuestro Misal, Asamblea Eucarística, ha sido actualizado conforme a su última edición. El número entre paréntesis en MR ( ) corresponde al Misal Romano edición para México de Editorial BAC.
San José, obrero
Blanco Domingo III de Pascua MR p. 359 (360) / Lecc. I, p. 332
LA
PESCA MILAGROSA
Hech 5, 27-32. 40-41; Sal 29; Apoc 5. 11-14; Jn 21, 1-19
Juan nos presenta la narración
sobre la aparición de Jesús, la cual, aunque se diferencia de
las anteriores por el lugar donde acontece (en Galilea en vez de Jerusalén),
ostenta los mismos rasgos cristológicos. Encontramos la misma confusión
acerca de la identidad de Cristo, el mismo énfasis en la realidad de
su cuerpo resucitado y la misma reacción de alegría al reconocer
a Cristo. Pero aquí se enlazan dichas características cristológicas
con otras que son eclesiológicas (la eclesiología es la parte
de la teología cristiana que estudia el papel de la Iglesia como una
comunidad). Entre éstas se destaca la pesca milagrosa, pues ésta
claramente simboliza a la Iglesia que, gracias a la predicación pascual
de los apóstoles, crece de manera
milagrosa. El gran intérprete de la Biblia, San Jerónimo (ca.
342-420), llegó a sugerir que el número de pescados simboliza
la universalidad de la Iglesia, ya que para la zoología antigua las especies
de peces sólo sumaban ciento cincuenta y tres.
ANTÍFONA DE ENTRADA Sal 65, 1-2
Aclama a Dios, tierra entera. Canten todos un himno a su nombre, denle gracias y alábenlo. Aleluya.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que tu pueblo se regocije siempre al verse renovado y rejuvenecido, para que, al alegrarse hoy por haber recobrado la dignidad de su adopción filial, aguarde seguro su gozosa esperanza el día de la resurrección. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Nosotros somos testigos de todo esto y también lo es el Espíritu Santo.
Del libro de los Hechos de los apóstoles: 5, 27-32. 40-41
En aquellos días,
el sumo sacerdote reprendió a los apóstoles y les dijo: "Les
hemos prohibido enseñar en nombre de ese Jesús; sin embargo, ustedes
han llenado a Jerusalén con sus enseñanzas y quieren hacernos
responsables de la sangre de ese hombre".
Pedro y los otros apóstoles replicaron: "Primero hay que obedecer
a Dios y luego a los hombres. El Dios de nuestros padres resucitó a Jesús,
a quien ustedes dieron muerte colgándolo de la cruz. La mano de Dios
lo exaltó y lo ha hecho Jefe y Salvador, para dar a Israel la gracia
de la conversión y el perdón de los pecados. Nosotros somos testigos
de todo esto y también lo es el Espíritu Santo, que Dios ha dado
a los que lo obedecen".
Los miembros del sanedrín mandaron azotar a los apóstoles, les
prohibieron hablar en nombre de Jesús y los soltaron. Ellos se retiraron
del sanedrín, felices de haber padecido aquellos ultrajes por el nombre
de Jesús. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 29,2.4.
5-6. 11-12a. 13b.
R/. Te alabaré, Señor, eternamente. Aleluya.
Te alabaré, Señor,
pues no dejaste que se rieran de mí mis enemigos. Tú, Señor,
me salvaste de la muerte y a punto de morir, me reviviste. R/.
Alaben al Señor quienes lo aman, den gracias a su nombre, porque su ira
dura un solo instante y su bondad, toda la vida. El llanto nos visita por la
tarde; por la mañana, el júbilo. R/.
Escúchame, Señor, y compadécete; Señor, ven en mi
ayuda. Convertiste mi duelo en alegría, te alabaré por eso eternamente.
R/.
SEGUNDA LECTURA
Digno es el Cordero, que fue inmolado, de recibir el poder y la riqueza.
Del libro del Apocalipsis del apóstol san Juan: 5, 11-14
Yo, Juan, tuve una visión,
en la cual oí alrededor del trono de los vivientes y los ancianos, la
voz de millones y millones de ángeles, que cantaban con voz potente:
"Digno es el Cordero, que fue inmolado, de recibir el poder y la riqueza,
la sabiduría y la fuerza, el honor, la gloria y la alabanza".
Oí a todas las creaturas que hay en el cielo, en la tierra, debajo de
la tierra y en el mar -todo cuanto existe-, que decían: ''Al que está
sentado en el trono y al Cordero, la alabanza, el honor, la gloria y el poder,
por los siglos de los siglos".
Y los cuatro vivientes respondían: ''Amén''. Los veinticuatro
ancianos se postraron en tierra y adoraron al que vive por los siglos de los
siglos. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO
R/. Aleluya, aleluya.
Resucitó Cristo, que creó todas las cosas y se compadeció de todos los hombres. R/.
EVANGELIO
Jesús tomó el pan y el pescado y se los dio a los discípulos.
Del santo Evangelio según san Juan: 21, 1-19
En aquel tiempo, Jesús
se les apareció otra vez a los discípulos junto al lago de Tiberíades.
Se les apareció de esta manera: Estaban juntos Simón Pedro, Tomás
(llamado el Gemelo), Natanael (el de Caná de Galilea), los hijos de Zebedeo
y otros dos discípulos. Simón Pedro les dijo: "Voy a pescar".
Ellos le respondieron: 'También nosotros vamos contigo". Salieron
y se embarcaron, pero aquella noche no pescaron nada.
Estaba amaneciendo, cuando Jesús se apareció en la orilla, pero
los discípulos no lo reconocieron. Jesús les dijo: "Muchachos,
¿han pescado algo?". Ellos contestaron: "No". Entonces
él les dijo: "Echen la red a la derecha de la barca y encontrarán
peces". Así lo hicieron, y luego ya no podían jalar la red
por tantos pescados.
Entonces el discípulo a quien amaba Jesús le dijo a Pedro: "Es
el Señor". Tan pronto como Simón Pedro oyó decir que
era el Señor, se anudó a la cintura la túnica, pues se
la había quitado, y se tiró al agua. Los otros discípulos
llegaron en la barca, arrastrando la red con los pescados, pues no distaban
de tierra más de cien metros.
Tan pronto como saltaron a tierra vieron unas brasas y sobre ellas un pescado
y pan. Jesús les dijo: "Traigan algunos pescados de los que acaban
de pescar".
Entonces Simón Pedro subió a la barca y arrastró hasta
la orilla la red, repleta de pescados grandes. Eran ciento cincuenta y tres
y a pesar de que eran tantos, no se rompió la red. Luego les dijo Jesús:
"Vengan a almorzar". y ninguno de los discípulos se atrevía
a preguntarle: ¿Quién eres?, porque ya sabían que era el
Señor.
Jesús se acercó, tomó el pan y se lo dio y también
el pescado. Ésta fue la tercera vez que Jesús se apareció
a sus discípulos después de resucitar de entre los muertos.
Después de almorzar le preguntó Jesús a Simón Pedro:
"Simón, hijo de Juan, ¿me amas más que éstos?".
Él le contestó: "Sí, Señor, tú sabes
que te quiero". Jesús le dijo: "Apacienta mis corderos".
Por segunda vez le preguntó: "Simón, hijo de Juan, ¿me
amas?". Él le respondió: "Sí, Señor, tú
sabes que te quiero". Jesús le dijo: "Pastorea mis ovejas".
Por tercera vez le preguntó: "Simón, hijo de Juan, ¿me
quieres?". Pedro se entristeció de que Jesús le hubiera preguntado
por tercera vez si lo quería y le contestó: "Señor,
tú lo sabes todo; tú bien sabes que te quiero". Jesús
le dijo: "Apacienta mis ovejas.
Yo te aseguro: cuando eras joven, tú mismo te ceñías la
ropa e ibas a donde querías; pero cuando seas viejo, extenderás
los brazos y otro te ceñirá y te llevará a donde no quieras".
Esto se lo dijo para indicarle con qué género de muerte habría
de glorificar a Dios. Después le dijo: "Sígueme". Palabra
del Señor. Gloria a ti Señor Jesús.
Se dice Credo.
PLEGARIA UNIVERSAL
Invoquemos, amados hermanos,
a Cristo, triunfador del pecado y de la muerte, que siempre intercede por nosotros
diciendo: Te rogamos, Señor. R/. Te rogamos, Señor. O bien: Rey
de la gloria, resucítanos contigo.
Para que Cristo, el Señor, atraiga hacia sí el corazón
de los fieles y fortalezca sus voluntades, de manera que busquen los bienes
de allá arriba, donde él está sentado a la derecha de Dios,
roguemos al Señor.
Para que Cristo, amo supremo de la creación, haga que todos los pueblos
gocen abundantemente de la paz que en sus apariciones otorgó a los discípulos,
roguemos al Señor.
Para que Cristo, el destructor de la muerte y el médico de toda enfermedad,
se compadezca de los débiles y desdichados y aleje del mundo el hambre,
las guerras y todos los males, roguemos al Señor.
Para que Cristo, el Señor, salve y bendiga nuestra parroquia (comunidad),
y conceda la paz, la alegría y el descanso de las fatigas a los que hoy
nos hemos reunido aquí para celebrar su triunfo, roguemos al Señor.
Acrecienta, en nosotros, Padre misericordioso, la luz de la fe, para que
en los signos sacramentales, sepamos reconocer siempre a tu Hijo, que se manifiesta
constantemente a nosotros, sus discípulos, y haz que, llenos del Espíritu
Santo, proclamemos con valentía ante los hombres que Cristo es el Señor.
Él, que vive y reina, inmortal y glorioso, por los siglos de los siglos.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Recibe, Señor, los
dones que, jubilosa, tu Iglesia te presenta, y puesto que es a ti a quien debe
su alegría, concédele también disfrutar de la felicidad
eterna.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio IV de Pascua, MR, p. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Lc 24, 35
Los discípulos reconocieron al Señor Jesús, al partir el pan. Aleluya.
O bien: (opcional) Cfr. Jn 21, 12-13
Dijo Jesús a sus discípulos: Vengan a comer. Y tomó un pan y lo repartió entre ellos. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dirige, Señor, tu
mirada compasiva sobre tu pueblo, al que te has dignado renovar con estos misterios
de vida eterna, y concédele llegar un día a la gloria incorruptible
de la resurrección. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Puede utilizarse la fórmula de bendición solemne, p. 608 (602).
UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO.- La Pascua no es una temporada focalizada únicamente en Cristo. También tiene que ver con el misterio de la iglesia que, en cierto sentido, es una prolongación del cuerpo de Cristo y su misión. Por tanto, esta temporada nos ofrece una oportunidad para meditar sobre dicho misterio. La Iglesia en la actualidad, ¿sigue siendo una pesca milagrosa, una captura siempre creciente de nuevos cristianos? Es difícil contestar con una afirmación contundente, pues sabemos que en ciertas partes del mundo el número de cristianos está disminuyendo de manera preocupante. ¿Es la Iglesia de hoy universal en el sentido que abraza a todas las culturas? De nuevo, una afirmación sencilla no es realista ni tampoco cierta. Si la Iglesia está fallando en su misión pascual, si huele a muerte en vez de emanar la vida resucitada, no tiene alternativa: tiene que reformarse.
Blanco Memoria de san Atanasio, obispo y doctor de la Iglesia MR, p. 739 (726) / Lecc. I, p. 886
Otros Santos: Beatas: Sandra Sabattini Giovane, laica de la Asociación Comunidad Papa Juan XXIII; Mafalda de Portugal, abadesa cisterciense.
Fue obispo de Alejandría (328-373) Y su objetivo único fue defender la fe en la divinidad de Cristo, que había definido el Concilio de Nicea, pero que por dondequiera se controvertía. Ni el poco valor de los obispos, ni las trampas de la policía, ni sus cincos destierros, pudieron acabar con su valor, ni mucho menos con su amor al Señor Jesús, Dios hecho hombre.
EL MAESTRO Y SUS
DISCIPULOS
Hech 6,8-15; Sal 118; Jn 6, 22-29
Antes de san Esteban, los apóstoles en Jerusalén sufrieron persecución por su fe en Jesús resucitado. Pero en nuestra primera lectura vemos que la persecución empieza a crecer: mientras los apóstoles padecían a manos de sólo algunas autoridades judías, Esteban sufrió a manos de varios miembros del pueblo común. No debemos sorprendernos de que la persecución surge inmediatamente después de la resurrección. Ésta es una promesa no de una vida sin problemas, sino de la participación en Jesús, quien no dejó de sufrir injusticias. De hecho, la presencia de Esteban ante el sanedrín es narrada por el evangelista Lucas, autor también del libro de Hechos, de manera paralela al proceso contra Jesús. Lucas quiere hacer hincapié en el hecho de que el destino de los cristianos es paralelo al de Cristo. Como escribió en su Evangelio: "el discípulo no es más que su maestro" (6,40).
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Sir 15, 5
En medio de la Iglesia abrió su boca, y el Señor lo llenó del espíritu de sabiduría e inteligencia, y lo revistió de gloria. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Dios todopoderoso y eterno que suscitaste al obispo san Atanasio como insigne defensor de la divinidad de tu Hijo, concédenos bondadoso que, alegres por su protección y por sus enseñanzas, crezcamos continuamente en tu conocimiento y tu amor. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
No podían refutar la sabiduría inspirada con que hablaba Esteban.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 6, 8-15
En aquellos días,
Esteban, lleno de gracia y de poder, realizaba grandes prodigios y señales
entre la gente.
Algunos judíos de la sinagoga llamada "de los Libertos", procedentes
de Cirene, Alejandría, Cilicia y Asia, se pusieron a discutir con Esteban;
pero no podían refutar la sabiduría inspirada con que hablaba.
Entonces sobornaron a algunos hombres para que dijeran: "Nosotros hemos
oído a este hombre blasfemar contra Moisés y contra Dios".
Alborotaron al pueblo, a los ancianos y a los escribas; cayeron sobre Esteban,
se apoderaron de él por sorpresa y lo llevaron ante el sanedrín.
Allí presentaron testigos falsos, que dijeron: "Este hombre no deja
de hablar contra el lugar santo del templo y contra la ley. Lo hemos oído
decir que ese Jesús de Nazaret va a destruir el lugar santo y a cambiar
las tradiciones que recibimos de Moisés".
Los miembros del sanedrín miraron a Esteban y su rostro les pareció
tan imponente como el de un ángel.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 118,
23-24. 26-27. 29-30.
R/. Dichoso el que cumple la voluntad del Señor. Aleluya.
Aunque los poderosos se
burlen de mí, yo seguiré observando fielmente tu ley. Tus mandamientos,
Señor, son mi alegría; ellos son también mis consejeros.
R/.
Te conté mis necesidades y me escuchaste; enséñame, Señor,
tu voluntad. Dame nueva luz para conocer tu ley y para meditar las maravillas
de tu amor. R/.
Apártame de los caminos falsos y dame la gracia de cumplir tu voluntad.
He escogido el camino de la lealtad a tu voluntad y a tus mandamientos. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Mt 4, 4
R/. Aleluya, aleluya.
No sólo de pan vive el hombre, sino también de toda palabra que sale de la boca de Dios. R/.
EVANGELIO
No trabajen por el alimento que se acaba, sino por el que dura para la vida eterna.
Del santo Evangelio según san Juan: 6, 22-29
Después de la multiplicación
de los panes, cuando Jesús dio de comer a cinco mil hombres, sus discípulos
lo vieron caminando sobre el lago. Al día siguiente, la multitud, que
estaba en la otra orilla del lago, se dio cuenta de que allí no había
más que una sola barca y de que Jesús no se había embarcado
con sus discípulos, sino que éstos habían partido solos.
En eso llegaron otras barcas desde Tiberíades al lugar donde la multitud
había comido el pan. Cuando la gente vio que ni Jesús ni sus discípulos
estaban allí, se embarcaron y fueron a Cafarnaúm para buscar a
Jesús.
Al encontrarlo en la otra orilla del lago, le preguntaron: "Maestro, ¿cuándo
llegaste acá?". Jesús les contestó: "Yo les aseguro
que ustedes no me andan buscando por haber visto señales milagrosas,
sino por haber comido de aquellos panes hasta saciarse. No trabajen por ese
alimento que se acaba, sino por el alimento que dura para la vida eterna y que
les dará el Hijo del hombre; porque a éste, el Padre Dios lo ha
marcado con su sello".
Ellos le dijeron: "¿Qué necesitamos para llevar a cabo las
obras de Dios?". Respondió Jesús: "La obra de Dios consiste
en que crean en aquel a quien él ha enviado". Palabra del
Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Mira, Señor las ofrendas
que te presentamos en la conmemoración de san Atanasio, y ya que profesamos
su misma fe incontaminada, haz que el testimonio que damos de tu verdad nos
sirva para la salvación.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I-V de Pascua, MR, pp. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN 1 Cor 3,11
El único cimiento válido es Jesucristo y nadie puede poner otro distinto. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dios todopoderoso, a quienes confesamos firmemente, junto con san Atanasio, que tu Hijo es verdadero Dios, concédenos que este verdadero sacramento nos dé vida y nos proteja siempre. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Rojo Fiesta de la Santa Cruz (En la República Mexicana)
MR, p. 740 (727) / Lecc. I, p. 1014
En la Iglesia universal
la fiesta de la Santa Cruz se celebra el 14 de septiembre, al día siguiente
de la dedicación de la "Iglesia de la Resurrección",
levantada en Jerusalén sobre el sepulcro de Jesucristo. Antes de la reforma
litúrgica del Vaticano II esta fiesta se llamaba "La exaltación
de la Santa Cruz". Entonces también se celebraba otra fiesta, la
del "Hallazgo de la Santa Cruz", el día 3 de mayo. Dado que
en México la celebración de la Santa Cruz en este día está
muy arraigada, sobre todo en el sector de la construcción, el Episcopado
Mexicano pidió autorización a la Santa Sede para seguirla celebrando
el 3 de mayo en vez del 14 de septiembre, con lo cual siempre cae dentro del
Tiempo Pascual. Ciertamente la cruz es el trofeo de la victoria pascual de Cristo
sobre la muerte.
En los lugares donde la fiesta se celebra como solemnidad se leen las tres lecturas
aquí indicadas; en los demás se escoge como primera lectura una
de las que preceden al Evangelio.
EL RITMO DE LA
CRUZ
Flp 2,6-11; Sal 77; Jn 3,13-17
Vivimos en una época
histórica, la modernidad, que valora un único ritmo en la vida,
el de un progreso siempre creciente hacia el éxito. En este ritmo no
caben el infortunio, la desgracia, la humildad y el fracaso. En contraste, el
ritmo de la salvación tiene amplio lugar
por estos momentos tan comunes en la vida humana. Sentimos dicho ritmo en la
primera lectura de hoy que narra dos movimientos en la vida de Jesús:
primero su abajamiento (versos 6-8) y luego su glorificación (versos
9-11). Es una lección para todos los cristianos: no debemos huir de los
inevitables momentos oscuros de la existencia, sino que debemos abrazarlos para
pasar por medio de ellos a la vida verdadera. Este ritmo es simbolizado por
la cruz, una herramienta de una muerte ignominiosa y también el medio
para la vida eterna.
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Gál 6, 14
Que nuestro único orgullo sea la Cruz de nuestro Señor Jesucristo, porque en él tenemos la salvación, la vida y la resurrección, y por él hemos sido salvados y redimidos. Aleluya.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Señor Dios, que quisiste que tu Unigénito sufriera la cruz para salvar al género humano, concédenos que quienes conocimos su misterio en la tierra, merezcamos alcanzar en el cielo el premio de su redención. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA** En el Tiempo pascual
Dios ha constituido a Jesús, Señor y Mesías.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 2, 14. 22-24. 32-36
El día de Pentecostés,
se presentó Pedro, junto con los Once, ante la multitud, y levantando
la voz, dijo: "Israelitas, escúchenme. Jesús de Nazaret fue
un hombre acreditado por Dios ante ustedes, mediante los milagros, prodigios
y señales que Dios realizó por medio de él y que ustedes
bien conocen. Conforme al plan previsto y sancionado por Dios, Jesús
fue entregado, y ustedes utilizaron a los paganos para clavarlo en la cruz.
Pero Dios lo resucitó, rompiendo las ataduras de la muerte, ya que no
era posible que la muerte lo retuviera bajo su dominio.
Pues bien, a este Jesús, Dios lo resucitó, y de ello todos nosotros
somos testigos. Llevado a los cielos por el poder de Dios, recibió del
Padre el Espíritu Santo prometido a él y lo ha comunicado, como
ustedes lo están viendo y oyendo". Porque no fue David el que subió
a los cielos, pues él mismo afirma: Dijo el Señor a mi Señor:
Siéntate a mi derecha y yo pondré a todos tus enemigos debajo
de tus pies.
Sepa todo Israel, con absoluta certeza, que Dios ha constituido Señor
y Mesías al mismo Jesús, a quien ustedes han crucificado".
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
77, 1-2. 34-35. 36-37. 38.
R/. No olvidemos las hazañas del Señor. Aleluya.
Escucha, pueblo mío,
mi enseñanza; presten oído a las palabras de mi boca. Abriré
mi boca y les hablaré en parábolas; anunciaré lo que estaba
oculto desde la creación del mundo. R/.
Cuando Dios los hacía morir, lo buscaban y madrugaban para volverse hacia
él. Se acordaban de que Dios era su auxilio; el Dios altísimo,
su redentor. R/.
Lo adulaban con su boca, le mentían con su lengua; su corazón
no era sincero con él ni eran fieles a su alianza. R/.
Pero él sentía lástima de ellos, les perdonaba su culpa
y no los destruía. Muchas veces dominó su ira y apagó el
furor de su cólera. R/.
SEGUNDA LECTURA
Cristo se humilló a sí mismo, por eso Dios lo exaltó.
De la carta del apóstol san Pablo a los filipenses: 2, 6-11
Cristo, siendo Dios, no
consideró que debía aferrarse a las prerrogativas de su condición
divina, sino que, por el contrario, se anonadó a sí mismo, tomando
la condición de siervo, y se hizo semejante a los hombres. Así,
hecho uno de ellos, se humilló a sí mismo y por obediencia aceptó
incluso la muerte, y una muerte de cruz.
Por eso Dios lo exaltó sobre todas las cosas y le otorgó el nombre
que está sobre todo nombre, para que, al nombre de Jesús, todos
doblen la rodilla en el cielo, en la tierra y en los abismos, y todos reconozcan
públicamente que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO
R/. Aleluya, aleluya.
Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos, porque con tu santa cruz redimiste al mundo. R/.
EVANGELIO
El Hijo del hombre tiene que ser levantado.
Del santo Evangelio según san Juan: 3, 13-17
En aquel tiempo, Jesús
dijo a Nicodemo: "Nadie ha subido al cielo sino el Hijo del hombre, que
bajó del cielo y está en el cielo. Así como Moisés
levantó la serpiente en el desierto, así tiene que ser levantado
el Hijo del hombre, para que todo el que crea en él tenga vida eterna.
Porque tanto amó Dios al mundo, que le entregó a su Hijo único,
para que todo el que crea en él no perezca, sino que tenga vida eterna.
Porque Dios no envió a su Hijo para condenar al mundo, sino para que
el mundo se salvara por él".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Te rogamos, Señor, que este sacrificio, que en el altar de la cruz borró el pecado del mundo entero nos purifique de todas nuestras ofensas. Por Jesucristo, nuestro Señor.
PREFACIO: La victoria de la Cruz gloriosa.
En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y salvación darte gracias siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios todopoderoso y eterno. Porque has puesto la salvación del género humano en el árbol de la Cruz, para que, de donde tuvo origen la muerte, de allí surgiera la vida; y el que en un árbol venció, fuera en un árbol vencido, por Cristo, Señor nuestro. Por él, celebran tu majestad los ángeles, te adoran las dominaciones, se estremecen las potestades. Te celebran, unidos en la alegría, los cielos, las virtudes celestiales y los bienaventurados serafines. Permítenos asociarnos a sus voces cantando humildemente tu alabanza: Santo, Santo, Santo ...
Se puede decir también el prefacio I de la Pasión del Señor, MR, p. 502 (498).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 12, 32
Cuando yo sea levantado en la tierra atraeré a todos hacia mí, dice el Señor. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor nuestro, Jesucristo, fortalecidos con este alimento santo, te pedimos que conduzcas a la gloria de tu resurrección a quienes redimiste por el madero vivificante de la cruz. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos.
Fiesta de los Santos Felipe y Santiago, Apóstoles (En la República Mexicana)
Rojo MR, p.742 (729) / Lecc. I, p. 1018
El único dato que se conserva acerca de Santiago es que pertenecía al grupo de los doce apóstoles. Felipe, lo mismo que Pedro y Andrés, era oriundo de Betsaida y había sido discípulo de Juan el Bautista. En la última cena le dijo a Jesús: "Señor. muéstranos al Padre". El Señor le contestó: "Felipe, quien me ve a mí, ve también al Padre".
LES TRANSMITÍ,
ANTE TODO, LO QUE YO MISMO RECIBÍ
1 Cor 15,1-8; Sal 18; Jn 14,6-14
Escribiendo su carta a ciertos cristianos de la ciudad griega de Corinto, quienes presumían de estar ya resucitados en espíritu y de no necesitar la resurrección corporal, Pablo repite la buena nueva que les predicó en los primeros días de su ministerio entre ellos. El mero acto de repetir este meollo de su predicación es significativo. Nos recuerda una verdad muy sencilla, pero sumamente importante: tenemos la fe cristiana por medio de los apóstoles. Son ellos quienes por primera vez transmitieron con sus palabras y acciones todo lo que vivieron con Jesucristo. Sin ellos, tal vez el Evangelio habría quedado como un secreto compartido sólo por unos testigos oculares. Pero, aunque para Jesús todo es posible y no necesita de nadie para extender su palabra, hoy es una oportunidad para meditar sobre todo lo que debemos a la obediencia de los apóstoles al mandato del Señor, que dijo: "vayan y prediquen el Evangelio hasta los confines de la tierra".
ANTÍFONA DE ENTRADA
Éstos son los santos varones que Dios eligió con amor verdadero y les dio la gloria eterna. Aleluya.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que cada año nos alegras con la festividad de los santos apóstoles Felipe y Santiago, concédenos, por su intercesión, tener parte en la pasión y resurrección de tu Unigénito, para que merezcamos llegar a contemplarte eternamente. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Después se le apareció a Santiago y luego a todos los apóstoles.
De la primera carta del apóstol san Pablo a los corintios: 15, 1-8
Hermanos: Les recuerdo el
Evangelio que yo les prediqué y que ustedes aceptaron y en el cual están
firmes. Este Evangelio los salvará, si lo cumplen tal y como yo lo prediqué.
De otro modo, habrán creído en vano.
Les transmití, ante todo, lo que yo mismo recibí: Que Cristo murió
por nuestros pecados, como dicen las Escrituras; que fue sepultado y que resucitó
al tercer día, según estaba escrito; que se le apareció
a Pedro y luego a los Doce; después se apareció a más de
quinientos hermanos reunidos, la mayoría de los cuales vive aún
y otros ya murieron. Más tarde se le apareció a Santiago y luego
a todos los apóstoles. Finalmente, se me apareció también
a mí.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
18,2-3.4-5.
R/. El mensaje del Señor llega a toda la tierra. Aleluya.
Los cielos proclaman la
gloria de Dios y el firmamento anuncia la obra de sus manos. Un día comunica
su mensaje al otro día y una noche se lo transmite a la otra noche.
R/.
Sin que pronuncien una palabra, sin que resuene su voz, a toda la tierra llega
su sonido y su mensaje hasta el fin del mundo. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 14, 6. 9
R/. Aleluya, aleluya.
Yo soy el camino, la verdad y la vida, dice el Señor. Felipe, quien me ve a mí, ve al Padre. R/.
EVANGELIO
Tanto tiempo hace que estoy con ustedes, ¿y todavía no me conocen?
Del santo Evangelio según san Juan: 14, 6-14
En aquel tiempo, Jesús
dijo a Tomás: "Yo soy el camino, la verdad y la vida. Nadie va al
Padre si no es por mí. Si ustedes me conocen a mí, conocen también
a mi Padre. Ya desde ahora lo conocen y lo han visto". Le dijo Felipe:
"Señor, muéstranos al Padre y eso nos basta".
Jesús le replicó: "Felipe, tanto tiempo hace que estoy con
ustedes, ¿y todavía no me conoces? Quien me ve a mí, ve
al Padre. ¿Entonces por qué dices: 'Muéstranos al Padre'?
¿O no crees que yo estoy en el Padre y que el Padre está en mí?
Las palabras que yo les digo, no las digo por mi propia cuenta. Es el Padre,
que permanece en mí, quien hace las obras. Créanme: yo estoy en
el Padre y el Padre está en mí. Si no me dan fe a mí, créanlo
por las obras. Yo les aseguro: el que crea en mí, hará las obras
que hago yo y las hará aún mayores, porque yo me voy al Padre;
y cualquier cosa que pidan en mi nombre, yo la haré para que el Padre
sea glorificado en el Hijo. Yo haré cualquier cosa que me pidan en mi
nombre". Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor
Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Acepta, Señor, los dones que te presentamos en esta festividad de tus santos apóstoles Felipe y Santiago, y concédenos vivir nuestra fe con un corazón puro y sincero. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I o II de los Apóstoles, MR, pp. 536-537 (532-533).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Jn 14, 8-9
Señor, muéstranos al Padre y nos basta. Felipe, el que me ha visto a mí, ha visto a mi Padre. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Purifica, Señor,
nuestros corazones por este sacramento que acabamos de recibir, para que, contemplándote
en tu Hijo, con los apóstoles Felipe y Santiago, merezcamos alcanzar
la vida eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Puede utilizarse la fórmula de bendición solemne, p. 616 (610).
Blanco Jueves III de Pascua MR, p. 364 (365) / Lecc. I, p. 892
LEYENDO SE
CREE
Hech 8, 26-40; Sal 65; Jn 6, 44-51
¿Quién se llamaría cristiano si no rezara? ¿Quién ostentaría el nombre de cristiano sin intentar vivir los mandamientos del Señor? Pero, ¿es necesario que los cristianos practiquen la lectura? ¡Claro que sí! La lectura nos ayuda a conversar con Dios y a comer el pan de vida, que no es únicamente la Eucaristía, sino también la Palabra de Dios. Por eso no debemos sorprendernos de que el etíope de la primera lectura descubra el camino hacia la fe cristiana por medio de la lectura. No es suficiente que lea, porque Felipe tiene que explicarle lo que está leyendo, pero sin la lectura este alto funcionario de la reina de Etiopía no hubiera conocido a Dios. Tenemos que refinar nuestra capacidad de leer y asistir a aquellos que, todavía analfabetos, no disfrutan de la alegría de poder leer.
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Éx 15, 1-2
Cantemos al Señor, pues su victoria es grande. Mi fortaleza y mi alabanza es el Señor, él es mi salvación. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Dios todopoderoso y eterno, concédenos aprovechar bien los dones de tu bondad en estos días en que, por gracia tuya, la hemos experimentado más plenamente, para que, libres de las tinieblas del error, nos hagas estar adheridos firmemente a tu verdad. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Aquí hay agua. ¿Hay alguna dificultad para que me bautices?
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 8, 26-40
En aquellos días,
un ángel del Señor le dijo a Felipe: "Levántate y
toma el camino del sur, que va de Jerusalén a Gaza y que es poco transitado".
Felipe se puso en camino. Y sucedió que un etíope, alto funcionario
de Candaces, reina de Etiopía, y administrador de sus tesoros, que había
venido a Jerusalén para adorar a Dios, regresaba en su carro, leyendo
al profeta Isaías.
Entonces el Espíritu le dijo a Felipe: ''Acércate y camina junto
a ese carro". Corrió Felipe, y oyendo que el hombre leía
al profeta Isaías, le preguntó: "¿Entiendes lo que
estás leyendo?". Él le contestó: "¿Cómo
voy a entenderlo, si nadie me lo explica?". Entonces invitó a Felipe
a subir y a sentarse junto a él.
El pasaje de la Escritura que estaba leyendo, era éste: Como oveja fue
llevado a la muerte; como cordero que no se queja frente al que lo trasquila,
así él no abrió la boca. En su humillación no se
le hizo justicia. ¿Quién podrá hablar de su descendencia,
puesto que su vida ha sido arrancada de la tierra'?
El etíope le preguntó a Felipe: "Dime, por favor: ¿De
quién dice esto el profeta, de sí mismo o de otro?". Felipe
comenzó a hablarle y partiendo de aquel pasaje, le anunció el
Evangelio de Jesús. Siguieron adelante, llegaron a un sitio donde había
agua y dijo el etíope: "Aquí hay agua. ¿Hay alguna
dificultad para que me bautices?". Felipe le contestó: "Ninguna,
si crees de todo corazón". Respondió el etíope: "Creo
que Jesús es el Hijo de Dios". Mandó parar el carro, bajaron
los dos al agua y Felipe lo bautizó.
Cuando salieron del agua, el Espíritu del Señor arrebató
a Felipe. El etíope ya no lo vio más y prosiguió su viaje,
lleno de alegría. En cuanto a Felipe, se encontró en la ciudad
de Azoto y evangelizaba los poblados que encontraba a su paso, hasta que llegó
a Cesarea.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
65,8-9.16-17.20.
R/. Tu salvación, Señor, es para todos. Aleluya.
Naciones, bendigan a nuestro
Dios, hagan resonar sus alabanzas, porque él nos ha devuelto la vida
y no dejó que tropezaran nuestros pies. R/.
Cuantos temen a Dios, vengan y escuchen, y les diré lo que ha hecho por
mí; a él dirigí mis oraciones y mi lengua le cantó
alabanzas. R/.
Bendito sea Dios, que no rechazó mi súplica, ni me retiró
su gracia. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 6, 51
R/. Aleluya, aleluya.
Yo soy el pan vivo que ha bajado del cielo, dice el Señor; el que coma de este pan vivirá para siempre. R/.
EVANGELIO
Yo soy el pan vivo, que ha bajado del cielo.
Del santo Evangelio según san Juan: 6, 44-51
En aquel tiempo, Jesús
dijo a los judíos: "Nadie puede venir a mí, si no lo atrae
el Padre, que me ha enviado; y a ése yo lo resucitaré el último
día. Está escrito en los profetas: Todos serán discípulos
de Dios. Todo aquel que escucha al Padre y aprende de él, se acerca a
mí. No es que alguien haya visto al Padre, fuera de aquel que procede
de Dios. Ese sí ha visto al Padre.
Yo les aseguro: el que cree en mí, tiene vida eterna. Yo soy el pan de
la vida. Sus padres comieron el maná en el desierto y sin embargo, murieron.
Este es el pan que ha bajado del cielo para que, quien lo coma, no muera. Yo
soy el pan vivo que ha bajado del cielo; el que coma de este pan vivirá
para siempre, y el pan que yo les voy a dar es mi carne para que el mundo tenga
vida". Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor
Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Dios nuestro, que por el santo valor de este sacrificio nos hiciste participar de tu misma y gloriosa vida divina, concédenos que, así como hemos conocido tu verdad, de igual manera vivamos de acuerdo con ella. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio IV de Pascua, MR, pp. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN 2 Cor 5, 15
Cristo murió por todos, para que los que viven ya no vivan para sí mismos, sino para él, que murió y resucitó por ellos. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, muéstrate benigno con tu pueblo, y ya que te dignaste alimentarlo con los misterios celestiales, hazlo pasar de su antigua condición de pecado a una vida nueva. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Blanco Viernes III de Pascua MR, p. 365 (366) / Lecc. I, p. 895
¿ES
OPIO O CAFÉ?
Hech 9.1-20; Sal 116; Jn 6. 52-59
Según sus detractores, la religión es el opio del pueblo: la fe hace dormir a la gente para que sirva a los poderosos sin quejarse. Tal vez existen religiones así, pero la fe cristiana, cuando es vivida auténticamente, no es una de ellas. Las pruebas las encontramos en las lecturas de hoy. En el libro de Hechos, Dios decide emplear a Saúl, el perseguidor feroz, para convertir a los gentiles. Esta decisión es tan sorprendente que debió narrarse tres veces (9, 1-20; 22, 3-21; 26, 2-23), como si no se pudieran creer las dos primeras. En Juan, la turba no se duerme sino que se sorprende al oír a Jesús afirmando que hay que comer su carne para tener vida eterna. La fe cristiana no es opio, es más bien como el café que despierta nuestra mente, estimula nuestra acción y nos impulsa hacia adelante.
ANTÍFONA DE ENTRADA Apoc 5, 12
Digno es el Cordero que fue sacrificado, de recibir el poder, la riqueza, la sabiduría, la fuerza y el honor. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Dios todopoderoso, concede a quienes hemos conocido la gracia de la resurrección del Señor, resucitar, por el amor del Espíritu Santo, a una vida nueva. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Es el instrumento escogido por mí. para que me dé a conocer a las naciones.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 9, 1-20
En aquellos días,
Saulo, amenazando todavía de muerte a los discípulos del Señor,
fue a ver al sumo sacerdote y le pidió, para las sinagogas de Damasco,
cartas que lo autorizaran para traer presos a Jerusalén a todos aquellos
hombres y mujeres que seguían la nueva doctrina.
Pero sucedió que, cuando se aproximaba a Damasco, una luz del cielo lo
envolvió de repente con su resplandor. Cayó por tierra y oyó
una voz que le decía: "Saulo, Saulo, ¿Por qué me persigues?".
Preguntó él: "¿Quién eres, Señor?".
La respuesta fue: "Yo soy Jesús, a quien tú persigues. Levántate.
Entra en la ciudad y ahí se te dirá lo que tienes que hacer".
Los hombres que lo acompañaban en el viaje se habían detenido,
mudos de asombro, pues oyeron la voz, pero no vieron a nadie. Saulo se levantó
del suelo, y aunque tenía abiertos los ojos, no podía ver. Lo
llevaron de la mano hasta Damasco y ahí estuvo tres días ciego,
sin comer ni beber.
Había en Damasco un discípulo que se llamaba Ananías, a
quien se le apareció el Señor y le dijo: ''Ananías''. El
respondió: "Aquí estoy, Señor". El Señor
le dijo: "Ve a la calle principal y busca en casa de Judas a un hombre
de Tarso, llamado Saulo, que está orando". Saulo tuvo también
la visión de un hombre llamado Ananías, que entraba y le imponía
las manos para que recobrara la vista.
Ananías contestó: "Señor, he oído a muchos
hablar de ese individuo y del daño que ha hecho a tus fieles en Jerusalén.
Además, trae autorización de los sumos sacerdotes para poner presos
a todos los que invocan tu nombre". Pero el Señor le dijo: "No
importa. Tú ve allá, porque yo lo he escogido como instrumento,
para que me dé a conocer a las naciones, a los reyes y a los hijos de
Israel. Yo le mostraré cuánto tendrá que padecer por mi
causa".
Ananías fue allá, entró en la casa, le impuso las manos
a Saulo y le dijo: "Saulo, hermano, el Señor Jesús, que se
te apareció en el camino, me envía para que recobres la vista
y quedes lleno del Espíritu Santo". Al instante, algo como escamas
se le desprendió de los ojos y recobró la vista. Se levantó
y lo bautizaron. Luego comió y recuperó las fuerzas. Se quedó
unos días con los discípulos en Damasco y se puso a predicar en
las sinagogas, afirmando que Jesús era el Hijo de Dios. Palabra
de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
116, 1. 2.
R/. Que aclamen al Señor todos los pueblos. Aleluya.
Que alaben al Señor,
todas las naciones, que lo aclamen todos los pueblos. R/.
Porque grande es su amor hacia nosotros y su fidelidad dura por siempre. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 6, 56
R/. Aleluya, aleluya.
El que come mi carne y bebe mi sangre permanece en mí y yo en él, dice el Señor. R/.
EVANGELIO
Mi carne es verdadera comida y mi sangre es verdadera bebida.
Del santo Evangelio según san Juan: 6, 52-59
En aquel tiempo, los judíos
se pusieron a discutir entre sí: "¿Cómo puede éste
darnos a comer su carne?".
Jesús les dijo: "Yo les aseguro: Si no comen la carne del Hijo del
hombre y no beben su sangre, no podrán tener vida en ustedes. El que
come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna y yo lo resucitaré
el último día.
Mi carne es verdadera comida y mi sangre es verdadera bebida. El que come mi
carne y bebe mi sangre, permanece en mí y yo en él. Como el Padre,
que me ha enviado, posee la vida y yo vivo por él, así también
el que me come vivirá por mí.
Este es el pan que ha bajado del cielo; no es como el maná que comieron
sus padres, pues murieron. El que come de este pan vivirá para siempre".
Esto lo dijo Jesús enseñando en la sinagoga de Cafarnaúm.
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Santifica, Señor, por tu piedad, estos dones y al recibir en oblación este sacrificio espiritual, conviértenos para ti en una perenne ofrenda. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio IV de Pascua, MR, pp. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN
El Crucificado resucitó de entre los muertos y nos ha redimido. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Al recibir, Señor, el don de estos sagrados misterios, te suplicamos humildemente que lo que tu Hijo nos mandó celebrar en memoria suya, nos aproveche para crecer en nuestra caridad fraterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Blanco Sábado III de Pascua MR, p. 366 (367) / Lecc. I, p. 897 LH, Vísperas I del domingo: Semana IV del Salterio Tomo II: pp. 1412, 516 y 747; Para los fieles: pp. 722 y 274; Edición popular: pp. 289 y 447
Otros santos: Rosa Venerini, fundadora; Flavia Domitila de Roma, mártir. Beato Francisco Paleari, presbítero cottolenguino.
LAS VIUDAS
RODEARON A PEDRO
Hech 9,31-42; Sal 115; Jn 6, 60-69
La Iglesia debe tener cabida para todos, como los ancianos, que tenía un lugar muy importante en la antigüedad. La resurrección de Tabitá, narrada en Hechos es, respecto a su forma literaria, un ejemplo de los relatos taumatúrgicos (en los que se narran milagros) que se encuentran en la Biblia, desde los profetas Elías y Eliseo (1 Re 17, 17-19; 2 Re 4, 32-37), pasando por los Evangelios (Mc 5,22-24,35-43) y que se extienden hasta el tiempo de San Pablo (Hechos 20, 9-12). Respecto a lo que se nos muestra desde la iglesia primitiva, sugiere de manera indirecta que en la Iglesia se reconocía que las viudas tenían un ministerio especial. El autor de la Carta a Tito habla más directamente sobre este ministerio en 5, 3-16. Hoy, sin duda, los ancianos tienen un papel fundamental en nuestras comunidades, aunque lamentablemente en ocasiones este papel pase desapercibido.
ANTÍFONA DE ENTRADA Col 2, 12
Ustedes, por el bautismo, han sido sepultados con Cristo, y con él han sido resucitados, porque han creído en el poder de Dios, que lo resucitó de entre los muertos. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que renovaste en la fuente bautismal a los que creen en ti, protege a quienes renacieron en Cristo, para que, evitando todas las asechanzas del error, conserven fielmente la gracia de tu bendición. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
La comunidad cristiana crecía, animada por el Espíritu Santo.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 9, 31-42
En aquellos días,
las comunidades cristianas gozaban de paz en toda Judea, Galilea y Samaria,
con lo cual se iban consolidando, progresaban en la fidelidad a Dios y se multiplicaban,
animadas por el Espíritu Santo.
Pedro recorría toda la región y una vez fue a visitar a los fieles
que vivían en Lida. Ahí encontró a un hombre, llamado Eneas,
que tenía ya ocho años de estar en cama, paralítico. Pedro
le dijo: "Eneas, Jesucristo te da la salud. Levántate y tiende tu
cama". Eneas se levantó
inmediatamente; y todos los habitantes de Lida y de la llanura de Sarón
que lo vieron, se convirtieron al Señor.
Había en Jafa, entre los discípulos, una mujer llamada Tabitá
(que significa "gacela"), la cual hacía infinidad de obras
buenas y repartía limosnas. En aquellos días cayó enferma
y murió. Lavaron su cadáver y lo tendieron en una habitación
del segundo piso. Como Lida está cerca de Jafa, los discípulos,
sabiendo que Pedro estaba allá, enviaron dos hombres para suplicarle
que fuera a Jafa sin tardar.
Pedro fue con ellos. Tan pronto como llegó, lo condujeron a la habitación
del segundo piso. Allí lo rodearon todas las viudas, llorando y mostrándole
las túnicas y los vestidos que Tabitá les había hecho,
cuando aún vivía.
Pedro mandó salir a todos, se postró de rodillas y se puso a orar;
luego, dirigiéndose a la muerta, dijo: "Tabitá, levántate".
Ella abrió los ojos y al ver a Pedro, se incorporó. Él
la tomó de la mano y la levantó; llamó a los fieles y a
las viudas y se la entregó viva. Esto se supo por toda Jafa y muchos
creyeron en el Señor. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
115, 12-3. 14-15. 16-17.
R/. ¿Cómo le pagaré al Señor todo el bien que
me ha hecho? Aleluya.
¿Cómo le pagaré
al Señor todo el bien que me ha hecho? Levantaré el cáliz
de salvación e invocaré el nombre del Señor. R/.
Cumpliré mis promesas al Señor ante todo su pueblo. A los ojos
de Dios es muy penoso que mueran sus amigos. R/.
De la muerte, Señor, me has librado, a mí, tu esclavo e hijo de
tu esclava. Te ofreceré con gratitud un sacrificio e invocaré
tu nombre. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Jn 6, 63.68
R/. Aleluya, aleluya.
Tus palabras, Señor, son espíritu y vida. Tú tienes palabras de vida eterna. R/.
EVANGELIO
Señor, ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de vida eterna.
Del santo Evangelio según san Juan: 6, 60-69
En aquel tiempo, muchos
discípulos de Jesús dijeron al oír sus palabras: "Este
modo de hablar es intolerable, ¿quién puede admitir eso?".
Dándose cuenta Jesús de que sus discípulos murmuraban,
les dijo: "¿Esto los escandaliza? ¿Qué sería
si vieran al Hijo del hombre subir a donde estaba antes? El Espíritu
es quien da la vida; la carne para nada aprovecha. Las palabras que les he dicho
son espíritu y vida, y a pesar de esto, algunos de ustedes no creen".
(En efecto, Jesús sabía desde el principio quienes no creían
y quién lo habría de traicionar). Después añadió:
"Por eso les he dicho que nadie puede venir a mí, si el Padre no
se lo concede".
Desde entonces, muchos de sus discípulos se echaron para atrás
y ya no querían andar con él. Entonces Jesús les dijo a
los Doce: "¿También ustedes quieren dejarme?". Simón
Pedro le respondió: "Señor, ¿a quién iremos?
Tú tienes palabras de vida eterna; y nosotros creemos y sabemos que tú
eres el Santo de Dios". Palabra del Señor. Gloria a
ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Recibe, Señor, con bondad, estas ofrendas de tu familia santa, para que, con la ayuda de tu protección, conserve los dones recibidos y llegue a poseer los eternos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio IV de Pascua, MR, pp. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 17, 20-21
Padre, te ruego por ellos, para que sean uno en nosotros y el mundo pueda creer que tú me has enviado, dice el Señor. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Protege, Señor, con amor constante a quienes has salvado, para que, una vez redimidos por la pasión de tu Hijo, se llenen ahora de alegría por su resurrección. El que vive y reina por los siglos de los siglos.
Nuestra Señora de Luján, Patrona de las Repúblicas de Argentina, Paraguay y Uruguay
Blanco Domingo IV de Pascua Domingo de El Buen Pastor, Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones MR, p. 367 (368) / Lecc. I, p. 337 LH, semana IV
Otros Santos: Benedicto II, LXXXI Papa. Beata María Teresa Demjanovich, religiosa de las Hermanas de la Caridad de Santa Isabel.
"VI
UN GENTÍO INMENSO Y CANTABAN CON VOZ PODEROSA"
Hech 13, 14. 43-52; Sal 99; Apoc 7, 9. 14-17: Jn 10, 27-30
En medio de los espantos y turbaciones sobre el fin del mundo que narra el autor del libro de Apocalipsis, en la segunda lectura de hoy se relata una imagen esperanzadora de la vida en el cielo. Una existencia celestial de alegría, de convivencia con Dios y de la absoluta plenitud de la vida, de gran fiesta con música resonando por todas partes. De hecho, el anciano que discute esta fiesta con el autor canta una parte de su conversación, ya que el hablar no es lo suficientemente alegre para el estado de regocijo que es el cielo. En cierto sentido, la vida resucitada llega a su culmen sólo en esa actividad que reúne todas las fuerzas, toda la creatividad y toda la belleza del universo que se llama la música.
ANTÍFONA ENTRADA Cfr. Sal 32, 5-6
La tierra está llena del amor del Señor y su palabra hizo los cielos. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Dios todopoderoso y eterno, te pedimos que nos lleves a gozar de las alegrías celestiales, para que tu rebaño, a pesar de su fragilidad, llegue también a donde lo precedió su glorioso Pastor. Él, que vive y reina contigo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Ahora nos dirigiremos a los paganos.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 13, 14. 43-52
En aquellos días,
Pablo y Bernabé prosiguieron su camino desde Perge hasta Antioquía
de Pisidia, y el sábado entraron en la sinagoga y tomaron asiento. Cuando
se disolvió la asamblea, muchos judíos y prosélitos piadosos
acompañaron a Pablo y a Bernabé, quienes siguieron exhortándolos
a permanecer fieles a la gracia de Dios.
El sábado siguiente casi toda la ciudad de Antioquía acudió
a oír la palabra de Dios. Cuando los judíos vieron una concurrencia
tan grande, se llenaron de envidia y comenzaron a contradecir a Pablo con palabras
injuriosas. Entonces Pablo y Bernabé dijeron con valentía:
"La palabra de Dios debía ser predicada primero a ustedes; pero
como la rechazan y no se juzgan dignos de la vida eterna, nos dirigiremos a
los paganos. Así nos lo ha ordenado el Señor, cuando dijo: Yo
te he puesto como luz de los paganos, para que lleves la salvación hasta
los últimos rincones de la tierra".
Al enterarse de esto, los paganos se regocijaban y glorificaban la palabra de
Dios, y abrazaron la fe todos aquellos que estaban destinados a la vida eterna.
La palabra de Dios se iba propagando por toda la región. Pero los judíos
azuzaron a las mujeres devotas de la alta sociedad y a los ciudadanos principales,
y provocaron una persecución contra Pablo y Bernabé, hasta expulsarlos
de su territorio.
Pablo y Bernabé se sacudieron el polvo de los pies, como señal
de protesta, y se marcharon a Iconio, mientras los discípulos se quedaron
llenos de alegría y del Espíritu Santo. Palabra de Dios.
Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
99, 2. 3. 5.
R/. El Señor es nuestro Dios y nosotros su pueblo. Aleluya.
Alabemos a Dios todos los
hombres, sirvamos al Señor con alegría y con júbilo entremos
en su templo. R/.
Reconozcamos que el Señor es Dios, que él fue quien nos hizo y
somos suyos, que somos su pueblo y su rebaño. R/.
Porque el Señor es bueno, bendigámoslo, porque es eterna su misericordia
y su fidelidad nunca se acaba. R/.
SEGUNDA LECTURA
El Cordero será su pastor y los conducirá a las fuentes del agua de la vida.
Del libro del Apocalipsis del apóstol san Juan: 7, 9. 14-17
Yo, Juan, vi una muchedumbre
tan grande, que nadie podía contarla. Eran individuos de todas las naciones
y razas, de todos los pueblos y lenguas. Todos estaban de pie, delante del trono
y del Cordero; iban vestidos con una túnica blanca y llevaban palmas
en las manos.
Uno de los ancianos que estaban junto al trono, me dijo: "Estos son los
que han pasado por la gran tribulación y han lavado y blanqueado su túnica
con la sangre del Cordero. Por eso están ante el trono de Dios y le sirven
día y noche en su templo, y el que está sentado en el trono los
protegerá continuamente.
Ya no sufrirán hambre ni sed, no los quemará el sol ni los agobiará
el calor. Porque el Cordero, que está en medio del trono, será
su pastor y los conducirá a las fuentes del agua de la vida, y Dios enjugará
de sus ojos toda lágrima".
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 10, 14
R/. Aleluya, aleluya.
Yo soy el buen pastor, dice el Señor; yo conozco a mis ovejas, y ellas me conocen a mí. R/.
EVANGELIO
Yo les doy la vida eterna a mis ovejas.
Del santo Evangelio según san Juan: 10, 27-30
En aquel tiempo, Jesús dijo a los judíos: "Mis ovejas escuchan mi voz; yo las conozco y ellas me siguen. Yo les doy la vida eterna y no perecerán jamás; nadie las arrebatará de mi mano. Me las ha dado mi Padre, y él es superior a todos, y nadie puede arrebatarlas de la mano del Padre. El Padre y yo somos uno". Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
Se dice Credo.
PLEGARIA UNIVERSAL
Levantemos, hermanos,
nuestros ojos a Cristo, obispo y pastor de nuestras almas, y pongamos en sus
manos, con toda confianza, las necesidades de los hombres diciendo: Jesús,
Buen Pastor, sálvanos. (R/. Jesús, Buen Pastor, sálvanos).
Para que los obispos, los presbíteros y diáconos apacienten
santamente a los pueblos que tienen encomendados, roguemos al Señor.
Para que la paz que Jesucristo concedió a los discípulos arraigue
con fuerza en nuestro mundo, y se alejen de las naciones el odio y las guerras,
roguemos al Señor.
Para que los enfermos, los pobres y todos los que sufren encuentren en Cristo
resucitado luz y esperanza, roguemos al Señor.
Para que Dios derrame en las familias cristianas el espíritu de piedad
y de renuncia a lo mundano, de manera que germinen abundantes vocaciones al
ministerio eclesial, roguemos al Señor.
Dios nuestro, fuente de gozo y paz, que has concedido a tu Hijo el poder
y la realeza sobre los hombres y los pueblos, escucha nuestra oración
y sostennos con la fuerza de tu Espíritu, para que nunca nos separemos
de nuestro pastor, que nos conducirá hacia fuente de aguas vivas, y que
vive y reina, inmortal y glorioso, por los siglos de los siglos.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Concédenos, Señor,
vivir siempre llenos de gratitud por estos misterios pascuales que celebramos,
para que, continuamente renovados por su acción se conviertan para nosotros
en causa de eterna felicidad.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio IV de Pascua, MR, pp. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN
Ha resucitado el Buen Pastor, que dio la vida por sus ovejas y se entregó a la muerte por su rebaño. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Buen Pastor, vela con solicitud por tu rebaño y dígnate conducir a las ovejas que redimiste con la preciosa sangre de tu Hijo, a las praderas eternas. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Puede utilizarse la fórmula de bendición solemne, MR, p. 608 (603).
UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO.-La música es un elemento imprescindible de cualquier religión. Según los hindúes, por ejemplo, las divinidades se comunican produciendo una música que retumba por el universo y que sólo ciertos individuos selectos pueden oír. Claro que en nuestra religión católica, Dios se revela por palabras y acciones. No obstante, la música siempre ha tenido un lugar muy importante. Los salmos no son meramente poemas, sino la letra de canciones para cantar. Partes del Nuevo Testamento se originaron como cánticos usados durante las liturgias, como Fil 2, 6-11 y Ef 3, 1-14. En la historia de la Iglesia ha habido controversias acerca de la música, como atestiguan las luchas contra los himnos arrianos en el siglo IV y la discusión durante el Concilio de Trento en el siglo XVI sobre los instrumentos musicales que se pueden tocar durante la misa. Nuestra fe necesita la música.
Blanco Lunes IV de Pascua MR, p. 368 (369) / Lecc. I, p. 900
JESÚS,
EL BUEN PASTOR
Hech 11, 1-18; Salmos 41 y 42; Jn 10, 1-10
La figura del pastor era bien conocida en la cultura agrícola del antiguo Medio Oriente. No sorprende, por lo tanto, que aparece en el Antiguo Testamento como símbolo de Dios, desde el Génesis (49, 24) y el libro de los Salmos (Sal 22) hasta el profeta Ezequiel (34,1-31). En el Nuevo Testamento, los Evangelios Sinópticos la adoptaron de manera indirecta: Marcos compara las multitudes con unas ovejas sin un pastor (6, 35), Lucas inserta la parábola de la oveja perdida en la enseñanza de Cristo (15, 3-7) y Mateo representa a los justos como ovejas salvadas durante el juicio final (25, 32-34). No obstante, el evangelista Juan es el escritor bíblico que se inspira más en esta imagen, como podemos ver en todo el décimo capítulo de su evangelio y la extensa descripción de Jesús como el buen pastor.
ANTÍFONA DE ENTRADA Rom 6, 9
Cristo, una vez resucitado de entre los muertos, ya no morirá nunca. La muerte ya no tiene dominio sobre él. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, luz perfecta de los santos, que nos concediste celebrar en la tierra los misterios pascuales, haz que gocemos siempre de la plenitud eterna de tu gracia. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
También a los paganos les ha concedido Dios la conversión que lleva a la vida.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 11,1-18
En aquellos días,
los apóstoles y los hermanos que vivían en Judea se enteraron
de que también los paganos habían recibido la palabra de Dios.
Cuando Pedro regresó a Jerusalén, los circuncidados le hicieron
reproches, diciendo: "Has entrado en la casa de unos incircuncisos y has
comido con ellos" Entonces Pedro les contó desde el principio lo
que le había pasado: "Estaba yo en la ciudad de Jafa, en oración,
cuando tuve una visión y vi algo semejante a un gran mantel, que sostenido
por las cuatro puntas, bajaba del cielo hasta donde yo me encontraba. Miré
con atención aquella cosa y descubrí que había en ella
toda clase de cuadrúpedos, fieras, reptiles y aves. Oí luego una
voz que me decía: 'Levántate, Pedro. Mata el animal que quieras
y come'. Pero yo le respondí: 'Ni pensarlo, Señor. Jamás
he comido nada profano o impuro'. La voz del cielo me habló de nuevo:
'No tengas tú por impuro lo que Dios ha hecho puro'. Esto se repitió
tres veces y luego todo fue recogido hacia el cielo.
En aquel instante, se presentaron en la casa donde yo estaba tres hombres, que
venían de Cesárea, con un recado para mí. El Espíritu
me dijo entonces que me fuera con ellos sin dudar. También fueron conmigo
estos seis hermanos y todos entramos en casa de aquel hombre. Él nos
contó cómo había visto de pie, ante él, a un ángel
que le dijo: 'Manda a buscar en Jafa a Simón, llamado Pedro. Lo que él
te diga, te traerá la salvación a ti y a toda tu familia'. En
cuanto empecé a hablar, el Espíritu Santo descendió sobre
ellos, como había descendido al principio sobre nosotros. Entonces me
acordé de lo que había dicho el Señor: 'Juan bautizó
con agua; pero ustedes serán bautizados con el Espíritu Santo'.
Por lo tanto, si Dios les ha dado a ellos el mismo don que a nosotros, por haber
creído en el Señor Jesús, ¿quién soy yo para
oponerme a Dios?".
Con esto se apaciguaron y alabaron a Dios, diciendo: "Por lo visto, también
a los paganos les ha concedido Dios la conversión que lleva a la vida".
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
De los salmos
41,2-3; y 42, 3.4.
R/. Estoy sediento del Dios que da la vida. Aleluya.
Como el venado busca el
agua de los ríos, así, cansada, mi alma te busca a ti, Dios mío.
R/.
Del Dios que da la vida está mi ser sediento. ¿Cuándo será
posible ver de nuevo su templo? R/.
Envíame, Señor, tu luz y tu verdad; que ellas se conviertan en
mi guía y hasta tu monte santo me conduzcan, allí donde tú
habitas. R/.
Al altar del Señor me acercaré, al Dios que es mi alegría,
y a mi Dios, el Señor, le daré gracias al compás de la
cítara. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 10, 14
R/. Aleluya, aleluya.
Yo soy el buen pastor, dice el Señor; yo conozco a mis ovejas y ellas me conocen a mí. R/.
EVANGELIO
Yo soy la puerta de las ovejas.
Del santo Evangelio según san Juan: 10, 1-10
En aquel tiempo, Jesús
dijo a los fariseos: "Yo les aseguro que el que no entra por la puerta
del redil de las ovejas, sino que salta por otro lado, es un ladrón,
un bandido; pero el que entra por la puerta, ése es el pastor de las
ovejas. A ése le abre el que cuida la puerta, y las ovejas reconocen
su voz; él llama a cada una por su nombre y las conduce afuera. Y cuando
ha sacado a todas sus ovejas, camina delante de ellas, y ellas lo siguen, porque
conocen su voz.
Pero a un extraño no lo seguirán, sino que huirán de él,
porque no conocen la voz de los extraños".
Jesús les puso esta comparación, pero ellos no entendieron lo
que les quería decir. Por eso añadió: "Les aseguro
que yo soy la puerta de las ovejas. Todos los que han venido antes que yo, son
ladrones y bandidos; pero mis ovejas no los han escuchado. Yo soy la puerta;
quien entre por mí se salvará, podrá entrar y salir y encontrará
pastos. El ladrón sólo viene a robar, a matar y a destruir. Yo
he venido para que tengan vida y la tengan en abundancia". Palabra
del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Recibe, Señor, los dones que, jubilosa, tu Iglesia te presenta, y puesto que es a ti a quien debe su alegría, concédele también disfrutar de la felicidad eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio IV de Pascua, MR, pp. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 20, 19
Jesús se presentó en medio de sus discípulos y les dijo: "La paz esté con ustedes". Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dirige, Señor, tu mirada compasiva sobre tu pueblo, al que te has dignado renovar con estos misterios de vida eterna, y concédele llegar un día a la gloria incorruptible de la resurrección. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Blanco Martes IV de Pascua o Memoria de san Juan de Ávila, presbítero y doctor de la Iglesia * MR, pp. 369 (370) / Lecc. I, p. 903
TRANSFORMANDO
LAS CONTINGENCIAS EN OPORTUNIDADES
Hech 11,19-26; Sal 86; Jn 10,22-30
El martirio de Esteban y la persecución de los cristianos que se desató, fueron acontecimientos contingentes. No es que se hayan programado desde la eternidad. Si el Evangelio hubiera sido aceptado por los habitantes de Jerusalén, nunca habrían ocurrido. Pero gracias a estas contingencias, la sabiduría de los primeros cristianos y "la mano del Señor" (v. 21), el Evangelio empezó a predicarse fuera de Israel y los gentiles recibieron la invitación al banquete de la vida eterna. Es que nuestra fe es histórica: Dios se revela en la historia, no en ideas abstractas, en visiones alucinatorias o en leyendas mitológicas; y nosotros abrazamos y vivimos esta revelación en medio de la historia. Tal historia es guiada por Dios, pero tiene lugar para las contingencias y nosotros debemos saber cómo recibirlas para transformarlas en oportunidades para construir el Reino de Dios.
ANTÍFONA DE ENTRADA Apoc 19, 7. 6
Alegrémonos, regocijémonos y demos gracias, porque el Señor, nuestro Dios omnipotente, ha empezado a reinar. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Concédenos, Dios todopoderoso, que quienes celebramos los misterios de la resurrección del Señor, merezcamos alcanzar el gozo de nuestra redención. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Comenzaron a predicar a los griegos el Evangelio del Señor Jesús.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 11,19-26
En aquellos días,
algunos de los que se habían dispersado, huyendo de la persecución
desatada después de la muerte de Esteban, llegaron hasta Fenicia, Chipre
y Antioquía; pero predicaban el Evangelio solamente a los judíos.
Sin embargo, hubo entre ellos algunos chipriotas y cirenenses, que al llegar
a Antioquía, comenzaron a dirigirse también a los griegos y a
predicarles el Evangelio del Señor Jesús. Y como la mano del Señor
estaba con ellos, muchos se convirtieron y abrazaron la fe.
Cuando llegaron estas noticias a la comunidad cristiana de Jerusalén,
Bernabé fue enviado a Antioquía. Llegó Bernabé,
y viendo la acción de la gracia de Dios, se alegró mucho; y como
era hombre bueno, lleno del Espíritu Santo y de fe, exhortó a
todos a que, firmes en su propósito, permanecieran fieles al Señor.
Así se ganó para el Señor una gran muchedumbre.
Entonces Bernabé partió hacia Tarso. en busca de Saulo; y cuando
lo encontró, lo llevó consigo a Antioquía. Ambos vivieron
durante todo un año en esa comunidad y enseñaron a mucha gente.
Allí, en Antioquía, fue donde por primera vez los discípulos
recibieron el nombre de "cristianos". Palabra de Dios. Te
alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 86, 1-3.
4-5. 6-7.
R/. Alaben al Señor todos los pueblos. Aleluya.
Jerusalén gloriosa,
el Señor ha puesto en ti su templo. Tú eres más querida
para Dios que todos los santuarios de Israel. R/.
De ti, Jerusalén, ciudad del Señor, se dirán maravillas.
Egipto y Babilonia adorarán al Señor; los filisteos, con Tiro
y Etiopía, serán como tus hijos. R/.
Y de ti, Jerusalén, afirmarán: "Todos los pueblos han nacido
en ti y el Altísimo es tu fortaleza". R/.
El Señor registrará en el libro de la vida a cada pueblo, convertido
en ciudadano tuyo; y todos los pueblos te cantarán, bailando: "Tú
eres la fuente de nuestra salvación". R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 10, 27
R/. Aleluya, aleluya.
Mis ovejas escuchan mi voz, dice el Señor; yo las conozco y ellas me siguen. R/.
EVANGELIO
El Padre y yo somos uno.
Del santo Evangelio según san Juan: 10, 22-30
Por aquellos días,
se celebraba en Jerusalén la fiesta de la dedicación del templo.
Era invierno. Jesús se paseaba por el templo, bajo el pórtico
de Salomón.
Entonces lo rodearon los judíos y le preguntaron: "¿Hasta
cuándo nos vas a tener en suspenso? Si tú eres el Mesías,
dínoslo claramente".
Jesús les respondió: "Ya se lo he dicho y no me creen. Las
obras que hago en nombre de mi Padre dan testimonio de mí, pero ustedes
no creen, porque no son de mis ovejas. Mis ovejas escuchan mi voz; yo las conozco
y ellas me siguen. Yo les doy la vida eterna y no perecerán jamás;
nadie las arrebatará de mi mano. Me las ha dado mi Padre, y él
es superior a todos, y nadie puede arrebatarlas de la mano del Padre. El Padre
y yo somos uno".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Concédenos, Señor,
vivir siempre llenos de gratitud por estos misterios pascuales que celebramos,
para que, continuamente renovados por su acción, se conviertan para nosotros
en causa de eterna felicidad.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio IV de Pascua, MR, pp. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Lc 24, 46. 26
Era necesario que Cristo padeciera y resucitara de entre los muertos, y así entrara luego en su gloria. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor y Dios nuestro,
escucha nuestras oraciones, para que la participación en los sacramentos
de nuestra redención nos ayude en la vida presente y nos alcance las
alegrías eternas. Por Jesucristo, nuestro Señor.
* O bien en la Memoria del santo, del Común de doctores de la Iglesia,
(blanco) M R, p. 956 (948).
Blanco Miércoles IV de Pascua MR, p. 370 (371) / Lecc. I, p. 906
"CONOCE
LA TIERRA TU BONDAD, SEÑOR"
Hech 12, 24-13, 5; Sal 66; Jn 12, 44-50
De acuerdo con una
tipología aceptada por muchos exégetas, hay seis clases de salmos:
salmos de alabanza (que alaban a Dios por su grandeza); salmos de lamento y
agradecimiento (que lamentan tragedias nacionales o para dar gracias a Dios
por su ayuda); salmos reales (que celebran la monarquía o son pronunciados
por el rey); salmos de sabiduría (relacionados con los libros sapienciales);
salmos litúrgicos (usados en el templo); y salmos históricos (que
narran las maravillas que ha operado Dios). Nuestro salmo de hoy frecuentemente
se clasifica como un salmo de agradecimiento, porque parece dar gracias a Dios
por un año agrícola que produjo rebaños repletos, cosechas
abundantes y la seguridad de una vida sin hambre. Es particularmente idóneo
para el Tiempo de Pascua, que celebra la cosecha abundante de vida producida
por el ministerio, pasión, muerte y resurrección de Jesucristo.
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Sal 17, 50: 21, 23
Te alabaré, Señor, ante las naciones y anunciaré tu nombre a mis hermanos. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, vida de los creyentes, gloria de los humildes, felicidad de los justos, escucha, benigno, nuestras súplicas, para que quienes tienen sed de las promesas de tu generosidad, se vean siempre colmados de la plenitud de tus bienes. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Resérvenme a Saulo y a Bernabé.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 12, 24-13, 5a
En aquel tiempo, la palabra
del Señor cundía y se propagaba. Cumplida su misión en
Jerusalén, Saulo y Bernabé regresaron a Antioquía, llevando
consigo a Juan Marcos.
Había en la comunidad cristiana de Antioquía algunos profetas
y maestros, como Bernabé, Simón (apodado el "Negro"),
Lucio el de Cirene, Manahén (que se crió junto con el tetrarca
Herodes) y Saulo. Un día estaban ellos ayunando y dando culto al Señor,
y el Espíritu Santo les dijo: "Resérvenme a Saulo y a Bernabé
para la misión que les tengo destinada". Todos volvieron a ayunar
y a orar; después les impusieron las manos y los despidieron.
Así, enviados por el Espíritu Santo, Saulo y Bernabé fueron
a Seleucia y zarparon para Chipre. Al llegar a Salamina, anunciaron la palabra
de Dios en las sinagogas de los judíos.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
66, 2-3. 5. 6 Y 8.
R/. Que te alaben, Señor, todos los pueblos. Aleluya.
Ten piedad de nosotros y
bendícenos; vuelve, Señor, tus ojos a nosotros. Que conozca la
tierra tu bondad y los pueblos tu obra salvadora. R/.
Las naciones con júbilo te canten, porque juzgas al mundo con justicia;
con equidad tú juzgas a los pueblos y riges en la tierra a las naciones.
R/.
Que te alaben, Señor, todos los pueblos, que los pueblos te aclamen todos
juntos. Que nos bendiga Dios y que le rinda honor el mundo entero.
R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 8, 12
R/. Aleluya, aleluya.
Yo soy la luz del mundo, dice el Señor; el que me sigue tendrá la luz de la vida. R/.
EVANGELIO
Yo he venido al mundo como luz.
Del santo Evangelio según san Juan: 12, 44-50
En aquel tiempo, exclamó
Jesús con fuerte voz: "El que cree en mí, no cree en mí,
sino en aquel que me ha enviado; el que me ve a mí, ve a aquel que me
ha enviado. Yo he venido al mundo como luz, para que todo el que crea en mí
no siga en tinieblas.
Si alguno oye mis palabras y no las pone en práctica, yo no lo voy a
condenar; porque no he venido al mundo para condenar al mundo, sino para salvarlo.
El que me rechaza y no acepta mis palabras, tiene ya quien lo condene: las palabras
que yo he hablado lo condenarán en el último día. Porque
yo no he hablado por mi cuenta, sino que mi Padre, que me envió, me ha
mandado lo que tengo que decir y hablar. Y yo sé que su mandamiento es
vida eterna. Así, pues, lo que hablo, lo digo como el Padre me lo ha
dicho". Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor
Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Dios nuestro, que por el sano valor de este sacrificio nos hiciste participar de tu misma y gloriosa vida divina, concédenos que, así como hemos conocido tu verdad, de igual manera vivamos de acuerdo con ella. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio IV de Pascua, MR, pp. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Jn 15, 16. 19
Yo los elegí del mundo, dice el Señor, y los destiné para que vayan y den fruto, y su fruto permanezca. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, muéstrate benigno con tu pueblo, y ya que te dignaste alimentarlo con los misterios celestiales, hazlo pasar de su antigua condición de pecado a una vida nueva. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Blanco / Rojo Jueves IV de Pascua o santos Nereo y Aquileo, mártires* o san Pancracio, mártir** MR, p. 371 (372) / Lecc. I, p. 908
"SI
ENTIENDEN ESTO Y LO PONEN EN PRÁCTICA, SERÁN DICHOSOS"
Hech 13, 13-25; Sal 88; Jn 13,16-20
Las estrellas del cine, los famosos de la televisión y los influencers de los medios sociales anhelan los aplausos de sus aficionados. No está fuera de la esfera de la posibilidad de que también apetezcan su dinero. Sin embargo, no esperan que sus fans lleguen a las alturas de la fama que ellos ya han alcanzado. Siempre hay una brecha entre ellos y sus seguidores. No es así con Cristo, especialmente como lo presenta Juan en su Evangelio. Con el capítulo 13, el evangelista inicia la segunda parte principal de su obra, que va hasta el capítulo 20 y lleva el título de el "Libro de la Exaltación". Enseña que los que siguen las huellas de Cristo tendrán un destino igual al de él. Por eso, hoy Jesús alienta a sus seguidores a imitar su ejemplo de servicio y alcanzar así la felicidad.
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Sal 67, 8-9. 20
Cuando saliste, Señor, al frente de tu pueblo, y le abriste camino a través del desierto, la tierra se estremeció y hasta los cielos dejaron caer su lluvia. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Señor Dios, que restauraste la naturaleza humana, elevándola por encima de su dignidad original, dirige tu mirada a este inefable misterio de tu amor, para que conserves los dones de tu eterna gracia y bendición en quienes te dignaste renovar por el sacramento del bautismo. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Del linaje de David Dios hizo nacer un Salvador.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 13, 13-25
En aquellos días,
Pablo y sus compañeros se hicieron a la mar en Pafos; llegaron a Perge
de Panfilia, y allí Juan Marcos los dejó y volvió a Jerusalén.
Desde Perge siguieron hasta Antioquía de Pisidia, y el sábado
entraron en la sinagoga y tomaron asiento. Acabada la lectura de la ley y los
profetas, los jefes de la sinagoga les mandaron decir: "Hermanos, si tienen
alguna exhortación que hacer al pueblo, hablen".
Entonces se levantó Pablo, y haciendo señal de silencio con la
mano, les dijo: "Israelitas y cuantos temen a Dios, escuchen: El Dios del
pueblo de Israel eligió a nuestros padres, engrandeció al pueblo
cuando éste vivía como forastero en Egipto y lo sacó de
allí con todo su poder, lo alimentó en el desierto durante cuarenta
años, aniquiló siete tribus del país de Canaán y
dio el territorio de ellas en posesión a Israel por cuatrocientos cincuenta
años. Posteriormente les dio jueces, hasta el tiempo del profeta Samuel.
Pidieron luego un rey, y Dios les dio a Saúl, hijo de Quis, de la tribu
de Benjamín, que reinó cuarenta años. Después destituyó
a Saúl y les dio por rey a David, de quien hizo esta alabanza: He hallado
a David, hijo de Jesé, hombre según mi corazón, quien realizará
todos mis designios.
Del linaje de David, conforme a la promesa, Dios hizo nacer para Israel un Salvador,
Jesús. Juan preparó su venida, predicando a todo el pueblo de
Israel un bautismo de penitencia, y hacia el final de su vida, Juan decía:
'Yo no soy el que ustedes piensan. Después de mí viene uno a quien
no merezco desatarle las sandalias' ". Palabra de Dios. Te
alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
88,2-3.21-22.25.27.
R/. Proclamaré sin cesar la misericordia del Señor. Aleluya.
Proclamaré sin cesar
la misericordia del Señor y daré a conocer que su fidelidad es
eterna, pues el Señor ha dicho: "Mi amor es para siempre y mi lealtad,
más firme que los cielos. R/.
He encontrado a David, mi servidor, y con mi aceite santo lo he ungido. Lo sostendrá
mi mano y le dará mi brazo fortaleza. R/.
Contará con mi amor y mi lealtad y su poder aumentará en mi nombre.
El me podrá decir: 'Tú eres mi padre. el Dios que me protege y
que me salva' ". R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Apoc 1, 5
R/. Aleluya, aleluya.
Señor Jesús, testigo fiel, primogénito de entre los muertos, tu amor por nosotros es tan grande, que has lavado nuestras culpas con tu sangre. R/.
EVANGELIO
El que recibe al que yo envío, me recibe a mí.
Del santo Evangelio según san Juan: 13, 16-20
En aquel tiempo, después
de lavarles los pies a sus discípulos, Jesús les dijo: "Yo
les aseguro: el sirviente no es más importante que su amo, ni el enviado
es mayor que quien lo envía. Si entienden esto y lo ponen en práctica,
serán dichosos.
No lo digo por todos ustedes, porque yo sé a quiénes he escogido.
Pero esto es para que se cumpla el pasaje de la Escritura, que dice: El que
comparte mi pan me ha traicionado. Les digo esto ahora, antes de que suceda,
para que, cuando suceda, crean que Yo Soy.
Yo les aseguro: el que recibe al que yo envío, me recibe a mí;
y el que me recibe a mí, recibe al que me ha enviado". Palabra
del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Suba hasta ti, Señor, nuestra oración, acompañada por estas ofrendas, para que, purificados por tu bondad, nos dispongas para celebrar el sacramento de tu inmenso amor. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio IV de Pascua, MR, p. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Mt 28, 20
Yo estaré con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dios todopoderoso y eterno, que, por la resurrección de Cristo, nos has hecho renacer a la vida eterna, multiplica en nosotros el efecto de este sacramento pascual, e infunde en nuestros corazones el vigor que comunica este alimento de salvación. Por Jesucristo, nuestro Señor.
O bien:
*Santos Nereo
y Aquileo, mártires MR, p. 743 (730)
Eran soldados en tiempo del emperador Diocleciano. De acuerdo
con los informes que nos da el Papa Dámaso, no eran aún cristianos
cuando estalló la persecución; pero el valor de los mártires
los impulsó a creer en Jesucristo. Fueron degollados en Roma (304).
ORACIÓN COLECTA
Dios todopoderoso, ya que hemos conocido la fortaleza con la cual confesaron la fe los gloriosos mártires Nereo y Aquileo, concédenos experimentar su piedad al interceder por nosotros ante ti. Por nuestro Señor Jesucristo ...
O bien:
**San Pancracio,
mártir MR, p. 743 (731)
Sufrió el martirio el mismo día, y probablemente,
el mismo año que Nereo y Aquileo. Según la Tradición, fue
martirizado cuando tenía 14 años. y, en la misma forma que santa
Inés, no dudó en sacrificar su juventud para mantenerse fiel a
Cristo.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que tu Iglesia se alegre confiada por la protección del mártir san Pancracio, y que, por su gloriosa intercesión, se consagre a tu servicio y esté a salvo de todo peligro. Por nuestro Señor Jesucristo ...
Nuestra Señora de Fátima
Blanco Viernes IV de Pascua MR, p. 372 (373) / Lecc. I, p. 910
Otros santos: Andrés Huberto Foumet, presbítero y cofundador. Beata Gemma de Goriano, virgen reclusa.
EL CAMINO,
LA VERDAD, Y LA VIDA
Hech 13, 26-33; Sal 2; Jn 14,1-6
Hoy Jesús proclama uno de sus pronunciamientos más famosos y repetidos: "Yo soy el camino, la verdad, y la vida" (v. 6). Es un verso que ha recibido, a lo largo de los siglos, un sinfín de interpretaciones, desde la de Santo Tomás de Aquino, quien arguyó que Cristo afirma sus dos naturalezas, la humana (el camino) y la divina (la verdad y la vida), hasta la de ciertos polémicos de hoy, quienes ven en esta frase la negación de salvación en otras religiones porque éstas no son el único camino. No todas estas interpretaciones tienen igual valor. Lo que parece cierto es que, con este dicho, Juan entiende que Cristo no es únicamente un buen guía espiritual o que meramente llevó una nueva manera de vivir, sino que es también la fuente misma de nuestra existencia y salvación.
ANTÍFONA DE ENTRADA Apoc 5,9-10
Señor, con tu sangre has rescatado a hombres de toda raza, lengua, pueblo y nación, y has hecho de nosotros un reino de sacerdotes para Dios. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, autor de nuestra libertad y salvación, oye la voz de los que te suplican y a quienes redimiste por la sangre derramada de tu Hijo, concédeles vivir para ti y que puedan gozar en ti de inmortalidad eterna. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Resucitando a Jesús, Dios ha cumplido la promesa que nos hizo.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 13, 26-33
En aquellos días,
Pablo continuó su predicación en la sinagoga de Antioquía
de Pisidia con estas palabras: "Hermanos míos, descendientes de
Abraham, y cuantos temen a Dios: Este mensaje de salvación les ha sido
enviado a ustedes. Los habitantes de Jerusalén y sus autoridades no reconocieron
a Jesús, y al condenarlo, cumplieron las palabras de los profetas que
se leen cada sábado: no hallaron en Jesús nada que mereciera la
muerte, y sin embargo, le pidieron a Pilato que lo mandara ejecutar. Y después
de cumplir todo lo que de él estaba escrito, lo bajaron de la cruz y
lo pusieron en el sepulcro.
Pero Dios lo resucitó de entre los muertos, y él, ya resucitado,
se apareció durante muchos días a los que lo habían seguido
de Galilea a Jerusalén. Ellos son ahora sus testigos ante el pueblo.
Nosotros les damos la buena nueva de que la promesa hecha a nuestros padres
nos la ha cumplido Dios a nosotros, los hijos, resucitando a Jesús, como
está escrito en el salmo segundo: Tú eres mi hijo, yo te he engendrado
hoy".
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
2, 6-7. 8-9. 10-11.
R/. Jesucristo es el rey de las naciones. Aleluya.
El Señor me ha consagrado
como rey de Sión, su ciudad santa. Anunciaré el decreto del Señor.
He aquí lo que me dijo. R/.
"Hijo mío eres tú, yo te he engendrado hoy. Te daré
en herencia las naciones y como propiedad, toda la tierra. Podrás gobernarlas
con cetro de hierro, y despedazarlas como jarros". R/.
Escuchen y comprendan estas cosas, reyes y gobernantes de la tierra. Adoren
al Señor con reverencia, sírvanlo con temor. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 14, 6
R/. Aleluya, aleluya.
Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie va al Padre si no es por mí, dice el Señor. R/.
EVANGELIO
Yo soy el camino, la verdad y la vida.
Del santo Evangelio según san Juan: 14, 1-6
En aquel tiempo, Jesús
dijo a sus discípulos: "No pierdan la paz. Si creen en Dios, crean
también en mí. En la casa de mi Padre hay muchas habitaciones.
Si no fuera así, yo se lo habría dicho a ustedes, porque ahora
voy a prepararles un lugar. Cuando me haya ido y les haya preparado un lugar,
volveré y los llevaré conmigo, para que donde yo esté,
estén también ustedes. Y ya saben el camino para llegar al lugar
a donde voy".
Entonces Tomás le dijo: "Señor, no sabemos a dónde
vas, ¿cómo podemos saber el camino?". Jesús le respondió:
"Yo soy el camino, la verdad y la vida. Nadie va al Padre si no es por
mí". Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor
Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Recibe, Señor, con
bondad, estas ofrendas de tu familia santa, para que, con la ayuda de tu protección,
conserve los dones recibidos y llegue a poseer los eternos.
Por Jesucristo, nuestro Señor ...
Prefacio IV de Pascua, MR, pp. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Rom 4, 25
Cristo fue condenado a muerte por nuestros pecados y resucitó para nuestra justificación. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Protege, Señor, con amor constante a quienes has salvado, para que, una vez redimidos por la pasión de tu Hijo, se llenen ahora de alegría por su resurrección. El, que vive y reina por los siglos de los siglos.
O bien:
* Memoria de
Nuestra Señora de Fátima MR, pp. 744 (731). 913 (916)
El 13 de mayo de 1917, en Cova de Iría, Portugal, tuvo
lugar la primera aparición de la santísima Virgen a tres pastorcitos:
Lucía, de diez años, Francisco, de ocho, y Jacinta, de siete.
El 13 de mayo de 2000, el Papa Juan Pablo II declaró beatos a Jacinta
y Francisco durante su viaje al santuario de las apariciones. En este día
contemplamos a la que, en el orden de la gracia, es nuestra Madre clementísima,
quien suscita en muchos fieles la oración por los pecadores y la profunda
conversión de los corazones.
ANTÍFONA DE ENTRADA Sal 29,12
Cambiaste mi llanto en gozo, Señor, y me vestiste de fiesta. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Dios y Padre nuestro, que nos diste a la Madre de tu Hijo como Madre nuestra, concédenos que, preservando en la penitencia y en la oración a favor de la salvación del mundo, podamos promover cada vez con más eficacia el reinado de Cristo, Hijo tuyo y Señor nuestro. El que vive y reina contigo ...
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Recibe, Padre santo, la ofrenda de nuestra humildad que, llenos de alegría, te presentamos al celebrar la conmemoración de la santísima Virgen María y concédenos que, asociados al sacrificio de Cristo, recibamos el consuelo en la vida presente y los gozos de la salvación eterna. Él que vive y reina por los siglos de los siglos.
Prefacio IV de santa María Virgen en la conmemoración, MR, pp. 531-535 (527-531).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN
Alégrate, Virgen Madre, porque Cristo ha resucitado del sepulcro. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Fortalecidos con los sacramentos pascuales, te rogamos, Señor, que quienes celebramos la memoria de la Madre de tu Hijo, manifestemos la vida de Jesús en nuestra carne morta1. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Fiesta de san Matías, Apóstol
Rojo MR, p. 744 (732) / Lecc. I, p. 1020
Por este motivo, cuando Judas desertó y hubo necesidad de completar el número de los doce Apóstoles, Pedro lo propuso para que se uniera al grupo apostólico y "se convirtiera en testigo de la resurrección" del Señor.
EL MISMO DIOS,
SIEMPRE ACTIVO
Hech 1, 15-17. 20-26; Sal 112; Jn 15, 9-17
La continuidad de la historia de la salvación fue uno de los motivos principales que movieron a Lucas a escribir su Evangelio y el libro de Hechos. El evangelista quiso demostrar que, a lo largo de la historia del Pueblo de Israel, ha estado presente la acción salvadora de Dios, eficaz, e imparable, por ejemplo, con la vida de Jesucristo y el crecimiento de la Iglesia primitiva. La elección de Matías como el duodécimo apóstol, para reemplazar a Judas Iscariote, es un ejemplo de dicho motivo: Matías brinda continuidad entre las tribus de Israel (cuyo número tradicional fue de doce), la vida de Cristo, y la primera comunidad cristiana. Quizá se ha deseado saber más sobre Matías y por eso se han tejido varias leyendas acerca de su ministerio posterior, pero lo esencial es que el mismo Dios es activo en su vida y en las nuestras.
ANTÍFONA DE ENTRADA Jn 15, 16
No son ustedes los que me han elegido, dice el Señor; soy yo quien los ha elegido y los ha destinado para que vayan y den fruto y su fruto permanezca. Aleluya.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que asociaste a san Matías al colegio de los Apóstoles, concédenos, por su intercesión, que, teniendo la dicha de ser amados por ti, merezcamos ser contados entre tus elegidos. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Echaron suertes, le tocó a Matías y lo asociaron a los once apóstoles.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 1, 15-17. 20-26
En aquellos días,
Pedro se puso de pie en medio de los hermanos, que eran unos ciento veinte,
y dijo: "Hermanos, tenía que cumplirse aquel pasaje de la Escritura
en que el Espíritu Santo, por boca de David, hizo una predicción
tocante a Judas, quien fue el que guio a los que apresaron a Jesús. Él
era de nuestro grupo y había sido llamado a desempeñar con nosotros
este ministerio.
Ahora bien, en el libro de los Salmos está escrito: Que su morada quede
desierta y que no haya quien habite en ella; que su cargo lo ocupe otro. Hace
falta, por lo tanto, que uno se asocie a nosotros como testigo de la resurrección
de Jesús, uno que sea de los que nos acompañaron mientras convivió
con nosotros el Señor Jesús, desde que Juan bautizaba hasta el
día de la ascensión".
Propusieron entonces a dos: a José Barsabá, por sobrenombre "el
Justo", y a Matías, y se pusieron a orar de este modo: "Tú,
Señor, que conoces los corazones de todos, muestra a cuál de estos
dos has elegido para desempeñar este ministerio y apostolado, del que
Judas desertó para irse a su propio lugar". Echaron suertes, le
tocó a Matías y lo asociaron a los once apóstoles. Palabra
de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
112,1-2.3-4.5-6.7-8.
R/. Lo puso el Señor entre los jefes de su pueblo. Aleluya.
Bendito sea el Señor,
alábenlo sus siervos. Bendito sea el Señor desde ahora y para
siempre. R/.
Desde que sale el sol hasta su ocaso, alabado sea el nombre del Señor.
Dios está sobre todas las naciones, su gloria, por encima de los cielos.
R/.
¿Quién hay como el Señor? ¿Quién iguala al
Dios nuestro, que tiene en las alturas su morada, y sin embargo de esto, bajar
se digna su mirada para ver tierra y cielo? R/.
Él levanta del polvo al desvalido y saca al indigente del estiércol,
para hacerlo sentar entre los grandes, los jefes de su pueblo. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Jn 15, 16
R/. Aleluya, aleluya.
Yo los he elegido del mundo, dice el Señor, para que vayan y den fruto y su fruto permanezca. R/.
EVANGELIO
No son ustedes los que me han elegido, soy yo quien los ha elegido.
Del santo Evangelio según san Juan: 15, 9-17
En aquel tiempo, Jesús
dijo a sus discípulos: "Como el Padre me ama, así los amo
yo. Permanezcan en mi amor. Si cumplen mis mandamientos, permanecen en mi amor;
lo mismo que yo cumplo los mandamientos de mi Padre y permanezco en su amor.
Les he dicho esto para que mi alegría esté en ustedes y su alegría
sea plena.
Este es mi mandamiento: que se amen los unos a los otros como yo los he amado.
Nadie tiene amor más grande a sus amigos que el que da la vida por ellos.
Ustedes son mis amigos, si hacen lo que yo les mando. Ya no los llamo siervos,
porque el siervo no sabe lo que hace su amo; a ustedes los llamo amigos, porque
les he dado a conocer todo lo que le he oído a mi Padre.
No son ustedes los que me han elegido, soy yo quien los ha elegido y los ha
destinado para que vayan y den fruto y su fruto permanezca, de modo que el Padre
les conceda cuanto le pidan en mi nombre. Esto es lo que les mando: que se amen
los unos a los otros".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Acepta, Señor, los dones que tu Iglesia te presenta con devoción en la festividad de san Matías, y, por ellos, fortalécenos con el poder de tu gracia. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I o II de los Apóstoles, MR, pp. 536-537 (532-533).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 15, 12
Éste es mi mandamiento: que se amen los unos a los otros como yo los he amado, dice el Señor.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, tú
que das con abundancia a tu familia, estos dones celestiales, por la intercesión
de san Matías dígnate recibirnos en la claridad de tu luz, para
que tengamos parte con los santos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Puede utilizarse la fórmula de bendición solemne, M R, p. 616
(610).
Blanco Domingo V de Pascua [Se omite la Memoria de san Isidro Labrador, en la República Mexicana] MR p. 374 (375) / Lecc. I, p. 340
Otros santos: Beatos: Isabel Czacka, "La Madre de los ciegos", fundadora; Joan Montpeó Masip, Seminarista diocesano y mártir.
OJOS EN EL
PREMIO
Hech 14, 21-27; Sal 144; Apoc 21, 1-5; Jn 13,31-33.34-45
El libro de Apocalipsis no es una recopilación de predicciones sobre el futuro ni tampoco un manual para sobrevivir al fin del mundo. Es una obra escrita, en un género literario antiguo, para infundir la esperanza y la perseverancia en unos cristianos que sufrieron la persecución y habían empezado a descorazonarse. Nuestra segunda lectura de hoy es el culmen de este esfuerzo porque afirma, de manera metafórica, que el último destino del cosmos -y de todos nosotros no es el triunfo de los poderosos despiadados o una continuación de la misma vida sin fin y significado, sino la destrucción de todos los males y una unión con Dios, que es tan íntima que se parece a la de unos esposos enamorados. Es el objetivo en el que tenemos que mantener fijos nuestros ojos, especialmente en momentos de desánimo y temor.
ANTÍFONA DE ENTRADA Sal 97. 1-2
Canten al Señor un cántico nuevo, porque ha hecho maravillas y todos los pueblos han presenciado su victoria. Aleluya.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Dios todopoderoso y eterno, lleva a su plenitud en nosotros el sacramento pascual, para que, a quienes te dignaste renovar por el santo bautismo, les hagas posible, con el auxilio de tu protección, abundar en frutos buenos, y alcanzar los gozos de la vida eterna. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Contaban a la comunidad cristiana lo que había hecho Dios por medio de ellos.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 14, 21b-27
En aquellos días,
volvieron Pablo y Bernabé a Listra, Iconio y Antioquía, y ahí
animaban a los discípulos y los exhortaban a perseverar en la fe, diciéndoles
que hay que pasar por muchas tribulaciones para entrar en el Reino de Dios.
En cada comunidad designaban presbíteros, y con oraciones y ayunos los
encomendaban al Señor, en quien habían creído.
Atravesaron luego Pisidia y llegaron a Panfilia; predicaron en Perge y llegaron
a Atalía. De ahí se embarcaron para Antioquía, de donde
habían salido, con la gracia de Dios, para la misión que acababan
de cumplir.
Al llegar, reunieron a la comunidad y les contaron lo que había hecho
Dios por medio de ellos y cómo les había abierto a los paganos
las puertas de la fe. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
144, 8-9. 10-11. 12-13ab.
R/. Bendeciré al Señor eternamente. Aleluya.
El Señor es compasivo
y misericordioso, lento para enojarse y generoso para perdonar. Bueno es el
Señor para con todos y su amor se extiende a todas sus creaturas. R/.
Que te alaben, Señor, todas tus obras y que todos tus fieles te bendigan.
Que proclamen la gloria de tu reino y den a conocer tus maravillas. R/.
Que muestren a los hombres tus proezas, el esplendor y la gloria de tu reino.
Tu reino, Señor, es para siempre, y tu imperio, por todas las generaciones.
R/.
SEGUNDA LECTURA
Dios les enjugará todas sus lágrimas.
Del libro del Apocalipsis del apóstol san Juan: 21, 1-5
Yo, Juan, vi un cielo nuevo
y una tierra nueva, porque el primer cielo y la primera tierra habían
desaparecido y el mar ya no existía. También vi que descendía
del cielo, desde donde está Dios, la ciudad santa, la nueva Jerusalén,
engalanada como una novia, que va a desposarse con su prometido.
Oí una gran voz, que venía del cielo, que decía: "Ésta
es la morada de Dios con los hombres; vivirá con ellos como su Dios y
ellos serán su pueblo. Dios les enjugará todas sus lágrimas
y ya no habrá muerte ni duelo, ni penas ni llantos, porque ya todo lo
antiguo terminó".
Entonces el que estaba sentado en el trono, dijo: ''Ahora yo voy a hacer nuevas
todas las cosas". Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 13, 34
R/. Aleluya, aleluya.
Les doy un mandamiento nuevo, dice el Señor, que se amen los unos a los otros, como yo los he amado. R/.
EVANGELIO
Un mandamiento nuevo les doy: que se amen los unos a los otros.
Del santo Evangelio según san Juan: 13, 31-33. 34-35
Cuando Judas salió
del cenáculo, Jesús dijo: "Ahora ha sido glorificado el Hijo
del hombre y Dios ha sido glorificado en él. Si Dios ha sido glorificado
en él, también Dios lo glorificará en sí mismo y
pronto lo glorificará.
Hijitos, todavía estaré un poco con ustedes. Les doy un mandamiento
nuevo: que se amen los unos a los otros, como yo los he amado; y por este amor
reconocerán todos que ustedes son mis discípulos". Palabra
del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
Se dice Credo.
PLEGARIA UNIVERSAL
Invoquemos a Cristo,
camino verdad y vida y, como pueblo sacerdotal, pidámosle por las necesidades
de todo el mundo diciendo: Te rogamos, Señor. (R/. Te rogamos, Señor.)
Para que Cristo, esposo de la Iglesia, llene de alegría pascual
a todos los que se han consagrado a la extensión de su reino, roguemos
al Señor.
Para que Cristo, piedra angular del edificio, ilumine con el anuncio evangélico
a los pueblos que aún desconocen la buena nueva de la resurrección,
roguemos al Señor.
Para que Cristo, estrella luciente de la mañana, seque las lágrimas
de los que lloran y aleje del dolor las penas de los que sufren, roguemos
al Señor.
Para que Cristo, testigo fidedigno y veraz, nos conceda ser, con nuestra alegría
evangélica, sal y luz para los hombres que desconocen la victoria de
la resurrección, roguemos al Señor.
Dios nuestro, que, en tu Hijo Jesucristo, has hecho que todo sea nuevo,
escucha nuestra oración y haz que asumamos, como distintivo de nuestra
vida, el mandamiento del amor, y que te amemos a ti y a los hermanos como tú
nos has amado, para que el mundo te conozca a ti y a tu Hijo Jesucristo. El,
que vive y reina, inmortal y glorioso, por los siglos de los siglos.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Dios nuestro, que por el
santo valor de este sacrificio nos hiciste participar de tu misma y gloriosa
vida divina, concédenos que, así como hemos conocido tu verdad,
de igual manera vivamos de acuerdo con ella.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio IV de Pascua, MR, pp. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 15, 1. 5
Yo soy la vid verdadera y ustedes los sarmientos, dice el Señor; si permanecen en mí y yo en ustedes darán fruto abundante. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, muéstrate
benigno con tu pueblo, y ya que te dignaste alimentarlo con los misterios celestiales,
hazlo pasar de su antigua condición de pecado a una vida nueva. Por Jesucristo,
nuestro Señor.
Puede utilizarse la fórmula de bendición solemne, p. 608 (603).
UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO.- Desde los días de Joaquín de Fiore (ca. 1135-1202), quien fijó la fecha del fin del mundo en el año 1260, no han faltado quienes presumen saber no sólo cuándo será el fin, sino muchos otros detalles acerca del futuro del mundo. Tales afirmaciones son irrisorias, pero la escatología misma -la reflexión sobre el destino final del mundo a la luz de la fe no es absurda. Podemos decir algo acerca del fin porque Dios es fiel en su amor, generosidad y misericordia y que, por ende, estos rasgos van a coronar un mundo futuro infundido por la presencia divina. Podemos decir algo porque la Biblia discute el fin y, por tanto, nos da el permiso de hacer lo mismo. Debemos decir algo porque el pasado y el presente no pueden ser los únicos enfoques de nuestra fe.
Blanco / Rojo Lunes V de Pascua o (En la República Mexicana) Memoria de san Juan Nepomuceno, mártir* MR, p. 375 (376) / Lecc. I, p. 915
Otros santos: Andrés Bobola, presbítero de la Orden de la Compañía de Jesús y mártir; Simón Stock, presbítero de la Orden de los Carmelitas.
PABLO Y BERNABÉ
EVITANDO LA MANIPULACIÓN RELIGIOSA
Hech 14, 5-18; Sal 113B; Jn 14, 21-26
¿Por qué Pablo y Bernabé no se aprovecharon de los vecinos de Listra y no se dejaron adorar como dioses? Los vecinos los asumieron como las divinidades romanas Júpiter y Mercurio. Tal identificación fue verosímil a los ojos de dichos vecinos: las acciones de los apóstoles se asemejaban a la leyenda bien conocida en el mundo antiguo, de Filemón y Baucis, dos ancianos que dieron hospedaje a Júpiter y Mercurio, disfrazados de mendigos, y luego fueron recompensaron por su hospitalidad. Si aceptaban que eran dioses, Pablo y Bernabé probablemente hubiesen recibido beneficios apreciables. Entonces, ¿por qué no quisieron los dos apóstoles aprovecharse de las personas? La respuesta es que sabían que el peor líder religioso es el que manipula a su gente. La fe cristiana es destinada para la salvación de todos y no para el egoísmo de unos dirigentes banales.
ANTÍFONA DE ENTRADA
Ha resucitado el Buen Pastor, que dio la vida por sus ovejas y se entregó a la muerte por su rebaño. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Te rogamos, Señor, que protejas siempre a tu familia santa con el auxilio de tu diestra poderosa, para que, en virtud de la resurrección de tu Unigénito, protegida de toda maldad, avance sin cesar asistida por tus dones celestiales. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Les predicamos el Evangelio para que dejando los falsos dioses, se conviertan al Dios vivo.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 14, 5-18
En aquellos días,
los paganos y los judíos de Iconio, apoyados por las autoridades, comenzaron
a agitarse con la intención de maltratar y apedrear a Pablo y a Bernabé.
Pero ellos se dieron cuenta de la situación y huyeron a Listra y Derbe,
ciudades de Licaonia, y predicaron el Evangelio en toda la región.
Había en Listra un hombre tullido de los pies desde su nacimiento que
se pasaba la vida sentado y nunca había podido andar. El tullido escuchaba
el discurso de Pablo, y éste, mirándolo fijamente, advirtió
que aquel hombre tenía fe suficiente como para ser curado, y le ordenó
en voz alta: "Levántate y ponte derecho sobre tus pies". De
un salto el hombre se puso en pie y comenzó a caminar.
Cuando la gente vio lo que Pablo había hecho, empezaron a gritar en la
lengua de Licaonia: "¡Dioses en figura de hombres han bajado a visitarnos!".
Decían que Bernabé era el dios Júpiter y Pablo el dios
Mercurio, porque éste era el que hablaba.
El sacerdote del templo de Júpiter, situado a la entrada de la ciudad,
llevó a las puertas unos toros adornados con guirnaldas, y junto con
la muchedumbre, quería ofrecerles un sacrificio. Al darse cuenta de todo
esto, los apóstoles Bernabé y Pablo se rasgaron las vestiduras
e irrumpieron por entre la multitud, gritando:
"Ciudadanos, ¿por qué hacen semejante cosa? Nosotros somos
hombres mortales, lo mismo que ustedes. Les predicamos el Evangelio que los
hará dejar los falsos dioses y convertirse al Dios vivo, que hizo el
cielo, la tierra, el mar y todo cuanto contienen. En épocas pasadas,
Dios dejó que cada pueblo siguiera su camino, aunque siempre se dio a
conocer por sus beneficios, mandando la lluvia y la cosecha a su tiempo, dándoles
así comida y alegría en abundancia". Y diciendo estas palabras,
consiguieron impedir, a duras penas, que la multitud les ofreciera un sacrificio.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 113 B,
1-2. 3-4.15-16.
R/. Que todos te alaben sólo a ti, Señor. Aleluya.
No por nosotros, Señor,
no por nosotros, sino por ti mismo, manifiesta tu grandeza, porque eres fiel
y bondadoso. Que no nos pregunten los paganos: "¿Dónde está
el Dios de Israel?". R/.
Nuestro Dios está en el cielo y él ha hecho todo lo que quiso.
En cambio, los ídolos de los paganos son oro y plata, son dioses hechos
por artesanos. R/.
Que los llene de bendiciones el Señor, que hizo el cielo y la tierra.
El Señor se ha reservado para sí el cielo y a los hombres les
ha entregado la tierra. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 14,26
R/. Aleluya, aleluya.
El Espíritu Santo les enseñará todas las cosas y les recordará todo cuanto yo les he dicho, dice el Señor. R/.
EVANGELIO
El Espíritu Santo, que mi Padre les enviará en mi nombre, les enseñará todas las cosas.
Del santo Evangelio según san Juan: 14, 21-26
En aquel tiempo, Jesús
dijo a sus discípulos: "El que acepta mis mandamientos y los cumple,
ése me ama. Al que me ama a mí, lo amará mi Padre, yo también
lo amaré y me manifestaré a él".
Entonces le dijo Judas (no el Iscariote): "Señor, ¿por qué
razón a nosotros sí te nos vas a manifestar y al mundo no?".
Le respondió Jesús: "El que me ama, cumplirá mi palabra
y mi Padre lo amará y vendremos a él y haremos en él nuestra
morada. El que no me ama no cumplirá mis palabras. Y la palabra que están
oyendo no es mía, sino del Padre, que me envió.
Les he hablado de esto ahora que estoy con ustedes; pero el Parác1ito,
el Espíritu Santo que mi Padre les enviará en mi nombre, les enseñará
todas las cosas y les recordará todo cuanto yo les he dicho".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Suba hasta ti, Señor, nuestra oración, acompañada por estas ofrendas. para Que, purificados por tu bondad nos dispongas para celebrar el sacramento de tu inmenso amor. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio IV de Pascua, MR, pp. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 14, 27
La paz les dejo, mi paz les doy; pero yo no se la doy como la da el mundo, dice el Señor. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dios todopoderoso y eterno, que, por la resurrección de Cristo, nos has hecho renacer a la vida eterna, multiplica en nosotros el efecto de este sacramento pascual, e infunde en nuestros corazones el vigor que comunica este alimento de salvación. Por Jesucristo, nuestro Señor.
O bien:
*Memoria de
san Juan Nepomuceno, mártir (En la República Mexicana) MR, p.
746 (734)
Nació en Bohemia (República Checa) en 1350. Su padre
era juez. Ya a los 20 años era "notario del tribunal eclesiástico".
Fue ocupando diferentes cargos hasta llegar a vicario general del arzobispado
de Praga. Se dedicaba a ayudar especialmente a los pobres y humildes. Como el
rey cometía innumerables abusos de autoridad, el arzobispo lo excomulgó.
El rey, enfurecido, se ensañó contra los cristianos: una de las
primeras víctimas fue Juan Nepomuceno, torturado por órdenes reales
(16 de mayo de 1393).
Del Común de mártires: para un mártir en tiempo pascual,
MR, p. 935 (927).
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Sal 12,6
Una luz eterna, Señor, brillará para tus santos y vivirán para siempre. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Señor, tú que otorgaste a san Juan Nepomuceno valor para morir y no ceder ante los perseguidores, concédenos su fortaleza para callar por tu amor cuanto pueda lesionar al prójimo. Por nuestro Señor Jesucristo ...
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Recibe, Señor, el sacrificio de reconciliación y alabanza que ofrecemos a tu majestad en la conmemoración del santo mártir Juan Nepomuceno, para que nos lleve a obtener el perdón y nos haga permanecer en continua acción de gracias. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 12, 24
Si el grano de trino no cae en tierra y muere, queda infecundo; pero, si muere, da fruto abundante. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Al celebrar con alegría esta festividad y habiendo recibido tus dones celestiales, te pedimos, Señor, que concedas a quienes en este divino banquete proclamamos la muerte de tu Hijo, que podamos participar, con los santos mártires, de su resurrección y de su gloria. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Puede utilizarse la fórmula de bendición sobre el pueblo, MR, p. 606 (614).
Blanco / Rojo Martes V de Pascua MR, p. 376 (377) / Lecc. I, p. 917
"LA PAZ LES DEJO, MI PAZ LES DOY"
Hech 14,19-28; Sal 144; Jn 14, 27-31
Durante la misa, después de rezar el Padre Nuestro, el sacerdote repite las palabras de Jesús en el Evangelio de hoy: "La paz les dejo, mi paz les doy" (v. 27), luego nos invita a intercambiar el saludo de la paz. Este saludo, también llamado el osculum pacis o "beso de la paz", es muy antiguo, como atestigua la Carta a los Romanos: "Salúdense unos a otros con el beso santo" (16, 16). Las relaciones dentro de una comunidad pueden ser frágiles y deben reforzarse continuamente, incluso con gestos sencillos. Lo que es más, debemos cultivar la paz en nuestro mundo si queremos ser cristianos auténticos. La paz y el amor han caracterizado, desde toda la eternidad, la relación entre el Padre y el Hijo, como Jesús nos recuerda. Si queremos imitarlos, tenemos que trabajar por la paz.
ANTÍFONA DE ENTRADA Apoc 19, 5; 12, 10
Alaben a nuestro Dios todos cuantos lo temen, pequeños y grandes, porque ha llegado ya la salvación, el poder y el reinado de su Cristo. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que por la resurrección de tu Hijo nos rescatas para la vida eterna, concede a tu pueblo perseverar en la fe y la esperanza, para que no dudemos que se han de cumplir las promesas que tú hiciste y nos has dado a conocer. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Contaban a la comunidad cristiana lo que había hecho Dios por medio de ellos.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 14, 19-28
En aquellos días,
llegaron a Listra, procedentes de Antioquía y de Iconio, unos judíos,
que se ganaron a la multitud y apedrearon a Pablo; lo dieron por muerto y lo
arrastraron fuera de la ciudad. Cuando lo rodearon los discípulos, Pablo
se levantó y regresó a la ciudad. Pero al día siguiente,
salió con Bernabé hacia Derbe.
Después de predicar el Evangelio y de hacer muchos discípulos
en aquella ciudad, volvieron a Listra, Iconio y Antioquía, y ahí
animaban a los discípulos y los exhortaban a perseverar en la fe, diciéndoles
que hay que pasar por muchas tribulaciones para entrar en el Reino de Dios.
En cada comunidad designaban presbíteros, y con oraciones y ayunos los
encomendaban al Señor, en quien habían creído. Atravesaron
luego Pisidia y llegaron a Panfilia; predicaron en Perge y llegaron a Atalía.
De allí se embarcaron para Antioquía, de donde habían salido,
con la gracia de Dios, para la misión que acababan de cumplir.
Al llegar, reunieron a la comunidad y les contaron lo que había hecho
Dios por medio de ellos y cómo les había abierto a los paganos
las puertas de la fe. Ahí se quedaron bastante tiempo con los discípulos.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 144,
10-11.12-13ab. 21.
R/. Bendigamos al Señor eternamente. Aleluya.
Que te alaben, Señor,
todas tus obras y que todos tus fieles te bendigan. Que proclamen la gloria
de tu reino y den a conocer tus maravillas. R/.
Que muestren a los hombres tus proezas, el esplendor y la gloria de tu reino.
Tu reino, Señor, es para siempre y tu imperio, para todas las generaciones.
R/.
Que mis labios alaben al Señor, que todos los seres lo bendigan ahora
y para siempre. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Lc 24, 46.26
R/. Aleluya, aleluya.
Cristo tenía que morir y resucitar de entre los muertos, para entrar así en su gloria. R/.
EVANGELIO
Les doy mi paz.
Del santo Evangelio según san Juan: 14, 27-31
En aquel tiempo, Jesús
dijo a sus discípulos: "La paz les dejo, mi paz les doy. No se la
doy como la da el mundo. No pierdan la paz ni se acobarden. Me han oído
decir: 'Me voy, pero volveré a su lado'. Si me amaran, se alegrarían
de que me vaya al Padre, porque el Padre es más que yo. Se lo he dicho
ahora, antes de que suceda, para que cuando suceda, crean.
Ya no hablaré muchas cosas con ustedes, porque se acerca el príncipe
de este mundo; no es que él tenga poder sobre mí, pero es necesario
que el mundo sepa que amo al Padre y que cumplo exactamente lo que el Padre
me ha mandado". Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor
Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Recibe, Señor, los dones que, jubilosa, tu Iglesia te presenta, y puesto que es a ti a quien debe su alegría, concédele también disfrutar de la felicidad eterna. Por Jesucristo. nuestro Señor.
Prefacio IV de Pascua, MR, pp. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Rom 6, 8
Si hemos muerto con Cristo, creemos que también viviremos con él. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dirige, Señor, tu mirada compasiva sobre tu pueblo, al que te has dignado renovar con estos misterios de vida eterna, y concédele llegar un día a la gloria incorruptible de la resurrección. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Blanco / Rojo Miércoles V de Pascua o san Juan I, Papa y mártir* MR, p. 377 (378) / Lecc. I, p. 919
LA VID
Hech 16,1-6; Sal 121; Jn 15,1-8
En las antiguas escrituras hebreas, especialmente en los escritos proféticos (por ejemplo Is 5,1-7; Jer 2, 21; Os 10, 1; y Ez 15, 1-6), la vid fue bien amada como una imagen para el pueblo de Israel. Como tal, Israel debió ser pululante de vida, floreciente, fructuoso, bello, y la causa de alegría para el viñador, que es Dios. El evangelista Juan emplea esta imagen como una metáfora para los discípulos de Cristo, mientras que, al mismo tiempo, lo transforma. Dios sigue siendo el viñador, pero el evangelista especifica que es el Padre quien cuida de la vid; Dios Hijo no se queda lejos, mirando el progreso lento de su viña, sino que está tan íntimamente relacionado con la planta que él mismo es la fuente de su vida abundante y él mismo impulsa su crecimiento maravilloso.
ANTÍFONA DE ENTRADA Sal 70, 8. 23
Mi boca, Señor, se llene de alabanzas, para que pueda cantarte; y así mis labios se llenarán de júbilo. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que amas la
inocencia y la devuelves a los que la han perdido, atrae hacia ti el corazón
de tus siervos, para que, rescatados por ti de las tinieblas de la incredulidad,
ya nunca se aparten de la luz de tu verdad.
Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Se decidió que Pablo y Bernabé fueran a Jerusalén a ver a los apóstoles.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 15, 1-6
En aquellos días,
vinieron de Judea a Antioquía algunos discípulos y se pusieron
a enseñar a los hermanos que si no se circuncidaban conforme a la ley
de Moisés, no podrían salvarse. Esto provocó un altercado
y una violenta discusión con Pablo y Bernabé; al fin se decidió
que Pablo, Bernabé y algunos más fueran a Jerusalén para
tratar el asunto con los. apóstoles y los presbíteros. La comunidad
cristiana los proveyó para el viaje, y ellos atravesaron Fenicia y Samaria,
contando a los hermanos cómo se convertían los paganos, y los
llenaban de gozo con esta noticia.
Al llegar a Jerusalén, fueron recibidos por la comunidad cristiana, los
apóstoles y los presbíteros, y ellos refirieron todo cuanto Dios
había hecho por su medio. Pero algunos de los fariseos convertidos intervinieron,
diciendo: "Hay que circuncidar a los paganos y exigirles que cumplan la
ley de Moisés".
Entonces se reunieron los apóstoles y los presbíteros para examinar
el asunto. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
121,1-2. 3-4a. 4b-5.
R/. Vayamos con alegría al encuentro del Señor. Aleluya.
¡Qué alegría
sentí, cuando me dijeron: "Vayamos a la casa del Señor"!
Y hoy estamos aquí, Jerusalén, jubilosos, delante de tus puertas.
R/.
A ti, Jerusalén, suben las tribus, las tribus del Señor, según
lo que a Israel se le ha ordenado, para alabar el nombre del Señor. R/.
Por el amor que tengo a mis hermanos, voy a decir: "La paz esté
contigo". Y por la casa del Señor, mi Dios, pediré para ti
todos los bienes. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 15, 4. 5
R/. Aleluya, aleluya.
Permanezcan en mí y yo en ustedes, dice el Señor; el que permanece en mí da fruto abundante. R/.
EVANGELIO
El que permanece en mí y yo en él, ése da fruto abundante.
Del santo Evangelio según san Juan: 15, 1-8
En aquel tiempo, Jesús
dijo a sus discípulos: "Yo soy la verdadera vid y mi Padre es el
viñador. Al sarmiento que no da fruto en mí, él lo arranca,
y al que da fruto lo poda para que dé más fruto.
Ustedes ya están purificados por las palabras que les he dicho. Permanezcan
en mí y yo en ustedes. Como el sarmiento no puede dar fruto por sí
mismo, si no permanece en la vid, así tampoco ustedes, si no permanecen
en mí. Yo soy la vid, ustedes los sarmientos; el que permanece en mí
y yo en él ése da fruto abundante, porque sin mí nada pueden
hacer. Al que no permanece en mí se le echa fuera, como al sarmiento,
y se seca; luego lo recogen, lo arrojan al fuego y arde.
Si permanecen en mí y mis palabras permanecen en ustedes, pidan lo que
quieran y se les concederá. La gloria de mi Padre consiste en que den
mucho fruto y se manifiesten así como discípulos míos".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Concédenos, Señor,
vivir siempre llenos de gratitud por estos misterios pascuales que celebramos,
para que, continuamente renovados por su acción, se conviertan para nosotros
en causa de eterna felicidad.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio IV de Pascua, MR, pp. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN
Resucitó el Señor y nos iluminó a nosotros, los redimidos con su Sangre. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor y Dios nuestro,
escucha nuestras oraciones, para que la participación en los sacramentos
de nuestra redención nos ayude en la vida presente y nos alcance las
alegrías eternas. Por Jesucristo, nuestro Señor.
O bien:
*San Juan I,
Papa y mártir MR, p. 747 (734)
Fue Papa de 523 a 526. Teodorico, rey arriano, lanzó una persecución
contra todos los que sostuvieran la verdadera fe católica acerca de Cristo.
El Papa Juan fue uno de los primeros en ser castigados: primero fue enviado
por el rey a Constantinopla con una embajada destinada a fracasar; después,
también por órdenes del rey fue confinado en una cárcel
de Ravena, en donde murió de hambre.
Del Común de mártires: para un mártir, MR, p. 930 (922),
o del Común de pastores: para un Papa, MR, p. 941 (933).
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, recompensa de las almas fieles, que consagraste este día con el martirio del Papa san Juan primero, escucha las plegarias de tu pueblo y concede que, quienes veneramos sus méritos, imitemos la constancia de su fe. Por nuestro Señor Jesucristo ...
Blanco Jueves V de Pascua MR, p. 378 (379) / Lecc. I, p. 922
EL CONCILIO
DE JERUSALÉN
Hech 15,7-21; Sal 95; Jn 15,9-11
Es inevitable que una parroquia, una orden religiosa, o cualquier comunidad eclesial tendrá que enfrentar nuevos retos que no hubiesen imaginado y arriesgarse a tomar decisiones acerca de ellos. La iglesia primitiva tuvo que hacer lo mismo y podemos aprender algo. Nuestra primera lectura, narrada de forma típicamente lucana (de la antigua región Lucania, en Italia), como un episodio dramático y paradigmático, se focaliza en el reto de las relaciones entre la fe cristiana y el judaísmo. ¿Son los gentiles llamados a ser parte del Nuevo Pueblo de Dios?, y en caso afirmativo, ¿cómo se les incorpora? Pedro, Pablo, Bernabé, Santiago y otros se juntan en el llamado Concilio de Jerusalén para tomar una decisión. Aquí no vemos nada de autoritarismo o de una imagen inversa. Se toman decisiones discutiendo, escuchando, reflexionando en la experiencia y, en medio de todo esto, discerniendo la voluntad del Señor.
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Éx 15. 1-2
Cantemos al Señor, pues su victoria es grande. Mi fortaleza y mi alabanza es el Señor, él es mi salvación. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Dios misericordioso, cuya gracia convierte en justos a los descarriados y en dichosos a los afligidos, actúa con tu poder y concede tus dones, para que en quienes ya infundiste la justificación por la fe no decaiga la firmeza de su perseverancia. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Juzgo que no se debe importunar a los paganos que se convierten a Dios.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 15,7-21
Por aquellos días,
después de una larga discusión sobre el asunto de la circuncisión,
Pedro se levantó y dijo a los apóstoles y a los presbíteros:
"Hermanos: Ustedes saben que, ya desde los primeros días, Dios me
eligió entre ustedes para que los paganos oyeran, por mi medio, las palabras
del Evangelio y creyeran. Dios, que conoce los corazones, mostró su aprobación
dándoles el Espíritu Santo, igual que a nosotros. No hizo distinción
alguna, ya que purificó sus corazones con la fe.
¿Por qué quieren irritar a Dios imponiendo sobre los discípulos
ese yugo, que ni nuestros padres ni nosotros hemos podido soportar? Nosotros
creemos que nos salvaremos por la gracia del Señor Jesús, del
mismo modo que ellos".
Toda la asamblea guardó silencio y se pusieron a oír a Bernabé
y a Pablo, que contaban las grandes señales y prodigios que Dios había
hecho entre los paganos por medio suyo. Cuando terminaron de hablar, Santiago
tomó la palabra y dijo:
"Hermanos, escúchenme. Pedro nos ha referido cómo, por primera
vez, se dignó Dios escoger entre los paganos un pueblo que fuera suyo.
Esto concuerda con las palabras de los profetas, porque está escrito:
Después de estos sucesos volveré y reconstruiré de nuevo
la casa de David, que se había derrumbado; repararé sus ruinas
y la reedificaré, para que el resto de los hombres busque al Señor,
lo mismo que todas las naciones que han sido consagradas a mi nombre. El Señor
que hace estas cosas es quien lo dice. Él las conoce desde la eternidad.
Por lo cual, yo juzgo que no se debe molestar a los paganos que se convierten
a Dios; basta prescribirles que se abstengan de la fornicación, de comer
lo inmolado a los ídolos, la sangre y los animales estrangulados. Si
alguien se extraña, Moisés tiene, desde antiguo, quienes lo predican
en las ciudades, puesto que cada sábado se lee en las sinagogas".
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
95, 1-2a. 2b-3.10.
R/. Cantemos la grandeza del Señor. Aleluya.
Cantemos al Señor
un nuevo canto, que le cante al Señor toda la tierra; cantemos al Señor
y bendigámoslo. R/.
Proclamemos su amor día tras día, su grandeza anunciemos a los
pueblos; de nación en nación, sus maravillas. R/.
Caigamos en su templo de rodillas. "Reina el Señor", digamos
a los pueblos, gobierna a las naciones con justicia. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 10, 27
R/. Aleluya, aleluya.
Mis ovejas escuchan mi voz, dice el Señor; yo las conozco y ellas me siguen. R/.
EVANGELIO
Permanezcan en mi amor para que su alegría sea plena.
Del santo Evangelio según san Juan: 15, 9-11
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: "Como el Padre me ama, así los amo yo. Permanezcan en mi amor. Si cumplen mis mandamientos, permanecen en mi amor; lo mismo que yo cumplo los mandamientos de mi Padre y permanezco en su amor. Les he dicho esto para que mi alegría esté en ustedes y su alegría sea plena". Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Dios nuestro, que por el santo valor de este sacrificio nos hiciste participar de tu misma y gloriosa vida divina, concédenos que, así como hemos conocido tu verdad, de igual manera vivamos de acuerdo con ella. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio IV de Pascua, MR, pp. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN 2 Cor 5, 15
Cristo murió por todos, para que los que viven ya no vivan para sí mismos, sino para él, que murió y resucitó por ellos. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, muéstrate benigno con tu pueblo, y ya que te dignaste alimentarlo con los misterios celestiales, hazlo pasar de su antigua condición de pecado a una vida nueva. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Blanco Viernes V de Pascua o san Bernardino de Siena, presbítero* MR, p. 379 (380) / Lecc. I, p. 924
Otros santos: Beatos: Ángel o Arcángelo Tadini, presbítero y fundador; Luis Talamoni, sacerdote y fundador.
AMIGOS DE
DIOS
Hech 15. 22-31; Sal 56; Jn 15.12-17
Un Dios todopoderoso, omnisciente e infinito, ¿No esperaría que los seres humanos se comportaran como sus inferiores o sus esclavos? Hay que admitir que, a veces, ciertas figuras en la Biblia son descritas como esclavos de Dios, como Moisés (2 Re 18, 12), Josué (Jueces 2, 8) y Abrahán (103, 42). Además, en sus cartas, san Pablo se proclama el "esclavo de Cristo" (Gal l, 10; Rom 1, 1 y 6,5; Fil l, 1). Pero dicha tradición resalta no la inferioridad del ser humano sino su deseo de servir a Dios. En contraste, hay una tradición larga y osada que resalta la amistad, que Dios quiere con sus criaturas, como con Moisés (Ex 33,7-11). Jesús enfatiza esta tradición en sus relaciones personales (con Lázaro, en Jn 11,3 y 36) y en su enseñanza, como en el Evangelio hoy.
ANTÍFONA DE ENTRADA Apoc 5, 12
Digno es el Cordero que fue sacrificado, de recibir el poder, la riqueza, la sabiduría, la fuerza y el honor. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Concédenos, Señor, conformar dignamente nuestra vida a los sacramentos pascuales, para que, al celebrarlos llenos de alegría, nos protejan y nos salven con su fuerza perdurable. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
El Espíritu Santo y nosotros hemos decidido no imponerles más cargas que las estrictamente necesarias.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 15, 22-31
En aquellos días,
los apóstoles y los presbíteros, de acuerdo con toda la comunidad
cristiana, juzgaron oportuno elegir a algunos de entre ellos y enviados a Antioquía
con Pablo y Bernabé. Los elegidos fueron Judas (llamado Barsabás)
y Silas, varones prominentes en la comunidad. A ellos les entregaron una carta
que decía:
"Nosotros, los apóstoles y los presbíteros, hermanos suyos,
saludamos a los hermanos de Antioquía, Siria y Cilicia, convertidos del
paganismo. Enterados de que algunos de entre nosotros, sin mandato nuestro,
los han alarmado e inquietado a ustedes con sus palabras, hemos decidido de
común acuerdo elegir a dos varones y enviárselos, en compañía
de nuestros amados hermanos Bernabé y Pablo, que han consagrado su vida
a la causa de nuestro Señor Jesucristo. Les enviamos, pues, a Judas y
a Silas, quienes les transmitirán, de viva voz, lo siguiente: 'El Espíritu
Santo y nosotros hemos decidido no imponerles más cargas que las estrictamente
necesarias. A saber: que se abstengan de la fornicación y de comer lo
inmolado a los ídolos, la sangre y los animales estrangulados. Si se
apartan de esas cosas, harán bien'.
Los saludamos".
Los enviados se despidieron y cuando llegaron a Antioquía, reunieron
a la comunidad cristiana y les entregaron la carta. Al leer aquellas palabras
alentadoras, todos se llenaron de júbilo.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 56,8-9.10-12.
R/. Alabemos y cantemos al Señor. Aleluya.
Dispuesto está mi
corazón, Dios mío, para cantar tus alabanzas. Despiértate,
alma mía, despiértense mi Cítara y mi arpa, antes de que
despunte el alba. R/.
Tocaré para ti ante las naciones, te alabaré, Señor, entre
los pueblos, pues tu lealtad hasta las nubes llega y tu amor es más grande
que los cielos. Levántate, Señor, en las alturas y llena con tu
gloria el mundo entero. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 15, 15
R/. Aleluya, aleluya.
A ustedes los llamo amigos, dice el Señor, porque les he dado a conocer todo lo que le he oído a mi Padre. R/.
EVANGELIO
Éste es mi mandamiento: que se amen los unos a los otros.
Del santo Evangelio según san Juan: 15, 12-17
En aquel tiempo, Jesús
dijo a sus discípulos: "Éste es mi mandamiento: que se amen
los unos a los otros como yo los he amado. Nadie tiene amor más grande
a sus amigos que el que da la vida por ellos. Ustedes son mis amigos, si hacen
lo que yo les mando. Ya no los llamo siervos, porque el siervo no sabe lo que
hace su amo; a ustedes los llamo amigos, porque les he dado a conocer todo lo
que le he oído a mi Padre.
No son ustedes los que me han elegido, soy yo quien los ha elegido y los ha
destinado para que vayan y den fruto y su fruto permanezca, de modo que el Padre
les conceda cuanto le pidan en mi nombre. Esto es lo que les mando: que se amen
los unos a los otros".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Santifica, Señor, por tu piedad, estos dones y al recibir en oblación este sacrificio espiritual, conviértenos para ti en una perenne ofrenda. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio IV de Pascua, MR, pp. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN
El Crucificado resucitó de entre los muertos y nos ha redimido. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Al recibir, Señor, el don de estos sagrados misterios, te suplicamos humildemente que lo que tu Hijo nos mandó celebrar en memoria suya, nos aproveche para crecer en nuestra caridad fraterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.
O bien:
Memoria
de san Bernardino de Siena, presbítero MR, pp. 747 (735).952 (944)
Se puede decir que este franciscano prosiguió
la obra del dominico Vicente Ferrer, como predicador popular que exhortaba a
los cristianos a levantar la vista por encima de los conflictos de este mundo.
Desde Milán hasta Roma recorría aldeas y ciudades predicando el
amor infinito de Dios y ofreciendo el nombre de Jesús como la protección
para toda clase de males.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, tú que diste a san Bernardino de Siena, presbítero, un extraordinario amor al santo nombre de Jesús, concédenos también a nosotros, por su intercesión y sus méritos, vivir siempre inflamados por el espíritu de tu amor. Por nuestro Señor Jesucristo ...
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Mira, Dios todopoderoso, las ofrendas que presentamos en la festividad de san Bernardino de Siena, y concédenos expresar en la vida los misterios de la pasión del Señor, que ahora celebramos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Ez 34, 15
Yo mismo apacentaré a mis ovejas; yo mismo las haré reposar, dice el Señor. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Por la eficacia de este sacramento, confirma, Señor, a tus siervos en la verdad de la fe, por la que san Bernardino de Siena nunca cesó de trabajar, dedicándole toda su vida, para que en todas partes la profesemos, de palabra y de obra. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Rojo Santos Cristóbal Magallanes, presbítero y compañeros, mártires (Memoria en la República Mexicana) MR, pp. 748 (735) y 933 (925) / Lecc. I, p. 927 LH, Vísperas I del domingo: semana II del Salterio Tomo II: pp. 1201,516 y 878; Para los fieles: pp. 555 y 274; Edición popular: pp. 108 y 449
Del año 1915 a 1937,
y principalmente en la persecución religiosa de 1926 a 1929, veinticinco
mexicanos: 22 sacerdotes diocesanos y tres laicos, se distinguieron entre los
cientos de cristianos sacrificados en México por los enemigos de la fe
católica. Con admirable
constancia preservaron fieles a su compromiso bautismal y a su identidad sacerdotal
y ofrecieron su vida por Cristo Rey y santa María de Guadalupe, en diversos
lugares de la diócesis de Aguascalientes, Autlán, Colima, Chihuahua,
Chilpancingo-Chilapa, Durango, Guadalajara, Morelia, San Juan de los Lagos y
Zacatecas.
DIOS TRAMA PLANES
SORPRESIVOS
Hech 16,1-10; Sal 99; Jn 15,18-21
"El ser humano propone y Dios dispone", así dice el conocido dicho que probablemente remite al antiguo dramaturgo griego Eurípides (ca. 480-406 a. C.), y ha recordado a muchos a lo largo de los siglos que, aunque hacemos planes, es Dios quien guía la historia, a veces en contra de nuestros planes. Quizá san Pablo debería haber recordado este dicho en nuestra primera lectura. El apóstol planifica un viaje misionero en la Turquía actual. Pero una serie de acontecimientos, incluso una riña con Bernabé, el encuentro con Timoteo y la acción obstructiva del Espíritu Santo, hizo que sus planes cambiaran. El autor de Hechos narra que la visión de un europeo lo dirige no a Asia sino hacia Europa. Lo que llama la atención es que Pablo se dispone a seguir los cambios que Dios quiere. También nosotros debemos estar igualmente atentos y dispuestos.
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Mt 25, 34
Vengan, benditos de mi Padre, y tomen posesión del Reino, preparado para ustedes desde la creación del mundo. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Dios todopoderoso y eterno, que concediste a san Cristóbal Magallanes, presbítero, y a sus compañeros, que fueran fieles a Cristo Rey hasta el martirio, concédenos, por su intercesión, que, perseverando en la confesión de la fe verdadera, podamos ser siempre fieles a los mandatos de tu amor. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
¡Ven a Macedonia y ayúdanos!
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 16, 1-10
En aquellos días,
Pablo fue a Derbe y luego a Listra.
Había allí un discípulo, llamado Timoteo, hijo de padre
griego y de madre judía cristiana. Timoteo gozaba de muy buena fama entre
los hermanos de Listra e Iconio. Pablo quiso llevarlo consigo y lo circuncidó,
en atención a los judíos de aquellas regiones, pues todos sabían
que su padre era pagano.
En todas las ciudades por donde iban pasando, daban a conocer las decisiones
tomadas por los apóstoles y los presbíteros de Jerusalén,
para que las pusieran en práctica. De esta manera las comunidades cristianas
se fortalecían en la fe y el número de creyentes aumentaba cada
día más.
Como el Espíritu Santo les había prohibido predicar la palabra
en la provincia de Asia, Pablo y Timoteo atravesaron Frigia y Galacia. Al llegar
a los límites de Misia, se propusieron ir a Bitinia, pero el Espíritu
de Jesús no se lo permitió. Entonces atravesaron Misia y llegaron
a Tróade. Por la noche, Pablo tuvo una aparición: vio a un macedonio,
que de pie ante él, le rogaba: "¡Ven a Macedonia y ayúdanos!".
Después de esta visión, determinamos salir para Macedonia, convencidos
de que Dios nos llamaba a predicar allí el Evangelio.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 99, 2.
3. 5.
R/. El Señor es nuestro Dios y nosotros su pueblo. Aleluya.
Alabemos a Dios todos los
hombres, sirvamos al Señor con alegría y con júbilo entremos
en su templo. R/.
Reconozcamos que el Señor es Dios, que él fue quien nos hizo y
somos suyos, que somos su pueblo y su rebaño. R/.
Porque el Señor es bueno, bendigámoslo, porque es eterna su misericordia
y su fidelidad nunca se acaba. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Col 3, 1
R/. Aleluya, aleluya.
Puesto que han resucitado con Cristo, busquen los bienes de arriba, donde está Cristo, sentado a la derecha de Dios. R/.
EVANGELIO
Ustedes no son del mundo, pues, al elegirlos, yo los he separado Del mundo.
Del santo Evangelio según san Juan: 15, 18-21
En aquel tiempo, Jesús
dijo a sus discípulos: "Si el mundo los odia, sepan que me ha odiado
a mí antes que a ustedes. Si fueran del mundo, el mundo los amaría
como cosa suya; pero el mundo los odia porque no son del mundo, pues al elegirlos,
yo los he separado del mundo.
Acuérdense de lo que les dije: 'El siervo no es superior a su señor'.
Si a mí me han perseguido, también a ustedes los perseguirán,
y el caso que han hecho de mis palabras lo harán de las de ustedes. Todo
esto se lo van a hacer por mi causa, pues no conocen a aquel que me envió".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Al conmemorar la muerte dichosa de tus justos, te ofrecemos, Señor, aquel mismo sacrificio en el que tuvo su origen todo martirio. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I o II de los santos mártires, MR, pp. 540-541 (536-537).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Apoc 2, 7
Al vencedor le daré de comer del árbol de la vida, que está en el paraíso de Dios. Aleluya.
O bien: Cfr. Sal 32, 1
Alégrense, justos, en el Señor, que merece la alabanza de los buenos. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Al celebrar en este divino banquete la celestial victoria de los santos mártires Cristóbal Magallanes y compañeros, te pedimos, Señor, que concedas la victoria a quienes nos alimentamos con este pan de vida, y que, ya vencedores, nos lleves a comer del árbol de la vida en el paraíso. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Blanco Domingo VI de Pascua [Se omite la memoria de santa Rita de Casia, religiosa] MR p 381 (382) / Lecc. I, p. 342 LH, semana II del Salterio
Otros santos: Joaquina de Vedruna, fundadora. Beato Francisco Salinas Sánchez, postulante franciscano y martir.
RECORDANDO
LAS PALABRAS DE JESÚS
Hech15, 1-2.22-29; Sal 66; Apoc 21, 10-14.22-23; Jn 14, 23-29
Algunos interpretan el Evangelio de hoy como si fuera una aceptación, por parte de Jesús, de que no ha revelado todo a los discípulos y de que el Espíritu Santo tenía que finalizar la revelación comunicando más verdades. Sin embargo, tal interpretación hace caso omiso de eso a que todos los exégetas bíblicos deben prestar atención, es decir, las palabras precisas de la Escritura. Jesús dice, textualmente, que el Espíritu Santo les recordará a los discípulos de lo que él ha enseñado por medio de su ministerio. En otros términos, Jesús no les ha escondido nada; el Espíritu les ayudará a recordar su predicación y penetrar su significado más profundo. Jesús y el Espíritu no son unos seres independientes, sino dos Personas del mismo Dios que se nos revela a sí mismo totalmente.
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Is 48, 20
Con voz de júbilo, anúncienlo; que se oiga. Que llegue a todos los rincones de la tierra: el Señor ha liberado a su pueblo. Aleluya.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Dios todopoderoso, concédenos continuar celebrando con incansable amor estos días de tanta alegría en honor del Señor resucitado, y que los misterios que hemos venido conmemorando se manifiesten siempre en nuestras obras. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
El Espíritu Santo y nosotros hemos decidido no imponerles más cargas que las necesarias.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 15, 1-2. 22-29
En aquellos días,
vinieron de Judea a Antioquía algunos discípulos y se pusieron
a enseñar a los hermanos que si no se circuncidaban conforme a la ley
de Moisés, no podrían salvarse.
Esto provocó un altercado y una violenta discusión con Pablo y
Bernabé; al fin se decidió que Pablo, Bernabé y algunos
más fueran a Jerusalén para tratar el asunto con los apóstoles
y los presbíteros.
Los apóstoles y los presbíteros, de acuerdo con toda la comunidad
cristiana, juzgaron oportuno elegir a algunos de entre ellos y enviarlos a Antioquía
con Pablo y Bernabé. Los elegidos fueron Judas (llamado Barsabás)
y Silas, varones prominentes en la comunidad. A ellos les entregaron una carta
que decía:
"Nosotros, los apóstoles y los presbíteros, hermanos suyos,
saludamos a los hermanos de Antioquía, Siria y Cilicia, convertidos del
paganismo. Enterados de que algunos de entre nosotros, sin mandato nuestro,
los han alarmado e inquietado a ustedes con sus palabras, hemos decidido de
común acuerdo elegir a dos varones y enviárselos, en compañía
de nuestros amados hermanos Bernabé y Pablo, que han consagrado su vida
a la causa de nuestro Señor Jesucristo. Les enviamos, pues, a Judas y
a Silas, quienes les transmitirán, de viva voz, lo siguiente: 'El Espíritu
Santo y nosotros hemos decidido no imponerles más cargas que las estrictamente
necesarias. A saber: que se abstengan de la fornicación y de comer lo
inmolado a los ídolos, la sangre y los animales estrangulados. Si se
apartan de esas cosas, harán bien'. Los saludamos". Palabra
de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
66, 2-3. 5. 6. 8.
R/. Que te alaben, Señor, todos los pueblos. Aleluya.
Ten piedad de nosotros y
bendícenos; vuelve, Señor, tus ojos a nosotros. Que conozca la
tierra tu bondad y los pueblos tu obra salvadora. R/.
Las naciones con júbilo te canten, porque juzgas al mundo con justicia;
con equidad tú juzgas a los pueblos y riges en la tierra a las naciones.
R/.
Que te alaben, Señor, todos los pueblos, que los pueblos te aclamen todos
juntos. Que nos bendiga Dios y que le rinda honor el mundo entero.
R/.
SEGUNDA LECTURA
Un ángel me mostró la ciudad santa, que descendía del cielo.
Del libro del Apocalipsis del apóstol san Juan: 21, 10-14. 22-23
Un ángel me
transportó en espíritu a una montaña elevada, y me mostró
a Jerusalén, la ciudad santa, que descendía del cielo, resplandeciente
con la gloria de Dios. Su fulgor era semejante al de una piedra preciosa, como
el de un diamante cristalino.
Tenía una muralla ancha y elevada, con doce puertas monumentales, y sobre
ellas, doce ángeles y doce nombres escritos, los nombres de las doce
tribus de Israel. Tres de estas puertas daban al oriente, tres al norte, tres
al sur y tres al poniente. La muralla descansaba sobre doce cimientos, en los
que estaban escritos los doce nombres de los apóstoles del Cordero.
No vi ningún templo en la ciudad, porque el Señor Dios todopoderoso
y el Cordero son el templo. No necesita la luz del sol o de la luna, porque
la gloria de Dios la ilumina y el Cordero es su lumbrera.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 14, 23
R/. Aleluya, aleluya.
El que me ama, cumplirá mi palabra, dice el Señor; y mi Padre lo amará y vendremos a él. R/.
EVANGELIO
El Espíritu Santo les recordará todo cuanto les he dicho.
Del santo Evangelio según san Juan: 14, 23-29
En aquel tiempo, Jesús
dijo a sus discípulos: "El que me ama, cumplirá mi palabra
y mi Padre lo amará y vendremos a él y haremos en él nuestra
morada.
El que no me ama no cumplirá mis palabras. Y la palabra que están
oyendo no es mía, sino del Padre, que me envió. Les he hablado
de esto ahora que estoy con ustedes; pero el Paráclito, el Espíritu
Santo que mi Padre les enviará en mi nombre, les enseñará
todas las cosas y les recordará todo cuanto yo les he dicho.
La paz les dejo, mi paz les doy. No se la doy como la da el mundo. No pierdan
la paz ni se acobarden. Me han oído decir: 'Me voy, pero volveré
a su lado'. Si me amaran, se alegrarían de que me vaya al Padre, porque
el Padre es más que yo. Se lo he dicho ahora, antes de que suceda, para
que cuando suceda, crean". Palabra del Señor. Gloria
a ti, Señor Jesús.
Se dice Credo.
PLEGARIA UNIVERSAL
Unidos a Cristo, que
intercede siempre por nosotros, elevemos, hermanos, nuestras súplicas
al Padre diciendo: Te rogamos, Señor. (R/. Te rogamos, Señor.)
Para que el que estaba muerto y ahora vive por los siglos de los siglos conceda
a la Iglesia ser, con firmeza y valentía, testimonio perseverante de
su resurrección, roguemos al Señor.
Para que el resucitado, que dio a los apóstoles su paz, quiera concederla
también en abundancia a todos los pueblos, roguemos al Señor.
Para que el vencedor de la muestre transforme los sufrimientos de los enfermos,
de los moribundos y de todos los que sufren en aquella alegría que nunca
nadie les podrá quitar, roguemos al Señor.
Para que el que tiene las llaves de la muerte y de su reino nos conceda celebrar
un día su resurrección con los ángeles y los santos en
su reino, roguemos al Señor.
Dios nuestro, que has prometido hacer morada en aquel que escucha tu palabra
y la guarda, escucha nuestra oración y envíanos el Espíritu
Santo, para que nos recuerde constantemente todo lo que Cristo ha dicho y enseñado
y nos haga capaces de dar testimonio de ello con nuestras obras y palabras.
Por Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina, inmortal y glorioso, por los siglos
de los siglos.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Suba hasta ti, Señor, nuestra oración, acompañada por estas ofrendas, para que, purificados por tu bondad, nos dispongas para celebrar el sacramento de tu inmenso amor. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio IV de Pascua, MR, pp. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 14, 15-16
Si me aman, cumplirán mis mandamientos, dice el Señor; y yo rogaré al Padre, y él les dará otro Abogado, que permanecerá con ustedes para siempre. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dios todopoderoso y eterno, que, por la resurrección de Cristo, nos has hecho renacer a la vida eterna, multiplica en nosotros el efecto de este sacramento pascual, e infunde en nuestros corazones el vigor que comunica este alimento de salvación. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Puede utilizarse la fórmula de bendición solemne, MR, p. 608 (603).
UNA
REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO.-
Entre los malentendidos que se encuentran en la Iglesia está la opinión
de que los laicos son recipientes pasivos de la enseñanza del clero,
es decir, que los obispos y los sacerdotes predican la verdad y los laicos la
reciben como una esponja que absorbe agua. Contra esta opinión es lo
que el Concilio Vaticano II ha proclamado, en su documento sobre la revelación
divina, Dei Verbum: la revelación "progresa en la Iglesia con la
asistencia del Espíritu Santo,
puesto que va creciendo en la comprensión de las cosas y de las palabras
transmitidas, ya por la contemplación y el estudio de los creyentes que
las meditan en su corazón, ya por la percepción íntima
que experimentan de las cosas espirituales" (n. 8). La verdad no puede
progresar sin el esfuerzo de todos, incluso los laicos que cooperan con el Espíritu.
Blanco Lunes VI de Pascua MR, p. 382 (383) / Lecc. I, p. 929
LOS PASAJES
"NOSOTROS"
Hech 16,11-15; Sal 149; Jn 15, 26-16,4
En la primera lectura encontramos uno de los llamados "pasajes nosotros". Se trata de párrafos en Hechos -específicamente 16, 10-17; 20, 5-21, 18; 21, 19-26,32; y 27, 1-28, 16-que utilizan la primera persona del plural y parecen ser apuntes tomados durante ciertos acontecimientos, especialmente viajes, narrados en dicho libro. Los expertos no están de acuerdo sobre quién es el autor de estos pasajes, algunos dicen que fueron escritos por Lucas, quien supuestamente acompañó a san Pablo; otros opinan que son elementos compuestos por otras personas que fueron testigos oculares o que simplemente eran convenciones literarias populares en el primer siglo. Sea lo que sea, los "pasajes nosotros" revelan que Dios puede emplear muchos medios para comunicarse con los seres humanos. No sólo utiliza poemas, historias y dichos sapientes, sino también un género literario tan inesperado como una guía turística.
ANTÍFONA DE ENTRADA Rom 6, 9
Cristo, una vez resucitado de entre los muertos, ya no morirá nunca. La muerte ya no tiene dominio sobre él. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Concédenos, Dios
misericordioso, que por la celebración del misterio de la Pascua que
nos mandaste conmemorar, experimentemos en todo tiempo su fruto.
Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
El Señor tocó el corazón de Lidia para que aceptara el mensaje de Pablo.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 16,11-15
Por aquellos días,
zarpamos de Tróade y navegamos rumbo a Samotracia; al día siguiente,
hacia Neápolis y de ahí a Filipos, colonia romana y ciudad principal
de la región de Macedonia.
En Filipos nos quedamos unos días. El sábado salimos de la ciudad
y nos fuimos por la orilla del río hasta un sitio donde solían
tenerse las reuniones de oración. Allí nos sentamos y trabamos
conversación con las mujeres que habían acudido.
Entre las que nos escuchaban, había una mujer llamada Lidia, de la ciudad
de Tiatira, comerciante en púrpura, que adoraba al verdadero Dios. El
Señor le tocó el corazón para que aceptara el mensaje de
Pablo.
Después de recibir el bautismo junto con toda su familia, nos hizo esta
súplica: "Si están convencidos de que mi fe en el Señor
es sincera, vengan a hospedarse en mi casa". Y así, nos obligó
a aceptar. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 149,1-2.3-4.
5-6a. 9b.
R/. El Señor es amigo de su pueblo. Aleluya.
Entonen al Señor
un canto nuevo, en la reunión litúrgica proclámenlo. En
su creador y rey, en el Señor, alégrese Israel, su pueblo santo.
R/.
En honor de su nombre, que haya danzas, alábenlo con arpa y tamboriles.
El Señor es amigo de su pueblo y otorga la victoria a los humildes.
R/.
Que se alegren los fieles en el triunfo, que inunde el regocijo sus hogares,
que alaben al Señor con sus palabras, porque en esto su pueblo se complace.
R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO cfr. Jn 15, 26.27
R/. Aleluya, aleluya.
El Espíritu de la verdad dará testimonio de mí, dice el Señor, y ustedes también darán testimonio. R/.
EVANGELIO
El Espíritu de verdad dará testimonio de mí.
Del santo Evangelio según san Juan: 15, 26-16, 4
En aquel tiempo, Jesús
dijo a sus discípulos: "Cuando venga el Paráclito, que yo
les enviaré a ustedes de parte del Padre, el Espíritu de la verdad
que procede del Padre, él dará testimonio de mí y ustedes
también darán testimonio, pues desde el principio han estado conmigo.
Les he hablado de estas cosas para que su fe no tropiece. Los expulsarán
de las sinagogas y hasta llegará un tiempo cuando el que les dé
muerte creerá dar culto a Dios. Esto lo harán, porque no nos han
conocido ni al Padre ni a mí. Les he hablado de estas cosas para que,
cuando llegue la hora de su cumplimiento, recuerden que ya se lo había
predicho yo". Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor
Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Recibe, Señor, los dones que, jubilosa tu Iglesia te presenta, y puesto que es a ti a quien debe su alegría, concédele también disfrutar de la felicidad eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio IV de Pascua, MR, pp. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 20, 19
Jesús se presentó en medio de sus discípulos y les dijo: "La paz esté con ustedes". Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dirige, Señor, tu mirada compasiva sobre tu pueblo, al que te has dignado renovar con estos misterios de vida eterna, y concédele llegar un día a la gloria incorruptible de la resurrección. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Nuestra Señora María Auxiliadora
Blanco Martes VI de Pascua MR, p. 383 (384) / Lecc. I, p. 931
Otros santos: Nereo, Aquilea y Pancracio de Roma, mártires. Beato Luis Ceferino Moreau, obispo y fundador.
¿QUÉ
ES LO QUE DIOS NOS QUIERE ENSEÑAR HOY?
Hech 16, 22-34; Sal 137; Jn 16,5-11
El gran escritor cristiano, san Ireneo (ca. 130 ca.202 d. C.), quien fue recientemente declarado doctor de la Iglesia por el Papa Francisco, frecuentemente retrataba a Dios como el educador por antonomasia. De acuerdo con el santo, Dios sabe perfectamente cómo enseñarle al ser humano cuánto le ama. El Evangelio de hoy sugiere que san Ireneo tenía razón. En nuestra lectura, Jesús sabe muy bien que tiene que dejar a sus discípulos y pasar por la muerte y la resurrección hacia la vida eterna. La solemnidad de la Ascensión, que vamos a celebrar en unos días, conmemora esta etapa final de su misión salvadora. Pero Cristo también sabe que sus discípulos podían interpretar su éxodo hacia el Padre como una especie de abandono. Por eso, como buen maestro, prepara a los discípulos a entender bien lo que van a experimentar.
ANTÍFONA DE ENTRADA Apoc 19, 7. 6
Alegrémonos, regocijémonos, y demos gracias, porque el Señor, nuestro Dios omnipotente, ha empezado a reinar. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Dios omnipotente y misericordioso, concédenos poder alcanzar una verdadera participación en la resurrección de Jesucristo, tu Hijo. El, que vive y reina contigo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Cree en el Señor Jesús y te salvarás, tú y tu familia.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 16, 22-34
En aquellos días,
la gente de la ciudad de Filipos se alborotó contra Pablo y Silas, y
los magistrados ordenaron que los desnudaran y los azotaran. Después
de azotarlos mucho, los metieron en la cárcel y le ordenaron al carcelero
que los vigilara bien. Siguiendo esta orden,
él los metió en el calabozo de más adentro y les aseguró
los pies en el cepo.
A eso de la medianoche, Pablo y Silas estaban en oración, cantando himnos
al Señor, y los otros presos los escuchaban. De pronto sobrevino un temblor
tan violento, que se sacudieron los cimientos de la cárcel, las puertas
se abrieron de golpe y a todos se les soltaron las cadenas.
El carcelero se despertó, y al ver las puertas de la cárcel abiertas
de par en par, pensó que los presos se habían fugado y sacó
su espada para matarse. Pero entonces Pablo le gritó: "No te hagas
ningún daño; aquí estamos todos". El carcelero pidió
una lámpara, se precipitó hacia dentro, y temblando, se arrojó
a los pies de Pablo y Silas. Después los sacó de allí y
les preguntó: "¿Qué debo hacer para salvarme?".
Ellos le contestaron: "Cree en el Señor Jesús y te salvarás,
tú y tu familia". Y les explicaron la palabra del Señor a
él y a todos los de su casa.
El carcelero se los llevó aparte, y en aquella misma hora de la noche
les lavó las heridas y en seguida se bautizó él con todos
los suyos. Después los invitó a su casa, les preparó la
mesa y celebraron una fiesta familiar por haber creído en Dios.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 137,
1-2a. 2bcd-3. 7c-8.
R/. Señor, tu amor perdura eternamente. Aleluya.
De todo corazón te
damos gracias, Señor, porque escuchaste nuestros ruegos. Te cantaremos
delante de tus ángeles, te adoraremos en tu templo. R/.
Señor, te damos gracias por tu lealtad y por tu amor; siempre que te
invocamos nos oíste y nos llenaste de valor. R/.
Tu mano, Señor, nos pondrá a salvo, y así concluirás
en nosotros tu obra. Señor, tu amor perdura eternamente; obra tuya soy,
no me abandones. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO cfr. Jn 16, 7. 13
R/. Aleluya, aleluya.
Yo les enviaré el Espíritu de la verdad, y él los irá guiando hasta la verdad plena, dice el Señor. R/.
EVANGELIO
Si no me voy, no vendrá a ustedes el Paráclito.
Del santo Evangelio según san Juan: 16, 5-11
En aquel tiempo, Jesús
dijo a sus discípulos: "Me voy ya al que me envió y ninguno
de ustedes me pregunta: '¿A dónde vas?'. Es que su corazón
se ha llenado de tristeza porque les he dicho estas cosas. Sin embargo, es cierto
lo que les digo: les conviene que me vaya; porque si no me voy, no vendrá
a ustedes el Paráclito; en cambio, si me voy, yo se lo enviaré.
Y cuando él venga, establecerá la culpabilidad del mundo en materia
de pecado, de justicia y de juicio; de pecado, porque ellos no han creído
en mí; de justicia, porque me voy al Padre y ya no me verán ustedes;
de juicio, porque el príncipe de este mundo ya está condenado".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Concédenos, Señor, vivir siempre llenos de gratitud por estos misterios pascuales que celebramos, para que, continuamente renovados por su acción, se conviertan para nosotros en causa de eterna felicidad. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio IV de Pascua, MR, pp. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Lc 24, 46. 26
Era necesario que Cristo padeciera y resucitara de entre los muertos, y así entrara luego en su gloria. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor y Dios nuestro, escucha nuestras oraciones, para que la participación en los sacramentos de nuestra redención nos ayude en la vida presente y nos alcance las alegrías eternas. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Blanco Miércoles VI de Pascua o Memoria de san Beda el Venerable, presbítero y doctor de la Iglesia*, o san Gregorio VII, Papa**, o santa María Magdalena de Pazzi, virgen*** MR, p. 384 (385) / Lecc. I, p. 933
Otros santos: Agustín Caloca Cortés, presbítero y mártir.
AL DIOS DESCONOCIDO
Hech 17, 15-16. 22-18,1; Sal 148; Jn 16, 12-15
Raras veces nos habla la Biblia de una relación positiva entre la fe cristiana y las religiones aparte del judaísmo. Claro que hay muchos párrafos, especialmente en los libros proféticos, que critican los ídolos de las religiones cananeas o babilónicas. Pero hay pocos escritos que sugieren la posibilidad de una cierta continuidad entre la fe cristiana y otras religiones, como sugiere nuestra primera lectura de hoy. En esta lectura, Pablo está predicando en medio de Atenas, la ciudad más culta del mundo en ese tiempo. Siguiendo el discurso profético, critica a los ídolos, sus templos y los sacrificios ofrecidos a ellos. Sin embargo, habla de un "dios desconocido" que es reconocido, de manera vaga, por los atenienses, y precisa que Jesús es este Dios. Tal vez estamos delante de una versión antigua de la teoría moderna del llamado "cristiano anónimo".
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Sal 17, 50; 21, 23
Te alabaré, Señor, ante las naciones y anunciaré tu nombre a mis hermanos. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Concédenos, Señor, que, así como celebramos solemnemente el misterio de la resurrección de tu Hijo, merezcamos también gozar con todos los santos cuando vuelva en su gloria. Él que vive y reina contigo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Les anuncio a ese Dios que ustedes veneran sin conocerlo.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 17, 15-16. 22 18, 1
En aquellos días,
los cristianos que ayudaron a Pablo a escapar de Berea, lo llevaron hasta la
ciudad de Atenas. Pablo los envió de regreso con la orden de que Silas
y Timoteo fueran a reunirse con él cuanto antes.
Un día, mientras los esperaba en Atenas, Pablo sentía que la indignación
se apoderaba de él, al contemplar la ciudad llena de ídolos. Entonces
se presentó en el Areópago y dijo:
"Atenienses: Por lo que veo, ustedes son en extremo religiosos. Al recorrer
la ciudad y contemplar sus monumentos, encontré un altar con esta inscripción:
'Al Dios desconocido'. Pues bien, yo vengo a anunciarles a ese Dios que ustedes
veneran sin conocerlo.
El Dios que hizo el mundo y todo cuanto hay en él, siendo el Señor
del cielo y de la tierra, no habita en templos hechos por hombres, ni es servido
por mano de hombres, como si necesitara de algo o de alguien; porque él
es quien da a todos la vida, el aliento y cuanto tienen.
De un solo hombre sacó todo el género humano para que habitara
toda la tierra, determinó las épocas de su historia y estableció
los límites de sus territorios. Dios quería que lo buscaran a
él y que lo encontraran, aunque fuera a tientas, pues en realidad no
está lejos de nosotros, ya que en él vivimos, nos movemos y somos.
Como lo ha dicho alguno de los poetas de ustedes: 'Somos de su mismo linaje'.
Por lo tanto, si somos linaje de Dios, no debemos pensar que Dios es como una
imagen de oro, plata o mármol, labrada artísticamente por los
hombres según su imaginación. Dios no tomó en cuenta la
ignorancia de la gente en tiempos pasados, pues ahora quiere que todos los hombres
se conviertan, porque tiene determinado un día en el cual ha de juzgar
al universo con justicia, por medio de un hombre designado por él, y
ha dado a todos la prueba de esto, resucitándolo de entre los muertos".
Al oír hablar de la resurrección de los muertos, algunos se burlaron
y otros dijeron: "De esto te oiremos hablar en otra ocasión".
Entonces Pablo se retiró. Sin embargo, algunos se adhirieron a él
y creyeron. Entre ellos se contaban Dionisio, el areopagita; una mujer, que
se llamaba Dámaris, y algunos más. Después de esto, Pablo
salió de Atenas y se fue a Corinto. Palabra de Dios. Te alabamos,
Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 148,
1-2. 11-12. 13.14.
R/. La gloria del Señor sobrepasa cielo y tierra. Aleluya.
Alaben al Señor en
las alturas, alábenlo en el cielo; que alaben al Señor todos sus
ángeles, celestiales ejércitos. R/.
Reyes y pueblos todos de la tierra, gobernantes y jueces de este mundo; hombres,
mujeres, jóvenes y ancianos, alaben al Señor y denle culto. R/.
El nombre del Señor alaben todos, pues su nombre es excelso, su gloria
sobrepasa cielo y tierra y ha hecho fuerte a su pueblo. R/.
Que alaben al Señor todos sus fieles, los hijos de Israel, el pueblo
que ha gozado siempre de familiaridad con él. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 14, 16
R/. Aleluya, aleluya.
Yo le rogaré al Padre y él les dará otro Paráclito, para que esté siempre con ustedes, dice el Señor. R/.
EVANGELIO
El Espíritu de verdad los irá guiando hasta la verdad plena.
Del santo Evangelio según san Juan: 16, 12-15
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: "Aún tengo muchas cosas que decirles, pero todavía no las pueden comprender. Pero cuando venga el Espíritu de la verdad, él los irá guiando hasta la verdad plena, porque no hablará por su cuenta, sino que dirá lo que haya oído y les anunciará las cosas que van a suceder. Él me glorificará, porque primero recibirá de mí lo que les vaya comunicando. Todo lo que tiene el Padre es mío. Por eso he dicho que tomará de lo mío y se lo comunicará a ustedes". Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Dios, nuestro, que por el santo valor de este sacrificio nos hiciste participar de tu misma y gloriosa vida divina, concédenos que, así como hemos conocido tu verdad, de igual manera vivamos de acuerdo con ella. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio IV de Pascua, MR, pp. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. 15, 16. 19
Yo los elegí del mundo, dice el Señor, y los destiné para que vayan y den fruto, y su fruto permanezca. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, muéstrate benigno con tu pueblo, y ya que te dignaste alimentarlo con los misterios celestiales, hazlo pasar de su antigua condición de pecado a una vida nueva. Por Jesucristo, nuestro Señor.
O bien:
*San
Beda el Venerable, presbítero y doctor de la Iglesia MR, p. 749 (737)
Su vida entera transcurrió en la
abadía de Jarrow (Inglaterra). La regla de san Benito prescribía:
"Ora y labora". Este fue precisamente el ideal de san Beda. Se consagró
a empresas intelectuales, como la historia de Inglaterra y de los mártires,
y a comentar la Biblia. Ninguna ciencia le parecía extraña. Pero
jamás sacrificó la oración por el estudio.
Del Común de doctores de la Iglesia, MR, p. 956 (948), o del Común
de santos y santas: para un monje, p. 971 (963).
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que iluminas a tu Iglesia con la doctrina de san Beda el Venerable, presbítero, concede, propicio, a tus fieles, ser siempre iluminados por su sabiduría, y ayudados por su intercesión. Por nuestro Señor Jesucristo ...
O bien:
**San
Gregorio VII, Papa MR, p. 749 (737)
Este famosísimo "monje Hildebrando",
que se convirtió en el Papa Gregario VII (1073-1085), domina la historia
de la Edad Media. Reunía una clara visión de las necesidades de
su tiempo con un temple inquebrantable, y persiguió un objetivo único:
arrancar a la Iglesia de manos del poder feudal y restaurar la disciplina entre
los clérigos. El año de 1077 fue verdaderamente increíble:
¡El Papa excomulga y depone al emperador del Sacro Imperio Romano Germánico!
Del Común de pastores: para un Papa, MR, p. 941 (933).
ORACIÓN COLECTA
Concede, Señor, a tu Iglesia el espíritu de fortaleza y el celo por la justicia con que hiciste brillar la vida del Papa san Gregorio séptimo, para que, apartándose del mal, practique cuanto es recto, con libertad y amor. Por nuestro Señor Jesucristo ...
O bien:
***Santa
María Magdalena de Pazzi, virgen MR, p. 750 (738)
A través de dolorosas purificaciones,
esta religiosa carmelita florentina fue llamada por el Señor hasta las
más elevadas experiencias místicas. Viviendo humildemente en pobreza,
castidad y obediencia, llegó al Señor y por este camino condujo
también a otras religiones (1566-1607).
Del Común de vírgenes: para una virgen, MR, p. 960 (952), o del
Común de santos y santas: para los religiosos, p. 973 (965).
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que amas la virginidad, tú que adornaste a santa María Magdalena de Pazzi, virgen, inflamada en tu amor, con celestiales dones, concédenos imitar los ejemplos de pureza y caridad de aquella a quien hoy veneramos. Por nuestro Señor Jesucristo ...
Blanco Memoria de san Felipe Neri, presbítero MR, p. 750 (738) / Lecc. I, p. 943
Nació en Florencia, pero se educó en Roma. Supo tomar con alegría la austeridad de las bienaventuranzas. Era realmente confortable contemplar a este sacerdote extasiado ante la Eucaristía y entregado a los jóvenes, enfermos y encarcelados. Esta fue la clave del éxito del Oratorio del Amor Divino, que fundó (1515-1595).
SOLO, NADIE ES CRISTIANO
Hech 18, 1-8; 8a197; Jn 16, 16-20
La primera lectura nos ofrece detalles de la vida cotidiana de san Pablo. Indica que su profesión original, antes de ser llamado al apostolado, fue fabricar tiendas de campaña. Ejemplifica su método de evangelizar, que concentró en la sinagoga y utilizó discusiones con los que estaban presentes para el sábado judío. Sobre todo, nos indica que dependía de muchas personas diferentes para cumplir con su misión apostólica. En esta breve lectura encontramos más de seis de ellas: Aquila, Priscila (que Pablo llama Prisca en 1 Cor 16, 15), Silas, Timoteo, Tito Justo, Crispo y su familia. Así, el autor de Hechos ofrece una lección concreta en la vida cristiana. No importa nuestra contribución a la Iglesia -si somos misioneros como Pablo o cumplimos con otras tareas importantes- necesitamos a los demás para ser cristianos. Solo, nadie es cristiano.
ANTÍFONA DE ENTRADA Rom 5, 5; Cfr. 8, 11
El amor de Dios ha sido infundido en nuestros corazones por el Espíritu Santo, que habita en nosotros.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que nunca dejas de glorificar la santidad de aquellos siervos tuyos que te son fieles, haz que el fuego del Espíritu Santo nos encienda en aquel mismo ardor que tan maravillosamente inflamó el corazón de san Felipe Neri. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Pablo se estableció en la casa de Aquila, trabajaba y predicaba en la sinagoga.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 18, 1-8
En aquellos días,
Pablo salió de Atenas y se fue a Corinto. Allí encontró
a un judío, llamado Aquila, natural del Ponto, que acababa de llegar
de Italia con su mujer, Priscila, en acatamiento a las órdenes de Claudio,
que expulsó de Roma a todos los judíos. Pablo se acercó
a ellos, y como eran del mismo oficio, se quedó a vivir ya trabajar con
ellos. Su oficio era fabricar tiendas de campaña. Cada sábado
Pablo discutía en la sinagoga y trataba de convencer a judíos
y griegos.
Cuando Silas y Timoteo llegaron de Macedonia, Pablo se dedicó por completo
a la predicación y afirmó delante de los judíos que Jesús
era el Mesías. Como éstos lo contradecían y lo insultaban,
se rasgó las vestiduras y dijo: "Que la sangre de ustedes caiga
sobre su propia cabeza: yo soy inocente. De ahora en adelante, iré a
hablar a los paganos".
Salió de allí y entró en la casa de Tito Justo, que adoraba
a Dios, y cuya casa estaba al lado de la sinagoga. Crispo, el jefe de la sinagoga,
creyó en el Señor, junto con toda su familia. Asimismo, al oír
a Pablo, muchos de los corintios creyeron y recibieron el bautismo.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
97,1. 2-3ab. 3cd. 4.
R/. El Señor nos ha demostrado su amor y su lealtad. Aleluya.
Cantemos al Señor
un canto nuevo, pues ha hecho maravillas. Su diestra y su santo brazo le han
dado la victoria. R/.
El Señor ha dado a conocer su victoria y ha revelado a las naciones su
justicia. Una vez más ha demostrado Dios su amor y su lealtad hacia Israel.
R/.
La tierra entera ha contemplado la victoria de nuestro Dios. Que todos los pueblos
y naciones aclamen con júbilo al Señor. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Jn 14, 18
R/. Aleluya, aleluya.
No los dejaré desamparados, dice el Señor; me voy, pero volveré a ustedes y entonces se alegrará su corazón. R/.
EVANGELIO
Su tristeza se transformará en alegría.
Del santo Evangelio según san Juan: 16, 16-20
En aquel tiempo, Jesús
dijo a sus discípulos: "Dentro de poco tiempo ya no me verán;
y dentro de otro poco me volverán a ver". Algunos de sus discípulos
se preguntaban unos a otros: "¿Qué querrá decir con
eso de que: 'Dentro de poco tiempo ya no me verán, y dentro de otro poco
me volverán a ver', y con eso de que: 'Me voy al Padre'?". Y se
decían: "¿Qué significa ese 'un poco'? No entendemos
lo que quiere decir".
Jesús comprendió que querían preguntarle algo y les dijo:
"Están confundidos porque les he dicho: 'Dentro de poco tiempo ya
no me verán y dentro de otro poco me volverán a ver'. Les aseguro
que ustedes llorarán y se entristecerán, mientras el mundo se
alegrará. Ustedes estarán tristes, pero su tristeza se transformará
en alegría". Palabra del Señor. Gloria a ti,
Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Al ofrecerte, Señor, este sacrificio de alabanza, te rogamos que, a ejemplo de san Felipe Neri nos mostremos siempre alegres y bien dispuestos, para promover la gloria de tu nombre y el servicio del prójimo. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio de Pascua, MR, pp. 504-508 (500-504) o de la Ascensión, pp. 509-511 (505-507).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 15, 9
Así como el Padre me ha amado a mí, así yo los he amado a ustedes, dice el Señor; permanezcan, pues, en mi amor.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Saciados, Señor, por este manjar celestial, te rogamos que, a imitación de san Felipe Neri, nos hagas anhelar siempre este mismo sustento por el cual verdaderamente vivimos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Blanco Viernes VI de Pascua o Memoria de san Agustín de Canterbury, obispo* MR p. 391 (390) / Lecc. II, p. 945
Otros santos: Atanasio Bazzekuketta, laico mártir ugandés; Bárbara Kim y Bárbara Yi, mártires.
"CUANDO
UNA MUJER VA A DAR A LUZ... "
Hech 18,9-18; Sal 46; Jn 16,20-23
La Biblia se deleita en la inversión de los valores sociales. Mientras que la sociedad antigua ensalzaba al hijo primogénito, por ejemplo, la Escritura frecuentemente daba más atención a los hijos menores, como en los casos de Jacob, el hijo menor de Isaac (Gén 27, 1-40) Y de José, el undécimo hijo de Jacob (Gén 36 y 37). Una inversión parecida se encuentra en el Evangelio de hoy. Ahora la sociedad actual se alegra y los discípulos lloran. Pero dicha situación va a invertirse y los discípulos van a alegrarse. Para expresar esta inversión, Jesús emplea una pequeña "parábola": la de una mujer que da a luz. Esta imagen femenina ha sido ya usada para predecir los dolorosos tiempos mesiánicos (p. ej. Is 26,17-18 y 66, 7-10), pero aquí tiene la finalidad de dar esperanza a los cristianos.
ANTÍFONA DE ENTRADA Apoc 5,9-10
Señor, con tu sangre has rescatado a hombres de toda raza, lengua, pueblo y nación y has hecho de nosotros un reino de sacerdotes para Dios. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Escucha, Señor, nuestras súplicas, y haz que el efecto santificador que prometió tu Palabra se cumpla en todas partes por la predicación evangélica y que, conforme a lo que anunció, el testimonio de tu verdad lleve a plenitud nuestra adopción filial. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Muchos de esta ciudad pertenecen a mi pueblo.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 18, 9-18
En aquellos días,
Pablo tuvo una visión nocturna en Corinto, en la que le dijo el Señor:
"No tengas miedo. Habla y no calles, porque yo estoy contigo y nadie pondrá
la mano sobre ti para perjudicarte. Muchos de esta ciudad pertenecen a mi pueblo".
Por eso Pablo se quedó allí un año y medio, explicándoles
la palabra de Dios.
Pero cuando Galión era procónsul de Acaya, los judíos,
de común acuerdo, se abalanzaron contra Pablo y lo llevaron hasta el
tribunal, donde dijeron: "Este hombre trata de convencer a la gente de
que den a Dios un culto contrario a la ley". Iba Pablo a tomar la palabra
para responder, cuando Galión dijo a los judíos: "Si se tratara
de un crimen o de un delito grave, yo los escucharía, como es razón;
pero si la disputa es acerca de palabras o de nombres o de su ley, arréglense
ustedes". Y los echó del tribunal. Entonces se apoderaron de Sóstenes,
jefe de la sinagoga, y lo golpearon delante del tribunal, sin que Galión
se preocupara en lo más mínimo. Pablo se quedó en Corinto
todavía algún tiempo. Después se despidió de los
hermanos y se embarcó para Siria, con Priscila y Aquila. En Céncreas
se rapó la cabeza para cumplir una promesa que había hecho. Palabra
de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
46,2-3.8-9.10.
R/. Dios es el rey del universo. Aleluya.
Aplaudan, pueblos todos;
aclamen al Señor, de gozo llenos, que el Señor, el Altísimo,
es terrible y de toda la tierra, rey supremo. R/.
Fue él quien nos puso por encima de todas las naciones y los pueblos,
al elegirnos como herencia suya, orgullo de Jacob, su predilecto.
R/.
Entre voces de júbilo y trompetas, Dios, el Señor, asciende hasta
su trono. Cantemos en honor de nuestro Dios, al rey honremos y cantemos todos.
R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO cfr. Lc 24, 46.26
R/. Aleluya, aleluya.
Cristo tenía que morir y resucitar de entre los muertos, para entrar así en su gloria. R/.
EVANGELIO
Nadie podrá quitarles su alegría.
Del santo Evangelio según san Juan: 16, 20-23
En aquel tiempo, Jesús
dijo a sus discípulos: "Les aseguro que ustedes llorarán
y se entristecerán, mientras el mundo se alegrará. Ustedes estarán
tristes, pero su tristeza se transformará en alegría.
Cuando una mujer va a dar a luz, se angustia, porque le ha llegado la hora;
pero una vez que ha dado a luz, ya no se acuerda de su angustia, por la alegría
de haber traído un hombre al mundo. Así también ahora ustedes
están tristes, pero yo los volveré a ver, se alegrará su
corazón y nadie podrá quitarles su alegría. Aquel día
no me preguntarán nada". Palabra del Señor. Gloria
a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Recibe, Señor, con bondad, estas ofrendas de tu familia santa, para que, con la ayuda de tu protección, conserve los dones recibidos y llegue a poseer los eternos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Rom 4, 25
Cristo fue condenado a muerte por nuestros pecados y resucitó para nuestra justificación. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Protege, Señor, con
amor constante a quienes has salvado, para que, una vez redimidos por la pasión
de tu Hijo, se llenen ahora de alegría por su resurrección. Él
que vive y reina por los siglos de los siglos.
Puede utilizarse la fórmula de bendición sobre el pueblo n. 2,
MR, p. 606 (614).
O bien:
*Memoria
de san Agustín de Canterbury, obispo MR, pp. 751 (739). 943 (935)
Fue enviado por el Papa Gregorio Magno a
Inglaterra, al frente de un grupo de monjes romanos, destinados a predicar el
Evangelio a los sajones. que hacía poco se habían establecido
en la isla (597). La misión fue un éxito completo. Agustín,
consagrado obispo de Canterbury, organizó la Iglesia e infundió
la fe cristiana en aquel pueblo, respetando en todo lo posible, sus tradiciones
ancestrales.
ANTÍFONA DE ENTRADA Ez 34, 11. 23-24
Buscaré a mis ovejas, dice el Señor, y les daré un pastor que las apaciente, y yo, el Señor, seré su Dios. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que por la
predicación del obispo san Agustín de Canterbury, llevaste la
luz del Evangelio a los pueblos de Inglaterra, haz que la semilla de sus trabajos
apostólicos continúe dando frutos en tu Iglesia.
Por nuestro Señor Jesucristo ...
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Mira favorablemente, Señor, las ofrendas que presentamos en tu altar en esta festividad de san Agustín de Canterbury, para que nos alcancen tu perdón y den gloria a tu nombre. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 15, 16
No son ustedes los que me han elegido, dice el Señor, soy yo quien los ha elegido y los ha destinado para que vayan y den fruto y su fruto permanezca. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Alimentados por estos sagrados misterios, Señor, te suplicamos humildemente que, a ejemplo de san Agustín de Canterbury, nos esforcemos en profesar lo que él creyó y en poner en práctica lo que enseñó. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Blanco Sábado VI de Pascua o MR, p. 392 (393) / Lecc. I, p. 947
LA ORACIÓN
AUDAZ
Hech 18,23-28; Sal 46; Jn 16, 23-28
Cuando quería hablar de la vida espiritual, y especialmente de la oración cristiana, san Ignacio de Loyola (1491-1555) empleó una palabra muy sencilla: "conversar". Toda la espiritualidad de los cristianos, de acuerdo con el autor de los famosos "ejercicios espirituales", consiste en una conversación con Dios. En el Evangelio de hoy, Jesús sugiere un consejo sorprendente para esta conversación: tenemos que conversar con Dios audazmente, resueltamente, con atrevimiento. "Cuanto pidan al Padre en mi nombre", afirma Cristo, "se les concederá ... Pidan y recibirán" (vv. 23-24). No nos está mandando tratar al Padre sin respeto o como si nos debiera conceder todos los regalos que anhelamos, aún los más superficiales o nocivos. Ni siquiera sugiere que nos acerquemos a Dios temblantes y aterrados. Nos manda que entremos, llenos de confianza, en una verdadera, sincera y deleitosa conversación con Dios.
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. 1 Pe 2,9
Pueblo redimido por Dios, anuncia las maravillas del Señor, que te llamó de las tinieblas a su luz admirable. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Señor Dios, cuyo
Hijo, al subir a los cielos, se dignó prometer a sus Apóstoles
el Espíritu Santo, concédenos que, así como ellos recibieron
los dones para proclamar de muchos modos las celestiales enseñanzas,
así también nos otorgues a nosotros los dones espirituales.
Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
El judío Apolo demostró, por medio de la Escritura, que Jesús es el Mesías.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 18, 23-28
En aquellos días,
después de haber estado en Antioquía algún tiempo, emprendió
Pablo otro viaje y recorrió Galacia y Frigia, confirmando en la fe a
los discípulos.
Un judío, natural de Alejandría, llamado Apolo, hombre elocuente
y muy versado en las Escrituras, había ido a Éfeso. Aquel hombre
estaba instruido en la doctrina del Señor, y siendo de ferviente espíritu,
disertaba y enseñaba con exactitud lo concerniente a Jesús, aunque
no conocía más que el bautismo de Juan.
Apolo comenzó a hablar valientemente en la sinagoga. Cuando lo oyeron
Priscila y Aquila, lo tomaron por su cuenta y le explicaron con mayor exactitud
la doctrina del Señor. Como él deseaba pasar a Grecia, los hermanos
lo animaron y escribieron a los discípulos de allá para que lo
recibieran bien. Cuando llegó, contribuyó mucho, con la ayuda
de la gracia, al provecho de los creyentes, pues refutaba vigorosamente en público
a los judíos, demostrando, por medio de las Escrituras, que Jesús
era el Mesías.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
46,2-3.8-9.10.
R/. Dios es el rey del universo. Aleluya.
Aplaudan, pueblos todos;
aclamen al Señor, de gozo llenos, que el Señor, el Altísimo,
es terrible y de toda la tierra, rey supremo. R/.
Porque Dios es el rey del universo, cantemos el mejor de nuestros cantos. Reina
Dios sobre todas las naciones desde su trono santo. R/.
Los jefes de los pueblos se han reunido con el pueblo de Dios, Dios de Abraham,
porque de Dios son los grandes de la tierra. Por encima de todo Dios está.
R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 16, 28
R/. Aleluya, aleluya.
Yo salí del Padre y vine al mundo, ahora dejo el mundo y vuelvo al Padre, dice el Señor. R/.
EVANGELIO
El Padre mismo los ama, porque ustedes me han amado y han creído que salí del Padre.
Del santo Evangelio según san Juan: 16, 23-28
En aquel tiempo, Jesús
dijo a sus discípulos: "Yo les aseguro: cuanto pidan al Padre en
mi nombre, se lo concederá. Hasta ahora no han pedido nada en mi nombre.
Pidan y recibirán, para que su alegría sea completa.
Les he dicho estas cosas en parábolas; pero se acerca la hora en que
ya no les hablaré en parábolas, sino que les hablaré del
Padre abiertamente. En aquel día pedirán en mi nombre, y no les
digo que rogaré por ustedes al Padre, pues el Padre mismo los ama, porque
ustedes me han amado y han creído que salí del Padre. Yo salí
del Padre y vine al mundo; ahora dejo el mundo y vuelvo al Padre". Palabra
del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Santifica, Señor, por tu piedad, estos dones y, al recibir en oblación este sacrificio espiritual, conviértenos para ti en una perenne ofrenda. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio IV de Pascua, MR, pp. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 17, 24
Padre, quiero que donde yo esté, estén también conmigo los que tú me diste, dice el Señor. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Al recibir, Señor, el don de estos sagrados misterios, te suplicamos humildemente que lo que tu Hijo nos mandó celebrar en memoria suya nos aproveche para crecer en nuestra caridad fraterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.
La Ascensión del Señor, Solemnidad
Blanco Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales Misa de la Vigilia MR, p. 387 (386) / Lecc. I. p. 936
Otros santos: Pablo VI, CCLXII Papa; Úrsula Ledochowska, virgen fundadora. Beatos: José Pérez de María Inmaculada.
Esta Misa se dice en la tarde del día que precede a la solemnidad, ya sea antes o después de las primeras Vísperas de la Ascensión.
LA ASCENSIÓN
Hech 1,1-11; Sal 46; Heb 9, 24-28; 10, 19-23; Lc 24, 46-53
¿Dónde está Jesús hoy? Es una pregunta sencilla, pero importante. Sabemos que Jesús está espiritualmente entre nosotros, especialmente en la Palabra de Dios y en la Eucaristía, pero no está con nosotros corporalmente, aunque nuestra fe afirma que resucitó en cuerpo. Entonces, ¿dónde está ahora? Para enmarcar su respuesta, unos escritores bíblicos utilizaron la tradición de la exaltación, que posiblemente deriva de la entronización de los reyes antiguos, escribiendo que "Dios lo exaltó [a su derecha] y le dio el Nombre que está sobre todo nombre" (Fil 2, 9). Lucas escogió otra tradición, la de una ascensión casi física que se remonta a los relatos de la ascensión del profeta Elías (2 Re 2, 9-13 Y Sir 48,9 y 12). Pero, a fin de cuentas, la respuesta es siempre igual: Jesús está en el centro de la Trinidad.
ANTÍFONA DE ENTRADA Sal 67, 33. 35
Canten a Dios, reinos de la tierra, toquen para el Señor, que asciende sobre los cielos; su majestad y su poder resplandecen sobre las nubes. Aleluya.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Dios eterno, cuyo Hijo subió
hoy al cielo en presencia de sus Apóstoles, te pedimos nos concedas que
él, de acuerdo a su promesa, permanezca siempre con nosotros en la tierra,
y nos permita vivir con él en el cielo. El, que vive y reina contigo
en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
En la celebración de la Misa de la Vigilia se utiliza el mismo formulario
de lecturas que en la Misa del día de la Ascensión del Señor,
tal como aparecen en las páginas que siguen.
Se dice Credo.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Dios nuestro, cuyo Unigénito,
nuestro mediador, vive para siempre y está sentado a tu derecha para
interceder por nosotros, concédenos acercamos llenos de confianza al
trono de la gracia y obtener así tu misericordia. Por Jesucristo, nuestro
Señor.
Prefacio I o II de la Ascensión, MR, pp. 509-510 (505-506).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Hb 10,12
Cristo ofreció un solo sacrificio por el pecado, y se sentó para siempre a la derecha de Dios. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Te pedimos, Señor, que los dones que hemos recibido de tu altar, enciendan en nuestros corazones el deseo de la patria celeste, para que, siguiendo las huellas de nuestro Salvador, tendamos siempre a la meta a donde nos ha precedido. El, que vive y reina por los siglos de los siglos.
Puede utilizarse la fórmula de bendición solemne, M R, p. 609 (603).
Misa del día
ANTÍFONA DE ENTRADA Hech 1, 11
Hombres de Galilea, ¿qué hacen allí parados mirando al cielo? Ese mismo Jesús, que los ha dejado para subir al cielo, volverá como lo han visto marcharse. Aleluya.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Concédenos, Dios todopoderoso, rebosar de santa alegría y, gozosos, elevar a ti fervorosas gracias ya que la ascensión de Cristo, tu Hijo, es también nuestra victoria, pues a donde llegó él, que es nuestra cabeza, esperamos llegar también nosotros, que somos su cuerpo. Por nuestro Señor Jesucristo ...
O bien:
Te rogamos nos concedas, Dios todopoderoso, que al reafirmar, en este día, nuestra fe en la ascensión a los cielos de tu Unigénito, nuestro Redentor, nosotros vivamos también con nuestros pensamientos puesto en las cosas celestiales. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Se fue elevando a la vista de sus apóstoles.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 1,1-11
En mi primer libro, querido
Teófilo, escribí acerca de todo lo que Jesús hizo y enseñó,
hasta el día en que ascendió al cielo, después de dar sus
instrucciones, por medio del Espíritu Santo, a los apóstoles que
había elegido. A ellos se les apareció después de la pasión,
les dio numerosas pruebas de que estaba vivo y durante cuarenta días
se dejó ver por ellos y les habló del Reino de Dios.
Un día, estando con ellos a la mesa, les mandó: "No se alejen
de Jerusalén. Aguarden aquí a que se cumpla la promesa de mi Padre,
de la que ya les he hablado: Juan bautizó con agua; dentro de pocos días
ustedes serán bautizados con el Espíritu Santo".
Los ahí reunidos le preguntaban: "Señor, ¿ahora sí
vas a restablecer la soberanía de Israel?". Jesús les contestó:
"A ustedes no les toca conocer el tiempo y la hora que el Padre ha determinado
con su autoridad; pero cuando el Espíritu Santo descienda sobre ustedes,
los llenará de fortaleza y serán mis testigos en Jerusalén,
en toda Judea, en Samaria y hasta los últimos rincones de la tierra".
Dicho esto, se fue elevando a la vista de ellos, hasta que una nube lo ocultó
a sus ojos. Mientras miraban fijamente al cielo, viéndolo alejarse, se
les presentaron dos hombres vestidos de blanco, que les dijeron: "Galileos,
¿qué hacen allí parados, mirando al cielo? Ese mismo Jesús
que los ha dejado para subir al cielo, volverá como lo han visto alejarse".
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
46, 2-3. 6-7. 8-9.
R/. Entre voces de júbilo, Dios asciende a su trono. Aleluya.
Aplaudan, pueblos todos;
aclamen al Señor, de gozo llenos; que el Señor, el Altísimo,
es terrible y de toda la tierra, rey supremo. R/.
Entre voces de júbilo y trompetas, Dios, el Señor, asciende hasta
su trono. Cantemos en honor de nuestro Dios, al rey honremos y cantemos todos.
R/.
Porque Dios es el rey del universo, cantemos el mejor de nuestros cantos. Reina
Dios sobre todas las naciones desde su trono santo. R/.
SEGUNDA LECTURA
Cristo entró en el cielo mismo.
De la carta a los hebreos: 9, 24-28; 10, 19-23
Hermanos: Cristo no entró
en el santuario de la antigua alianza, construido por mano de hombres y que
sólo era figura del verdadero, sino en el cielo mismo, para estar ahora
en la presencia de Dios, intercediendo por nosotros.
En la antigua alianza, el sumo sacerdote entraba cada año en el santuario
para ofrecer una sangre que no era la suya; pero Cristo no tuvo que ofrecerse
una y otra vez a sí mismo en sacrificio, porque en tal caso habría
tenido que padecer muchas veces desde la creación del mundo. De hecho,
él se manifestó una sola vez, en el momento culminante de la historia,
para destruir el pecado con el sacrificio de sí mismo.
Y así como está determinado que los hombres mueran una sola vez
y que después de la muerte venga el juicio, así también
Cristo se ofreció una sola vez para quitar los pecados de todos. Al final
se manifestará por segunda vez, pero ya no para quitar el pecado, sino
para la salvación de aquellos que lo aguardan y en él tienen puesta
su esperanza.
Hermanos, en virtud de la sangre de Jesucristo, tenemos la seguridad de poder
entrar en el santuario, porque él nos abrió un camino nuevo y
viviente a través del velo, que es su propio cuerpo. Asimismo, en Cristo
tenemos un sacerdote incomparable al frente de la casa de Dios.
Acerquémonos, pues, con sinceridad de corazón, con una fe total,
limpia la conciencia de toda mancha y purificado el cuerpo por el agua saludable.
Mantengámonos inconmovibles en la profesión de nuestra esperanza,
porque el que nos hizo las promesas es fiel a su palabra. Palabra de
Dios. Te alabamos, Señor.
O bien:
Lo hizo sentar a su derecha en el cielo.
De la carta del apóstol san Pablo a los efesios: 1, 17-23
Hermanos: Pido al Dios de
nuestro Señor Jesucristo, el Padre de la gloria, que les conceda espíritu
de sabiduría y de revelación para conocerlo.
Le pido que les ilumine la mente para que comprendan cuál es la esperanza
que les da su llamamiento, cuán gloriosa y rica es la herencia que Dios
da a los que son suyos y cuál la extraordinaria grandeza de su poder
para con nosotros, los que confiamos en él, por la eficacia de su fuerza
poderosa.
Con esta fuerza resucitó a Cristo de entre los muertos y lo hizo sentar
a su derecha en el cielo, por encima de todos los ángeles, principados,
potestades, virtudes y dominaciones, y por encima de cualquier persona, no sólo
del mundo actual sino también del futuro.
Todo lo puso bajo sus pies y a él mismo lo constituyó cabeza suprema
de la Iglesia, que es tu cuerpo, y la plenitud del que lo consuma todo en todo.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Mt 28, 19. 20
R/. Aleluya, aleluya.
Vayan y hagan discípulos a todos los pueblos, dice el Señor, y sepan que yo estoy con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo. R/.
EVANGELIO
Mientras los bendecía, iba subiendo al cielo.
Del santo Evangelio según san Lucas: 24, 46-53
En aquel tiempo, Jesús
se apareció a sus discípulos y les dijo: "Está escrito
que el Mesías tenía que padecer y había de resucitar de
entre los muertos al tercer día, y que en su nombre se había de
predicar a todas las naciones, comenzando por Jerusalén, la necesidad
de volverse a Dios para el perdón de los pecados.
Ustedes son testigos de esto. Ahora yo les vaya enviar al que mi Padre les prometió.
Permanezcan, pues, en la ciudad, hasta que reciban la fuerza de lo alto".
Después salió con ellos fuera de la ciudad, hacia un lugar cercano
a Betania; levantando las manos, los bendijo, y mientras los bendecía,
se fue apartando de ellos y elevándose al cielo. Ellos, después
de adorarlo, regresaron a Jerusalén, llenos de gozo, y permanecían
constantemente en el templo, alabando a Dios. Palabra del Señor.
Gloria a ti, Señor Jesús.
Se dice Credo.
PLEGARIA UNIVERSAL
Pongamos, hermanos,
nuestra mirada en Jesús, nuestro gran sacerdote, que ha atravesado el
cielo para interceder por nosotros, y pidámosle por las necesidades de
todos los hombres diciendo: Te rogamos, Señor.
(R/. Te rogamos, Señor.)
Para que Cristo, desde el trono de su gloria, venga en ayuda de su Iglesia,
que lucha en medio de las dificultades del mundo, y no permita que sus fieles
se dejen cautivar por los bienes de la tierra, roguemos al Señor.
Para que Jesús, el Señor, que prometió que, al ser elevado
sobre la tierra, atraería a todos hacia sí, revele su nombre a
los hombres que aún no lo conocen, roguemos al Señor.
Para que el Señor, que con su triunfo ha glorificado nuestra carne colocándola
cerca de Dios Padre, llene de esperanza a los que sufren enfermedades en el
cuerpo o angustias en el espíritu, roguemos al Señor.
Para que el Señor, elevado al cielo, nos envíe el Espíritu
Santo, para que nos enseñe a amar los bienes de arriba y a no dejamos
cautivar por las cosas de la tierra, roguemos al Señor.
Dios, Padre todopoderoso, que has resucitado a Cristo, tu Hijo, y los has
hecho Señor del universo, reconoce la voz de tu amado en las oraciones
de la Iglesia y concédenos lo que, te hemos pedido. Por Jesucristo, tu
Hijo, que vive y reina, inmortal y glorioso, por los siglos de los siglos.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Al ofrecerte, Señor, este sacrificio en la gloriosa festividad de la ascensión, concédenos que por este santo intercambio, nos elevemos también nosotros a las cosas del cielo. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I o II de la Ascensión, MR, pp. 509-510(505-506).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Mt 28, 20
Yo estaré con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dios todopoderoso y eterno,
que nos permites participar en la tierra de los misterios divinos, concede que
nuestro fervor cristiano nos oriente hacia el cielo, donde ya nuestra naturaleza
humana está contigo.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Puede utilizarse la fórmula de bendición solemne, MR, p. 609 (603-604).
UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO.- La primera lectura de hoy y el Evangelio probablemente fueron escritos por el mismo autor, el evangelista Lucas. Quizá nos sorprende el que retratan la reacción de los discípulos a la ascensión de Jesús de maneras diferentes. En el Evangelio, los discípulos vuelven a sus vidas, aunque llenos de alegría. En Hechos, se quedan parados, mirando fijamente el cielo. Sin embargo, en ambos casos los discípulos no logran entender muy bien el significado de la ascensión que acaban de presenciar. Por eso tenemos la segunda lectura. El autor revela este significado, exhortándonos a comprender "cuán gloriosa y rica es la herencia que Dios da a los que son suyos" (v. 18). En otras palabras, la fe cristiana no es un complejo de rituales y creencias, es mucho más que eso, es la invitación a participar en la vida misma de Dios.
Blanco Lunes VII de Pascua MR, p. 395 (394) / Lecc. I, p. 949
LA URGENCIA
DE LA EVANGELIZACIÓN
Hech 19,1-8; Sal 67; Jn 16, 29-33
En su Carta a los Romanos, Pablo explica la importancia de la evangelización haciendo preguntas: "¿Cómo invocarán [los paganos] a aquel en quien no han creído? ¿Cómo creerán en aquel a quien no han oído? ¿Cómo oirán sin que se les predique?" (10, 14). En nuestra lectura de Hechos, la importancia de la evangelización es ejemplificada en forma narrativa. Pablo encuentra un grupo de personas que intensamente anhelan al Mesías. No saben mucho. Ciertamente no han oído todo el Evangelio, no conocen a Cristo, ni siquiera están conscientes del Espíritu Santo. Sin embargo, ya que saben algo sobre Juan Bautista, su anhelo los conduce a creer que él fue el Mesías. Por eso, cuando Pablo les evangeliza y ellos se dan cuenta de toda la verdad, abrazan la fe cristiana con los brazos abiertos. ¿Necesitamos más pruebas de la urgencia de la evangelización?
ANTÍFONA DE ENTRADA Hech 1. 8
Recibirán la fuerza del Espíritu Santo, que descenderá sobre ustedes, y serán mis testigos hasta los confines de la tierra. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Descienda sobre nosotros, Señor, la fuerza del Espíritu Santo, para que podamos cumplir fielmente tu voluntad y manifestarla con una vida santa. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
¿Han recibido el Espíritu Santo, cuando abrazaron la fe?
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 19,1-8
En aquellos días,
mientras Apolo estaba en Corinto, Pablo atravesó las regiones altas de
Galacia y Frigia y bajó a Éfeso. Encontró allí a
unos discípulos y les preguntó: "¿Han recibido el
Espíritu Santo, cuando abrazaron la fe?". Ellos respondieron: "Ni
siquiera hemos oído decir que exista el Espíritu Santo".
Pablo replicó: "Entonces, ¿qué bautismo han recibido?".
Ellos respondieron: "El bautismo de Juan".
Pablo les dijo: "Juan bautizó con un bautismo de conversión,
pero advirtiendo al pueblo que debían creer en aquel que vendría
después de él, esto es, en Jesús".
Al oír esto, los discípulos fueron bautizados en el nombre del
Señor Jesús, y cuando Pablo les impuso las manos, descendió
el Espíritu Santo y comenzaron a hablar lenguas desconocidas y a profetizar.
Eran en total unos doce hombres.
Durante los tres meses siguientes, Pablo frecuentó la sinagoga y habló
con toda libertad, disputando acerca del Reino de Dios y tratando de convencerlos.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo
67,2-3. 4-5ac. 6-7ab.
R/. Cantemos a Dios un canto de alabanza. Aleluya.
Cuando el Señor actúa
sus enemigos se dispersan y huyen ante su faz los que lo odian; cual se disipa
el humo, se disipan; como la cera se derrite al fuego, así ante Dios
perecen los malvados. R/.
Ante el Señor, su Dios, gocen los justos y salten de alegría.
Entonen alabanzas a su nombre. En honor del Señor toquen la cítara.
R/.
Porque el Señor, desde su templo santo, a huérfanos y viudas da
su auxilio; él fue quien dio a los desvalidos casa, libertad y riqueza
a los cautivos. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Col 3, 1
R/. Aleluya, aleluya.
Puesto que han resucitado con Cristo, busquen los bienes de arriba, donde está Cristo, sentado a la derecha de Dios. R/.
EVANGELIO
Tengan valor, porque yo he vencido al mundo.
Del santo Evangelio según san Juan: 16, 29-33
En aquel tiempo, los discípulos
le dijeron a Jesús: "Ahora sí nos estás hablando claro
y no en parábolas. Ahora sí estamos convencidos de que lo sabes
todo y no necesitas que nadie te pregunte. Por eso creemos que has venido de
Dios".
Les contestó Jesús: "¿De veras creen? Pues miren que
viene la hora, más aún, ya llegó, en que se van a dispersar
cada uno por su lado y me dejarán solo. Sin embargo, no estaré
solo, porque el Padre está conmigo. Les he dicho estas cosas, para que
tengan paz en mí. En el mundo tendrán tribulaciones; pero tengan
valor, porque yo he vencido al mundo". Palabra del Señor.
Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Que este sacrificio inmaculado nos purifique, Señor, y fortalezca nuestros corazones con el poder divino de tu gracia. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio de Pascua, MR, pp. 504-508 (500-504) o de la Ascensión, MR, pp. 509-511 (505-507).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Jn 14, 18; 16, 22
No los dejaré huérfanos, dice el Señor; vendré de nuevo a ustedes y se alegrarán sus corazones. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, muéstrate benigno con tu pueblo, y ya que te dignaste alimentarlo con los misterios celestiales, hazlo pasar de su antigua condición de pecado a una vida nueva. Por Jesucristo, nuestro Señor.
MARTES 31
Fiesta de la Visitación de la Santísima Virgen María
Blanco MR, p. 752 (740) / Lecc. I, p. 1022
Entre las fiestas de la Anunciación y el nacimiento de san Juan Bautista se celebra ésta, de la Visitación. Es la fiesta del encuentro de María con Isabel, y sobre todo, de una manera misteriosa, del encuentro de aquellos dos niños: el precursor y el Mesías, encerrados todavía en el seno de sus madres. Es una fiesta que estalla en alegría con el "Magníficat".
LA VISITACIÓN
DE LA SABIDURÍA
Rom 12,9-16; Is 12; Lc 1,39-56
Un título tradicional de la Virgen María es sedes sapientiae, es decir, "el trono de la sabiduría". Ha sido usado al menos desde los días de san Agustín de Hipona (354-430 d. C.) para expresar la imagen del niño Jesús sentado en el regazo de la Virgen. Una relación entre la Virgen y la sabiduría resplandece en el Evangelio de la Visitación. Se cuenta primero que María se encaminó al pueblo de Isabel con spoudes, un término griego comúnmente traducido como "con premura", pero tal vez es más correcto traducir como: "con mucha reflexión" o sabiduría. Luego, la Virgen resume el Antiguo Testamento -toda la sabiduría de la historia de la salvación hasta sus días- en las palabras poéticas y sapientes del Magníficat. Los Que seguimos el ejemplo de la Santísima Virgen María tenemos el deber de estudiar, reflexionar, pensar y amar la sabiduría.
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Sal 65, 16
Cuantos temen a Dios vengan y escuchen, y les diré lo que ha hecho por mí.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Dios todopoderoso y eterno, que inspiraste a la santísima Virgen María, cuando llevaba ya en su seno a tu Hijo, el deseo de visitar a Isabel, concédenos que, siguiendo las inspiraciones del Espíritu Santo, podamos con María proclamar siempre tu grandeza. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Ayuden a los hermanos en sus necesidades y esmérense en la hospitalidad.
De la carta del apóstol san Pablo a los romanos: 12, 9-16
Hermanos: Que el amor de
ustedes sea sincero. Aborrezcan el mal y practiquen el bien; ámense cordialmente
los unos a los otros, como buenos hermanos; que cada uno estime a los otros
más que a sí mismo. En el cumplimiento de su deber, no sean negligentes
y mantengan un espíritu fervoroso al servicio del Señor. Que la
esperanza los mantenga alegres; sean constantes en la tribulación y perseverantes
en la oración. Ayuden a los hermanos en sus necesidades y esmérense
en la hospitalidad.
Bendigan a los que los persiguen; bendíganlos, no los maldigan. Alégrense
con los que se alegran; lloren con los que lloran. Que reine la concordia entre
ustedes. No sean, pues, altivos; más bien pónganse al nivel de
los humildes.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
O bien:
El Señor será el rey de Israel dentro de ti.
Del libro del profeta Sofonías: 3, 14-18
Canta, hija de Sion, da
gritos de júbilo, Israel, gózate y regocíjate de todo corazón,
Jerusalén. El Señor ha levantado su sentencia contra ti, ha expulsado
a todos tus enemigos. El Señor será el rey de Israel en medio
de ti y ya no temerás ningún mal.
Aquel día dirán a Jerusalén: "no temas, Sion, que
no desfallezcan tus manos. El Señor, tu Dios, tu poderoso salvador, está
en medio de ti. Él se goza y se complace en ti; él te ama y se
llenará de júbilo por tu causa, como en los días de fiesta.
Apartaré de ti la desgracia y el oprobio que pesa sobre ti". Palabra
de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Isaías
12, 2-3. 4bcd. 5-6.
R/. El Señor ha hecho maravillas con nosotros. (T. P. Aleluya).
El Señor es mi Dios
y salvador, con él estoy seguro y nada temo. El Señor es mi protección
y mi fuerza y ha sido mi salvación. Sacarán agua con gozo de la
fuente de salvación. R/.
Den gracias al Señor, invoquen su nombre, cuenten a los pueblos sus hazañas,
proclamen que su nombre es sublime. R/.
Alaben al Señor por sus proezas, anúncienlas a toda la tierra.
Griten jubilosos, habitantes de Sión, porque el Dios de Israel ha sido
grande con ustedes. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Lc 1. 45
R/. Aleluya, aleluya.
Dichosa tú, santísima Virgen María, que has creído, porque se cumplirá cuanto te fue anunciado de parte del Señor. R/.
EVANGELIO
¿Quién soy yo para que la madre de mi Señor venga a verme?
Del santo Evangelio según san Lucas: 1, 39-56
En aquellos días,
María se encaminó presurosa a un pueblo de las montañas
de Judea y, entrando en la casa de Zacarías, saludó a Isabel.
En cuanto ésta oyó el saludo de María, la criatura saltó
en su seno.
Entonces Isabel quedó llena del Espíritu Santo, y levantando la
voz, exclamó: "¡Bendita tú entre las mujeres y bendito
el fruto de tu vientre! ¿Quién soy yo, para que la madre de mi
Señor venga a verme? Apenas llegó tu saludo a mis oídos,
el niño saltó de gozo en mi seno. Dichosa tú, que has creído,
porque se cumplirá cuanto te fue anunciado de parte del Señor".
Entonces dijo María: "Mi alma glorifica al Señor y mi espíritu
se llena de júbilo en Dios, mi salvador, porque puso sus ojos en la humildad
de su esclava. Desde ahora me llamarán dichosa todas las generaciones,
porque ha hecho en mí grandes cosas el que todo lo puede. Santo es su
nombre, y su misericordia llega de generación en generación a
los que lo temen.
Ha hecho sentir el poder de su brazo: dispersó a los de corazón
altanero, destronó a los potentados y exaltó a los humildes. A
los hambrientos los colmó de bienes y a los ricos los despidió
sin nada.
Acordándose de su misericordia, vino en ayuda de Israel, su siervo, como
lo había prometido a nuestros padres' a Abraham y a su descendencia,
para siempre".
María permaneció con Isabel unos tres meses, y luego regresó
a su casa. Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Señor, recibe con agrado este sacrificio de salvación que ofrecemos a tu majestad, así como te fue grato el gesto de amor de la santísima Madre de tu Unigénito. Él, que vive y reina por los siglos de los siglos.
PREFACIO; II de santa María Virgen, MR, p. 532 (528).
La iglesia alaba a Dios con las palabras de María.
En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y salvación proclamar que eres admirable en la perfección de todos tus santos, y de un modo singular en la perfección de la Virgen María. Por eso, al celebrarla hoy, queremos exaltar tu benevolencia inspirados en su propio cántico. Pues en verdad, has hecho maravillas por toda la tierra, y prolongaste tu misericordia de generación en generación, cuando, complacido en la humildad de tu sierva, nos diste por su medio al autor de la salvación, Jesucristo, Hijo tuyo y Señor nuestro. Por él, los ángeles y los arcángeles te adoran eternamente, gozosos en tu presencia. Permítenos unirnos a sus voces cantando jubilosos tu alabanza: Santo, Santo, Santo ...
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Lc 1, 48-49
Desde ahora me llamarán dichosa todas las generaciones, porque ha hecho en mí grandes cosas el que todo lo puede. Santo es su nombre. (T. P. Aleluya).
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dios nuestro, que la Iglesia
proclame tu grandeza, porque haces cosas grandes en tus fieles, y así
como Juan Bautista se alegró al sentir la presencia oculta de tu Hijo,
haz que tu pueblo pueda reconocer siempre con alegría en este sacramento
al mismo Cristo viviente. El, que vive y reina por los siglos de los siglos.
Puede utilizarse la fórmula de bendición solemne, M R, p.
615 (609).
www.laverdadcatolica.org |